Espero que les guste~

Nota: Sin duda, uno de los cap más difíciles y largos de escribir pero la peor partes es que...todavía me falta xD

Branch esta vestido con su chaleco y pantalones gastados, concentrado en revisar sus trampas puestas alrededor del pueblo, tarareando una melodía para si mismo.

-Eres asombroso, mi querido Gary- le sonríe a su control con cariño, encantando de que todo funcionara como debía, eso le traía satisfacción. -Proteges a muchos, sabes que si- esta solo, así que no le importa mucho actuar como loco. -Ahora, nos ganamos un gran trozo de pastel- empezó su camino al bunker, ya pudiendo saborear su pastel favorito que había guardado en su heladera pero antes de siquiera poder subirse a su ascensor, alguien lo llama.

-¡Branch!- el mencionado chilla como animal sorprendido, su cola tensa mientras todo su cabello se erizaba por un segundo, lanzando a Gary y luchando con torpeza para evitar que cayera al suelo, suspirando de alivio cuando lo logra.

-Mi pobre bebé- lo miro con preocupación ligera, para luego guardarlo en el bolsillo interno de su chaleco y volteándose, justo a tiempo para ver a las gemelas acercarse a él con emoción apenas contenida, luciendo casi como si quisieran gritar en cualquier momento y él les agradecía de todo corazón que no lo hiciera. -¿Están bien?- enarco una ceja hacia ellas, algo preocupado.

-¡Ganamos!- ellas dan pequeños saltos entre murmullos llenos de emoción y festejo, mientras él solo puede parpadear con confusión.

-¿Ganaron qué cosa?- ladeo la cabeza, curioso, esperando poder obtener un poco más de contexto en este punto y saber la razón por la cual se lo estaban diciendo.

-El desfile de hace unos días solo fue para mostrar el talento y diseño de todos los diseñadores que quisieran participar- hablo Satín, llevando su mano a la cintura, sonriendo enormemente, lo cual se veía un poco extraño porque usualmente se veía super tranquila. -Había un concurso detrás de eso-

-Eligieron nuestro conjunto como el mejor de todo el desfile...- Chenille rio alegremente, su cola moviéndose con energía. -...y eso significa que ahora debemos diseñar un vestuario nuevo, cada uno en honor a las diferentes tribus, incluyendo a las más pequeñas- hace un gesto, mientras él aun sigue un poco confundido. -Las fotos estarán en la revista que se repartirá a cada troll-

-Okey...- se rasco la nuca. -...en ese caso, felicidades- les sonrío, genuinamente feliz por ellas, algo sorprendido de no haberse enterado del concurso y aun sin entender que hacían ellas allí, en vez de empezar a trabajar. -Su trabajo es fantástico, estoy seguro de que cada diseño les quedara hermoso- agrego ante la mirada fija de ambas. -¿Necesitan...el vestido de vuelta?- se siente muy perdido, sin entender del todo la mirada expectante de las gemelas, quienes se miran entre ellas y ríen, aunque sin burla con malas intenciones.

-Branch, cariño, nuestro vestido pudo haber sido hermoso pero el modelo ayudo mucho...- Satín le sonrío, cariñosa, casi divertida.

-...y lo necesitamos de vuelta, si no es mucha molestia- termino Chenille con una sonrisa suave. 

-Oh...- el sobreviviente parpadeo, mirándolas, tardando unos segundos en analizar y entender del todo lo que ellos quería. -...oh...- y ahora se siente avergonzado por haber tardado tanto en caer. -¿Quieren que modele sus nuevos vestuarios?- quiere asegurarse de que no las malinterpreto.

-Por favor- ambas asintieron con animo y él se rasco la nuca con ligero nerviosismo, algo aprensivo. A pesar de no gustarle llamar demasiado la atención y sentir muchas miradas encima de su pequeño ser, no podía negar que había algo en el modelaje que conquistaba su corazón, no sabía si era la parte de vestir esos hermosos conjuntos que ellas hacían especialmente para él o la sensación cálida que hacia crecer en su pecho verse tan diferente a lo usual, quizás era un poco de ambos, pero un temía estropear las cosas.

-Bueno, ¿están seguras?- ellas asintieron, luciendo seguras y decididas. -En ese caso, claro, me encantaría ayudarlas- le gusta la pasarela y el modelaje, demándenlo. -Solo...avísenme con tiempo, así busco a alguien que vigile mi bunker y a Gary- ellas no dudaron en asentir y él no se sorprendió mucho al ser aplastado entre ambas con un abrazo entusiasta, susurros agradecidos contra sus hombros.

Unas semanas más tarde, Branch deja a Gary en manos de Creek, esperando que este lo pudiera mantener lejos de las manos curiosidad de los demás y cuidar su bunker al mismo tiempo, dejando una nota para sus hermanos al no poder encontrarlo en su apuro y siendo medio arrastrado hasta la nave de los funk, directo a un cuarto amplio y lleno de cámaras que lo hacen sentir un poco intimidado, con un pequeño escenario de fondo blanco.

-...vaya...- y de repente, el sobreviviente se siente un poco fuera de lugar, ansioso mientras revisa todo a su alrededor y escucha a medias la conversación de las hermanas, quienes parecen estar revisando sus atuendos e intentando decidir con cual empezar.

-¡Branch!- se sobresalta, erizándose sin poder evitarlo, agitando la con nerviosismo mientras se voltea a verlas con los ojos bien abiertos. -¿Estás listo para vestirte?- ellas lo observan con sonrisas amables y pacientes, Chenille sosteniendo el vestido aun guardado y Satín el bolso lleno de accesorio.

-Eso creo- les muestra la mejor sonrisa que puede y las sigue cuando le hacen una ceña. Se adentra en un cuarto más pequeño, con un colgador a un lado para dejar sus pantalones y chaleco, dispuesto a ponerse lo que le dieron. Es un vestido largo, mucho más a que lo esta acostumbrado, con la falda ligeramente inflada y las mangas cortas hasta la mirad de sus brazos. Es mayormente azul, de un tono muy suave que le recuerda a la reina de los funk, con el pecho y la parte de enfrente de un color violeta más oscuro, quizás en alusión al rey, junto a pequeños detalles en rosa. -Esto se siente como algo que la realeza debería usar- es lo primero que comenta cuando sale, las hermanas sonriendo con encanto puro al verlo.

-Te vas a sacar una foto con la realeza, así que hicimos algo para que encajes entre ellos- Satín hace un gesto hacia una silla y él enarca una ceja, acercándose con un ligero bufido. Su cabello es peinado en una trenza algo complicada llena de brillo que no sabe cuanto tardara en sacar después y que se mantiene caída contra su espalda, mechones adornados con aros en dorado, con pulseras del mismo color en sus muñecas y estrellas doradas pegadas a sus orejas en modo de aros.

-¿Me voy a sacar una foto con ellos?- parpadeo con confusión, teniendo que cerrar los ojos mientras Chenille colocaba algo de brillo rodado sobre sus parpados y un poco en su rostro, alargando sus pestañas. -Eso no me dijeron- frunció el ceño hacia ellas pero no tiene tiempo de reclamarles cuando la familia real entra, la carcajada de Cooper resonando un poco por la habitación.

-¡Esto es muy emocionante!- hizo un pequeño baile ante la mirada cariñosa de su familia, tropezando un poco y apenas evitando caer, alzando la vista, Branch saludando con diversión ligera ante los grandes ojos que lo miran con sorpresa. -¡Branch!- corre y a pesar de las advertencias de las gemelas, el sobreviviente solo puede reír cuando el otro se le acerca con claras intenciones.

-¡Tengo maquillaje!- logra decir antes de que el otro intente frotar su rostro contra el suyo. El menor hace un puchero, que se borra cuando el troll del pop despeina su cabello con ambas manos. -También es bueno verte, Coop- es cariñoso y divertido, aliviado de tener un rostro familiar allí. -Saludos sus majestades- sonríe con cierta timidez ante los mayores que se acercan.

-Es bueno verte, cariño- Essence sonríe, suave y cariñosa como toda una madre, haciéndolo sentir cálido.

-Espero que no te estén haciendo trabajar demasiado- Quincy ríe entre dientes, medio tropezando con su larga capa, sin mostrarse siquiera avergonzado por como su esposa ríe a su lado.

-Apenas comenzamos- se encogió de hombros, acariciando de manera distraída el cabello azulado de Cooper, quien parece querer empujar su cabeza en su regazo pero teniendo cierto cuidado con el vestido.

-Te vez como toda una reina- Darnell no puede evitar comentar con una sonrisa suave y el sobreviviente se sonroja, sonriendo con cierto nerviosismo.

-Se supone que debo encajar entre ustedes, así que debía parecer de la realeza- bufo, repitiendo lo que le habían dicho las gemelas. -Espero no verme muy raro y fuera de lugar, a parte de lo obvio- hizo un gesto en general, Darnell bufando con cierta diversión.

-Creo que te vez genial- no duda en decir, acercándose para sentarse a su lado y empuja suavemente su hombro contra el ajeno. -Encajas perfectamente con nosotros- Branch le dedica una sonrisa agradecida.

Branch se para en medio de los hermanos, un poco sorprendido de que lo mandaran allí en primer lugar, mintiéndose su porte firme y tan relajado como puede, las manos enfrente y una sonrisa suave. Darnell esta a su izquierda, sentado, con esa sonrisa suave y tranquila que parece poder hacer con suma facilidad. Cooper esta a su derecha, su sonrisa llena de dientes como siempre, luciendo un poco extraño sin su usual gorro y con esos adornos para combinar con su hermano. Essence y Quincy están en los extremos, ambos con ese porte tan natural por todos sus años, luciendo elegantes y como los reyes que son, con un aura suave y amable que hace sentir a cualquiera cómodos.

Se siente como una foto familiar, extrañamente natural a pesar de todos, y Branch pide en secreto una copia para si mismo.

... ... ... ...

Branch esta comiendo con toda la tranquilidad del mundo, tomándose su tiempo, sabiendo que aun le quedan algunas horas antes de tener que encontrarse con los fotógrafos. Las hermanas están arreglando los últimos detalles del siguiente vestido y básicamente lo habían empujado fuera del cuarto para que fuera a descansar, algo que aprovecho para llenar su estomago.

-¡Amigo!- el sobreviviente se atraganto, algo chocando justo en todo su rostro, cayendo al suelo con un chillido medio ahogado con su toz. Usa su mano para quitar lo que sea que hubiera impactado contra su cara, esperando que no dejara ningún tipo de marca o las gemelas lo matarían, parpadeando con sorpresa ante el pequeño ser verde que lo observa con una gran sonrisa. -¡Amigo, tanto tiempo!- ríe, retorciéndose en su agarre.

-Hola, Drop- le muestra una pequeña sonrisa, aunque mira con tristeza lo que quedaba de su sándwich ahora tirado en el suelo. Lo suelta a favor de moverse y empezar a limpiar, tirando todo a la basura justo cuando alguien más entra a la cocina.

-¡Drop!- Trollex frunce el ceño hacia el pequeño ser, quien luce algo avergonzado. -Te dije que no podías moverte tu solo por aquí, somos visitantes-

-Lo siento, me emocione- admite con algo parecido a un puchero y el rey suspira, solo para parpadear al ver a Branch, quien enarca una ceja hacia ellos.

-¡Branch!- y parece iluminarse al verlo. -¿O debería decir "Dubstep"?- parece encantado con eso y el sobreviviente sabe, por su amigo Synth, que el nombre de rave parece ser algo muy importante entre su gente.

-Respondo a cualquiera- se encogió de hombros con una sonrisa. -Es raro verte fuera de tu reino- no puede evitar comentar, juntando todo lo que había estado usando para lavarlo y guardarlo.

-Es raro estar fuera de mi reino- rio, esperando mientras Drop parecía tener demasiada energía como para quedarse quieto. -No sabía que estarías aquí- parece genuino y para el sobreviviente es bueno ver que no es el único desinformado allí.

-Y yo no sabía que tu estarías aquí...- agarra una fruta, mordiéndola y empezando a caminar, con el rey frotando a su lado. -...pero es bueno verte- agrego con sinceridad, logrando que una gran sonrisa se dibujara en el rostro ajeno, iluminándose un poco más. Se quedan juntos, hablando de tantas cosas que pierden un poco el rumbo, dirigiéndose al cuarto cuando los fotógrafos los llaman. Branch medio se deja arrastrar por las gemelas, sin quejarse, poniéndose lo que le entregan después de mirarlo por unos segundos y enarcando una ceja ante el reflejo. -Vaya, esas dos se pasaron- sonrío y termino por salir. Es un vestido largo, mucho más que el anterior, hasta el punto de que los bordes se arrastran por el suelo en su caminar y sin mangas. El pecho esta ajustado hasta su cintura, con un corazón rosa y de bordes cuadrados como el del rey, con la falda ancha y suelta. A primera vista, luce como si fuera completamente violeta, pero la tela de encima es extrañamente brillante, de un tono azul notable, logrando hacer alusión a los cuerpos de los tecno. Mueve de manera tentativa los brazos cuando las hermanas terminan de acomodar las mangas, arcoíris y brillantes también. Su cabello esta trenzado una vez más, aunque esta vez son varias en vez de una, con cintas neón color verde que de alguna manera parecen resaltar entre el azul natural. -Sé que dije que me gustaban las faldas...- se queja ante el maquillaje, colores neón al parecer, tonos de violetas y azules. -...pero tampoco es para tanto- lo dice en broma, en serio que si.

-Calladito te vez más bonito- Satín toca su nariz de manera juguetona antes de alejarse, mientras él bufa y se levanta, obedeciendo la orden silenciosa de salir de allí, caminando hasta donde esta el rey. Sus ojos se encuentran con los ajenos y cuando le sonríe, muchas cosas suceden. Trollex luce sorprendido, brillando mucho más que antes y hasta el punto de ser algo cegador, soltando un grito medio agudo cuando de repente solo caer de lleno contra el suelo, quejándose.

-¡Trollex!- Branch hace una mueca, porque eso sonó doloroso, y se acerco tan rápido como la larga tela se lo permitió. Se inclina, tomando su brazo con cuidado, dando un suave tirón para ayudarlo a levantarse. -¿Estás bien?- lo mira con preocupación. El rey lo mira por un segundo, parpadeando, su piel aun iluminada.

-¡E-Estoy bien!- flota de repente, fuera del alcance del troll del pop, cubriéndose el rostro en una clara señal de vergüenza y el sobreviviente no tiene mucho tiempo para analizar eso porque el pequeño ser verde se le adelanta.

-¡Se puso nervioso, se puso nervioso!- Drop ríe a carcajadas en una clara burla, solo logrando que la vergüenza ajena creciera y el troll cian aprieta los labios para no reír.

-Supongo que el vestido y todo lo demás fue demasiado, ¿eh?- es la primera vez que ve al rey perder la compostura así y es gracioso.

-¡No!- se aclara la garganta, intentando recuperar su tono de voz usual y no ese tono agudo inducido por los nervios. -¡Te vez muy increíble!- lo mira con seriedad, como si esperara que el otro le creyera.

-Gracias- le sonríe suavemente, dejando que el rey hiciera sus ejercicios de respiración para dejar de brillar, sin poder borrar su sonrisa divertida y casi burlona. -¿Te sientes mejor?- lo volvió a mirar después de unos segundos, contento de ver que él había vuelto a su tono natural, luciendo mucho más tranquilo que antes. Trollex asiente, sonriendo aun con cierta vergüenza, su mano rápida para agarrar a Drop y callar sus carcajadas burlonas.

-Ammm, Branch, cariño...- el mencionado voltea a ver a Chenille, curioso. -...¿Crees que puedes hacer lo que hiciste en el desfile?-

-¿Qué cosa?- tarda un poco en recordar. Había estado tan feliz que en realidad brillaba y supuso que eso es lo que ambas querían. -Puedo intentar- cerro los ojos para concentrarse, dejando que pensamientos felices llenaran su mente, logrando que su piel cian y cabello azulado de iluminaran de manera notable. Abrió los ojos, sonriendo al haberlo logrado, notando la mirada sorprendida y encantada del rey ante su truco. -¿Debo sentarme...?- parpadea, haciendo una mueca. Tiene el cabello atado y es pequeño. -¿Me ayudas?- extiende sus manos hacia el rey, quien tiene su turno de reír con diversión antes de acercarse, colocando sus manos bajo sus brazos para alzarlo y colocarlo en su lugar.

Branch se siente en la cima de un gran parlante, cruzándose de piernas, sintiéndose alto y divertido por alguna razón, observando al rey, quien flota a su altura, con una versión un poco más compacta de su mesa de mezclas colgada en el cuello, con aquellas pequeñas cosas a cada lado de su cabeza y que lucen como auriculares, sonriendo enormemente y con notable animo, brillante como si estuviera en una gran fiesta.

Es una foto rara pero le encanta, pidiendo también una copia para si mismo.