Espero que les guste~

Branch odia las tormentas con toda su alma desde que es un niño. Puede recordar estar acurrucado junto a su abuela dentro del capullo que hacía de hogar, aferrándose a ella al sentir que todo se sacude por los fuertes vientos y el sonido de las tormenta que resuena solo lo hacía temblar más. Odiaba las tormentas pero la suave voz de su abuela, murmurando dulces palabras o cantante en voz baja una de sus canciones favoritas, fue el mejor consuelo que podía tener.

Cuando ella murió, estuvo solo, acurrucado bajo la cama de su abuela, llorando, los sonidos de la tormenta y los sonidos de los bertenos sólo llenándolo de más terror.

Cuando escapan y arma su bunker bajo tierra, la tormenta sólo trajo malos recuerdos, sonando más como grandes y sucios bertenos caminando cerca de donde estaba, buscándolo para comerlo, gritando con frío, y él solo podía acurrucarse en un pequeño cuarto seguro, temblando, su mente nublada por la paranoia y el miedo. Incluso, años después, cuando recuperó sus colores y se firmó la paz con los bertenos, eso no cambió. Sus sentimientos por las tormentas seguía viendo el mismo, los sonidos sólo lo hacían volver atrás, aterrado por los fuertes sonidos que su mente confundía con los pasos de los peligrosos bertenos que lo buscaban y el fuerte viendo que su mente confundía con los gritos de aquellos seres.

Así que cuando lo tormenta empezó, estaba a punto de correr a su escondite pero se detuvo en seco cuando escucho algo que llamó su atención. Un golpeteo, fuerte y contante en su puerta.

-¡Dubstep!- conocía esa voz. -¡Ábreme, Dubstep!- ese apodo. Solo había un troll que lo llamaba así. -¡Vamos amigo, sé que estas ahí!- era Synth, tenía que ser él. Corrió sin pensar. -¡Estoy preocupado por ti, no te en nuestra fiesta y la reina dijo que no te gusta salir con este clima pero igual quise venir a verte...!- dijo algo más pero Branch no escucho, estaba mas concentrado en quitar todos los seguros que tenia la puerta  con manos temblorosas, abriéndola de golpe apenas tuvo la oportunidad.  Sintió el viento frío y la lluvia pero simplemente extendió su mano, agarrando la muñeca de su amigo para jalar lo hacía dentro, cerrando la puerta y poniendo los seguros.

-¿Estas bien?- lo miró, empujando el pánico y los recuerdos en lo más profundo de su mente lo mejor que podía.

-Claro que estoy bien, es solo una tormenta- asintió Synth sin mucho problema, estaba empapado, un pequeño charco de agua formándose en el suelo, pero eso estaba bien, era acuático. -¿Estas bien, Dubstep?- preguntó, preocupado, notando la apariencia de su amigo. -Te vez...salvaje- era la mejor descripción que se le ocurrió. Branch tenía el cabello despeinado, el color opaco y una expresión de miedo apenas disimulado en su rostro.

-Yo...- hizo una mueca, un fuerte sonido resonando, haciendo que saltará en su lugar y se acurrucara un poco. Avanzó, pasando por al lado de sus amigo, aguantando las ganas de ir a su cuarto seguro y resignándose a sentarse por el momento en el sofá.

-Oh...- lo siguió, pensativo. -...Oh...- y entonces, se dio cuenta del problema. -No te gustan las tormentas- era una afirmación.

-No...No me gustan- era inútil negarlo a estas alturas. -Es una tontería pero...me dan miedo- hizo una mueca al admitir eso en voz alta.

-Awwww, Dubstep...- Synth se lanzó al sofá, rodeando al troll del pop con sus brazos sin importarle que estuviera mojado, atrayéndolo hacia su pecho para abrazarlo con fuerza.

-¡Oye, estas mojado!- reclamo pero suspiro, apoyándose contra el pecho ajeno, escuchando el corazón palpitante de su amigo. Se aferro cuando el trueno resonó, acurrucándose, sintiéndose algo consolado de estar acompañado. Sintió como el tecno-troll los acomodaba, sintiendo una mano mojada enredándose en el desastre que tenía por cabello y acariciando su cuero cabelludo, Synth empezando a cantar una suave y reconfortante canción. Branch cerró los ojos, se sintió confortado y cómodo a pesar de los sonidos de la tormenta que continuaba.