Simplemente su concentración estaba por los suelos, no podía ni siquiera tirar una canasta, se regañaba internamente al no poder lograr absolutamente nada, y por supuesto apenas y escuchaba los regaños del entrenador, no podía concentrarse en lo absoluto.

- ¡Park! ¡Tira bien, maldita sea!

De nueva cuenta el entrenador seguía con sus regaños y le exigía que tirara a la perfección, y debía hacerlo, él era uno de los mejores, tenía que seguir siéndolo, no podía fallar, pero de nueva cuenta lo hizo.

- ¡Maldición! -apretó la mandíbula al ver como el balón había golpeado la canasta, pero no había entrado.

- ¡Park, ven aquí! Los demás sigan con el entrenamiento.

El mencionado soltó un bufido molesto, y miro a sus demás compañeros de equipo, entre ellos estaba Taehyung y Jungkook, quienes estaban al igual que él, lanzando tiros lejanos para así obtener más puntos, se decepciono de si mismo, al ver como aquellos dos lo hacían muy bien.

- ¿Qué sucede contigo, muchacho? Has estado muy distraído en toda la practica.

El entrenador Choi, se encargaba de todo el equipo, desde principios se elegían a los mejores para que así pudieran participar en torneos importantes para la institución, y así ganar prestigio, inclusive era conveniente para los estudiantes, pues algunos podían ir con las ligas mayores y estar con un equipo internacional, Choi siempre confiaba en todos su jugadores, y ahora Jimin estaba siendo una estrella en el equipo, llevándolos a las estatales, podrían competir muy bien, pero ahora Jimin estaba demostrando que parecía que se le había olvidado por completo como tirar una canasta.

- Lo siento, estoy algo pensativo.

- ¿Problemas? -Jimin dio un leve asentimiento con la cabeza-. Deja los problemas de lado, concentrarte en la practica, no quiero que dejes de concentrarte, ¿entendido?

- Sí, entrenador.

- Bueno, ve a darte una ducha, la practica ha terminado, tus compañeros irán allí también en unos momentos.

- Entendido.

Jimin estaba a punto de retirarse por completo, cuando de nuevo la voz del entrenador hizo que mirase detrás de él.

- ¡Y Park! No traigas más problemas, recuerda, si uno del equipo falla...

- Los demás también.

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Yoongi apenas había salido de la escuela, se había quedado para poder investigar algunas cosas, en verdad que los profesores llegaban a hartarlo, suspiro cansado, le dolían levemente las sienes, pero sabía que con una taza de té caliente y un buen relajamiento, estaría mucho mejor, camino hacía la salida y es allí cuando diviso a Jimin.

Estaba sentado recargando su espalda en el tronco de un árbol, se veía ¿preocupado? Yoongi no estaba planeando acercarse, pero ver de esa manera a Jimin, de alguna forma le preocupaba, así que en su debate mental de si ir hacía él o no, termino acercándose.

- ¿Estás bien?

La voz de Yoongi hizo que Jimin dejase de pensar en lo que haría para poder dejarle en claro a Taehyung, que debía dejar de intentar acercarse a Yoongi, ahora allí estaba quien rondaba por sus pensamientos, agradecía al universo el que no estuviera Kim Taehyung para interrumpirlos.

- Sí, ¿qué estás haciendo aquí tan tarde?

Está vez Yoongi sabía que iba a ser una conversación normal, sin ese toque coqueto que siempre Jimin se negaba a no utilizar con él, está vez hablaba como a él le gustaba, como siempre lo había conocido.

- Debería preguntarte lo mismo.

- Estaba en practica -señalo la bolsa en donde se encontraba guardada su ropa con la que entrenaba.

- Me quede estudiando -Jimin miro solo por unos segundos a Yoongi, siempre se quedaba a estudiar.

Recordaba cuando a veces ambos se quedaban a estudiar por las tardes, ya fuera en la escuela, o en casa de alguno de ellos, siempre estaban juntos, amaba esos momentos, podía abrazar a Yoongi y de vez en cuando robarle un beso, o simplemente pedírselo, siempre lo aceptaba.

- ¿Te preocupa algo? -la voz de Yoongi lo había sacado de nuevo de sus pensamientos.

- No -por supuesto que le preocupaba algo.

- Claro que te preocupa algo, no puedes engañarme, Park.

Jimin sonrió ladino, pero no era arrogante, en verdad le había parecido divertido lo que había dicho Yoongi, y por supuesto que Yoongi sabía eso.

- Lo sé.

- Que bueno que lo sepas, estaba a punto de ir por un té, ¿quieres algo?

- ¿No se supone que debo invitarte, yo?

- ¿Y? Solo ven, y deja de poner esa cara de preocupado.

- Está bien, pero seré yo quien invite.