Cooper Y Branch #2
Espero que les guste~
Nota: Hice como tres versiones de esto y al fin pude elegir uno que quedo decente ^_^U
Los años pasan y Branch cree que esta haciendo un buen trabajo en mantenerse vivo junto al pequeño troll que se niega a dejarlo, aunque no siempre esta seguro. Cooper es un niño notablemente activo, a veces es mejor llevarlo al pueblo para que jugara con otros de su edad para gastar algo de energía y así dormir profundo de noche, aunque no siempre es el mejor momentos.
Se siente ansioso, incomodo, mientras se adentra a la villa. Sabe que lo están mirando fijamente, puede escucharlos murmurar, todas sus voces quedan en segundo plano mientras el pequeño Cooper de solo 4 años habla animadamente sobre los amigos que hizo y todo lo que podrían hacer juntos. No puede evitar sentir cariño por su casi frenético divagar, queriendo contar tantas cosas juntas que era difícil de entender, y bufando con ligera diversión al verlo torpeza, rápido en extender sus manos para evitar su caída.
Sabe que no hay ningún tipo de peligro real en el pueblo, el problema principal es el bosque y el volumen exagerado que los trolls usan con demasiada frecuencia, sin saber que en realidad atraen a muchos depredadores que caen en sus trampas antes de poder siquiera acercarse demasiado y eso activa su paranoia, que se siente casi como una voz que grita en su mente, llenándolo de miedo y ansiedad acerca de dejar a su pequeño hermano menor allí, rodeado de trolls tontos en los que no confía, pero lo ignora lo mejor posible, porque a pesar de ser antisocial, no quería ese estilo de vida para el menor. Él era bueno en socializar, en hacer amigos rapidamente, y necesitaba un medio para gastar toda la energía posible, así que supuso que era lo mejor que podía hacer.
Mientras tanto, Cooper esta tan emocionado que apenas puede quedarse quieto en su lugar, queriendo correr hacia sus amigos, quizás mostrarles los pasos de baile con los que soñó y practicar algunos nuevos ritmos que aun resonaban en su cabeza pero se siente obedientemente y espera, luchando contra la energía que recorre su cuerpo entero.
-¿Recuerdas las reglas cuando estamos separados?- Branch se mantiene tan serio como puede pero el menor lo conoce y puede notar que las comisuras de sus labios tiemblan, luchando por no sonreír.
-Quedarme en la villa y esperar a que vengas a buscarme- repite, hinchando el pecho con orgullo cuando el otro asiente con satisfacción.
-¿Y si te dicen para ir al bosque?- enarco una ceja.
-Decir "no, no"- negó, sonriendo. -Estaré bien, Big Bro...- la expresión del troll gris se ablanda ante el apodo, no tiene idea de donde salió pero el menor lo dice con tanto cariño que enternece su frio corazón. -...lo prometo-
-Bien, supongo que eso es todo- se encoge de hombros, haciendo el amague de irse, solo para que el menor se le abalanzara encima antes de que pudiera siquiera dan un paso. Cooper es un poco más alto que los trolls de su edad, con las piernas y el cuello algo largos, así que no tiene problemas en estirarse todo lo posible para frotar su cabeza contra el rostro ajeno, entusiasmado ante la risa silenciosa que escucha y las manos amables que acarician su cabeza por unos segundos. Ignoran las miradas fijas y solo disfrutan de su pequeña despedida.
-¡Adiós, Big Bro!- lo observa irse y solo se voltea cuando desaparece de su vista, parpadeando con confusión ante la mirada fija de sus amigos. -¿Qué pasa?- ladea la cabeza, curioso, sin entender porque lucen de repente algo incomodos mientras se miran entre ellos.
-Nada, es que eso fue...- Poppy, la hija del rey, parece estar entre removerse con nervios y lucir emocionada. -...super adorable~-
-Gracias- sonrío, enorme y brillante, acercándose a ellos con paso saltarín, aunque aun podía notar la mueca en el rostro de los demás.
-Aun no entiendo como él puede ser tu hermano- soltó Biggie de repente, suspirando de alivio, como si se hubiera estado conteniendo.
-Es cierto. Él es gris y muy enojón- Smidge se cruzo de brazos lo mejor que pudo, frunciendo apenas el ceño.
-Es raro...- Satín hizo una ligera mueca.
-...super raro- Chenille no dudo en asentir, totalmente de acuerdo con su hermana.
-No lo es- Cooper frunció el ceño, luchando por no sentirse molesto con ellos.
-Es un troll gris, que vive en algún lado del bosque, sin cantar o bailar...- Guy Diamond hizo un gesto, sonriendo con cierto nerviosismo. -...tienes que admitir que es un poco raro- lo siguiente que todos ellos supieron fue que había pastelillos volando directamente a sus rostros, ellos gritando por la sorpresa y el ligero escozor que lleno a sus ojos debido al glaseado.
-¡No es raro!- golpeo el suelo con uno de sus pies, notablemente enojado, sin notar que el pelaje que rodeaba su cuerpo se erizaba. -¡Es mi hermano y no pueden hablar de él así!- negó y les dio la espalda, alejándose de ellos con paso rápido, ignorando como lo llamaban, y se sentó en el borde de la villa, mirando el bosque, esperando. No pudo evitar acurrucarse un poco, con un lio de sentimientos en su interior, solo queriendo estar en su nido y con su hermano, quizás escuchar una buena historia para olvidar lo sucedido.
-¿Cooper?- levanto la cabeza ante la voz y no duda en correr hacia su hermano apenas puede verlo, contento ante los brazos abiertos que lo esperan y lo envuelven en un abrazo que tanto había esperado en los últimos minutos, enterrando su rostro en su ropa. Huele a bosque y tierra, con un toque dulce que cree que puede ser de alguna fruta que el otro recolecto, algo que lo consuela y lo calma por alguna razón. -¿Estás bien?- el mayor esta preocupado y lucha por no ceder ante el pánico, logrando separarlo solo para sujetar su rostro y mirarlo. El menor lucia al borde de las lagrimas y eso rompía el corazón ajeno. -¿Qué paso?-
-...me enoje- admitió con un puchero.
-¿Dijeron algo malo de ti?- y ahora esta enojado. Había envidiosos que habían intentado molestar al menor, cobardes porque solo necesito gruñirles para que prometieran no volver a hacerlo y huir pero siempre había más tontos.
-No...- negó. -...dijeron cosas malas de ti- agrego y el mayor no pudo evitar hacer una ligera mueca ante eso. Los comentarios en su contra no eran nuevos pero había esperado que Cooper fuera lo suficientemente distraído como para no prestarles atención. -No lo entiendo, ¿por qué son así?- hizo un puchero, luciendo enojado y triste al mismo tiempo.
-Es porque soy gris- Branch no tuvo problemas en saber que ese era el problema principal, por no mencionar las consecuencias que venían con su falta de color y demás. Le había explicado al menor de la mejor manera que pudo sobre lo que significaba ser gris y la razón tras de ellos después de muchas preguntas, algo que él había entendido.
-Pero...eso significa que estas muy triste...- hizo una mueca, luciendo casi al borde de las lagrimas, confundido y frustrado. Quería llorar y quizás morder a unos cuantos porque Branch no merecía ser tratado así en su opinión. -...deberían ayudar- y la expresión del mayor no puede evitar ablandarse con una suave tristeza ante sus palabras.
-Quizás...- no puede negarlo pero todos en el pueblo habían intentado arreglarlo, rindiéndose ante su actitud tosca, prefiriendo mantenerse alejados de él y su existencia gris. -...pero no todos piensan como tu, Coop- se inclino para verlo a los ojos, mostrando una ligera sonrisa en un intento de animarlo. -Ven aquí- lo acerco para abrazarlo una vez más, dejando escapar un suspiro ligero de cansancio. Los comentarios no iban a detenerse y tenía la sensación de que esta situación, seria algo que sucedería nuevamente en el futuro. -Conseguí moras arcoíris- anuncio al soltar, señalando la canasta que había dejado a su lado, aliviado de ver como los ojos ajenos se iluminaban ante las coloridas frutas. -¿Qué te parece si hacemos algo de mermelada?- las frutas eran un algo dulces, y te coloreaban la lengua, pero le había tomado el gusto después de descubrir que Cooper las amaba.
-¿Y un pastel?- dio pequeños saltos de emoción y el mayor solo pudo bufar ligeramente, contento de verlo un poco más animado.
-Un pastel- asintió y tomo la canasta mientras lo escuchaba chillar, ambos caminando hasta su bunker, decididos a no dejar que algo así arruinara su día.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top