Esta vez
Esta es la tercera vez
Kamado Tanjiro recuperó sus recuerdos después del asesinato de su familia, dejó que las cosas siguieran el mismo curso, pensaba que si podía lograr el mismo resultado que en la segunda vez, estaría satisfecho, había muchos sobrevivientes más que en la primera, por eso no le importaba volver a permitir que le atravesarán en lugar de Kyojuro.
Por otro lado estaba Rengoku Kyojuro, el joven que sentía que el alma se le partiría en mil pedazos si volvía a perder al joven que amaba con todo su corazón.
Siguiendo la misma lógica, permitió que su vida siguiera el mismo rumbo hasta donde sabía se encontrarían por primera vez.
Pasando los años, finalmente llegaron a ese día, suspiró mirando su ropa, se la puso y partió a la mansión del patrón.
Tanjiro cerró los ojos al dejar que lo atraparan haciéndose pasar por dormido, quedar tan apaleado era difícil.
La postura de Tanjiro le dejó muy en claro que planeaba volver a protegerlo, pero no contaba con que está vez los dos supieran lo que pasaría.
-Entonces no tienes que buscar a Muzan, el vendrá por ti cuando sea el momento adecuado.
-Ni lo sueñes Tanjiro, no te dejaré hacer siempre lo que te plazca.
El patrón guardó silencio y escuchó Rengoku que ahora en su voz tenía el tono de evidente ira.
-¿Disculpe maestro?
-Si quieres que les diga a todos la verdad, lo diré.
-¿De qué está hablando?
El joven sospechó pero anhelaba equivocarse.
-Sé muy bien que está es la tercera vez que llegamos a este momento, en la primera fui asesinado, mucha gente murió y tú estabas triste... Pero en la segunda, aún sigo molesto contigo ¿Tienes idea de cómo fue mi vida después de que dieras la tuya para protegerme?
Los demás pilares no entendían nada, incluso el patrón estaba desconcertado.
-Después de que elegiste morir en mi lugar, si, se salvaron todos los demás, pero tú... Me dejaste el vacío más profundo en la historia de mi vida, ni siquiera se cómo es que hemos repetido el mismo acontecimiento tantas veces.
-Yo tampoco lo sé, pero si con ello se salvan los demás está bien, tu mismo lo reconoces, hubo mejores resultados.
-No estoy de acuerdo, bien podríamos buscar otra solución y no dejar que nadie se vaya en ese momento.
-¿Crees que no lo pensé? ¿Que pasaría si rompemos un verdadero tabú? Podría ser que no lograsemos la victoria al final, el punto es que alguien debe morir allí.
-¿Esa es tu respuesta?
-Rengoku-san... Es lo mejor, seré yo quien lo haga y usted no debe interferir.
-¿Piensas romperme el corazón otra vez en pedazos? ¿Desde cuándo eres tan egoísta?
La pelea se extendió hasta que Shinazugawa se hartó y golpeó a Tanjiro.
-¡¿Cómo demonios le hablas asi a un Pilar?!
-Es porque si yo lo hago, Genya también seguirá a tu lado.
El de cabellos burdeos inclinó su cabeza mirando el piso con nostalgia, miró a Shinobu, Himejima, Tokito, Iguro y Matsuri.
-Si seguimos este camino, Iguro podrá disfrutar una vida feliz a lado de Matsuri, e incluso tendrán hijos, porque se aman, Himejima volverá a los templos y muchos niños jugarán a su lado, Shinobu y Gyuu también tendrán hijos y se amaran con fuerza, mi hermana los tendrá a los dos y seguirá siendo humana, Genya y tú se reconciliaran, Uzui-san no perderá el brazo y vivirá una larga vida con sus 7 hijos y sus tres esposas, Tokito... Tendrá una larga vida por delante, siendo el más joven de todos nosotros, el otro mundo fue injusto con el.
Los Pilares lo miraron y Tomioka apretó los puños, esa vida sonaba muy bien, pero... Para conseguirla tendría que perderlo, otra vez sería protegido y eso no... No estaba de acuerdo.
-Suena muy bien Tanjiro...
Rengoku lo miró con irá y estuvo a un paso de golpearlo, pero lo escuchó hablar de nuevo.
-Pero no quiero vivirla si vas a morir por ella, ¿Pensaste en lo mucho que nos dolería saber que un niño de tan buen corazón como tú hubiera muerto por ella?
-Gyuu-san...
-¿No podemos buscar otra solución? -esta vez hablo Kocho.
-Yo no quiero arriesgarme a qué algo les pase, no quiero perderlos.
El pilar del viento miró a otro lado y le dijo con una voz escandalosa -¿Has pensado en dejarnos elegir si preferimos tu vida sobre la nuestra?
-Yo tengo una mejor idea -dijo el patrón.
-¿Cuál? -contestó Rengoku.
-Si dices que alguien va a morir, puedo imaginar que estaban tres allí, Kyojuro y Tanjiro de nuestro lado, pero del otro lado hay alguien ¿No es así? ¿Fue en una pelea?
Tanjiro asintió con la cabeza.
-Entonces... Si en resumidas cuentas alguien debe morir en ese punto, porque no dejamos que se haga cargo el demonio que está allí.
-Asi que se necesitan 3 vidas para matar a Akaza en esa pelea...
El rubio se rió por la ironía.
-El punto es que no pude matarlo en dos ocasiones ¿Qué me hace pensar que podré en la tercera?
-No tienes que matarlo tú... Ya me haré cargo yo...
Tanjiro suspiró cuando los demás lo volvieron a ver.
-Yo fui quien le cortó la cabeza la primera vez y por lo que veo, debió ser Gyuu quien lo hiciera la segunda vez.
-¿Quieres decir que Gyuu me va a reemplazar en esa misión?
-No, el punto es que debes ir a esa misión, pero seré yo quien le corté la cabeza, no tú...
-¿Cómo puedes afirmar que puedes cortarle la cabeza dos veces?
-No puedo afirmarlo, pero... Si llega ese momento y no lo consigo, entonces dejaré que me mate. No aceptaré objeciones, ese tema no está a discusión.
Después de la plática, todos se retiraron, excepto Kyojuro que siguió a Tanjiro y llegó a su espalda.
-¿Piensas irte sin despedirte ni nada?
-Rengoku-san...
El mayor le jaló de la mano y lo llevó hasta la casa de los Rengoku, la recordaba bien, pero no la había visto desde su primera vida.
Ese día no estaban Senjuro ni Shinjuro, y para colmo Kyojuro lo seguía jalando sin decir nada.
-¿Rengoku... san?
El mayor cerró la puerta detrás de él y Tanjiro pudo ver el futón detrás de si, no sabía lo que estaba pasando en ese justo momento.
-¿Que estamos?...
Cerró la boca cuando el mayor dejo caer su capa al piso, se tronó los dedos y avanzo directo a él, tuvo miedo de que lo golpeara, en cambio sintió una dulce caricia en su mejilla.
-Me parece que tú me debes algo desde la primera vida, mi muchacho.
El rubio se agachó y le plantó un beso lento haciendo que se sonrojara por el contacto, segundos después su ropa le estaba siendo arrebatada con premura.
-¡Espera!
-¿Piensas que voy a esperar otra vida?
El mayor se acercó y le retiro el haori por completo, luego le quitó los zapatos y pantalones mientras Tanjiro estaba nervioso y recostado sobre el futón, sus mejillas estaban rojas al verlo actuar de esa forma y luego eso...
Kyojuro le dio un beso en el cuello y termino de retirar la última prenda de ropa que le quedaba...
Estaba acostado, desnudo y a la merced del Pilar de la Flama, la lengua del mayor le recorría todo el cuerpo, desde su cuello hasta la punta de sus pies, el de cabellos burdeos estaba nervioso y avergonzado por los pequeños sonidos que salían de su boca, no fue hasta que sintió la cavidad bucal de Rengoku saboreando su miembro que soltó un grito y trató de ahogarlo sin conseguirlo.
El mayor succionaba con fuerza y acariciaba los pezones de Tanjiro provocando esas sacudidas y contracciones en el cuerpo del menor.
Su frente se bañó en el sudor mientras que finalmente dejaba que su semen saliera, dejando escuchar un sonido gutural al terminar de correrse.
Su pecho subía y bajaba, sus manos le cubrían los ojos por la vergüenza de hacer un sonido tan erótico.
-Kyojuro... Yo...
El mayor se retiró lo que le restaba de ropa mientras el otro se relajaba por unos segundos...
-Esta noche no vas a dormir y no te prometo que puedas viajar a misiones pronto.
El menor se sonrojo al escucharlo hablar y se encogió en posición fetal de lado, sus ojos estaban abiertos de la sorpresa cuando sintió que alguien se ponía a su lado, un dedo recorrió su espalda erizandolo hasta la médula de los huesos.
Pero pronto sintió como lo movían de la cintura para dejarlo de nuevo boca arriba, Kyojuro le jaló de las piernas abriendolas y quedando entre ellas, estaba desnudo, Tanjiro lo recorrió con la mirada, su miembro era imponente, estaba erecto, pero lo que lo dejó paralizado fueron esos ojos lujuriosos que lo miraban de frente y sin reparos, lo vio lamerse los labios y luego acercó un dedo a la comisura de sus labios, los lamió un poco y finalmente los llevo a la entrada de Tanjiro.
Primero uno de ellos, el pequeño sintió un intenso dolor y tomó la mano de Kyojuro para indicarle que se detuviera, pero el contrario lo miró con dulzura.
-Sobran las palabras Tanjiro, en algún momento tendré que entrar y es mejor si respiras profundo y te acostumbras a el, te prometo que lo haré despacio.
Estaba siendo algo salvaje, lo sabía, pero aguanto dos vidas sin tocarlo, estaba en su límite, más al recordar que supo de Tanjiro desde una mañana con un sueño, luego todo fue real y a la siguiente semana, soñaba con hacerlo suyo justo como en ese momento.
El dedo entró sacando un pesado gemido de dolor en Tanjiro, pero recibió un dulce beso en su frente y se relajó, los movimientos dejaron de dolerle hasta que sintió otro calambre en el abdomen por la segunda intrusión, se encogió un poco, pero Kyojuro le regaló besos cerca de su ombligo para tranquilizarlo, con el tercer dedo, el dolor desapareció justo cuando el mayor presionó en un lugar que le sacudió de nuevo.
-Nghaaa
-Asi que ese es tu punto dulce...
-No hables, me apena más...
-Escucha Tanjiro, quiero que me mires, quiero que veas cuando entro en ti.
El menor se sonrojo pero dejo de acultar sus ojos en sus manos y volvió la vista al mayor recorriendolo con la mirada, vio las pequeñas gotas de líquido preseminal escurriendo de él y estiró su mano para tocarlo.
-Estoy listo Kyojuro, puedes continuar.
El mayor sintió placer cuando la mano de Tanjiro lo tocó, después de unos segundos más tomó la punta de su pene y la ajusto a la entrada de su amado, sintió como el cuerpo del menor se abría con el paso de su miembro y se ajustaba a él dejándolo entrar y sintiendo oleadas y oleadas de placer al llegar hasta el fondo.
Un sonido ronco escapó de su garganta al darse cuenta que finalmente estaba adentro de Tanjiro.
-Ya puedes... moverte Kyojuro... -Miró al niño que estaba agitado por la misma razón y empezó con movimientos lentos hasta enterrarse lo más profundo que pudiera, luego el ritmo aumento hasta desplegarse frenéticamente y no poder contenerse cuando los gemidos agudos de Tanjiro le rogaban que siguiera.
-¡Ah! ¡Por favor más!
-¿Quién era el que parecía no querer?
Le sonrió de forma lujuriosa sonrojandolo hasta llegar a tocar ese lugar que a Tanjiro le gustaba tanto.
El menor soltó un fuerte grito
-¡Aaa!
El líquido seminal del pelirrojo salió con fuerza chorreando en su abdomen, Kyojuro lo miraba y sabía que estaba lejos de terminar, pero si Tanjiro quería detenerlo... El lo haría.
-Kyojuro...
-Esta bien... No tienes que forzar te a más...
-No es eso...
-¿Mmm?
-Por favor cógeme por detrás...
El mayor se rió con dulzura, le dio vuelta poniéndolo en 4 y siguió entrando y saliendo con velocidad, suspiró cuando Tanjiro vio el escritorio lleno de libros frente a él y recargó sus manos en el, estuvo a un paso de correrse cuando su niño adorado se empujó con fuerza hacia atrás mientras el embestia con velocidad, chocando y haciéndolo alucinar del placer.
No fue suficiente, se dieron la vuelta, ahora Kyojuro fue empujado al futón con fuerza y se sorprendió al ver cómo el pelirrojo se montaba sobre el, ahora el se movía mientras sus grandes manos apretaban la cintura de Tanjiro y este reposaba las palmas de sus manos en el pecho.
Shinjuro caminaba con su hijo cuando reconoció algunos sonidos de su primogénito, sonrojado se dio la vuelta y tomo la mano de su hijo menor, a pesar de que las preguntas eran directas, las evadió todas llevandoselo de allí.
Kyojuro y Tanjiro seguían adentro de la habitación a un paso de llegar a un pleno orgasmo cuando el pelirrojo suspiro de nueva cuenta y le dijo....
-Correte... dentro de mi..
-Tus deseos son órdenes.
Ambos se corrieron al mismo tiempo y segundos después Kyojuro se acostó a lado de Tanjiro.
-Te amo, necesite sufrir dos veces el dolor de perderte para entenderlo.
-Tambien te amo.
Un mes después... Ambos estaban en la pelea del tren infinito, Akaza se sorprendió de que conocieran sus movimientos, estaba peleando contra los dos y de pronto, Tanjiro le atravesó el abdomen y Kyojuro le cortó cerca del ojo.
Unos segundos después dos espadas le atravesaron la garganta haciendo que su cabeza volará y finalmente se hiciera cenizas.
-Ve con tu amada -Tanjiro le susurro y Akaza cerró los ojos llenos de lágrimas, por fin la vería.
Al poco tiempo, Muzan fue derrotado, nadie perdió ninguna extremidad pese a lo heridos que estaban y tampoco perdieron a los pilares, aunque si hubo bajas en el cuerpo de cazadores de demonios.
5 años después, Tanjiro y Kyojuro estaban en su propia casa, encerrados en su habitación, abrazándose, besándose y algo más...
-Una vez para quererte, dos veces para amarte y tres para pertenecerte
-Esta vez eres mío Tanjiro.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top