Dado que Daniel y Andre habían trabajado durante una gran parte de la madrugada, todo estaba listo y puesto que la reunión se había aplazado hasta las siete pm ese mismo día, Daniel tenía tiempo para salir y relajarse un poco, desde luego, tenía prohibido dejar las instalaciones sin la compañía de alguien y siempre debía llevar una muñequera especial según palabras del Mayor Stuttgard, en realidad se trata de un aparato de rastreo con una combinación de 12 dígitos que con un solo error inyecta un poderoso paralizante y activa una alerta con la ubicación del sujeto.
¿Sus niñeras? Justamente… Andre y Lory.

—Explicate una vez más Ladrón ¿Cuál es el objetivo de este paseo? —preguntó Lory, tendía a cuestionarle todo, siempre.
—Lory, intenta relajarte. Deje de ser parte de la agencia ¿recuerdas? Estoy acostumbrado a la libertad y a vivir. Quiero despejar mis pensamientos y distraerme un poco, es decir, no hace falta estar estresada todo el tiempo.
—A mi me gusta divertirme —dijo Andre.
—¿Lo ves? Hasta el nerd se divierte.
—No lo molestes Ladrón.
—A mi no me incomoda. Estoy en una misión en las calles de Inglaterra con el escapista Daniel.
—Esto no es una misión, Andre. Y no soy Daniel. Puedes decirme ladrón también.
—Te propongo algo Ladrón —dijo Lory— te prometo relajarme y divertirme un rato, hasta te llevaré al lugar con las mejores hamburguesas de todo todo el reino con la condición de que nos cuentes a Andre y a mi la razón por la que odias tu nombre.
—Hmmm, perfecto. Vamos por esas hamburguesas— cerró Daniel y Lory los llevó caminando.

Todo empezó con mi escape de "Crías de león", tenía todo preparado para vivir una vida tranquila sin complicaciones pero aún debía cumplir una promesa. Debía visitar a cierta persona.
—Espera, ya que estamos aquí y tuve la suerte de ser parte de esto. Me gustaría saber cómo huiste. —interrumpió Andre—. Los rumores dicen que ideaste un plan desde que llegaste, yo personalmente lo dudo, es decir, tenías 4 años.
—Andre, para todo hay tiempo, intento entrar en mi papel de narrador ¿entiendes? Llegaré a ese punto. Pero calla.
—Oh, perfecto. No interrumpas, Lory.
—¿Donde estaba? Cierto.

Debía visitar a cierta persona. Sabía que no podía ser de inmediato dado que sería el primer lugar donde me buscarían, así que deje pasar un año. E incluso eso estaba planeado, era un punto muy importante en mi plan.

—¿Estás seguro que todo está como debe Daniel?— preguntó la señorita Adams.
—Revisamos todo unas cinco veces, mi contacto afuera tiene todo preparado, lo único que necesito son los códigos de desbloqueo de mi reloj, veinte segundos sin nadie viendo las cámaras del piso dos. Conecta esto al tablero de control y yo haré el resto.
—Te daré tu libertad hoy Daniel. Todo saldrá bien.
—Lo sé Adams y te estaré en deuda de por vida.
—Andando entonces.

La señorita Adams ya tenía los códigos, me encargué de hacerle saber donde estaban un par de semanas antes ya que el entonces profesor Stuttgard manejaba los archivos de cada estudiante del nivel 4. Para eso inventé un juego con él, yo debía descubrir tanto como pudiera de él. Este jamás me diría si acertaba o no, también debía descubrir eso descifrando su lenguaje corporal. Él nunca lo supo pero gracias a ese juego aprendí todo lo necesario acerca de él. Al punto de saber cuando mentía o como se sentía, etc. Durante el último año me concentré en su estado civil, averiguar si tenía esposa o hijos era la fachada,  pero gracias a eso supe donde estaban los códigos y también algunas cosas más. La señorita Adams subió a la sala de control y distrajo a los operadores veintitrés  segundos, más de lo necesario, sin mi reloj lo único que debía hacer es crear una distracción enorme para salir por la puerta principal sin problema alguno. Y la señorita Adams me ayudó con eso también,  la segunda parte del plan decía que después de la distracción en la sala de control ella debía bajar al primer nivel para dejar pasar a mi contacto que esperaba afuera, pero era un engaño. Utilicé uno de los relojes, lo modifiqué de modo que disparará una descarga eléctrica luego de una secuencia infrarroja, el primer número era la señal que emitía la puerta de la sala de control, el segundo número era la señal que emitía el paso de control de seguridad antes de bajar del piso dos al piso uno y el tercer y último número de la secuencia era la señal que emitía la puerta principal del edificio. Desde luego eso no serviría de mucho si no supiera que los detectores de humo iban a activarse en sincronía debido a un fuego que ella misma iniciaría al llegar al primer piso puesto que los primeros dos números de la secuencia también provocaban que el reloj emitiera un humo ligero, casi invisible al ojo humano pero fácilmente detectable para los rociadores, los cuales también estaban arreglados. Yo aguardaba en el segundo nivel, esperando a que ella bajara, veinte segundos después de que ella cruzará todo debía activarse, la electricidad producida se iba a conducir a través del agua de los rociadores, con la suficiente fuerza para desmayar al instante a todos en el piso uno, sólo debía bajar pasado el efecto y salir caminando. Y eso hice. Afuera si me esperaba mi contacto, con todo lo que había pedido de acuerdo al trato que teníamos. Ese día salí caminando por la puerta principal y lo último que vi fue a la señorita Adams desmayada a un paso de la entrada.

Estando afuera sólo debía cosechar unas minas de bitcoins que había creado tres años atrás y no necesitaba más. Usé mi entrenamiento y conocimientos para convertirme en un famoso ladrón y los clientes empezaron a llegar. Descubrí que la hermana Blake, a mis ojos, mi madre, estaba enferma internada en un hospital en Manchester, fui a visitarla para descubrir que se encontraba en estado terminal. No olvidaré nunca sus ojos ese día cuando me vio entrar por esa fea y despintada puerta. Ella… Ella estaba acostada en su cama, su memoria había sido destruida por el Alzheimer, sin embargo sus ojos me miraron al entrar y no estaba perdida, vi como sus pupilas se cristalizaron y pronunció mi nombre. Me senté al lado de su cama, la abracé y le conté todo. Estaba feliz de verme y era lo único que le faltaba, me lo dijo, me pidió que la abrazara una vez más, cuando la abracé acercó su rostro a mi oído y me dijo: —Mi bebe volvió a casa, sabía que sería así… Precioso, tu  verdadero nombre es…

—Y fin de la historia.— dijo Daniel, cambiando por completo su timbre de voz, su entonación y la mirada en sus ojos.
—¿Y? ¿Cuál es tu verdadero nombre?— preguntó Andre, desubicado por completo.
—Lo lamento mucho — soltó Lory, golpeando a Andre con su pie por debajo de la mesa—. ¿Qué quieres hacer ahora? Te prometí que nos divertiriamos y lo haremos.
—Descuida, ya habrá tiempo, por ahora acabemos esta salida. Ya queda poco más de una hora para la reunión y no quiero ser impuntual otra vez —esbozó Daniel.

Salieron del restaurante y caminaron de vuelta a las instalaciones, que parecían más un edificio plagado de oficinas, de esas que están llenas de sujetos vestidos con trajes aburridos que no hacen más que esperar la hora de salida para luego ir a casa a descansar, hacer algo para comer, dormir y despertar al siguiente día para repetir la rutina. Más alejado de la realidad no podía estar, aunque sí que había un par de esos tipos, ciertamente no estaba lleno de ellos.
En fin, Lory y los dos chicos caminaban de vuelta, ya había oscurecido y el tráfico no parecía pesado, de pronto un grito bastante tosco y de voz grave llamó la atención de los tres a un callejón.

—¡¡¡Anciano imbécil!!! recoges mucho más que esto, estoy harto de que quieras verme la cara de idiota. Hasta aquí llegas. —exclamó el tipo en el callejón, sujetando de la camisa a un vagabundo, ni bien terminó su frase descargó una bala del arma con la que apuntaba a la cabeza del vagabundo.
—¡¡¡Oye!!! ¿Que haces? —Gritó Daniel mientras corría directo hacia ellos, tarde sin embargo. Lory corrió detrás de él y Andre, asustado, se quedó de pie, paralizado ante lo sucedido.
Daniel embistió con tanta fuerza al tipo aquel, que sin duda alguna, muchas de sus costillas ya estaban quebradas antes de que impactara contra la acera, Daniel lo golpeó y golpeó y golpeó, tanto que su rostro estaba totalmente desfigurado, las manos de Daniel, sin embargo, estaban casi intactas. Lory sólo se limitó a mirar, —Es suficiente, Daniel. Debes dejar algo para la policía—. Dijo Lory al tiempo que los llamaba con su celular. Daniel se acercó al anciano y su improvisado refugio, hecho de algunas cajas de cartón cubiertas de plástico, dentro descubrió un par de gatos, aun bastante pequeños y decidió llevar a ambos consigo, Lory habló con la policía y se identificó como una oficial de asuntos internos. Luego de eso, los tres volvieron al edificio, Andre no dijo una sola palabra. Lory le dio tres palmadas en la espalda pero tampoco dijo nada. Daniel llevaba los dos gatos, entró a las instalaciones y nadie le dijo nada, su rostro no parecía nada amistoso en ese momento. Cada uno fue a su respectiva habitación sin mencionar nada sobre lo ocurrido.

—Adelante, —dijo Daniel, luego de escuchar que alguien llamó a la puerta de su habitación.
—En quince minutos es tu reunión Ladrón, ¿estás preparado? —preguntó Lory al entrar.
—Lo estoy desde ayer, descuida. ¿Alguna vez has nombrado a un gato? Porque tengo dos aquí que amarían ser los primeros, no se me ocurre ni uno solo.
—Veamos, son hermosos ¿Piensas quedartelos? ¿Como están preciosos? Son las cositas más lindas que jamás he visto.
Su nuevo papá está pasando una crisis de identidad con respecto a sus nombres.
—El macho es completamente negro y sus ojos verdes me recuerdan a algo verde.
—No tienes mucha creatividad que digamos.
—Lo siento, me salté la clase de arte y manualidades en la escuela de Manson. —dijo Daniel sarcásticamente.
—Ya bobo, te ayudaré con los nombres cuando regreses de tu reunión. —Rió Lory.
—Cierto, cuidalos un rato, vuelvo al terminar.
—Pero…
—¡¡¡Muchas gracias!!! Bye. —Cerró Daniel y salió de la habitación corriendo.

—Ya que el Mayor Wu (representante del bloque chino) finalmente está con nosotros, podemos empezar esta reunión. —Abrió el Mayor Stuttgard—. Espero que haya sido un viaje tranquilo Mayor.
—Bastante tranquilo, muchas gracias —dijo el Mayor Wu—, en el camino estuve revisando los documentos que me enviaron. Daniel, es un placer conocerte, leí mucho sobre ti.
—Mayor Wu —sonrió Daniel—, preparé esta presentación anoche, en compañía de Andre y Billie Eilish, no en persona lastimosamente, esta mañana mencioné que tomé en consideración lo delicado de la situación con respecto a la alianza, no sólo por el hecho de que el rival que enfrentamos propone una amenaza de carácter global, sino también porque cada país miembro de la alianza ha comprometido un pequeño porcentaje de sus archivos a la misión, poniendo su total confianza en esta operación, por lo tanto lo primero que sugiero es la creación temporal de un equipo especial supervisado por Andre, considero que debe estar conformado por doce miembros, dos de cada país, especialistas en software, antihackeo, manejo de información, decodificación y estrategia. Sería útil si estos miembros fueran elegidos por cada uno de ustedes, representantes de la alianza, de este modo no sólo aseguramos los datos sino también, reforzamos la confianza mutua.
—Me parece un punto muy razonable —intervino el Mayor Wu.
—Creo que todos estaremos de acuerdo en esto —dijo la Teniente Weber, representante del bloque alemán.
—Andre, carga los archivos por favor —Prosiguió Daniel—. Basé mi decisión en este mismo punto lógico dado que mi equipo será el eje central de toda la operación y estará bajo el mando y supervisión del Mayor Stuttgard, seguido por mi. Así que elegí a un agente de cada país miembro de la alianza y al final decidí incluir un miembro más. Por tanto mi equipo constará de ocho individuos conmigo incluido.

-El primero de los miembros es Iván Vasiliev, agente de rango S, perteneciente al bloque ruso, con dieciséis años de edad tiene cuatro años de experiencia en misiones reales, especialista en explosivos, ha participado en un total de veinticuatro misiones en el medio oriente, una de las zonas que más cubriremos, necesitamos la experiencia en el terreno que Vasiliev puede aportar, participó en la detención del líder terrorista Ahmad Darzi, todas sus misiones han acabado con éxito total y sin ninguna sola baja.
-Sin embargo, algo que no había contemplado y mi razón para agregar un miembro más al equipo, es que Vasiliev ha trabajado en cada una de sus misiones con el único pedido de que Dariya Koze partícipe a su lado, ella es la agente Koze —dijo Daniel, mientras su fotografía era alternada en una de las pantallas a la par de su expediente—, de rango 0, equivalente al rango E en nuestro sistema, dado que pertenece a Ucrania y cabe aclarar que ellos no utilizan el mismo sistema jerárquico de rangos, sin embargo, Koze está en el nivel más elevado de la escala, superandome incluso a mi y a Vasiliev, el agente claro. Koze ha participado en cada una de las misiones de las que Vasiliev ha sido miembro, condecorada con la más alta medalla de su país, ha trabajado para detener las organizaciones terroristas en medio Oriente, implementó un sistema nuevo de clasificación y entrenamiento para las fuerzas especiales de Ucrania, experta estratega y una de las personas mas sigilosas del mundo. La única razón por la que tengo su expediente es porque anoche conversé por teléfono con el agente Vasiliev y ella intervino la llamada y me facilitó su expediente, resumido claro está.
-El tercer integrante es el agente de rango S Herman Fischer, héroe de su agencia, ejemplo a seguir de cada estudiante en la academia "Aguilas negras" ha estado metido en todo lo que tiene que ver con el desequilibrio de trata de personas en Europa, participó en desbaratamiento de uno de los carteles más peligrosos de México cuando estos empezaron a querer expandir su mercado y apuntaron a europa, experto en espionaje y acróbata en sus tiempos libres, esto llamó mucho mi atención. Pero bueno…
-Agente de rango E, Charles Lancer, perteneciente al bloque Americano. Fue espía doble durante dos años hasta que cumplió su misión, por razones de seguridad no puedo dar más detalles de esto último. Estuvo a cargo de un proyecto de mejora en la frontera de Estados Unidos y México, lo que disminuyó el paso de drogas en uno treinta y cinco por ciento, participó en múltiples misiones en Oriente medio, contribuyó en la detención del ex-Gobernador Maurice Blackwell y ha estado trabajando con el equipo que descubrió la identidad real de el líder de la organización AIE, ahora sabido Jeremy Williams.
-Por parte del bloque italiano, el agente de rango S, Andrea Santoro, ha trabajado de la mano con la agencia británica en un total de doce misiones tanto en Turquía como en Siria. Fue atrapado y convertido en rehén durante una misión en Oriente, escapó acabando todo ese asentamiento terrorista y sólo encontró el camino de vuelta a su batallón después de cinco días de tortura, tardó nueve días más en regresar. Durante su estadía como rehén aprovechó su conocimiento del idioma para recabar información con la que llenó un archivo de veinticinco páginas con un margen de error del tres por ciento, este tipo no necesita más.
-Para finalizar, la agente de rango S Lian Chen, estudiante directa del Mayor Wu, especialista en infiltración y espionaje. Colaboró en la unión de los bloques Hong Kong-China al mismo tiempo que desbarataba los planes de las multinacionales que intentaban hacerse con la isla. Trabajó de encubierto en la India y desarticuló una importante cantidad de mafias. Además de que es la única miembro del equipo que conoce de tecnología nuclear, por lo que puede llegar a ser clave en mucho posibles planos y panoramas.
-La última pieza de mi equipo será Andre.
—¿Yo? Que caraj… —interrumpió Andre.
—Otra de las razones por las que solicité la creación del equipo de avanzada, supervisado por Andre mismo. Considero que Andre tiene la capacidad para manejar ambas cosas a la vez, con él estando con nosotros, el flujo de información va a ser instantáneo en el frente. Que es precisamente donde necesitamos los recursos más destacables, ayer Andre me detalló el perfil de los agentes mencionados y diría que unos quince perfiles más, no dudo que que maneje con esa misma facilidad la información que estará corriendo en esta operación, será el factor a cuidar, sin embargo estoy muy seguro que sus aportaciones serán mucho más positivas estando al frente que si estuviera aquí encerrado en la oficina, además tendrá comunicación directa con el equipo de avanzada que sugerí. Considero que este equipo, conmigo a la cabeza es lo mejor que la alianza puede ofrecer, con un riesgo mínimo de fracaso.
—Andre ¿Qué piensas de esto? —preguntó el Mayor Stuttgard.
—Que es una locura, jamás he estado en acción, soy un agente de escritorio.
—¿Consideras que tu memoria y tu agilidad cerebral no estarían a la altura?
—Pero claro que no considero eso. Mi memoria y mi agilidad cerebral no tienen rival.
—Decidido entonces, se considerará tu inclusión en el equipo.
—Espere Mayor yo no me ref…
—Vamos a deliberar, la resolución se dará a conocer mañana por la mañana, retírense todos excepto los representantes de la alianza.
—Señor. —Dijeron todos y salieron de la sala.

—¿Estas demente? Voy a morir allá afuera. —dijo Andre, asustado.
—Tranquilo Andre, te rodeé del mejor equipo en el mundo, definitivamente necesito tu cerebro allá afuera conmigo. Todo saldrá bien. —Respondió Daniel mientras caminaban a su habitación. En eso, se encontraron con Lory.
—¿Que tal la reunión? ¿Salió todo bien?
—A tu amigo se le ocurrió la broma de convertirme en un agente real y hacerme parte del equipo principal en la práctica.
—¿Que carajos?
—Calmense los dos, Joder. Tu, Andre careces de autoconfianza. Y tu Lory, como si ya hubieras olvidado que soy el mejor estratega.
—Supongo que algún plan tendrás en mente, Ladrón. —Respondió Lory llegando a la habitación de Daniel.
—Ahora, lo más importante —dijo Daniel— ¿Tienes los nombres para los gatos?
—Realmente te quedaste con ellos —rió Andre—. Mis amigos no creerán esto.
—Ok, primero, no puedes seguir alardeando mi amistad, Andre. Y segundo, si llegas a insinuar algún indicio de cariño o debilidad en mi, voy a dejarte perdido en algún lugar del medio Oriente como el italiano aquel.
—Ya, chicos, calmen esas hormonas. Pensé en Salem para esta preciosura —dijo Lory mientras cargaba al macho.
—¿Salem? ¿No es el nombre del gato de Sabrina? Ya saben, la bruja —preguntó Andre.
—Salem y Sabrina, ya está. Asunto arreglado. —Cerró Daniel.