Princesa, caballero y Dragón fantasma
Atsushi estaba colgado de una montaña rusa mientras despertaba, estaba atado, el dragón lo custodiaba ― claro, cliché de princesa – se quejó el albino y suspiro ― aunque... no tengo ningún príncipe – se auto respondió deprimido
― Has despertado Atsushi-kun
― Suéltame loco demente – se quejo
― Me temo que te soltaré en unos instantes, debo encontrar tu muerte
― ¿mu-muerte?
― Para que podamos casarnos, ya sabes, hasta que la muerte nos separe, pero cariño mio, ella ya nos separó – Atsushi trago saliva
― E-eres...
― Solo soy un fantasma, un cadáver más, que anda persiguiéndote hasta poder descansar
― Cálmate cadáver de la novia
― Exacto, cerraremos nuestro trato pronto. Atsushi-kun, el veneno pronto estará y tu muerte será instantánea
― Estoy en problemas...
...
La agencia y el par de mafiosos buscaban en Jurassic park donde podría estar Atsushi cuando vieron un enorme diplodocus ― allí deben estar – menciono Dazai
― ¿Por qué?
― ¿no entienden?
― La princesa, el dragón, falta una torre alta
― ¿el chiche de la princesa? ¿en serio?
― ¿Por qué no?
― Jinko no es una princesa – se quejó el mafioso
― Por cierto ¿Cómo es que estaban los dos aquí? – pregunto Chuuya y este trago saliva
― Atsushi-kun gano unos boletos, y reto a Akutagawa-kun – hablo Dazai
― Eso
La agencia se adelantó junto con Chuuya. Esté iba enfrente por cualquier cosa, era el único que había vencido al dragón con anterioridad. Dazai miro a Akutagawa – puedo verlo, en tus ojos – el mafioso lo miro sorprendido – Atsushi-kun te enseño algo más que matar ¿no? – el azabache trago saliva
― Me enseño algo maravilloso
― Bien, ahora te toca rescatar a la princesa
― Si
Entonces llegaron, era un enorme campo de pasto verde, Atsushi estaba encima de la parte más alta de la montaña rusa, el dragón estaba vigilante entre ruinas mientras un brebaje se preparaba. - ¡Atsushi-kun! – grito la agencia
― ¡Sí! – grito Atsushi feliz
― Solo tengo que tocarlo – dicto Dazai
― ¡ES UN FANTASMA! – Grito Atsushi - ¡UNO DE VERDAD!
En efecto, el fantasma de Shibusawa logro golpear a cada uno de ellos sin que se dieran cuenta para volver a su lugar – en efecto Atsushi-kun, pronto, seremos fantasma juntos – menciono Shibusawa. Atsushi forcejeaba con la cola del dragón.
― Estás demente - explico Akutagawa mientras Rashomon se convertía en una filosa espada – nadie interrumpe mi paseo – se quejó molesto
― Yo me encargo del dragón – dijo Chuuya tronando sus dedos
― Tomaré ese brebaje – menciono Kenji
― Ayudaremos – menciono Kyouka sacando su katana
― Por Narnia – grito Dazai – ah no, ¡Por Atsushi-kun!
La guerra comenzó, Akutagawa y Shibusawa peleaban con espadas. Chuuya peleaba con el dragón, Dragón que aún lo llevaba en la cola. El pelinaranja debía tener cuidado de no lastimar a Atsushi. Tanizaki había entrado en acción trepando aquel dragón con ayuda de Kenji, irían por Atsushi. Kyouka ayudaba a Akutagawa pero Shibusawa era rápido. El dragón rugió llevando a todos lejos y golpeo a Atsushi contra el suelo con gran fuerza en la cabeza, esto lo desmayo.
Shibusawa hizo a Kyouka y Akutagawa chocar uno con el otro para golpear sus cabezas, y fue hasta al lado de Atsushi – parece que fue un golpe fuerte – menciono acariciando la cabeza de Atsushi – todo estará bien pronto. Morirás conmigo
― Su objetivo es matar a Atsushi – dijo Chuuya cansado
― Es obvio, si quiere a la princesa con él debe llevarla al infierno donde el pertenece
― Maldición – expresaron todos preocupados.
Chuuya corrió para tomar la cola del dragón, esté había soltado a Atsushi, Shibusawa tomaba al albino para salir del lugar – el dragón, el dragón es quien los defiende – declaro Dazai
― Si vencemos al dragón llegamos a Shibusawa
― Apresurémonos, no le queda tiempo
Akutagawa los miro a todos con gran molestia – tiene todo el tiempo del mundo – menciono molesto – Rashomon. – la tela demoniaca se convirtió en un gran dragón negro. El azabache se había quedado sin abrigo que usar – Kyouka, tu daga – la menor le entrgo la daga al azabache
― Akutagawa, ¿estas consiente?
― Es mi responsabilidad. Me di cuenta de la falta de gente, me di cuenta que nos seguían, pero calle por deseos egoístas. Solo porque me divertía – menciono y miro a Dazai – aprendí que hay más que solo matar, aprendí que Jinko es un buen compañero y
― ¿Y? – pregunto Dazai
― Y lo último, se lo debo decir a él
― Bien, retendremos al dragón
― Trae de vuelta al chico tigre
― Si
El dragón negro de Akutagawa tomo al dragón rojo de Shibusawa para estrujarlo como la buena tela que era. Kenji tomo al dragón de su cola, Kunikida lo envolvió en cableado que era sostenido por los demás miembros de la agencia. Chuuya golpeo aquel gran dragón rojo haciéndolo caer. Rashomon desapareció dejando únicamente el abrigo, no había rastros de Shibusawa, Atsushi y Akutagawa.
Dazai tomo el abrigo del mafioso y lo sacudió ― esperemos a que regresen
...
Akutagawa llego a los rascacielos de la exhibición de spider man, Atsushi seguía inconsciente, y Shibusawa subía por uno de ellos ― ¿es en serio? ¡¿Eres King kong o qué?! - se quejo
― No lo sé, Miushi tiene ideas raras a veces
― Ni que lo digas
Regresando al punto, Shibusawa había entrado en el rascacielos y el mafioso le siguió. Encontrando a ambos chicos en el penúltimo piso. El mayor le esperaba con una botella en mano – estaba esperándote mafioso
― Aquí me tienes maldito fantasma
― Ahora que llegaste, podrá hacer a Atsushi beber, y así presenciarás lo fino de nuestro amor
― Aléjate de él – dicto molesto – porque esa princesa, es ¡MIA!
Akutagawa fue una vez más a la pelar contra Shibusawa, la pelea era reñida, todo las de ganar la tenía Shibusawa, el mafioso no tenía su abrigo, pero claro... su habilidad era de cualquier tela, no de un abrigo. ― Rashomon demon armor – la ropa del azabache se volvió una enorme armadura. Con gran agilidad dentro de él, pateo a Shibusawa dejándolo colgado de la ventana. Tomo rápido al albino, claro. Era un fantasma, no moriría por caer de allí, pero usar la armadura demoniaca le quitaba mucha energía.
Corría con Atsushi en brazos para regresar a jurassic park cuando fue intervenido por el dragón, y claro Chuuya quien volvia patearle la cara. Todos estaban cansados ― ¡Atsushi-kun! – grito Dazai
― Dazai-san, se lo encargo – pidió el mafioso dándole al pequeño
― Espera, Akutagawa – le detuvo quitando su armadura
El mafioso lo vio y el castaño le dio el abrigo ― Dazai-san...
― Acaba con él – dijo con orgullo.
Akutagawa apretó su abrigo, se lo coloco y ese fue el momento donde Dazai recordó la primera vez que le entrego aquel abrigo al mafioso, sonrió mientras el azabache corría hacia Shibusawa ― ha crecido tanto... - hablo una vez más orgulloso.
La pelea continuo, no había forma de acabar con ellos. Dazai analizo todo, Atsushi estaba despertando con un terrible dolor de cabeza ― Atsushi-kun ¿despertaste?
― Al-algo – dijo quejumbroso ― me duele mucho la cabeza – miro a Dazai preocupado ― ¿no tome ese brebaje o sí?
― No aun no
― Eso me mataría incluso con el tigre. Huele horrible
― Matarte... mmm ¿matará a alguien muerto?
― Mataría a cualquiera, en serio el olor es insoportable
― Atsushi-kun
― ¿sí?
― ¿Sabes actuar?
― ¿Qué quiere de mí?
― Mejor dicho, que quiere Shibusawa de ti
El silencio fue incómodo.
Akutagawa y Chuuya estaban por perder, Kenji ya estaba agotado. Atsushi se paró firme frente a todos ― Jinko
― Estoy bien – hablo el albino y sonrió a Shibusawa ― Shibusawa, la verdad es que me he dado cuenta... ¡quiero morir a tu lado!
― Esté ya se le pego mucho a Dazai – se quejó Chuuya
― Cometeré un precioso suicidio bebiendo el veneno, pero como Dazai-san me ha enseñado que no hay cosa más preciosa que morir con la persona que amas, Shibusawa – extendió su mano con una botella llena de aquel veneno – muere una vez más, conmigo.
― Oh Atsushi-kun – dijo Shibusawa alegre para tomar la cintura del albino ― lo bebería contigo en cualquier instante
― Bebamos – sonrió Atsushi
Todos estaban sorprendidos, excepto Dazai, el lloraba por la felicidad de la buena educación de un suicidio doble. Akutagawa no leía entre líneas, bueno de hecho nadie. Para todos, Atsushi se sacrificaría. (Excepto Dazai)
― ¡Yo me opongo a esto! – grito el azabache.
― Uuy, por estas cosas amo las bodas – dijo Naomi emocionada
― No dejaré que nadie tenga a Jinko
― Sé un buen perdedor perro rabioso
― ¿perdedor? El único perdedor aquí eres tú – expuso molesto ― Jinko me ha enseñado lo que significa no matar, me ha enseñado a que un simple festejo de juegos de Disney te alegran el día, que una estúpida pulsera de camaleones te unen más a cada momento y que la vida sin él simplemente no tendría sentido – Atsushi se sonrojo, mientras se acercó firme hasta Shibusawa ― y si habrá alguien que se casé con este maldito inútil hijo de puta
― Ya la cago – expreso Dazai en un susurro
― ¡seré yo! – grito pateando a Shibusawa y alejándolo de Atsushi.
El albino miro al azabache con ojos llenos de amor, Akutagawa sostuvo al albino en el mismo abrazo ― no estés sacrificándote por estúpidos
― En realidad era una trampa
― ¡¿Por qué carajos no dices nada?!
― Fue lindo... - menciono sonrojado ― que lo dijeras... Frente a todos
― Cállate – ordeno tapando la cara de Atsushi y empujándolo para tumbarlo al suelo ― yo me encargo del muerto viviente
― Infantil perro, ¿Cuándo entenderás? Atsushi ira al infierno conmigo
― ¡Eso jamás! – gritaron ambos chicos.
Rashomon sostuvo a Shibusawa. Atsushi corrió con sus piernas de tigre y medio a la fuerza el bote de veneno en la boca de Shibusawa, con todo éxito, lograron hacerlo tomar y una gran explosión hizo a todos volar.
Despertaban adoloridos, todo estaba bien, la gente estaba en las atracciones como si nada ― ¿Akutagawa? – pregunto el albino mirando al azabache
― Todo está bien, lo logramos – respondió
Atsushi sonrió y abrazo con fuerza al azabache ― ¡suéltame, suéltame! – grito molesto pues sí, tenía la mirada de todos encima
― Que vivan los novios – dijo burlón Dazai.
...
¿Qué? Les dije que sería corto.
Mañana subiré el final. Quizá hoy, no sé...
¡Gracias por leer!
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