El sonido de los fuertes puños que golpeaban el saco de boxeo, hacían eco en la habitación, el sudor recorría el cuerpo de Jungkook desde frente, empapándolo por completo, y las gotas escurrían sobre el piso.

Su práctica parecía contrastar con las suaves notas de violín en el fondo.

Jungkook nunca pensó que terminaría escuchando música clásica, mientras golpeaba su saco de boxeo, pero había sido idea del doctor Kim, decía que este tipo de música lo ayudaba a relajarse y mantenerse enfocado.

De verdad que el doctor Kim era bueno con él, incluso le obsequió un reloj que media su presión arterial, así cuando Jungkook se alteraba podría notarlo de inmediato.

Casi sin aliento dio un último golpe severo, antes de dejarse caer en el piso completamente agotado, sus músculos dolían, sus pulmones exigían oxígeno, mientras su garganta quemaba intentando recobrar el aliento.

Con sus ojos cerrados se centró solamente en el fuerte y desenfrenado latido de su corazón, que zumbaba en sus oídos en un sonido constante.

Estaba realmente agotado, aunque así se sentía la mayoría del tiempo los últimos meses, era realmente difícil, y a veces sentía que no podía seguir, que no era lo capaz de superarse a sí mismo y todos sus demonios.

Acostumbrarse a estar sin Jimin había sido una completa tortura, acostumbrarse a la ausencia de su peculiar novio en su vida era imposible, pero tammbien se convirtió en una de sus motivaciones más preciadas para seguir luchando, una llamita de esperanza encendida en su interior, que le decía que podía recuperarlo una vez que estuviera listo.

—! Oye Jungkook!, ¿Aún no estás listo?, ya casi es hora de tu sesión de terapia— La voz de Namjoon se escuchó al abrirse la puerta.

Jungkook aun en el piso rodó los ojos —Mi terapia es en dos horas, ¿Qué haces aquí?—

—Vine para llevarte a tu cita...

—Tengo mi propia motocicleta — Bufó Jungkook.

—Pero es mejor que vayas acompañado Jungkook— Soltó Namjoon — Soy tu amigo no pienso dejarte solo en esto—

—Porque no dices la verdad, quieres acompañarme para ver al doctor Kim— Lo acusó Jungkook poniéndose de pie.

Namjoon no pudo contener una risa llena de culpabilidad — Está bien, me atrapaste, hoy no lo pude ver en el instituto, así que date prisa, no quiero que lleguemos tarde—

—Aún tengo tiempo, así que déjame en paz — Murmuró Jungkook tomando una toalla para secarse el sudor y apagando su reproductor de música.

—Espérame aquí, lo verás cuando termine— Le dijo Jungkook a Namjoon y cruzó por la puerta del estudio del doctor Kim justo a tiempo.

El mayor levantó la mirada brindándole una amable sonrisa —Jungkook bienvenido—

—Hola Doc. Kim — Jungkook lo saludó con la mano.

—Toma asiento, ¿Cómo estas Jungkook?— Le preguntó de inmediato.

—Bien — Jungkook se encogió de hombros.

—¿Qué tal la escuela?—

—Sigo odiando tener que usar uniforme, pero el resto todo va bien, creo que lograré graduarme después de todo — Comentó rascándose la cabeza.

—¿Y como te fue en ese trabajo en equipo que tenías que hacer?— quiso saber SeokJin.

—La profesora dijo que el nuestro era el mejor, es agradable trabajar con Mingyu y EunWoo, aunque al principio no nos poníamos de acuerdo y le pusimos mucho empeño — Dijo Jungkook con una sonrisa.

—Me alegra tanto que te lleves bien con tus compañeros en tu nuevo instituto —

—Es porque he seguido sus consejos, trato de mantenerme bajo control, hago ejercicio, le ayudo a los chicos en el taller y siempre escucho la música que me recomendó—

SeokJin apuntó algo en su libreta — Te dije que te gustarían, el compositor es muy talentoso y logra transmitir las emociones a través de cada nota—

—Si, — Jungkook sonrió — Y esta semana me ha ayudado a mantener la calma, el reloj no se ha disparado ni una sola vez, solo cuando hago deportes —

—Tu progreso ha sido muy bueno, y estoy orgulloso de como estas manejando toda esta situación de acoplarte a nuevas personas, un nuevo ambiente— Le dijo SeokJin con una sonrisa.

Jungkook asintió — Es gracias a usted Doc. Kim—

—Claro que no, es gracias a tu esfuerzo de querer seguir adelante y ser mejor, vivir con un trastorno explosivo intermitente no es fácil, pero tú lo estás logrando y debes sentirte orgulloso de eso, y de la persona en la que te estás convirtiendo — Le aseguró SeokJin.

—Lo estoy, pero sé que debo esforzarme mucho más si quiero recuperarlo — Comentó Jungkook.

—¿A Jimin?— Preguntó SeokJin.

Jungkook tragó grueso y asintió — ¿Usted sabe como está él?—

—Se encuentra bien, está concentrado en sus estudios — Fue lo único que le contestó SeokJin.

—Me alegra que esté bien — Susurró Jungkook, queriendo preguntar más, pero se detuvo Jimin también era tratado por el doctor Kim, no seria ético que le dijera más.

—¿Haz pensando en hablar con él?—

—Muchas veces, pero creo que aún no estoy listo, le temo a su rechazo — Confesó.

—Así que supusiste esa posibilidad, ¿Y si eso pasa, que harás?— Interrogó SeokJin.

Jungkook suspiró tragando grueso —Aceptar su decisión, quizá intentar conquistarlo de nuevo, pero si ya no siente nada por mí, solo queda hacerme a un lado y desear que sea feliz, seguir con mi vida supongo, centrarme en mis metas como motociclista deportivo—

Aunque le doliera en el alma, y solo pensar en la idea de no volver a tenerlo cerca terminara de romper su corazón, nunca presionaria a Jimin, amar también significa querer el bienestar de la otra persona y por supuesto Jungkook siempre querría lo mejor para Jimin.

Aunque eso significara no estar junto a él.

—Es bueno que tengas tus decisiones claras Jungkook, si las cosas con Jimin no llegaran a funcionar, tu vida sigue, además tienes un gran futuro por delante, esa competencia sobre la que me contaste la última vez ya está cerca, ¿verdad?—

—Sí, es dentro de un mes, he practicado en el circuito cada día, es muy importante habrán muchos patrocinadores y la oportunidad de ser reclutado por un equipo profesional, se lo debo al Sr. Park— Contestó Jungkook.

—Aprovecha cada oportunidad que te brinde la vida, esfuérzate por cumplir con tus sueños y verás los frutos de tu trabajo—

—Espero que pueda ir a verme competir — Le invitó Jungkook.

SeokJin sonrió — Espero poder estar ahí para verte ganar—

Por supuesto Jungkook quería ganar, quería hacer sentir orgullosa a su abuela y si mismo, las carreras ilegales eran parte de su pasado, ahora el estaba construyendo su futuro con algo que le apasionaba.

Tres semanas después...

—¿Hijo?—

Jimin levantó la vista de su libro y ajustó sus lentes —¿Si padre?—

—¿Cómo estás hoy?— Le preguntó su padre sentándose a su lado, Jimin estaba leyendo en el jardín, algo un poco inusual que habían empezado a hacer, por lo general solo estudiaba en su habitación, ahora podía hacerlo al aire libre.

—Me encuentro bien — Contestó simplemente.

—¿Y como van las cosas en el instituto?— Interrogó aclarándose la garganta.

—Sin inconvenientes — Jimin volvió a dar una respuesta muy puntual.

—Que bueno, ¿Ya pensaste en que universidad quieres entrar?—

—Por supuesto, los exámenes serán muy pronto, estoy preparado para ellos, aplicaré para economía y negocios internacionales, será lo más conveniente para el manejo de nuestra empresa a futuro— Manifestó volviendo su vista al libro.

—Oh, ¿Pero si es eso lo que quieres estudiar?, no tienes que hacerlo únicamente por la empresa familiar, tú puedes elegir la carrera que desees, tu madre y yo te apoyamos, lo sabes— Contestó su padre.

—Estoy seguro, son áreas que manejo con facilidad, me gustan los números y los cálculos exactos — Jimin se encogió de hombros.

El Sr. Park asintió —¿Y en cuanto a tus sentimientos, has logrado aclarar algo más?—

—Estoy pasando por lo que se conoce como duelo amoroso, así lo llamó el doctor Kim— Dijo Jimin — Es un proceso emocional que puede durar de entre seis meses, hasta dos años—

—Ya han pasado casi cinco meses, ¿Cómo te sientes?— Preguntó su padre.

Jimin frunció el ceño y ajustó sus lentes — No creo que esté mejorando, echo de menos a Jungkook todos los días—

El Sr. Park sonrió —¿Quisieras verlo?—

Jimin se quedó callado por un rato — Verlo podría traer múltiples factores que afecten mi duelo, pero también podría hacerme sentir mejor, extraño la forma en que me sentía cuando estábamos juntos—

—¿Entonces que dices si vamos a una competencia de motociclismo la próxima semana, en el circuito de mi amigo?— Insinuó su padre.

Jimin lo miró confundido —¿Para qué?, es muy ruidoso, prefiero estudiar— murmuró para seguir leyendo.

El Sr. Park levantó una ceja —¿Seguro no quieres ir?, pensé que querrías ver a Jungkook, el estará ahí—

Jimin levantó la mirada interesada — Cambie de opinión, sería muy conveniente asistir— respondió.

Hola mis amores, sé que esta hermosa parejita nos ha hecho sufrir mucho, pero aquí estamos de nuevo, esperemos logren tener su final feliz.

Les amo mucho muchote, gracias por esperarme, de verdad que estoy agradecida con cada uno de ustedes.