—Perdón, el solo es un gran fan de Agust'D —explicó Jungkook la exagerada reacción de su hermano ante la presencia de su ídolo.

—De cierta forma, me recuerda a Tae la primera vez que me vio —susurro Yoongi observando a su pareja.

—Uhm, son parecidos —respondió Jimin.

Yoongi observó al menor y le sonrió, logrando que Bae se sintiera como si estuviera a punto de desmayarse.

—No seas malvado —regaño Jimin al ver a su esposo—. Y tú, ¿Cuándo planeabas decirme que arrendaste esta casa?

Taehyung sonrió con inocencia antes de esconderse parcialmente tras la espalda del rubio.

—Digamos que ustedes me extrañaban y yo les extrañaba, así que no me vi en la necesidad de decirte —se defendió.

Para ambos mayores, no pasó desapercibido el como Jungkook sonreía y se corría para que Taehyung no se escondiera, logrando que este rodeara su cintura para mantenerlo firme.

No se sorprendieron mucho de la cercana relación que se veía, ambos sabían lo mucho que se amaron en el pasado y seguramente lo seguían haciendo, solo era cuestión de tiempo para volver a verlos otra vez juntos.

—Bien, Yoonie acompaña a Bae y a Jungkook mientras hablo con Tae —pidió Jimin, su tono no aceptaba ninguna réplica al respecto.

Tomó del antebrazo a su hermano y lo arrastró hasta el jardín trasero.

—No me gusta para nada esto —fue lo primero que salió de su boca—. Tratamos de investigar a los residentes que se encontraban entre las posibles horas en la que ocurrió pero todos tienen coartada.

—Kookie me dijo que sus padres les han estado amenazando y enviando demandas, parece que le tomaron un odio especial luego de que se le entregara el poder de cuidar de Baekhyun.

—¿Por qué le dieron ese poder? —pregunto confundido, no sabía que los padres de Jungkook tenía problemas o que el mismo Jungkook tenía problemas durante el tiempo que no estuvo Tae.

—Me dijo que sus padres se separaron y que estaban luchando por ver quién se quedaba con Bae al ser menor de edad pero que ninguno le importaba realmente así que metió sus manos en el asunto, todo esto se ha hecho en secreto, por eso nadie sabía nada al respecto y tengo entendido que Kookie quiere que siga así —explicó ante la mirada de su hermano.

—Bien, iré con Nam a ver esto. Lo mejor para Jungkook y Bae será que no te alejes de ellos por ningún segundo y esto —saca un sobre plástico con una carta negra en su interior—. Estaba debajo de la jaula, buscamos huellas pero no hubo éxito como veces anteriores.

—Gracias —recibió la carta y la abrió.

—Las cartas siguen sin decirnos nada en especial —se quejó el de cabello gris.

—Pero sé que hay algo más en ellas que palabras al azar.

—Bien, enviaré algunas personas para vigilar los alrededores y para cuando salgas.

—¿Hay algo más? —cuestionó al ver que su hermano le observaba indeciso.

—¿Qué piensas de la idea de ser tío?

—¿Estas embarazado? —pregunto sorprendido, abriendo exageradamente sus ojos.

—Soy hombre idiota —gruño divertido, golpeando el hombro de su hermano.

—No me ilusiones así, Minnie —se quejó haciendo un puchero infantil.

—No te estaba ilusionando, es la verdad —muerde su labio inferior—. Con Yoongi queremos adoptar y...

—¡Oh Dios! ¡Seré tío! —grito emocionado, abrazando a su hermano con fuerza.

Jimin rió y correspondió con fuerza el abrazo del menor.

—Estamos esperando una llamada que nos dirán cuándo podremos ir a ver a los niños.

—Joder, hay que solucionar todo este lío para cuando llegue mi sobrinito o sobrinita —exclamó con emoción.

—Si vieras a Yoongi, ha estado muy indeciso al respecto, entre animarme para terminar todo o convencerme de dejarlo ya que tiene miedo de que me lastime —sonrió suave mientras observaba con cariño la sortija en su mano.

—Bueno, es entendible ya que tú llegas y saltas al peligro —coincidió el menor—. Ya eres mayor, deberías disfrutar del resto de tu vida con tu pareja y experimentar ser un padre, sé que serás un gran padre junto con Suga —sonrió dejando una mano sobre el hombro ajeno—. Y dinero es lo menos que les falta a ustedes dos y tu eres capaz de trabajar desde casa sin meterte ya en acción.

Jimin observó con cariño a su hermano menor. Luego, juguetón, alzó una ceja.

—¿Me estas diciendo viejo? —Taehyung boqueó sorprendido y finalmente sonrió infantil.

—Casi caigo. ¿Me puedes hacer un último favor? —pregunto colocando su mano sobre el hombro contrario.

—Claro.

—Puedes ser tú quien cuide de Bae cuando esté en la escuela, unos chicos se meten con él y aunque ya me metí en ello resolviéndolo... No quiero que se olviden de la promesa que me hicieron y vuelvan a lastimar a Bae.

—¿Qué fue exactamente lo que hiciste para resolverlo Taehyung? —pregunto con bastante seriedad.

El nombrado observó a su hermano y luego bajo su brazo, retrocediendo un paso, puso su expresión más inocente que tenía.

—Tal vez a uno le rompí un hueso, a otro lo golpe un poco, los amenace y usé el poder de que tú fueras mi hermano y que sea el cuñado de Suga —sin decir nada más, corrió al interior de la casa, escuchando a su hermano gritar su nombre completo.

—¿Qué fue lo que hiciste? —pregunto Yoongi divertido.

—Le conté que abuse del poder que tiene él y que te usé —reveló sin importancia, dejándose caer a su lado en el sofá justo cuando entraba su hermano—. Pero bueno, lo importante aquí es que van a ser padres.

Una sonrisa enorme nació en el rostro de Yoongi, estaba muy emocionado con la idea al igual que su esposo.

—¿Van a...? —Jungkook callo al no saber preguntar sin que sonara grosero.

—Vamos a adoptar —respondió Jimin.

—¿No pueden adaptarme a mí? —pregunto esperanzado Baekhyun, logrando una carcajada por parte de todos.

—Lo pensaremos —el de cabello celeste le cerró un ojo antes de levantarse e ir al lado de su pareja, tomando su mano.

—Nos vemos mañana —se despidieron ambos saliendo, dejando ya a los tres chicos en paz.

—Bueno, lo mejor será dormir y olvidarse de todo por un rato —anunció Taehyung levantándose.

Los hermanos siguieron sus indicaciones y cada uno fue a las respectivas habitaciones que habían escogido con anterioridad.

Tae fue hacia la cocina y preparó un café, subió hacia su habitación y se sentó en su cama. Sacó el sobre con la carta y lo observó pensativo.

El recuerdo de su hermano llegó a él.

—Podría servir... —murmuro dejando la tasa de lado, fue por todas las cartas que tenía hasta ahora y las arrojó sobre su cama, sacándolas del sobre.

Había quince cartas en total y todas parecían ser realmente de un fan excepto de las últimas.

Un ruido lo desconcentro, alzó la cabeza esperando. Lentamente se acercó al pequeño mueble que estaba al lado de la cama, intentando abrir el cajón donde estaba su arma.

—¿Tae? —suspiro en alivio al reconocer la voz de Jungkook.

—Aquí —respondió comenzando a guardar las cartas—. ¿Sucede algo? —pregunto observando a Jungkook una vez que entró en su habitación.

—Yo... Quiero dormir contigo —confesó algo avergonzado, sus mejillas tenían un adorable sonrojo.

—Sabes que no te haré el amor hasta que termines con Yugyeom, ¿cierto? —pregunto alzando una ceja—. Aunque tal vez no pueda contenerme y...

—¡Ya! —corto observándole feroz, logrando una risita por parte del contrario.

—Ven aquí —llamó echando las cobijas de la cama hacia atrás.

Con malhumor, el rubio se acercó y fue directamente a la cama, acomodándose y dándole la espalda.

Taehyung rió divertido mientras se colocaba un pijama, porque no creía que fuera buena idea dormir en bóxer como acostumbraba a hacer, no se creía capaz de resistirse.

Se acomodo en la cama y se dio vuelta, pasó un brazo por la cintura de Jungkook y lo atrajo hacia él.

—Yo te cuido —murmuro en su oído.

—Hable con Yugyeom, mañana vamos a hablar y terminaré con él —susurro acariciando la mano sobre su cintura.

—Me alegro —restregó cariñosamente su nariz en el cuello del contrario—. Hay que dormir, muchas cosas han pasado hoy.

(***)

—¿Con quién hablabas? —pregunto bajando del auto.

—Kris, quería saber cómo se encontraba —respondió siguiéndolo.

Ambos ingresaron al edificio frente a ellos, donde Jungkook tenía una grabación de un comercial.

Adentro, Daesung les esperaba con su amable sonrisa dulce. Pero había otra persona presente, una que provocó que el cuerpo de Taehyung se tensara.

Yugyeom sonrió y corrió hacia su pareja, abrazándolo efusivo y plantando un beso en sus labios, sin importarle las personas a su alrededor.

Tensando la mandíbula, Taehyung hizo puños sus manos mientras se alejaba e iba al lado de Daesung para confirmar la agenda de hoy. No podía creer controlarse con ellos dos así frente de él.

—Yugyeom... Tenemos que hablar —interrumpió cuando este tenía planeado besarle otra vez.

—Claro cariño, dime —sonrió rodeando su cuello.

—Uhm... Prefiero en un lugar con más privacidad —observó la espalda de Taehyung, deseando que este volteara a verlo.

—Oh, ya sé de que quieres hablar —susurro coqueto, lo tomó de su mano para arrastrarlo por los pasillos hasta llegar a una habitación, en la puerta había un cartel con el nombre de ambos.

—¿Por qué estamos en la misma habitación?

—Duh, porque somos pareja tontito.

—Sí pero...

—Y te recuerdo que vamos a grabar este comercial juntos, así lo pidieron —relamió sus labios y se acercó para volver a besarlo.

—Yugyeom... —se alejó.

—Vamos kook, yo sé que me extrañas tanto como yo a ti —pronunció tratando de deslizar sus manos bajo la ropa.

—Yugyeom —le detuvo—. No es el momento para eso —reprochó.

El nombrado se cruzo de brazo y recargo su peso en una pierna.

—Siquiera recuerdas que dentro de poco cumplimos dos años de pareja —pregunto algo resentido y triste, lo había sentido tan lejano este tiempo, más que de costumbre y si tenía que dar un momento exacto, era desde que ese guardaespaldas llegó a su vida.

Jungkook hizo una mueca, ahora sin saber si era correcto decirle que quería terminar.

—Claro que lo sé, no podría olvidar algo así de importante... —un golpeteo a la puerta les interrumpió.

Taehyung abrió sin esperar respuesta, sus ojos eran fríos cuando observo directamente a Jungkook.

—Les están llamando a ambos, quieren repasar lo que tienen que hacer —el rubio le observó dejarles solos nuevamente.

—Entonces...

—Vamos, tenemos trabajo —interrumpió sintiendo la necesidad de hablar con Tae.

Sin esperar una respuesta por parte de su novio, salió dispuesto a buscarlo, pero no fue necesario, Taehyung le esperaba recargado en la muralla, a su lado también estaba el guardaespaldas de Yugyeom.

Un nudo se instaló en su garganta ante la posibilidad de que ambos, en especial Taehyung, haya podido escuchar la conversación.

—Ta-

—Jungkook, vamos chico te están esperando —Daesung dijo tomándolo del antebrazo para arrastrarlo de nuevo al set, y detrás de ellos, iba Taehyung manteniendo una expresión distante poco común en él.

Todo estaba saliendo mal para Jungkook el día de hoy.

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Perdón la demora, mi inter está del asco :c

Veré si alcanzo a subir algo mas antes de que falle de nuevo...