MIAH.

El silencio es molesto.

Más aun cuando hay alrededor de catorce personas en un lugar relativamente pequeño.

Pero aun así, prefiero el silencio antes de que alrededor de 13 personas comiencen a hablar al mismo tiempo.

Todos gritan, golpean la mesa, se acercan a Blake y Alexia en busca de respuestas, incluso gritan mi nombre seguido de lo que creo que es una pregunta.

Pero yo estoy muy ocupada contando mis parpadeos.

Ha sido un día ridículamente largo, las clases fueron abrumadoras, estudiar lo fue aún mas y todo lo de Nick, la persona de la biblioteca y Ryder drenaron toda mi energía.

Todos parecen realmente distraídos, así que yo tomo esta oportunidad para poder escaparme del área del comedor. Suelto un suspiro de cansancio mientras que muevo mi cabello a un lado.

Siento una sueve brisa provenir de la puerta del patio, que al mirar me doy cuenta de que se encuentra abierta, así que decido salir al patio en busca de aire.

Al salir, el aire de septiembre me hace suspirar. En California no contamos con suficiente frio como para que nieve, así que la idea de enfrentarme a este clima me mueve un poco el piso, me hace recordar que no estoy en casa, estoy a muchas millas de el.

Cubro mis brazos con mis manos en busca de algo de calor, mientras cierro los ojos tratando de organizar mis pensamientos. Aun cuento con un mal presentimiento de lo que paso en la biblioteca, lo cual causa un nudo en mi garganta que me obliga a inhalar en busca de mas aire.

Abro mis ojos en cuanto siento como una especie de calor me envuelve, se trata de una chaqueta, y al girarme Ryder se encuentra a mi lado, mirando hacia el patio, como si este contara con algo muy interesante.

El cansancio me hace suspirar y ofrecerle una ligera sonrisa forzada en forma de agradecimiento mientras aprieto la chaqueta mas cerca de mi cuerpo.

Durante unos pocos minutos Ryder y yo nos mantenemos en silencio, simplemente acompañando al otro mientras pensamos en nuestros problemas individuales.

No es hasta que Ryder gira a mirarme y yo hago lo mismo, que noto los millones de cosas que esta muriendo por decirme a través de sus ojos.

-Suéltalo ya, White, estoy lo suficientemente cansada como para no querer pelear. -Mi comentario parece hacerlo reír, ya que sus labios se estiran, mas no termina de ser una sonrisa completa.

-Solo me preguntaba que pensabas de lo de Alexia y Blake, saliste corriendo de la casa. -Devuelve su mirada hacia el patio, mientras se balancea de atrás hacia delante.

Frunzo el ceño mientras pienso en su pregunta.

-Siendo sincera, no lo sé, es su vida, así que no puedo hacer mas que espectar y opinar cuando ella necesite que lo haga, es mi mejor amiga, después de todo. -Las palabras tienen un regusto amargo. – Pero aun así creo que debió de habérnoslo dicho de una forma diferente.

- ¿De que otra forma lo iba a hacer? "Hey, se acabó el cereal, por cierto, estoy saliendo con Blake" hubieras ido tu misma a buscarlo y a colgarlo como bandera en alguna parte.

Bajo la mirada hacia mis zapatos, con algo de vergüenza.

-No lo hubiera hecho, hubiera dicho que es una locura, sí, pero no hubiera hecho nada más, es la felicidad de dos personas, con eso no me metería. -Un pequeño nudo se crea en mi garganta mientras subo mi mirada hacia Ryder- ¿De verdad crees que hubiera interferido entre ellos o haberle hecho algo a Blake?

Ryder no responde mi pregunta, simplemente me mira a los ojos.

-Dios, yo no soy así. - Frunzo el ceño, un poco enojada de que así sea como me perciben las personas, como una loca.- Crecí con un hermano mayor que jugó toda clase de deportes que implicaran empujones, pasaba la mayor parte del tiempo con el y sus amigos, soy brusca por naturaleza, pero eso no me hace una loca agresiva y controladora, si Alexia y Blake quieren estar juntos que así sea.

-Nunca dije que fueras una loca agresiva y controladora. -Ryder se gira para enfrentarme, mientras que coloca sus manos dentro de sus bolsillos- En realidad, considero que eres la chica más valiente que conozco. -Las palabras de Ryder me hacen alzar una ceja y mirarlo con incredulidad- Llevo en esta universidad dos años, las bromas que he hecho han molestado a muchos he incluso casi soy expulsado un par de veces, y aun así nunca nadie me había plantado cara como tú.

Sus palabras me toman ligeramente por sorpresa, causando que mis mejillas se calienten ligeramente.

-Aunque me cueste admitirlo, te admiro, y esto es algo que no voy a repetir, pero pienso que eres increíble, Miah, nunca conocí a nadie como tú.

-Puedo decir lo mismo. -Las palabras salen de mi boca sin siquiera poder procesarlas.

Ryder parece sorprendido antes ellas.

Y me sonríe.

Y juro que nunca había sentido tanta calma dentro de mi como en este momento.

Ryder y yo nos mantenemos en silencio mientras nos observamos, el parece analizar algo, mientras que yo no puedo evitar perderme así sea por un rato en sus lindos ojos azules.

Quizás podríamos olvidarnos por un momento que nos odiamos, que somos Miah y Ryder, poder disfrutar simplemente de la compañía del otro.

-¿Miah?

-Ryder.

-No salgas con Nick, por favor.

Mi ensoñamiento me causa casi decir que si a sus palabras sin siquiera pensarlo, pero mi subconsciente me hace agitar mi cabeza, sacándome de mi trance.

-¿Qué? -Pregunto confundida.

-No lo hagas, no salgas con él.

El ambiente muere en ese instante, solamente dejando el recuerdo de lo que fue la calma, y siento reemplazado con enojo.

- ¿Y a ti que te importa que salga con él? -Pregunto a la defensiva, mientras veo a Ryder tensarse.

-Miah, por favor, solo no lo hagas.

-Ni siquiera lo conoces.

Mis palabras parecen hacerlo enojar.

-Fuimos al instituto juntos, éramos amigos, pero el lo echó todo a perder, no quiero que te haga daño, no como me lo hizo a mí. -Sus brazos se cruzan mientras me mira.

Sus palabras me causan curiosidad, haciendo que yo también cruce mis brazos.

-¿Y qué fue lo que te hizo, exactamente?

Ryder aparta su mirada, su ceño fruncido con molestia y sus hombros tensos.

-¿No puedes simplemente confiar en mi palabra? -Pregunta, incredulo.

-Nick no ha hecho otra cosa que ser amable conmigo, así que no, necesito argumentos válidos para poder creerte.

Su mirada parece herida ante mis palabras, y me sorprende el sentimiento abrumador de pánico que se desarrolla en mi pecho, como la necesidad de abrazarlo y prometerle que todo está bien.

Absurdo.

Ryder tiene la intensión de hablar, pero se ve interrumpido por el sonido de su celular. Por un momento parece muy poco interesado en responderlo hasta que ve el nombre de la llamada entrante, su rostro tomo otro semblante mientras contesta la llamada y se aleja un poco de mí.

-Charleen...-Lo escucho murmurar, mientras se apresura a entrar a la casa, dejándome con este sentimiento de disgusto.

¿Charleen? ¿Quién es Charleen?

Confundida, entro en casa, y me sorprendo al no ver ni un rastro de Ryder en ningún lugar cercano, así que decido ir hasta el comedor, donde me encuentro con los demás, que parecen un poco más calmados.

-Hey, ahí estas.- La voz dulce de Alexia me hace sonreír, mientras que Ally se acerca a mi y cubre mis hombros con mis brazos.

-Creímos que Ryder te había tomado de rehén. -Ally aprieta mis hombros de forma amigable.

-O que tenias de rehén a Ryder. -Dice Chase.

Algunos se ríen, mientras que yo solo puedo asentir.

-Ninguna de las anteriores, solo hablábamos. -Los chicos parecen sorprendidos con mis palabras, pero no me cuestionan.

-Miah...-Alexia comienza a hablar, haciendo que centre mi atención en ella.

-No digas nada, tonta, no estoy molesta, ni contigo ni con Blake, solo que estoy algo cansada.

Decido guardarme el problema en la biblioteca para otro momento, no queriendo revivir esa situación mientras que aun cuento con un mal sabor de boca por mi conversación con Ryder.

Alexia se levanta de su asiento y se acerca a abrazarme, Ally uniéndose a nosotras.

Adoro a mis amigas, están tan locas como yo.

Durante la siguiente hora, mantengo mi vista por todo el lugar, esperando que Ryder vuelva a aparecer, pero no lo hace.

Ya cuando los Alphas empiezan a despedirse, decido jalar a Blake del brazo para poder hablar con él.

-Prometo cuidar de tu amiga. - Dice de inmediato.

-Muy lindo de tu parte y eso es lo mínimo que espero, pero eso no era lo que te iba a preguntar. - Blake parece sorprendido, pero aun así decide darme su atención- ¿Sabes que sucedió entre Nick y Ryder? ¿Y quién es Charleen?

Mis preguntas toman por sorpresa a Blake, ya que el parece cuestionarme con la mirada.

-No creo que esté en mi poder el contarte, eso es algo de Ryder, puedes preguntarle a él. -Blake me guiña un ojo de forma amigable mientras comienza a alejarte. -Lamento no poder ayudarte.

Niego con mi cabeza, restándole importancia mientras me despido de él.

Dicen que la curiosidad mato al gato, lástima que soy alérgica a ellos.