Capítulo 20: Andrew, El Sabio
Ya es hora de que vea a Andrew. Le mandé un par de mensajes y me dijo que aún no le dieron el alta, tendría que haber hablado con él antes. Ya ha pasado un par de días desde la fiesta de pijamas, no estuvo mal, Lucas apareció y fue como una explosión de sinceridad entre nosotros. Nos dijimos cosas que el otro deseaba, nos dijimos lo que pensábamos, cosa que necesitábamos. Estaba claro que no podíamos estar alejados, pero eso me confunde aún más.
¿A quién quiero más? Los tres son unos chicos maravillosos, chicos bastantes agradables. Jensen es mi mejor amigo, ha sido el chico del que me había enamorado hace tiempo, pero ahora es como si no lo estuviera. Lucas es un chico muy guapo, musculoso, como todos, tiene secretos aún por contar, secretos que a lo mejor me dolerán o no. Andrew es bastante cariñoso, muy lanzado para muchas cosas, aun así es romántico cuando habla, cuando quiere de verdad.
Estoy llegando al hospital. No le he dicho nada al respecto a Andrew para darle una sorpresa, espero que esté bien, que esté mejor. Paso la entrada del hospital y camino hasta la recepcionista, quien está con el teléfono y el ordenador a la vez.
-Disculpe -deja el teléfono a un lado, creo que era una charla entre amigas-, ¿puede decirme la habitación de Andrew Hamilton?
Me dijo que lo cambiaron de habitación, no se qué de algo. Desconozco el motivo, lo que dijo no tenía sentido. La mujer teclea en el ordenador hasta decirme su habitación. Le doy las gracias y comienzo a caminar por los pasillos del hospital. La última vez no fue nada bueno, pero ahora soy más fuerte, aunque eso depende. Al llegar a la puerta de Andrew, veo que esta está abierta de par en par, algo pasa. Me acerco al marco de la puerta y dentro se escuchan un par de voces. No quiero ser cotilla, pero los genes de mi madre se me han pegado y me hace poner la oreja.
-...alegra bastante eso -dice una voz masculina que desconozco, ¿quién será?
-¿Sí, verdad? Pronto saldré y podré hacer lo que quiera.
-Bueno, lo que quieras...
-Es cierto, las heridas tienen aún que sanar. Pero bueno, al menos saldré de este lugar que tanto odio. Espero no volver.
-Yo creo que volverás, no es tan fácil librarse de una paliza de algún enemigo o de algún amigo que te tenga rencor.
-Tampoco me puedo liberar de una enfermedad.
-Si te cuidas, sí.
-¿Tú me cuidarás? -pregunta con un tono de voz bastante infantil, pero cariñoso.
-Te cuidaré todo el tiempo que desees.
-Como deseo salir de aquí de una vez. Te comeré a besos.
-¿Y ese chico con el que estabas?
-Creo que ya no siento nada hacia él, creo que no nos importamos lo suficiente como para estar los dos juntos.
No debe estar hablando de mí, ¿verdad? Ya no sé si habla de mí o no, estoy confuso. Otra cosa que me confunde a la lista.
-¿Por qué dices eso? -menos mal que lo pregunta.
-Vino aquí un día y me dijo que se iría a París un mes -está hablando de mí, que mal-, no notó mi sarcasmo cuando dije que no me importaba. Ahí vi que no le importaba lo suficiente como para quedarse conmigo.
-Pobrecito. Siento que te hiciera eso.
-No pasa nada, seremos amigos solamente. Cuando venga se lo diré, no quiero que hayan confusiones.
-Espero que sí.
-Se lo diré porque yo te quiero a ti.
-Yo también te quiero.
Se escucha un beso, uno muy sonoro. Nunca he oído algo así, me parece raro, es la primera vez que lo oigo.
-Tengo que irme, el trabajo me llama. Pero volveré a la misma hora de siempre.
-Claro, vuelve lo antes posible.
-Lo haré. Hasta luego, amor.
-Hasta luego.
No puedo moverme, no puedo hacer nada. Sus palabras me han afectado, he sido un mal amigo para él, he sido lo peor, pero al menos ya no me quiere, porque si lo hace sólo le haré daño.
Un hombre que parece tener la misma edad de Andrew aparece delante de mí. Estoy apoyado en la pared, mirando al frente, pero a la nada. Es un hombre pelirrojo, de barba corta, un buen cuerpo, aunque no tiene músculos, y ojos grises plateados. No parece un mal tipo, seguro es por el aspecto que le gusta a Andrew, es guapo.
-Eh, hola. ¿Estás bien? ¿Qué haces aquí?
-No, nada. Tan solo pasaba por aquí y me he apoyado en esta pared -miento.
-Una cosa, ¿no seras, por casualidad, un tal Hector?
-No. Yo me llamo Pepe -miento otra vez, seguro que si le digo que soy yo ese chico que le dejó aquí mientras estaba en París me echaría la bronca de que Andrew es un hombre magnífico, que por qué hice eso.
-Oh, lo siento. Bueno, me voy. Siento la confusión.
-No pasa nada, hasta la gente perfecta se equivoca.
-Exacto. Adiós.
Se marcha y le dejo de ver cuando gira una de las esquinas. No quiero correr riesgos, así que me quedo aquí por lo menos un par de minutos hasta que creo que ya se habrá ido con el coche. Me despego de la pared y me posiciono delante de la puerta, no creo estar preparado después de lo que he escuchado, pero tengo que hacerlo. Respiro hondo y camino hasta pasar el marco de la puerta.
Ahí está, mirando el techo aburrido. No tiene nada que hacer, salvo estar con el móvil y jugar a algo. Le doy un par de golpes a la puerta, he llamado su atención. Al verme no se le nota ilusionado, mas bien un poco mal. Yo lo estoy, él lo está, todo el mundo lo está.
-Hola -alzo la mano, no sé qué decir, así que dejaré que mi corazón hable.
-Hola. No esperaba más visitas.
-Lo sé, no esperabas nada de mí, pero aquí estoy.
-¿Qué? ¿De qué hablas?
-No, nada. ¿Cómo estás?
-Bien, el médico dijo que en un par de días me darán el alta.
-Te has quedado sólo durante las navidades y año nuevo.
-La verdad es que no me he quedado sólo.
-¿No? Eso es bueno saberlo. ¿Te ha visitado algún familiar o algo?
-De eso quería hablar contigo. Hector, yo...
-Sé lo que vas a decir.
-¿En serio? -se sorprende, incluso puede que hasta esté atando cabos para entender lo que voy a decir.
-Sí. Quieres que seamos amigos, nada más.
-¿Cómo...?
-He visto a un chico pelirrojo salir de la habitación, ¿era tu novio? -la sonrisa no se me va de la cara, es algo bueno, eso es que lo estoy llevando bien.
-Sí, lo es.
-Es muy guapo. Seguro que los dos juntos sois geniales. Para cuando os vea me darán ganas de vomitar arco iris.
-No seas tonto -reímos, pero tengo que soltarlo.
-Andrew, venía para pedirte disculpas. He sido un chico idiota. Te he dejado aquí cuando, la verdad, tendría que haberme quedado para hacerte compañía. Pero no me arrepiento ahora. Tú has conocido a un buen hombre al estar aquí sin mí que de seguro te hará feliz. Es como si el mundo me dijera que sobro en la vida de los demás, que solo obstaculizo a gente para ser feliz -lágrimas aparecen en mis ojos, asoman amenazando con salir, mostrar que soy un idiota llorica-. Para mí será difícil ser feliz, estoy confuso en todo, confuso en el amor. Ya no sé qué hacer. Incluso hoy, ahora mismo, pienso que si no existiera a lo mejor la vida de todos los que me rodean sería muy buena.
-No digas eso, si no fuera por ti yo estaría muerto en ese callejón asqueroso en manos de mi ex y de su amigo. Creeme que si dejaras de existir todo sería muy aburrido. Todo cambiaría a peor sin ti.
-Ya no sé qué creer.
-Cree en la vida. Deja paso a tu corazón, paso a tus pensamientos de razón. Tienes que saber lo bueno de la vida, explora, aún eres joven para anclarte al amor. No dejes que tus demonios ganen.
-Tienes razón. Tengo que irme -me levanto y camino hacia la puerta.
-¡Hector! Espero volver a verte pronto.
-Mejor si es en mucho tiempo, porque dudo estar bien de momento.
-Tan solo te pido una cosa, que no dejes de ser como eres.
-¿Por qué?
-Porque eres un chico hermoso, guapo, inteligente... Eres capaz de enamorar a alguien con tu sonrisa, con tu forma de ser. Puede que yo no sea ese hombre que esté a tu lado para cogerte de la mano y pasear por el parque como un par de enamorados, pero puede que haya alguien en tu vida que ya conozcas que sí sea tu amor verdadero, tu querida mitad que te completará.
-¿Y cómo sabré que esa persona es mi amor verdadero?
-Yo no puedo decírtelo, eso lo tienes que descubrir tú.
-Gracias por todo, aunque yo haya hecho poco -camino al marco de la puerta, pero antes de salir me dice algo.
-Has hecho mucho, de verdad. Siempre te recordaré como mi héroe por salvarme la vida -sonrío al oírle, esas palabras son bonitas y buenas para mi autoestima, mi corazón y mi salud mental.
-Adiós, Andrew.
-Hasta luego, Hector.
Salgo de la habitación y cierro la puerta. Al final venir ha sido bueno y todo. Ya estoy menos confuso al saber que no estoy enamorado de Andrew, en parte él me lo ha revelado. Ya solo falta saber de quién de los dos estoy enamorado. Tengo que saber...
-Don't let me down, down, down -el tono de mi móvil me saca de mis pensamientos justo en el mejor momento.
Miro quién me llama, pero es en vano ya que la llamada es de un número desconocido. ¿Quién será? ¿Un asesino? ¿Un violador? ¿Un pervertido que me hará la pregunta de qué llevo puesto? Me da asco solo de pensarlo. Antes de que esa persona cuelgue, contesto la llamada.
-¿Quién es? -pregunto duro, hay que estarlo cuando alguien desconocido te llama.
-Hector, soy yo, Tina.
-Menos mal, Tina. Creía que me llamaba un pervertido.
-¿Y eso?
-No, nada. ¿Qué pasa? ¿Cómo es que tienes mi número?
-Me lo ha dado April -la mato-. Quiero pedirte un favor.
-Claro. ¿Cuál?
-¿Podrías venir conmigo ahora mismo para apoyarme?
-Tina, ¿qué vas ha hacer?
-Voy a presentarme a unas pruebas para ser cantante. Sólo escogen a tres personas y estoy súper nerviosa. Por eso necesito que vengas a apoyarme.
-Vale. Voy.
-¿En serio? ¡Genial! April tenía razón contigo, tienes un corazón de oro.
-Tampoco es para tanto.
-Para mí, sí. Te paso la calle en la que se hacen las pruebas y te quiero ahí en media hora. Espero poder contar con tu apoyo, verte entre los asientos del público mientras canto.
-Estaré ahí, tranquila.
-Nos vemos.
-Hasta luego -la llamada se corta.
Justo recibo un mensaje de Tina diciendo la calle. De aquí hacia el teatro tardo como veinte minutos andando, no está mal. Calculo el tiempo que tardo con música, unas cuantas canciones para llegar.
De mientras me pongo de camino hacia el teatro, pienso un poquito. Ya se ve que entre Andrew y yo no va ha haber nada, eso lo respeto, seremos amigos, pero no nos veremos en un buen tiempo. Tan solo me queda saber si quiero más a Jensen o a Lucas. Me veo en medio de los dos, mirándolos a cada uno, indeciso. Los dos son geniales, son buenos chicos, pero no sé qué hacer. ¿Quién me gusta más? ¿De quién estoy realmente enamorado? ¿Quién me completa el corazón?
Ya no estoy seguro de nada, tengo que pensar con calma, dejar que pase el tiempo, así todo se aclarará poco a poco. De Lucas sé mucho, lo único que no me explica es ese contacto que decía "Error Medio Bien", tampoco sé cuál es su trabajo por su miedo a que me enamore sólo por lo que tiene. ¿Acaso yo me enamoro por los bienes materiales? No, señor. Yo no soy de esos.
Yo soy un chico que se enamora por cómo es la persona, no por sus cosas.
Andrew... Ahora eres muy sabio. ¿Quién te lo ha pegado?
Jensen... Dejaré que el tiempo pase.
Lucas... ¿No me vas a contar nada?
----------------------------
¡Hooola a todos amigos y amigas de Wattpad! ¿Qué tal todo?
(Creo que dije antes que este sería mi saludo, por si acaso me hago YouTuber algún día jajaja)
¡Mente de Hector más despejada! Menos mal, seguro ya se estaba matando por intentar quitar a alguien de su cerebro.
Ya os dije que mi mínimo de partes en esta historia sería de 50 y hemos superado más de la mitad, ahora que me entero. ¡Siii! ¡Más de 25 partes! Estamos a mitad de camino a la posibilidad de que se acabe la historia.
Cuando se supere el número 50 no se sabrá el final, aunque seguro que sí. Esta será la historia con más partes que habré hecho, apartando que si junto las temporadas de "¿Un Amor Real?" serían más de 80 partes. Dejando eso de lado...
¡Estamos a 200 visitas de llegar a los 2K! De verdad, gracias a los que leen mi historia. Es la primera que sigue en curso que llega a esa cifra. La primera historia tuve que acabarla para que tuviera una K.
¡Tengo Facebook!
PedroLibro
¡Tengo Twitter!
Pedro100Libros
¡Tengo Instagram!
Pedrolibros / pedroj16_99
¡Tengo Snapchat!
Pedroj17999
Hay algo que no entiendo del Snapchat. Hay unos números al lado del nombre, ¿qué significa eso? Da igual.
Espero que os haya gustado y...
¡Hasta el próximo capítulo!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top