♣13♣ᶜᵒᵐᵒ ᶜʳᶤᵐᶤᶰᵃˡᵉˢ

Problemas para publicar el capítulo, descuiden es bien largo :'v

********************

Cruzada de brazos sobre mi pecho, con una pierna sobre la otra cual movía de por puro nerviosismo. Mi blusa floreada estaba empapada, mis pelos se apegaban a mi frente como las gotas que caían por mis lados. Ellos sentandos en frente mio porque como los maricones que eran ninguno se atrevia ponerse en mi lado, preservando su seguridad primero, claro. Jimin meteniendo un ojo morado y pómulo rojo, Jungkook con el labio partido y restos de lechuga y tomate en sus hombros, Hoseok al igual que Taehyung con la ropa desgarrada y el pelo echo un desastre . Todos oliamos a goseosa. Encerrados en una maldita celda de comisaría. La diferencia, el peli plateado solo junto a otros presos encerrados en celda de en frente.

¿Cómo carajo llegamos hasta ahí?

¿Qué coño sucedio?

Bueno debería retomar desde mi cita con Jimin. Antes de que todo se volviera un desastre

5 horas antes...

—No creí que todo estuviese tan cambiado, hay calles que no reconozco —admito viendo a mis alrededores las diversas tiendas tan llamativas para mí

Jimin decidió ser mi guía, mostrandome todos los lugares que conoce y hablandome un poco de cada uno. Parecía de esos pericos cuales no saben cuándo cerrar la boca pero no me molestaba, lo único malo fue que tuvimos que aparcar el auto a cuatro calles lejos y el jodido calor era asfixiante, completamente sofocante que me hacía sudar como cerdo nervioso en un matadero.

—Si, debe ser lo más lógico si te vas a vivir al extranjero por varios años. —tomo mi muñeca y jalo de ella haciendo que frunciera el ceño

—¿A dónde vamos?

—Sorpresa, hermosa

—eleve una ceja —Jimin, empezamos mal ¿Enserio los mismo tipos de Piropos que Jungkook?

—¿Qué? Solo soy yo a mi manera —me miro sobre su hombro, ofendido haciendo puchero con sus labios

—¿Qué debería pensar de alguien que se la vive tropezando por los pasillos y caer de la silla? —era verdad, varias ocasiones lo vi casi dandose en la madre contra el piso. Quizás tenga algún serio compromiso con el suelo y nadie ni enterado.

—¡Solo un par de veces! —se excuso

—rode los ojos y trate de sacarme su mano aunque fue inútil —Ya, dime a dónde vamos —insisti

—Iremos a divertirnos. —esa fue la última frase que dijo durante todo el camino.

Mire el enorme establecimiento una vez y luego a Jimin, después otra vez al establecimiento.

El centro comercial.

—¿Enserio? Hubiera preferido ir a una botanatica, park

—Tan linda y amargada —entre cerre los ojos —Tengo preparado todos los lugares a los que iremos, nos joderemos de la risa y me burlare de tu cara cuando vea que te diverties —sonrió

No me dio tiempo a protestar, solo dejé que volviera a jalonear. Una vez entramos mire a los alrededores, las tiendas, todo muy moderno infestado de muchas personas —entre ellas más adolescentes— Subimos a las escaleras eléctricas hasta el segundo piso, cual se veía más para jóvenes. Ni en los centros comerciales de los Angeles eran así, tan a la moda. Jimin volvió a tirar de mi hacia un lugar cual no leí el nombre, luces oscuras y neon era lo único que alumbraban, curiosa vi al fondo dándome cuenta que era una sala de juegos. El pago las fichas y nos adentramos

No es que me desagrade pero muy pocas veces eran las que venía a los centros comerciales con mis amigos en los Ángeles, siempre me invitaban pero yo obtaba por quedarme en casa y flojaer con mi gasparin. Así es bastante nuevo esto para mí, aunque suene ridículo.

—¿Jugamos?

—me encoji de hombros desinteresada —No lo sé, se ve aburrido

—¿Segura? O será que eres... ¿Miedosa?

—enarque una ceja —¿Qué?

—tome el casco de realidad virtual y la pistola, clave mis ojos en el, su expresión de burlona solo aumento mi malestia —Te voy aplastar ese culo de Kim Kardashian que llevas detras.

—No vas a ganarme, soy bueno en este Suni~ —alardeo

—Cierra la boca y ponte ese casco de una vez.

***

Golpie su brazo por tercera vez, Jimin no paraba de reírse en mi cara. Digamos que después de mi fracaso en el juego con pistola —cual perdí 78 puntos a 86— seguimos probando más juegos diferentes, en su mayoría ganó él. Y me di cuenta de algo, soy pésima en el de "golpea al topo"

—¡Ya para! —lo empuje lejos de mi, las personas alrededor comenzaba a vernos raro. Este eneno parecía una foca riéndose —Jimin... —cuando el me miró no me pude aguantar a reír también, sus expresiones eran tan graciosas como el desaparecer de sus ojos.

—¡V-Ves, ya te reíste también! —me sañalo y saco unas lágrimas causadas por las carajadas —Ah, mi pansa...

—Ya, cara de panetón —dije y ver el rostro ofendido de Jimin sonreí socarrona

—Hey! Me han dicho muchos sobre nombres en mi corta vida pero ¿¡Panteón!? Que cruel mujer, yo que te digo cosas lindas —toco su pecho haciendose el dolido

—Nadie te mando a alagarme.

Touche

***


—Vamos, Jimin posicionalo bien —pedi casi desesperada

—Eso intento, de verdad que lo hago. Pero no quiere meterse más

—Mierda, solo has un poco más de fuerza —mi respiración se aceleró —Se que puede meterse más para dentro —insisti

—No puedo!

Casi senti las gotas de sudor deslizarse por mi frente por la impaciencia que lo hiciera de una vez.

El gancho subió y no hagarro nada. Resople enojada, ni un mísero peluche.

—Te dije que lo metieras más para dentro, ahí siempre hay algunos chiquitos que si se pueden sacar

—La garra se trabo con algo, no podía. Quise sacar el de únicornio pero no querías

—Era rosado, no soy SeokJin

Bufo y nos alejamos de la máquina. Intentamos varias veces sacar un jodido peluche ¿Por qué? Ambos teníamos ese sueño frustrado, cuando eras niño y veias con ilusión esa máquina llena de peluches para que luego terminaras llendote sin nada y modernas porque esa garra no tomaba una mierda.

Y es que a mí no me jodan, esa cosa está arreglada.

—Tengo hambre

—No eres la única —incurvo sus labios para arriba —Ven, hay un lugar a qui que tienen las mejores hamburguesas —entrelaso sus dedos con los míos, quise decir algo pero me quedé callada por la sorpresa. Su mano se sentía suave

Al final Jimin terminó siendo más agradable de lo que pensé.

Burger Haven fue el lugar al que entramos y inmediatamente That's what i like Bruno Mars no tardó llegar a mis oídos, el lugar se veía muy bien. La decoración del establecimiento era con colores neón; azules, rosas, verdedes, violelas, morados teniendo gran cantidad de cosas retro pero sin perder el detalle de lo moderno, —aparte las mesas de billar en el fondo—


Narrador Omnisciente

El peli plateado daba mordiscos a la hamburguesas mientras observaba a sus amigos concentrados en meter las bolas en los hoyos. No participaria en jugar porque ya conocía su destino.

—¡Vamos Hobi Hyung, tres bolas más! —quiso alentarlo al ver el sudor bajar por su frente. Dios, el chico estaba  nervioso que te cagas, el ambiente se encontraba en tensión. Necesitaba meter esas tres bolas para ganarle al trillizos. Jamás llegó tan lejos

Hoseok, metio una bola. Entonces paso al turno de Jungkook quien solo debía meter las dos bolas restantes, se posiciono sobre la mesa apoyando el palo y analizando para que lado sería mejor meter.

Los dos chicos quedaron con las bocas entre abiertas al ver las bolas metiendose en dos agurejos cercanos.

—Te toca pagar hoy, Hobi —le dijo con una sonrisa más triunfadora que satisfactoria

—Tranquilo, diste buena batalla —tae palmeó en consuelo el hombro de su amigo.

Una mesera se acerco con una libreta hasta la mesa de los chicos, aunque con un pequeño niño viniendo detrás de ella quien no se dejaba ver. Con todo el escote a la vista plena se posiciono muy coqueta al lado del trillizos, no le había quitado los ojos encima desde que llegó

—¿Ya decidieron que más perdir, muchachos?

—Cuatro combos de hamburguesas más, extra picante, papas fritas, dos gaseosas y una Sprite —respondio Jungkook galante mientras ella anotaba y el peli naranja casi se descoloca. Su dinero se hiba a ir en la comida

—¿Algo más, cariño? —pregunto a Taehyung quien negó amistoso —¿Y tu, corazón? —ahora se dirigio a Jungkook después de posar la mano en su hombro, acariciando.

—Si vienes incluida, claro que sí —le guiño el ojo cuando la vio morderse el labio.

Jungkook Pero cuando quiso toquetear un poco su trasero, la mano fue retirada de un manotazo. Extrañado vio detrás de la chica, encontrandose con mirada asesina de un niño no más de 6 años ¿Que carajos?

—Ruji! —dijo la mesera al niño tras llevárselo consigo lejos de la mesa.

Después de ser regañado por su hermana mayor se quedó en una esquina sentado a esperar porque termine su turno. Alertado clavo la vista en la mesa donde un chico acompañado de una chica estaban comiendo, mejor dicho devorando. Su hermana se acerco al lado del rubio para hacer el mismo procedimiento que en la mesa anterior.

—Ahi qui tienes las patitas de pollo y pescado, lindo —dijo siendo correspondida por la sonrisa del rubio

Suni nisiquiera les presto atención, estaba bien ocupada en degustar de la hamburguesa con las papas fritas. Hasta que vio como de la nada la mujer se apoyaba sobre el respaldo del asiento, queriendo tocar los pelos de Jimin, frunció los labios tras pensar

"Vaya ofrecida..."

—Ya, alejate! —una voz pequeña les llamó la atención, un niño que se llevó a la mesara lejos no sin antes darle una mirada de muerte a Jimin.

—Al parecer te quieren matar, panetón

—Imposible, es solo un niño. No es mi culpa que su hermana se me haya casi puesto encima, además ¿Tú por qué no hiciste nada? —llevo una papitas su boca

—Oye, tampoco te hagas tan importante. El día en que yo me ponga celosa será por la persona que me guste.

—jimin se inclinó hasta ella con curiosidad apoyando los codos —¿Y ya te gusta alguien?

—No. —respondio más que segura

—Entonces todavía tengo oportunidad —Suni comenzó a toser luego de beber la gaseosa bajo la divertida sonrisa del rubio, no puede un simple comentario la haya echo atragantarse.

El nene miro a su hermana quien estaba otra vez en la mesa de esos tres chicos y dejándose tocar la espalda, inhaló por la nariz con hastío y desvío sus ojos uno momento a la mesa anterior de la pareja.

Dicen que la imaginación de los niños es grande, bueno la suya era inmensa.

Porque sintió que la mejor idea se le ocurrió en ese instante.

Pasando desapercibido corrió sin ser visto hasta adelante escondido detrás de una vacía mesa.

—Ni que fueras Brad Pitt, Park. Me gustan altos no elfos

—Pero yo no... Espera ¿¡Acabas de decirme elfo!?

—Quizas —tomo unas papitas untadas en ketchup que rápidamente le fue arrebatada por unos dedos intrusos —¡Oye!

Jimin elevó las papitas lejos de su alcanze en forma de venganza sin importarle como se manchaba con la salsa en su palma.

Mala idea.

—Dance pool, eh. Entonces nos hablamos cuando quieras...enseñarme un poco Daphne —la chica embriada con su colonia se relambio sus rojos labios captanta a lenguas el mensaje asintió más que decuerdo.

Claro que le enseñaría su baile, y bien que lo haría.

Cuando la mesera se retiró Taehyung y Hoseok entre risas le dieron palmadas de satisfacción para el castaño, de nuevo demostraba ser inresistible hasta para una simple empleada de Burger haven.

—Hyung a este paso tendrás una mansión Playboy más antes de un treintañero.

El trillizo carcajeo por eso.

Todo hubiera seguido bien pero al parecer ese día la suerte no estuvo de su lado.

Jungkook sintió el golpe de algo contra su nuca, como si le hubieran arrojado una bola. La mesa quedó en silencio por como sonó el impacto, Taehyung quién estaba más cerca suyo miro para verificar extrañado su espalda.

Los ojos se le abrieron como platos y vio alarmando a Hoseok quien no entendía su expresión hasta que también se dirigió para ver la espalda.

El peli naranja palidecio y su boca se entre abrio ahora comprendiendo mejor al peli plateado. En otras circunstancias se hubieran echado a reír por la ecena, pero conociendo al trillizo sabían que eso no era lo adecuado para la situación.

—J-Jung...

—¿Era una bola de papel, Tae? —pregunto el pelinegro incredulo

Ojalá hubiera sido eso.

Cansado de no escuchar una respuesta de ninguno movió a su amigo fuera de la ventana, miro su reflejo detrás por si mismo. Y es que debía ser una joda, una maldita hamburguesa estaba estrellada en su espalda, todo deslizándose con lentitud, el kepchup le mancho hasta el cabello, los pepinos aderinos a los lados, la mostaza mezclada la lechuga y el pan Pegado en sus hombros ¡Encima lo que traía puesto era una remera blanca!

Hizo puños las manos con tanta fuerza que temblaban y las venas se le marcaban en el cuello. Los dos chicos tragaron duro por la apreciación de su amigo.

—¿¡Qué mierda!? —toco el ketchup de su nuca solo provocando que se pusiera  rojo del coraje

Se paró rápidamente buscando entre las mesas el hijo de puta que se atrevió a tirarle esa mierda.

No obstante, sus ojos no pudieron evitar caer en una mesa adelante. Jimin estaba en frente de una chica con...la mano alzada manchada en salsa roja. El trillizo entre cerro los ojos

"¿Podría ser...? no, imposible"

Se retiró de la mesa rendido por no encontrar al culpable para ir al baño a limpiarse la tremenda obra de comida que le dejaron en la espalda, una vez estuvo de vuelta —poco más tranquilo— no evito volver a echarle un vistazo a la mesa donde estaba el rubio

—¿Quién te pudo hacer eso? Yo no vi nada —dijo hoseok —¿Tú viste algo, Tae? —el nombrado negó igual de confundió

—Si lo llego a encontrar juro que le voy hacer tragar esos restos de hamburguesa —mascullo con enfado, pues no logro hacer mucho con el ketchup que no se quitó con el agua —¿Ya vieron? adelante está Jimin con una chica

los pares de ojos curiosos fueron hacia adelante para comprobar, Jungkook tenía razón. Jimin estaba con una chica de pelo negro y parecía estar pasándoselo muy bien con ella

—Espera ¿Qué hoy no tenía una cita con Suni? —tae frunció el entre cejo

—Cierto pero...—hoseok se detuvo un momento para dar a relucir una sonrisa pícara dandose cuenta del detalle —Bueno, me parece que sigue en su cita

—en eso Jungkook levanto la cabeza de su celular con esa mención —¿Estás diciendo que la chica de ahí es la Gumgum? —el contrario asintió

—Que asco ¡Ya manchaste mis papás! —empujo lejos el plato por quedar manchada con la salsa de la mano de Jimin

—río con fuerza —Deberias comerlo igual, si el ketchup esto en mi mano entonces estarias probando un poco de mi —solo obtuvo un golpe en hombro por su parte, Suni resopló para mantener la calma.

—Imbecil, mi comida no se toca.

—¿Entonces preferirías que te la diera de comer y...

Las palabras se le quedaron en el aire cuando sintió el frió líquido mojar su ropa como el hielo. Alguien le habia aventado gaseosa, se levantó de golpe para verse acompañado de Suni quien lo miraba sin poder creerlo

—¿¡Qué carajo!? ¡Ah, está frió! —ella rápidamente hagarro servilletas de la mesa para tratar de secar su pecho

—¿¡De donde salió esa gaseosa!?

—¡No tengo ni puta idea! —respondio Jimin, aprovechaba estar de pie para tratar de encontrar en todo el lugar pudo haber sido el cabron.

Aunque rápidamente desvío su enfado al darse cuenta que Suni lo estaba limpiando, literalmente ahora se sentía en un sueño por ver qué tenía su atención de esa manera. Todo rastro de molestia en su rostro desapareció y sintiendose bien con como frotaba el papel de su mano contra el pecho cual se lograba marcar gran parte gracias al líquido.

—¿Preocupada por mi? —musito con un tono ronco que adulzaria a cualquier chica, ella levanto la vista para darse cuenta que su respiración con la de Jimin chocaban, así de centimetros estaban.

—en un instante ya se había alejado volviendo a su postura inicial dándole el envase vacío con el que diero y servilletas —Limpiate tú

—puso los ojos en blanco —¿Por qué paraste? lo hacías bien —se quejó haciendo un puchero.

Unas risas muy conocidas para el no lograron pasar desapercibidas, en el fondo la mesa que solía ocupar con sus amigos se encontraba Taehyung, Hoseok y el pelinegro trillizos que parecía susurrarle cosas a los otros dos que los mantenía muy divertidos.

¿Puedo haber sido él? Desde el primer momento sabía que no le gustaría que se acercase a Suni para una cita, ya que según el "le echo el ojo primero"

¿Sería capas, acaso...?

—¿Enserio? ¿¡Jungkook piensas acércate a su mesa!? —declaro desconcertado Taehyung

—Si, ¿Cuál es el problema?

—Amigo, les arruinaras la cita —dijo hoseok —Es mejor dejarles que sigan en su rollo.

Jungkook empujó la lengua dentro de su boca arrugando las cejas, no entendían a que venía ese gesto suyo.

—Ni que me fuera a sentar con ellos tampoco, solo quiero saludar.

—Y romperle los ovarios a Suni —agrego el peli naranja

—Exacto. —sonrió divertido

No  duro tanto tiempo la sonrisa de sus labios, pues desaparecido automaticamente cuando un nuevo proyectil, ahora líquido terminó arriba de su cabeza esta vez haciendole doler, si no fuera gaseosa diría que estuvo lloviendo arriba suyo pero no. Los hielos cayeron en la mesa, Jungkook tenía la cabeza agachada y sus amigos habían retrocedido lejos suyo también sin poder asimilar el nuevo incidente ¿Otra vez?. Las gotas caían de sus pelos completamente mojado.

Algo sucedería y no sería nada bueno.

De un impulso el trillizo se paró, eso fue suficiente. Estaba peor que un jodido toro embravecido, sus puños ardían con ganas de romper algo con urgencia, movió la cabeza hacia todos lados, tanto Taehyung como hoseok se quedaron mudos y encojidos en los lugares, si le llegan a decir algo al trillizos solo saldrían más lastimados que el responsable. Los ojos de Jungkook eran llamas, recorría todas las mesas, cualquier que se topará con la suya le atravesaría sin pudor.

Sus orbes se clavaron como agujas en el envase goteando de la mano de alguien, no dudo en subir la mirada hasta la persona para encontrarse con rubio de su amigo riendo con fuerza ¿Acaso sería de él? ¿Se atrevió a joderle de esa manera, ahora y delante de Suni?

La furia lo cegó que no en dar zancadas largas hasta donde se encontraba haciendo oídos sordos a los pedidos de sus amigos. Por fin delante de ellos Jimin no tardó en darse cuenta de su presencia y fruncir el ceño.

—¿Jungkook?




Narra Suni


Apenas escuché ese nombre me giré enseguida quedando sorprendida por la presencia de Jungkook delante nuestro, aunque había algo raro. Tenía un semblante tan duro y sus ojos carecían de brillo estando en un estado de enfado tremendo que podría hacernos temblar de miedo. Nisiquiera me dirigió una mirada su vision parecía enfocada en el rubio de mi lado.

Jamás lo había visto así en todo lo que llevo conocidole, tampoco me espere hagarrando del cuello de la ropa a Jimin y acercandolo a su rostro.

—¿Me estuviste jodiendo desde a qui? —hablo entre dientes, joder si que estaba molestó.

—No sé de coño hablas Jungkook —se soltó brusco de su agarre, es verdad. Yo tampoco sabía de qué hablaba —¿No serás tú me tiro esto? —Jimin le tiro a los pies el envase de gaseosa

—¿¡Me estas echando la culpa de lo que tú tiraste!?

Ambos comenzaron a acercarse con claras intensiones de hagarrarse a los golpes.

Entre en pánico.

Afortunadamente cuando vi a Taehyung y Jhope acercándose los alejaron evitandonos el mal momento. Suspiré aliviada aunque tuvieron los pares de ojos de todos los presentes en el lugar.

—¡Primero me tiras una hamburguesa y ahora una maldita gaseosa! ¿¡De eso tanto reías con Suni!?

Si no lo hubiera dicho no lo hubiera notado, el cabello de Jungkook parecía y no por agua, de tras tampoco parecía estar ya que alcanze a notar manchas salpicadas de lo que notaba como ketchup.

—¿¡Yo!? Tú eres el parece haberme lanzado refresco y muy entretenido riéndote de mi ¿Será porque salí con Suni? ¡Conozco cuando te burlas de alguien, Jungkook!

—¿¡Qué mierdas estás diciendo!?

Sentí que debía intervenir, creí que solo las chicas se gritaban así todas histericas cuando una le bajaba el novio a otro y estaban apunto de agarrarse como gatas. Estos idiotas las superaban.

Sin aguantarlo más me puse en medio  de donde los retenían.

—YA CALLENSE HIJOS DE PUTA

Tenía una voz potente cuando me enojaba y agradecia de que en este me halla salido porque quedaron en silencio. Aprovechando eso seguí

—Me ponen en vergüenza idiotas, así que si no quieren irse sin un huevo direcho les recomiendo que dejen de armar una ecena de novias despechadas. —gruñi

Todos parecieron captar mi mensaje pues se dieron la vuelta con intensiones de irse cada quien por su lado, yo estaba por seguir a Jimin.

De no ser porque senti como pedazos de patitas de pollos caían en mi cabeza ensuciando mi cabello.

¿Se atrevieron a tirarme pollo frito..?

Gire sobre mi eje lentamente para encarar a los tres chiflados asiáticos que tenía en frente quienes tenían los ojos abiertos mientras les sonría a boca cerrada. Me pareció verlos temblar en sus lugares cuando di unos pasos al frente.

—¿Quien fue? —dos simples palabras para que se señalaran entre los tres —Chicos... —aprete la mandíbula

De repente dos de ellos cambiaron sus dedos acusatorios hacia Taehyung quien me observo con miedo.

—¡N-No! —puso sus manos en señal de paz —Ese pollo estaba en nuestra mesa pero no sé como...

Fue el entonces.

No perdí tiempo en lanzarme hacia el peli gris rabiosa, tumbandolo en el suelo con inmensas de desgreñarlo.

Un instante pensé que era yo la que desató dicha batalla campal, pues desde ahí todo se volvió un desastre. Dentro del local se desató una verdadera batalla, mesas tiradas como protección, sillas, hamburguesas, vasos, lechuga, tomantes, bebidas, pollos, jugos, papas fritas. Todo tipo de comida volaba en el aire, impactando contra cualquier, no sabía en qué momento pero Jungkook se hallan rodando en el suelo dándose de puñetazos, Hoseok golpeando y golpeando a un tipo, Taehyung después de mi ataque ayudando a su amigo con el enorme tipo al que se enfrentaba y yo, hagarrandome con la mesera que antes coqueteaba con Jimin, pero ella empezó a insultarme, estaba lo suficientemente molesta para liarme con cualquier sin importarme nada. En un momento de adrenalina se olvida lo que es ser civilizado ¿Calma? ¡Esa porquería no existió ahí!

***

—¡Son unos animales! ¿¡Ya vio lo que le hicieron a mi local!? —grito un hombre mayor cual suponia era dueño

¿Algo peor? ¡Oh, si! Luego de darnos contra todos llegaron varios de la seguridad del centro comercial junto a policías a ver que sucedía, apenas escucharon eso muchos de los que hicieron más destrozos salieron huyendo, nosotros fuimos los únicos idiotas en no irnos por quedarnos con los pies pegados al asimilando porque de repente todos desalojaban, siendo así presa fácil como en ese momento donde nos cerraban las esposas en nuestras muñecas.

—el policía tomaba nota —¿Piensa presentar cargos?

—¡Pero claro que sí! ¿¡No ve que por ellos se desató todo esto!? ¡Se pudieran en la cárcel!

—No tiene como probar eso. —comento Hoseok

—Tenemos cámaras. —se apresuró en decir esa estúpida camarera, no tarde en clavarle una mirada ensombrecida.

—Gracias Jimin, ahora por tu culpa estamos siendo atestados ¿Sabes lo que afecta a nosotros siendo universitarios? —dijo Jungkook con amargura y tono irónico

—¡Tú fuiste el que empezo! —contradijo jimin

—quisieron volver a darse golpes no ser por las esposas y el oficial que intervino —¡Hey, hey, hey! ¿Se puede saber de quién empezó qué cosa hablan?

—Fui yo... —todos dirigimos nuestras vistas hacia la voz pequeña que hablo, el mismo niño que estaba junto a esa mesera ahora estába detrás suyo.

—¿Fuiste tú que, pequeño? —dijo con suavidad el policía

—Yo empeze a tirarle esa comida a ese díenton...luego hice lo mismo con el rubio enano, todo detras las mesas. Pensé que sería divertido pero no fue así...ellos pensaron fue uno de los dos —musito casi lloriqueando —Es que mi hermana le prestaban más atención en atenderlos que a mí —bajo la cabeza

—R-Ruji tú...

—Lo siento.

—el policía suspiró y vi como Jimin y Jungkook se veían perplejos sin creerlos, los imbéciles se acusaban el uno al otro cuando el responsable fue un niño no más de 6 años. —Bueno, eso no justifica los destrozos

Todos comenzamos a protestar quejandonos, no era justo

—¡Pero ya confesó el niño! —grite

—Eso no los justifica, ustedes empezaron con esto así que serán encarcelados en la comisaría y tendrán que pagar los daños causados al local del señor, más una fianza para los que los vengan a sacar.

—Por primera vez me arrepiento de coquetear con una chica que tiene hermano... —susurro el trillizo

—¿¡Seremos encarcelados como criminales!? —vocifero sin creerselo Taehyung

—Tiene derecho a guardar silencio.

Y eso fue lo último que nos dijo antes de llevarnos para acabar a qui, esperando detrás las rejas. Nadie se atrevía a hablar pero era lo mejor, porque ahora mismo sentía de nuevo la adrenalina suficiente para acabar con ellos ya que estamos perfectamente en un espacio cerrado sin salida.

Jimin y Jungkook no parecen seguir molestos ya que ahora estaban tan juntitos lejos de mi por fulminarlos con una mirada de pocos amigos.

¿Como demonios empieza una cita normal para acabar una maldita carcel de comisaría?

—C-Chicos... —llamo Taehyung desde la celda de en frente —¿Alguien tiene una armónica? Es que en las películas vi que los presos lo tocan cuando estan encarcelados. —nadie le dijo nada solo nos le quedamos mirando —¿Qué? Llevamos horas a qui y creo que va siendo mi hora de tener una.

De verdad, está bendecido por no estar la misma celda que yo.

Lo peor de esto es que nos dijieron que hicieramos una llamada a alguien para que nos pagará la fianza, yo no me levanté pues Jungkook se ofreció a "solucionarlo" ¿De que manera? No tengo idea.

Los minutos se hacía eternos y yo estaba ansiosa de saber lo que ocurrirá ahora.

***

—el oficial se acercó por primera vez a nuestras celdas —Kim, Jeon, Jung y Park. Levantense ya pagaron su fianza  dijo para abrir con la llave

Todos nos miramos ¿Quien la pago? Salí dudosa de adentro pasando saliva nerviosa, no sabía quién lo hizo pero solo rezaban que no fuera alguien como mi madre ¿Pero ella como lo haría? ¡Todavía no llega de los Ángeles!

Todos salimos hasta afuera donde nos esperaban LeeBink con una gran sonrisa cruzado de brazos, Yoongi con su seriedad que me hiela la sangre junto a un JunKie preocupado a su lado. Un minuto ¿Quien de los tres pago la fianza?

Una vez estuvismos cerca LeeBink no dudo en pegarle un zape en la nuca a su trillizo Jungkook que ni se quejó. Bueno, era su "pago" por meterse en problemas supongo

—Joder, huelen a mierda... ¡Estas asquerosos! —LeeBink arrugo primero la nariz para luego reir divertido, yo no le veía la gracia. —Sabes Jungkook, pensé que yo sería el primer en pisar el suelo de una comisaría. Que vueltas da la vida ¿verdad? —realmbio sus labios mirándolo aun sonriente

No me interesaba lo que el trillizo tatuado tenga para burlarse de Jungkook, yo seguía sin saber lo importante.

—¿Quien pago mi fianza?

—Lo hice yo, Twit —hablo con lentitud con sus orbes fijas en mi ¿¡Es enserio!? —En realidad lo hice con todos, Yoongi estaba que se lo llevaba el diablo así que no quería colaborar mientras procesaba lo que nos dijo por llamada, Jungkook me lo pidió —menciono restándole importancia

Mire unos segundos a mi amigo, pero nisiquiera me la devolvió ¿Ahora le parezco una criminal? ¡Soy la más inocente a qui!

—Espera ¿Qué hay de pagar los destrozos del local —pregunto hoseok, cierto era otra cosa importante.

—LeeBink resopló pareciendo cansado —Tranquilo Jhope, ya está todo resuelto. —dijo con hastío

—Pero...

—Yah, largemonos —LeeBink comenzo a emprender camino primero que todos a la salida

Le hubiera seguido de no ser por Junkie quien se me acercó sin quitar su semblante preocupado.

—Sunie...m-me anguistie mucho cuando llamaron a LeeBink diciendo que todos estaban d-detenidos en la comisaría —musito en lo bajo solo para que lo escuchase.

Ay, hubiera preferido que JunKie no viniera, es una vergüenza que se enterase de esto y encima viniera también. Me hace sentir mal porque no quiero proyectarle una imagen errónea de mi por este incidente.

—No debiste preocuparte por mí...yo ¡Ahg! qué pena —masculle eso último para mí misma

—Perdoname tu a mi, gracias a j-jungkook te metió en problemas —era cierto ¡pero el no debia disculparse en su lugar!

—Descuida JunKie, no te eches la culpas que no son tuyas ¿Vale? —asintio lentamente —Bien, entonces ya podemos irnos —comenze a dar pasos

—¡E-Espera! —me detuvo para prestarle atención —Ahm...el día de la e-excursion —vi como sus mejillas se teñian de un color carmesí —¿T-te gustar-ria sentarte c-c-conmigo?

—Si no estuviera toda sucia, embarrada y bañada en gaseosa le hubiese dado un abrazo —Claro, nos sentaremos juntos —le di mi mejor sonrisa del momento cuando el trillizo levanto la mirada como si no pudiera creerlo ¿Acaso pensaba que no aceptaría? yo siempre gustosa.

—ajusto un poco sus lentes —G-Genial! —huyo hacia afuera donde se hiban los demás, no me dio tiempo a decirle otra cosa.

¿JunKie porque siempre eres así?

—Suni —rode los ojos al escucharlo, dios. Espera no volver a oír su voz en un buen tiempo.

—¿Qué quieres Jimin? —enarque una ceja

—Perdon por lo ocurrido —parecia apenado al apretar los labios —La cita se arruino... Si quieres puedo compensartelo con nueva ropa y-

—lo detuve —No hace falta, yo estoy bien. —dije queriendo dar por terminado la conversación que no deseaba tener

—Lo dije antes, eres muy peculiar Suni... —la piel se me estremeció cuando sentí su voz hablar cerca de mi oído y la ecena en la hamburguesería se me recreo en la mente por unos segundos.

—¡Oingan! ¿Vienen o se quedan? —escuchamos la voz de Jungkook que estaba apoyado en el marco de salida.

Puede que el trillizo sea el más pesado, pero Jimin era peor que un animal al acecho esperando cuativarte con su labia.

Yoongi ¿Qué tipo de amigos te cargas?

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