Capítulo 18: Perspectiva de Vegeta
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*Cuatro meses después...*
*23 de octubre del año 784*
*Universo 7 - Galaxia del Norte*
*Planeta 4032-Verde-877. La Tierra*
*Residencia Briefs - Corporación Cápsula*
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"Se castigará al violador: cortándole su miembro, útero o quitándole el clítoris. Vengando a su víctima y según la sentencia se le cortará la cabeza..." Explicó Nappa. Estábamos en la sala de comandos de nuestra nave, Raditz está detrás de mí, escuchando. "Según recuerdo después de la ejecución del traidor se tiene costumbre limpiar cualquier rastro de él: al ser un significado de deshonor y cobardía. Se limpia el arma que cumplió su castigo y se quema la ropa que haya sido manchada con su sangre..."
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Lo primero de lo que me encargué fue de deshacerme del cuerpo: solo bastaron unas bolas de ki controladas para que el cadáver del traidor comenzará a incendiarse. Había un río cerca, así que acompañé a Trunks a limpiar su espada y rostro de los rastros de sangre. No fue hasta que llegamos a Corporación Cápsula que nos encargamos de nuestra ropa: lanzamos ambos atuendos al incinerador del laboratorio de mi esposa. Trunks dejó el celular de su madre ahí y después de una ducha regresamos a la habitación.
Por primera vez no soñé nada.
Desperté cuando escuché como mi hijo se levantaba de la cama, ya había amanecido. Tuve que ver el reloj para saber la hora, eran las 11:30 am. No recordaba la última vez que me desperté tan tarde.
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"Ty ukhodish' seychas? (¿Ya te vas?) " Pregunté, él volteó a mirarme mientras terminaba de ponerse un chaleco. Me sorprende que no hubiera huido por la noche para buscarla.
"Privet papa. (Hola papá.) " No fue hasta que escuché su voz que me di cuenta de que había hablado en sayan, pero tal parecía que no le molestaba. "YA dolzhen byl uyti neskol'ko chasov nazad, no ya usnul. (Debí de haberme ido desde hace horas, pero me quedé dormido.) " Confesó.
Lo mire directo a los ojos, el recuerdo de cómo apuñaló al traidor por instinto y después lo ejecutó grabado a fuego en mi mente. Había temido que se arrepintiera: a pesar de todo seguía siendo mitad humano y no todos tenían la capacidad de matar, ni siquiera por venganza.
Pero mi hijo me miró a los ojos y ahí no ví arrepentimiento o culpa: estaban en paz. Tenían de regreso ese brillo enamorado que compartía con mi hermano, ya no estaban solitarios.
De repente una alarma sonó, no pude evitar taparme los oídos. Trunks lo apagó casi de inmediato, pero también tenía una mueca de dolor en el rostro. Bulma acostumbraba poner alarmas fuertes para despertar, tenía un sueño profundo.
"Mmmm..." escuché a mi esposa despertar, había estado abrazada a nuestra hija, quien estaba bostezando. Bulma se dió la vuelta acercándose a mí y abrió los ojos, lentamente su vista se dirigió a mi rostro, ella sonrió lentamente. Yo le regresé una pequeña sonrisa de lado. "Vegeta..."
"A la próxima deberías asegurarte de apagar todas tus alarmas. Sabes que las escucho el triple de fuerte que tú..." Le regañó, ella solamente se encogió de hombros muy poco arrepentida. De golpe sus ojos se oscurecieron, fruncí el ceño y con mi mano aparte uno de sus mechones del rostro.
"No fue un sueño... ¿Verdad?" Ella preguntó, la culpa y el dolor ahora reflejados en su mirada; yo solo negué con la cabeza. Mi esposa se acercó más y me abrazó, yo la rodeé con mi brazo. Bra se había levantado, pero Trunks la recogió de la cama.
Nuevamente comenzó a escucharse otro sonido, pero está vez era del teléfono. Puse los ojos en blanco, escuché en mi oído la risa de mi esposa cuando nuestro hijo preguntó a la nada, indignado: "¿Es en serio?" antes de levantar el teléfono y contestar.
"Si es algo de la empresa mi madre ya declaró que la junta se encargaría por el resto del mes..." Trunks regaño. No logré escuchar quien estaba al otro lado del teléfono, pero si noté como abrió mucho los ojos y su ki se movió, parecía eufórico. Levanté una ceja mientras me sentaba en la cama. "¡Déjenlos pasar voy en un momento!" gritó con una sonrisa boba en su rostro, de repente sonrojado. Bulma se volteó y miró a nuestro hijo con curiosidad, al menos hasta que Trunks le pasó a Bra y salió corriendo de la habitación. Sentía que se dirigía a la entrada principal de Corporación.
"¡TRUNKS!" Gritó mi esposa, pero ya se había ido. Suspiró derrotada y se sentó en la cama con nuestra hija entre sus piernas.
"¡Hermana Mai!" Bra grito emocionada, mientras comenzaba a saltar. Mi esposa me miró, parpadeó sorprendido antes de concentrarme un poco y los sentí: el ki de Mai y de sus dos amigos estaban en la entrada de Corporación.
Fruncí el ceño cuando también logré sentir el ki de Videl y Satán acercándose, pero no podía sentir el de Pan.
Sabía por Whis que toda la familia de Kakarotto fue dosificada durante meses, pero no creí que le darían el inhibidor a una niña. Claramente la arpía está lo suficientemente demente para hacerlo.
"Mai y sus amigos están en la entrada... pero Videl y Satán se están acercando." Le informé a mi esposa, ella frunció el ceño con preocupación. Rápidamente ambos nos levantamos, yo cargue a Bra, Bulma se puso una bata y salimos de la habitación.
Cuando llegamos a la entrada los vimos: los tres tenían puesto ropa gastada y vieja, incluso podía notar que les quedaba algo grande. Tal parece que mi esposa tuvo razón cuando dijo que era posible que los deseos los enviaran al castillo en ruinas de Pilaf, lejos de la capital. Pero a Trunks no le importó, estaba riéndose de alegría, abrazando a Mai y dándole vueltas; incluso Pilaf y Shu se unieron al abrazo poco después. Bulma sonrió al ver a nuestro hijo tan feliz... su alegría no duró.
Un auto se estacionó en la entrada de Corporación saliendo del vehículo Videl y Satán, el último cargando a Pan, quien estaba demasiado pálida y tenía escalofríos incluso estando dormida. Parecía que tenía temperatura.
La esposa de Gohan estaba desesperada, solo bastó con mirar su rostro. Bulma se acercó a ella al verla.
"¿Estás bien Videl?, ¿Qué ocurre?" preguntó mi esposa.
"Es... es Pan. Yo... yo-o no sé qué le ocurre-e por favor Se-eñora Bulma-a..." explico, dejando salir las lágrimas que había contenido. Estaba aterrada.
"No logramos contactar con Gohan. ¡Goku tampoco responde! y no sabemos dónde está Goten... creímos que estarían aquí." Explicó Satán, igual o más asustado que su hija, abrazaba a su nieta con cuidado, como si en cualquier momento se fuera a romper.
"No Satán, ellos tampoco están aquí." Conteste.
"¡Pan! ¡PAN!" dijo mi hija emocionada intentando bajarse de mi agarre, tuve que abrazarla más fuerte.
"Papá dámela, iré también a llamar al abuelo." Dijo Trunks, acercándose. Rápidamente le pase a su hermana y él la abrazó con fuerza, ignorando sus protestas para que la bajarán.
"Hijo, dile a tu abuelo que nos vea en la Ala Médica." Pidió Bulma mientras revisaba a Pan, nuestro hijo asintió y junto a Mai entraron a Corporación. Luego dirigió su mirada a los dos restantes. "Ya saben la rutina, preparen todo para una revisión completa."
"¡Sí señora Bulma!" Gritaron ambos y corrieron. Poco después los seguimos.
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Mi suegro y mi esposa atendieron a Pan mientras el resto nos quedamos afuera: Trunks tuvo que llevarse a Bra cuando ella comenzó a llorar al ver a su amiga.
No tardó mucho en llegar Piccolo a Corporación: Videl tan pronto lo vio corrió a abrazarlo, llorando y preguntándole dónde estaba su esposo o incluso Kakarotto. El Namek la consoló lo mejor que pudo, su rostro no mostró nada, pero sabía que estaba preocupado por Pan, todos lo estábamos...
Sabía que Piccolo sospechaba en dónde estaban Kakarotto y sus hijos, pero él se negó a revelar algo, sólo dijo que, en dónde sea que estuvieran estaban a salvó: Videl contó más calmada que después de recuperar todos sus recuerdos: había buscado a la arpía, exigiendo respuestas el día anterior, pero no había nadie en la casa. Busco el ki de su esposo, Goten y su suegro, pero no los encontró.
Para ese punto estaba llorando de nuevo y siendo consolada por Satán, quien no se veía preocupado como antes, sino más bien enojado. Era extraño verlo con una expresión así en el rostro, pero la situación no era normal, al menos según nuestros estándares.
Horas después Bulma salió y nos explicó todo, tuvieron que ponerle dos intravenosas a Pan; uno con suero para compensar la desnutrición y anemia que presentó; otro para eliminar los rastros del inhibidor de su sistema. Tal parecía que había tenido una reacción severa al tomar dosis grandes y durante tanto tiempo, siendo ella aún demasiado joven y sus defensas no del todo desarrolladas. La falta de alimento debió dañarla aún más, siendo una semi saiyajin en crecimiento.
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"¿El inhibidor de ki?" Preguntó la esposa de Gohan lentamente. Bulma había acabado de contarle el estado de su hija, aunque no había mencionado el inhibidor aún.
"¿Sabes del inhibidor?" Pregunté, ella se giró para mirarme.
"Si, Gohan me contó, después de llevar a su madre de regreso a la montaña Paoz. Lo había acompañado a recoger a Pan a Corporación Cápsula, fue unas semanas antes de que mi suegro la dejara." respondió.
Cuando terminó miré a mi esposa a los ojos, ella volteo a mirarme también, estaba sorprendida y aterrada. Sabía que le dijo a Gohan sobre la droga, incluso Goten y Trunks lo sabían, pero había creído que la arpía no, que tal vez Kakarotto se lo había contado.
"¿Esa arpía vio dónde estaban los viales?" pregunté, con el tono más calmado que pude. No quería que creyera que le echaría la culpa o que estaba enojado, al menos no con ella.
"Yo... cuando ví a Chichi ese día creí que sería bueno que ella supiera del inhibidor..." contó lentamente. "Poco antes de que se fueran: Gohan se había ido por Pan a la guardería... me llamaron de la empresa y dejé a Chichi, sola con el refrigerador abierto... solo fueron unos minutos... ¡oh cielos!" Se tapó con las manos el rostro.
"Pero no puede ser el inhibidor, Gohan me dijo que solo era inyectable. ¡Pan lo único que ha tomado son pastillas para el dolor de cabeza al igual que mi esposo!" Exclamó Videl casi desesperada, negándose a creer que su suegra sería tan ruin. Ella tomó su bolso y del interior sacó un frasco de pastillas el cual le pasó a Bulma, ella lo agarró y comenzó a observar; conforme leía su ceño se frunció cada vez más.
"Esto... no tiene sentido..." Dijo al terminar de leer la receta que estaba pegada al frasco. "Conozco al hombre que aparece aquí: él es un químico no un doctor... lo despedí hace más de un año por intentar robar algunos planos de mi papá..."
"No, si es doctor, mi suegro fue con él..." Videl se detuvo, puso una mano en su boca. Nos miró a todos, con aprensión y un miedo frío que incluso sentí por medio de su ki. "... mi suegro fue con él... po-or sus jaquecas hace unos días."
Tomé el frasco de las manos de Bulma, lo abrí y tomé un par de pastillas: tan rápido pasaron por mi garganta la debilidad y el cansancio que sentí eran exactamente igual a cuando mi esposa probó el inhibidor conmigo, pero con menos intensidad. Miré de nuevo a Bulma.
"Es el inhibidor... así como drogaron a todos." Ella cerró los ojos, cansada y agachó la cabeza. Videl se sentó en una silla y comenzó a llorar, de furia o preocupación o ambos; Piccolo solo pudo apoyar una de sus manos en su hombro; mientras Satán abrazaba a su hija. Suspiré lentamente, intentando controlar mis emociones.
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Con los cuidados que le dió Bulma y mi suegro, Pan no tardó mucho en sentirse mejor. Hizo falta dos semanas para que el resto del inhibidor saliera de su sistema. Ella estaba feliz de pasar todos los días con mi hija, aunque pregunto mucho por el resto de su familia. Pero nunca por la arpía.
Se quedaron a vivir con nosotros hasta el regreso de Gohan, Goten y Kakarotto. Piccolo los visitó seguido.
Mi esposa se sentía culpable. Durante los siguientes meses Bulma estuvo lidiando con pesadillas casi todas las noches, algo con lo que estaba muy familiarizado; Trunks y yo la apoyamos y la consolamos lo mejor que podíamos, pero ambos sabíamos que muchas de sus pesadillas tenían que ver con ese bastardo de Yamcha.
Mi hijo tuvo razón, nadie se dió cuenta hasta un día después.
A mediados de septiembre Trunks prendió la televisión, salieron las noticias de Satán City y ahí pasaron el boletín de desaparecido o posible muerte: informando que habían encontrado hace semanas su auto destrozado y casi completamente quemado hace unos meses, en una carretera a las afueras de la ciudad, pero sin señales de él. Se sospechaba que su cuerpo se había carbonizado en el incendió.
Bulma alcanzó a escuchar toda la noticia, cuando terminó apagó el televisor y nos miró, con ese ceño fruncido que ponía cada vez que su mente comenzaba a trabajar. Fue pura suerte que solo estuviéramos nosotros tres en la sala. Mi hijo y yo la vimos con la mirada en alto, sin ningún arrepentimiento. Bulma había estado en esas lecciones en particular, cuando le conté a Trunks sobre las traiciones y sus respectivos castigos.
Por nuestras miradas ella debió confirmar sus sospechas: no dijo nada, pero sus hombros tensos de repente bajaron, mostró una sonrisa acuosa y corrió hasta nosotros, abrazándonos y comenzando a llorar de nuevo. Pero no de tristeza, de alivio, al igual que nuestro hijo esa noche. No pidió ningún detalle. Sabía que en silencio ella había tenido miedo de que él regresará a Corporación, ahora jamás volvería a verlo. Estaba a salvó, y sin que ella supiera Bra también.
Durante las siguientes semanas sus pesadillas disminuyeron, ayudó que ninguno de los traidores se acercó a Corporación Cápsula. En todo caso todo el lugar estaba sellado y con guardias en todas las entradas. Pero no funcionará para siempre.
Su humor mejoró mucho más cuando (de alguna forma tal vez no tan legal, aclaró Trunks después) el químico que ayudó a la arpía fue encarcelado por la Policía y su laboratorio clausurado: un químico de Corporación había sido solicitado para encargarse de todo lo que hubiera en el interior del lugar. Bulma en persona destruyó toda la información del inhibidor que encontró, incluyendo sus propias notas, pero conservó los viales restantes con seguridad extra.
Mi hijo y Mai no se habían separado desde su reencuentro, pasaron todo el tiempo juntos. Bulma con gusto los recibió de nuevo a esos tres en Corporación Cápsula. Aún me daba gracia la expresión desilusionada de la secretaria de mi hijo cuando lo vio a él y a Mai en la empresa. Tal parecía que ya eligió a su sputnik zhizni (pareja de vida) y Mai no era mala compañera, aceptaba completamente a mi hijo, muy parecido a como mi esposa me acepto a mí.
Trunks estaba feliz, Bra también: mi pequeña incluso volvió a hablar de nuevo y comenzó con sus lecciones del lenguaje Saiyajin, tal parecía que al igual que su hermano lo captaba con rapidez: mi esposa estaba sobrellevando cada vez mejor lo ocurrido, la culpa desapareciendo de su mirada un poco más cada día; la nieta y nuera de Kakarotto estaban sanas y seguras.
Fruncí el ceño, de quién no sabía nada era de ese cabeza hueca.
Kaiosama me informó cuando despertó de su aparente coma de tres días, le di un pequeño mensaje y no supe más de ellos. Él y sus hijos estaban a salvó, de eso no había duda; pero algo en la boca de mi estómago me ha estado manteniendo alerta durante estos meses. Implicaba a Kakarotto, solo no sabía que era. Trunks también sentía esa inquietud, podía verlo en su mirada perdida en algunas ocasiones.
Suspiré, incluso había culpa y vergüenza en sus ojos a veces, tal vez por sus discusiones con Goten y los roces con su djadja (tío).
Levanté la taza de café de la mesa y tomé un sorbo, escuché distraídamente que mi esposa hacía lo mismo. Era temprano, habíamos decidido desayunar fuera, cerca del kiosco en dónde había dado vueltas durante horas pensando un nombre Saiyajin para mi hija.
"¿Qué quería tu abogado ayer?" Le pregunté a Bulma, ella había estado leyendo un libro: Bra estaba en algún lugar con Pan y Trunks con su... novia. Era extraño ese término aún para mí.
"Vino a entregarme los papeles que le encargue hace meses..." respondió, sin apartar nunca la vista de su libro, pero con una sonrisa satisfecha en sus labios. Así que era eso.
"¿Es necesario tanto papeleo? Con lo que hizo esa arpía debería de estar decapitada..." dije amargamente. Bulma no había hecho nada contra el resto de los insectos, ella quería esperar a que Kakarotto volviera.
"Lo sé, Vegeta... pero Gohan y Goten tienen una vida en la ciudad y es mejor dejar todo lo legal arreglado antes de que regresen. A diferencia de ustedes, Goten aún es considerado menor de edad... más que nada por ese bebé inocente." Declaró mi esposa con un suspiro triste. Había ido tan lejos como para ayudar a Videl a mentir en el trabajo de Gohan en la universidad, diciendo que se tomaría un año sabático y cancelando sus clases de esa carrera en genética y medicina. A Goten lo habían sacado del colegio, pero Bulma logró 'despedir' a los tutores que contrató la arpía. Incluso los estaba investigando en secreto, después de escuchar mis sospechas sobre el maltrato.
De esa traidora no habíamos sabido nada desde ese fatídico día. Según el calendario de Bulma el bebé no tardaría en nacer: si Kakarotto no regresaba estaba seguro que mi esposa personalmente le arrebatara la pequeña a la arpía. Sonreí un poco. Si intentaban invocar a Shenlong de nuevo sería imposible.
Las esferas estaban seguras y selladas, Dende se aseguró de que jamás volverá a repetirse todo este teatro.
Tan pronto se cumplió el año recogimos Trunks y yo cada esfera y se las dimos a Dende. Piccolo había mencionado vagamente que en el templo había una habitación en la que solo él y el Kami del templo podían entrar, Bulma agregó una cúpula que evitaba su detección a través del radar del dragón.
"Hola mat', Hola papa." escuché la voz de mi hijo, saludándonos. Vi como Bulma levantó la vista de su libro y lo saludo con una sonrisa, yo solo asentí con la cabeza.
Últimamente mi hijo se había comenzado a vestir con pantalones holgados y playeras: no había vuelto a usar algún dogy desde la ejecución del traidor y tampoco yo mi armadura. De hecho, estaba con pantalón y camisa... sentía que era incorrecto volver a vestirse como antes. Tendría que hablar con mi esposa del tema; era posible que Kakarotto y sus hijos tuvieran el mismo problema.
"Trunks, ¿Dónde está tu hermana?" Bulma pregunto, regresando a su lectura. Nuestro hijo se acercó a la mesa y se sentó en la silla frente a nosotros.
"Ella está en el jardín del abuelo con Pan, están jugando con los animales..." respondió. Tomó una taza, la cafetera y se sirvió. "Mr. Satán se acaba de ir, me dijo que Buu por fin se despertó. Probablemente regrese a su casa en Satán City y venga de visita." Ese globo mal inflado había estado dormido durante todo el desastre.
"Bien por él..." solté sarcástico, mi esposa se rió un poco. "Al menos sabemos que Buu cuidará de Satán."
"¿De verdad crees que irían tras Mr. Satán, otets?" Preguntó mi hijo al terminar de tomar un poco de café y agarrar unos pastelillos.
"Fueron tras Kakarotto, simplemente estoy alerta..." Bulma suspiró y Trunks bajó un poco su mirada. "El cobarde no hará nada; los dos animales no pueden hacer mucho y la arpía aún está embarazada, pero cuando su bebé nazca será un problema." Más si Bulma lograba su plan.
"¿Dónde está Mai?" Preguntó mi esposa, cambiando de tema y cortando el silencio tenso que siguió. Nuestro hijo se sonrojo al instante.
"Se fue a ayudar a Pilaf y Shu con las reparaciones de algunos de los robots..." contó, una sonrisa infantil dibujándose en su rostro. Por el rabillo del ojo mire a Bulma, estaba sonriendo con complicidad. Ella creía que Trunks se casaría antes de los 21 años. Mi suegra estaba bastante entusiasmada con la idea de una boda, era probable que la estuviera planeando ahora mismo. "Mis amigos se alegraron al verla."
"¿Qué es lo que exactamente recuerdan tus amigos sobre la repentina salida de Goten y Mai?" Bulma preguntó. Trunks había faltado durante estos meses al colegio, apenas había regresado hace un par de días junto a Mai.
"Después de que Lula me soltó de su abrazo de oso..." comenzó elocuente. "Según todos; Mai se salió para trabajar contigo en Corporación Cápsula, tú la ayudaste a mantenerse al corriente con sus estudios; con Goten, saben que Chichi decidió sacarlo de la escuela y desde entonces estudia en casa, pero durante estos 8 meses se mandaron mensajes por teléfono. Incluso Chok y Fayra me mostraron sus teléfonos..." Comentó divertido. Tal parecía que Porunga había cubierto esa parte. "Lula me preguntó por él, ya que dice que intentó llamarlo después de que yo le colgué ese día, pero no contesta... le dije que se había ido con mi tío Goku y Gohan a ese viaje en el sabático y que dónde estaban no había buena señal..." Bulma le guiñó un ojo por la mentira. "Aparte de eso, todo lo demás está bien."
"Porunga de verdad nos hizo un favor... esto pudo haber sido más complicado." comentó mi esposa, terminando su propio café.
"Es verdad... ¿Qué pasa con ese hombre que vino hace una semana a preguntar por mi djadja?" recordó Trunks, incluso yo miré a Bulma con curiosidad.
Hace una semana un hombre rubio llegó a Corporación y pidió hablar con mi esposa, lo único destacable era que tenía un traje de guardia, el mismo traje con el que Kakarotto nos vistió algunas veces.
"Ah sí... Su nombre es Taku Nakaze, Goku fue su jefe." comenzó, poniendo una mano en la mesa y moviendo periódicamente sus dedos. "Por lo que me contó parece que ellos se hicieron amigos, porque incluso le contó de mí. Vino por qué quería saber cómo estaba Goku, ya que se enteró de la carta de renuncia que 'el mando' después del picnic familiar." otra cosa que ella había arreglado. "Estaba preocupado... Me contó que él le dió la idea a Goku de un picnic: se suponía que él laboraba el lunes, pero se enteró de la renuncia. Intentó llamarlo, pero lo mandó directo al buzón, por eso vino aquí... tuve que decirle lo del sabático también. Se fue un poco más tranquilo." Suspiro, cerrando su libro y apoyándose mejor en la silla. "Me dió su teléfono y me pidió de favor que le dijera cuando Goku regresará... se veía sincero."
"Incluso con el cerebro lavado esa cabeza hueca no cambia... si se hizo amigo del Rey del todo, de un humano será demasiado fácil." Comenté con una ceja levantada. Trunks y Bulma se rieron.
"¡Abuelito!" Escuche la voz de Pan, al mismo tiempo que las puertas se abrían. Ella y Bra estaban jugando con el muñeco de Kakarotto y otro nuevo muy parecido a mí. Bulma se lo había dado a nuestra hija hace unas semanas y simplemente no lo soltaba, Trunks se rió hasta el cansancio cuando lo vió.
Tras las pequeñas estaban Videl y Piccolo escoltándolas: a diferencia de hace meses la mujer se veía mucho mejor, la compañía de su padre y del segundo padre de su esposo la ayudaron, aunque aún estaba muy preocupada por Gohan. Cuando nos vio nos saludó, mientras las niñas seguían jugando alrededor.
"Hola señora Bulma, señor Vegeta." Saludó, mientras se sentaba en una silla. El Namek se mantuvo parado no muy lejos, vigilando a las traviesas.
"Buenos días Videl. ¿Creí que tenías clases hoy?" Preguntó mi esposa, mientras veía como la mujer se servía una taza de té.
"Parece que van a hacer un pequeño evento en la escuela y toda mi clase fue invitada." Informo, mientras le daba un sorbo a su taza. "Preferí quedarme y me dieron el día."
El ambiente estaba tranquilo, mi esposa y Trunks comenzaron a hablar con Videl. Miré hacia atrás y vi a Bra y Pan sentadas en el pequeño kiosco jugando, Piccolo las miraba con una pequeña sonrisa.
Solo pasaron unos segundos, pero mi pecho estaba... cálido, de repente. Miré a mi hijo a los ojos y vi que él también lo estaba sintiendo, incluso tenía una mano en su pecho; Piccolo debió sentir algo parecido porque parpadeo sorprendido, frunció el ceño al mismo tiempo que se dió vuelta y nos miró, pidiendo explicaciones.
Fruncí el ceño, confundido... esto no debería de ocurrir, Gohan, Goten y mucho menos Kakarotto sabían nada de los vínculos saiyajin...
"Vegeta ¿Que pasa-a...?" Intento preguntar mi esposa, pero no pudo terminar cuando el sonido inconfundible de la teletransportación se escuchó y todos miramos al frente, levantándonos de la mesa.
A un par de metros lejos de nosotros, enfrente de la entrada se había teletransportado Kakarotto; tenía puesto el mismo traje que tenía cuando se quedó en el planeta Yadrat por un año. Se veía que había recuperado gran parte de su masa muscular, incluso estaba relajado. Por fin podía detectar su ki.
Había comenzado a bajar su mano de su frente cuando vio que alguien más se estaba teletransportando a su lado, pero algo lento. Kakarotto no despegó su mirada de la persona hasta que su apariencia se mostró completamente, era Goten; tenía también un traje del planeta Yadrat pero de colores café, naranja y rojo oscuro. Cuando vio a su padre le dió una enorme sonrisa y saltaba entusiasmado.
Ni medio segundo después otra persona se teletransporto, aunque con él fue mucho más lento su aparición y tropezó un poco con el aterrizaje, pero se mantuvo firmé, fue cuando pudimos verlo, traía un traje de Yadrat pero sus colores eran diferentes: con diferentes tonos de morado y verde, fue Gohan: le sonrió a su padre y a su hermano al verlos.
Kakarotto les dio una sonrisa grande y orgullosa a ambos. Los tres claramente ignorantes de que estábamos no muy lejos de ellos.
Ese insecto... llevó a sus hijos al planeta Yadrat y les enseñó la teletransportación.
"¡Kakarotto!" grité.
"¡Goku!" Bulma y Piccolo.
"¡Gohan!" Videl.
"¡Goten!" Trunks.
"¡Tío!" Bra.
"¡Abuelito!" Pan, y todos al unísono.
Cuando nos escucharon los tres saltaron, espantados. Vieron por fin a nuestra dirección y se quedaron congelados. Al menos hasta que Kakarotto comenzó a reír nerviosamente.
"Jijijijijijiji Hola a todos." dijo con esa sonrisa infantil y demasiado animada, mientras se rascaba la parte de tras de la cabeza. Siempre hacía eso cuando estaba nervioso.
"Buenos días." Saludo Gohan un poco bajo, pero sonriendo, bajando su mano de la frente.
"¡Hola!" Siguió Goten, él movía su mano de un lado al otro, tenso y entusiasta al mismo tiempo. Le había crecido el cabello desde la última vez que lo vi. "Ya volvimos..."
"Debí imaginar que llevarías a tus hijos al planeta Yadrat..." exclamé, Kakarotto me miró y su sonrisa bajó un poco, pero era una verdadera, sin su máscara. Se encogió de hombros, puse los ojos en blanco y crucé los brazos.
"¡Abuelito!" Gritó Pan mientras corría hasta llegar al frente de su dedushka (abuelo), él se arrodilló y la abrazo. "¡Te extrañe mucho abuelito!"
"Lo sé... lamento llegar tarde." le dijo a su nieta, en un tono triste. Separó un poco a Pan de él, pero no la soltó. "Ya no te sientes mal. ¿Verdad?" Instantáneamente Goten y Gohan se acercaron.
"No abuelito, me siento muy bien... ¿Cómo sabes que me enferme?" Preguntó ella de repente, girando su cabeza hacia un lado. Kakarotto sonrió.
"Estuvimos al pendiente de todos mientras estábamos fuera..." se limitó a responder, mientras volvía a abrazarla, está vez más fuerte. Bulma y yo nos miramos, si Kaiosama les había informado, posiblemente sabían lo que había ocurrido estos meses. La pregunta era si sabían lo del traidor.
Pan se alejó de él e inmediatamente se acercó a Gohan quien ya estaba arrodillado y la abrazó con fuerza. "Mi pequeña, no sabes cuánto te extrañé..." confesó él, tan bajo que apenas logré escucharlo. "Ya no tienes fiebre ni vómitos ¿Verdad? ¿Ya estás mejor? ¿Sin fiebre?"
"¡Si papá estoy bien! Solo fue una fiebre..." se quejó ella, ignorante de la mirada enojada y el ligero aumento de energía que mostró su padre por un segundo. "Los extrañe mucho... ¿Dónde estuviste papá?, ¿Por qué no me llevaste?"
Miré a mi hijo por el rabillo del ojo, él asintió levemente, también estaba escuchando todo. Habían comenzado a susurrar.
"No te preocupes..." dijo Gohan con una sonrisa suave, separándose de Pan y mirándola a los ojos. "Te llevaré conmigo la próxima vez. ¿Qué te parece?"
"¡Siiiiii! ¡Un viaje!" Gritó ella emocionada, mientras volvía a abrazarlo, después fue corriendo hacia Goten quien la recibió igual de animado.
"Gohan..." exclamó Videl casi en un susurro. Gohan ya se había levantado del suelo, pero al escucharla miró a su esposa con miedo y culpa, incluso agacho un poco la cabeza. Kakarotto le puso una mano en el hombro, haciendo que lo mirara, le dió una sonrisa alentadora y lo soltó, alejándose un par de pasos.
Gohan volteo y con un suspiro caminó en dirección a su esposa.
"Videl... Videl lo siento, no quise... no quise decir ninguna de esas cosas..." comenzó él, pero su esposa lo interrumpió cuando corrió hasta su dirección y lo abrazó, Gohan la rodeó con sus brazos y no la soltó. Al verlos Bulma sonrió con ternura, Piccolo y Kakarotto también, satisfechos.
Dirigí mi mirada hacia Goten: Pan se separó de él y corrió en dirección a sus padres, fue cuando Trunks reunió el valor y caminó hacia él, ambos quedaron uno frente al otro, mirándose fijamente por unos minutos.
"¿Vas a golpearme ya?" Goten pregunto, con una ceja levantada y los brazos cruzados. Mi esposa al no escucharlos y verlos con miradas tan serias quiso acercarse, pero negué con la cabeza.
"Eso mismo te iba a preguntar." Contestó mi hijo, mientras se reía un poco, Goten emulándolo. "Lamento haber dicho que eras una copia de Gohan... sé cuánto odias la comparación." se disculpó.
"Bueno... yo te dije que eras una vergüenza para mi tía Bulma, creo que estamos a mano. ¿No crees?" exclamó Goten, algo dudoso.
En vez de contestar mi hijo solo extendió su mano derecha y le dió a su hermano una sonrisa, Goten sonrió al verlo, desapareció la tensión en su postura, estrechó la mano de Trunks y lo abrazó. Bulma me miró con una ceja levantada al verlos, era seguro que me preguntará más tarde que habían dicho.
"¿Tío Goku?" Escuché la pequeña voz de mi hija. Ella se había escondido detrás de mi pierna sin darme cuenta, con su juguete agarrado con fuerza en su mano.
Kakarotto la escuchó, la vio y su sonrisa desapareció, la culpa y el autodesprecio se vieron en su rostro, incluso en su ki. Se acercó lentamente hacia nosotros, antes de llegar a la mesa se detuvo y me miró, yo asentí con la cabeza. Él se arrodilló otra vez y extendió un poco sus brazos, como esperando a que Bra saliera corriendo. Por el rabillo del ojo ví como Gohan y Goten voltearon a mirar a su padre, alertas. Estaban preocupados.
Mi princesa me miró primero, yo le sonreí un poco y asentí nuevamente, volteo a ver a Kakarotto y comenzó a caminar lentamente hacia él. Sin soltar nunca su muñeco.
"¿Tío Goku?" Ella volvió a preguntar, como asegurándose de que esté era en verdad su tío, y no la versión que la despreció.
Desde bebé por alguna razón le había tomado mucho cariño a ese cabeza hueca, y sabía que él a ella también, le había dolido mucho cuando la trato mal durante esos meses. Solo podía imaginar lo mal que se sentía Kakarotto en este momento, tenía cierta facilidad con los niños, algo que ya no se veía tan a menudo incluso en Planeta Vegetta.
"Hola pequeña Bra..." Sonrió él, emulando a la perfección la sonrisa paternal que siempre le daba a mi hija. Ella lo vio y de repente corrió hacia él y lo abrazó con fuerza, Kakarotto atrapándola con facilidad.
"Te extrañe mucho tío Goku..." dijo ella mientras ocultaba su cabeza en el hombro de su tío. "Te quiero..." está vez se notó su tono lloroso.
"Yo también te quiero mi pequeña sobrina..." él exclamó, mientras cerraba los ojos con fuerza. No era la primera vez que la llamaba así. "Lo siento... todo fue mi culpa..." repitió, Bulma al lograr escucharlo se acercó a él y se arrodilló a abrazarlo, al mismo tiempo que Trunks. Miré alrededor y vi las expresiones tristes de Gohan y Goten, tal parecía que no era la primera vez que se culpaba. Clásico de él.
Suspiré derrotado, caminé hasta donde se encontraba, puse mi mano en el hombro de Kakarotto e hice un poco de presión, instantáneamente abrió los ojos y levantó su rostro para mirarme.
"Espero que ese viaje haya valido la pena Kakarotto... no creas que te la dejaré fácil." dije con una sonrisa engreída, él me la regreso.
"Eso tenlo por seguro, Vegeta..." aceptó el reto. Por el rabillo del ojo ví como la postura de Piccolo dejó de estar tensa, incluso Goten y Gohan suspiraron aliviados.
Estará bien. V kontse kontsov, on Saiyajin. (Es un saiyajin después de todo)
Notas:
-Algunos de los colores de los trajes de Gohan y Goten fueron inspirados en los trajes vistos en el Manga de Dragon Ball Super: Saga de Moro. (Otros fueron agregados según mi gusto personal)
-Se cuenta aquí lo ocurrido con Pilaf, Shu y Mai.
-Imagen de Corporación Capsula fue sacada de uno de los videojuegos oficiales de Dragon Ball (Creo el Tenkaichi Budokai)
-Fan Art creado y dibujado por mí. (Fondo y personajes) De verlo en otra plataforma o Red social será denunciado.
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