Ougai había curado a Dazai y vuelto a vendar, Atsushi estaba en la sala con la cabeza en la mesa sin ánimos de nada, Fukuzawa buscaba a Natsume y Akutagawa, bueno el miraba a Atsushi estar decaído. – Jinko

― ¿sí?

― No te hará bien estar así

― Que importa...

― Vamos a la playa

― No quiero...

― Vamos - ordeno jalándole la oreja

― Vo-voy, su-suéltame, allí no – se quejó nervioso

El mafioso le soltó y Atsushi se talla sonrojado - ¿Qué pasa con tu oreja?

― Na-nada, no la toques

Los jóvenes daban una vuelta por la playa, no sabían del paradero de Chuuya, solo se relajaban – la arena entre los pies se siente bien – dijo Atsushi sonriente

― Supongo que es relajante

― Sería mejor si te quitas el abrigo para tener rayos de sol, eres pálido

― Cállate. Terminarás más rojo que la sangre si te sigues asoleando

― Y el pantalón ¿no traes ropa fresca?

― Mi ropa es fresca

― Sigo insistiendo

― Calla Jinko

― Y

― ¡que te calles!

― Hay perdón – se quejó el albino

Atsushi se alejó del mafioso y fue a la orilla, allí el agua tocaba sus dedos – eres como un infante

― Solo lo disfruto ¿Qué tiene de malo disfrutar? Me sacaste de la casa apropósito, ahora aguanta

― Jinko, la verdad es que eres un

― Miaauuu – escucharon ambos chicos

Atsushi miro a la palmera – oouwa, ¡un gatito!

― Jinko no lo toques, debe tener rabia

― No hables así de un gatito – se quejó Atsushi

― No lo toques Jinko – le regaño al ver al albino

Atsushi trepo por la palmera y tomo al gato, este se acomodó en su hombro y volvió a bajar – mira qué lindo – dijo sonriente

― Asco

― Conservémoslo

― No

― Vamos Akutagawa, conservémoslo

― No, déjalo ir

Atsushi suspiro, lo puso en el suelo pero el gato se quedó con él – llevémoslo

― Que no

― Que amargado eres, lo llevaré

― Jinko si Fukuzawa-san y Mori-san nos regañan diré que fue todo tu idea

― Bien, me echaré la culpa

― Malditos gatos

Una vez más, en casa, el gato fue bien recibido sobre todo por Fukuzawa pero la verdad es que el gato tricolor solo se quedaba con Atsushi – niños, iré a buscar a Chuuya – dijo Mori

― Y yo a Natsume-sensei

― Dazai-kun dormirá hasta mañana, por favor pórtense bien

― Y cuiden al gato

― Si – sonrió Atsushi mientras Akutagawa suspiro de brazos cruzados

Atsushi jugaba con el gato y un pedazo de listón, Akutagawa los miraba molesto ¿Qué tenía ese gato de especial? La verdad nunca se sabría, pues el gato estaba contento jugando con Atsushi como si nada.

― Jinko, ¿puedes comportarte? Esos listones son peligrosos, tienes como 15

― No pasa nada, Tri está jugando

― ¿Tri?

― Si, por TRIcolor, Trilogía,

― ¿Por qué Trilogía?

― Solo se me ocurrió

― Vamos Jinko, solo deja a ese maldito gato, me provoca molestias

― ¿eres alérgico?

― No pero es molesto

Los niños seguían discutiendo mientras el gato jugaba con los listones, poco a poco enredando al par de muchachos, poco a poco los hilos fue juntando y a los chicos enredando, solo para aquellos que ponían atención en su imaginación, miraron aquella cola moverse feliz y a un gato soltar el hilo mientras parecía sonriente.

Tri comenzó a alejarse y una vez lejos comenzó a maullar para llamar la atención del albino, Atsushi volteo a verle y dio un paso, el paso que daría para el resto de su vida unir, literalmente.

Con su paso firme pero torpe, el chico cayo por los hilos, y el azabache se fue encima de él, la posición aunque rara, no les perjudicaba, (según ellos), pues Atsushi se había golpeado como acostumbraba hacerlo en la cara, su rostro en el suelo, sus manos por el camino, y su trasero levantado, para mala o buena fortuna, Akutagawa había caído encima suyo, arqueando su cuerpo por el trasero levantando del menor, y si como toda comedia: los mayores llegaron

Chuuya los miro sorprendidos, Ougai se sonrojo pero estaba molesto, Fukuzawa fue el primero en ir tras ellos - ¡¿pero qué están haciendo?! – grito Ougai mientras Fukuzawa iba hacer ellos para darse cuenta que no pasaba nada, hizo señales al azabache mayor quien estaba por darle un ataque

― L-lo siento – dijo Atsushi avergonzado – tropecé y

― Ay por dios, es que esto está buenísimo – decía Chuuya quien gravaba lo ocurrido - ¿puedo tener más? – pregunto acercándose

― Chuuya – escucho la voz molesta de Mori llamarle y se detuvo

Fukuzawa terminaba de quitar los hilos cuando Tri salto al mueble y meneo la cola, su trabajo estaba hecho.

Akutagawa y Atsushi no entendían lo sucedido, lo que si sabían es que sus corazones latían con gran fuerza y rapidez. Ougai se había quedado con ellos para unas lecciones anticipadas por la gravedad de sus posiciones. Era el más preocupado.

Fukuzawa había entrado a ver a Dazai quien seguía durmiendo, Chuuya se asomó ligeramente - ¿tan mal lo deje? – pregunto con una voz sinceramente preocupada

― No es tanto el mal, es más la necedad

― Fukuzawa-niisan

― ¿niisan?

― ¿Por qué Dazai es...?

― ¿quieres oír algo curioso?

― Si

― Acepte a Dazai hace unos años en la agencia, sabía que venía de estar con Mori, lo llegue a ver un par de veces cuando Mori comenzaba a ser el jefe de la mafia

― Si

― Cuando vi a Dazai, vi a Ougai

― ¿perdón?

― Ougai Mori y Osamu Dazai son muy parecidos, demasiado debo admitir... - miro a Chuuya - tú también ya lo notaste ¿no es así?

― Fukuzawa-niisan, yo...

― No tienes que explicarte, es normal. Nos ocultamos mucho en el pasado pero ahora ya no importa

― Es... doloroso ocultar el amor

― Lo sé bien, viví con ello por años, muchos años...

― Usted ¿Cómo soporta a mi jefe? – pregunto sincero – digo... si se parece a Dazai

― Metido mucho a decir verdad, pero no es solo eso

― ¿Qué es?

― Que así lo conocí, así me enamore de él

Chuuya lo miro sorprendido, realmente sus palabras eran las que llegaban – Ougai era desastroso, podía sonreír y jugar como si nada pero al mismo tiempo sacaba su bisturí y mataba a 15 en un movimiento. Ese es Ougai Mori

― ¿y cómo?

― Hubieron muchas discusiones, muchos pleitos, y visitas al hospital

― Si, comprendo eso...

― Pero una vez que entiendes que no puedes vivir sin ese desastre... El desastre se vuelve parte de tu vida y lo disfrutas como cada día

Chuuya suspiro, miro a Dazai quien dormía y sonrió – es un temible desastre ¿no?

― Lo son – sonrió ligeramente – admitiré algo contigo

― ¿Qué es?

― Cada que veía a Dazai quería llorar, porque veía a Ougai reflejado en el – suspiro – me hacía extrañarlo más

― Gracias por siempre mantenerse fuerte

― Es lo que hacemos, mantenernos fuertes

Chuuya sonrió, dejo sus cabeza recargada en el hombro de Fukuzawa y esté le miro con orgullo, Chuuya ahora esperaría el despertar de Dazai.

...

En la sala, Ougai intentaba explicarle a los chicos que era el semen mientras el gato Tri maullaba con gran fuerza, Atsushi trataba de calmarlo y Akutagawa de asesinarlo. Ougai simplemente quería llorar con el par de críos que debía de cuidar. 

...

Tri a llegado para quedarse un buen rato y hacer de las suyas, digo... si una cosa no funciona, quiza un gato bajo el sombrero podrá resolver todo.

Gracias por la espera mientras me fui de vacaciones, espero les guste el capítulo.

¡Gracias por leer!