#PirateBabyDayIII
JONG HWA
contenido delicado, leer con discreción
Hongjoong no sabía qué hacer. Seonghwa lo había tomado de la manga de su suéter y no lo había soltado desde entonces, pero tampoco decía nada. Por la quietud del mayor, Hongjoong intuía que nadie más estaba herido, pero eso no quitaba que se sintiera terrible por el aspecto tan destruido de su hyung.
Hongjoong intentó pararse, pero Seonghwa volvió a desesperarse, negando con la cabeza rápidamente al mismo tiempo que sus ojos volvían a llenarse de lágrimas.
―Sólo iré a buscar el botiquín ―susurró Hongjoong señalando el pasillo con la cabeza―. Tienes sangre seca en el rostro y en las yemas de tus dedos ―señaló tomando delicadamente la muñeca del mayor.
Seonghwa jadeó por el dolor en ella y asintió lentamente, volviendo a cerrar los ojos y recostar la cabeza. Hongjoong se levantó, pero lo miró por unos segundos más antes de irse a buscar dicho botiquín. El pesar en su pecho le estaba matando al igual que la terrible incertidumbre. Pasó por las habitaciones de los miembros, preocupado, vio que todos estaban dormidos a excepción de Yeosang.
―Buenos días ―murmuró Hongjoong, viendo al menor en la cama con su celular―. Despierta a los demás, por favor.
Yeosang asintió soltando gemidos de placer al estirarse. Sin percatarse del tono en la voz de Hongjoong.
Hongjoong tomó el botiquín y volvió a la cocina. Seonghwa seguía igual de quieto.
―Hwa, vamos a nuestra habitación. ―Hongjoong susurró arrodillándose delante del mayor―. Yo hablaré con el mánager, pero tú no puedes salir así hoy.
Seonghwa no le respondió, no se movió, no parpadeó. Hongjoong comenzaba a asustarse cada vez más mientras intentaba convencerlo de irse, pues Seonghwa no estaba reaccionando a ninguna cosa que le dijera.
―Hwa...
Hongjoong tomó un poco de algodón y limpió la sangre seca en el rostro de Seonghwa, luego tomó sus dedos y, manipulándolos con nucho cuidado, comenzó a limpiarlos también. Una de las muñecas de Seonghwa parecía estar rota, la otra se veía un poco mejor.
Hongjoong miró a su alrededor y la sangre en el sofá hizo que tuviera náuseas. Tomó unos cojines y los puso encima tratando de ocultarla.
Pocos minutos después, la casa, que había estado en silencio, se llenó de ruido. Los miembros se levantaron y comenzaron a asearse; Hongjoong no quería que viesen a Seonghwa en ese estado tan vulnerable, pero el mayor seguía sin reaccionar y Hongjoong no quería levantarlo a la fuerza, no cuando parecía que se rompería al primer toque. Sin embargo, también necesitaba de alguien, necesitaba que le dijesen qué hacer, Hongjoong era el líder, se suponía que podía lidiar con todo, pero esto... Esto era demasiado. No podía llamar a nadie, Seonghwa no quería, pero tampoco podía dejar las cosas así.
Alguien había lastimado a Seonghwa y debía pagar por ello.
―Hwa, por favor ―Hongjoong tomó el mentón del mayor e hizo que este le mirase―. Háblame, dime qué hacer, hyung.
Seonghwa parpadeó varias veces y se alejó del toque ajeno inmediatamente. Sus orbes oscuros recorrieron los alrededores con un profundo horror, como si estuviese buscando algo. Hongjoong boqueó sin saber qué hacer, la respiración ajena comenzó a tornarse irregular y los temblores en su cuerpo aumentaron drásticamente, Hongjoong no sabía qué había activado esa terrible reacción, pero lo puso alerta.
Fue cuando se escucharon los pasos a sus espaldas y las voces bulliciosas que el estado de Seonghwa empeoró.
“Hyung, hyung”
Seonghwa comenzó a negar desesperadamente con la cabeza y las lágrimas bajaron por sus mejillas cual cascadas. Jadeó y, sacando fuerzas de algún lado, gritó tan alto como pudo.
―¡No! ¡No!
Todos tenían que alejarse, él no quería.
Seonghwa no estaba al tanto de lo que estaba sucediendo a su alrededor en realidad, veía negro, pero las voces frívolas llamándolo ponían su piel de gallina y el terror lo consumía como el fuego.
―¿Hyung? ―La voz de Mingi sonó asustada cuando llegó a la cocina, San paro en seco detrás suyo.
Seonghwa estaba luchando por apartar a Hongjoong, pero el menor no cedía. Seonghwa se estaba lastimando en su intento por quitárselo de encima y huir.
―¡Ayúdenme a sostenerlo! ―Hongjoong les gritó fuerte y desesperado―. ¡Se está lastimando!
Seonghwa seguía negando y llorando, empujando a Hongjoong aunque su muñeca estuviera rota y su cuerpo doliera; él no quería que se le acercaran. Él quería desaparecer. Con desesperación, el menor intentó sujetarlo, pero era terriblemente difícil hacer que este dejara de lastimarse.
Mingi sujetó los brazos de Seonghwa por detrás y cuando el resto de los miembros llegó debido al escándalo, el mayor seguía retorciéndose.
―¡No, suéltame, suéltame! ¡Déjame ir!
Las respiraciones agitadas de Seonghwa comenzaron a disminuir y, entonces, fue demasiado. Seonghwa se desmayó.
San, Mingi y Hongjoong se miraron a los ojos completamente perturbados, pero ninguno alzó la cabeza cuando Yeosang, Yunho y Wooyoung llegaron a la cocina a tropezones por los gritos y el llanto.
Mingi soltó lentamente el cuerpo de Seonghwa y su mirada vagó por el cuerpo ajeno completamente sorprendido y aturdido por lo que veía.
Wooyoung se acercó lentamente a ellos y el miedo y la confusión se mostró en sus expresiones.
―¿Qué le pasó a hyung? ¿Por qué está tan... tan lastimado?
Fue el primero en preguntar, con la voz quebrada y cayendo de rodillas frente a ellos.
Hongjoong los observó a todos, estaban completamente sorprendidos y horrorizados por el aspecto de Seonghwa. «¿Cómo es que nadie sabía lo que le había pasado?»
La mano temblorosa de Wooyoung tocó el moretón en el ojo de Seonghwa con cuidado y sus ojos se llenaron de lágrimas al instante. Recorrió su cuerpo y se horrorizó aún más cuando vio la sangre y los algodones sucios en el suelo.
―¿Hyung?
La voz baja y ronca de Jongho hizo que todos voltearan hacia él. El menor ingresó a la cocina con los sus ojos hinchados y los cabellos despeinados mientras sostenía su cabeza con una de sus manos, pues la resaca, al igual que a muchos de ellos, lo estaba matando.
―¿Por qué están todos reunidos con esas caras de velorio...? ―preguntó distraído, dando unos pasos hacia ellos.
Todos se quedaron en silencio. Hongjoong parpadeó varias veces sin quitarle la vista de encima y, de un momento a otro, Jongho era observado por seis pares de ojos confundidos y perturbados.
―¿Q- qué?
Jongho no lo sabía, pero tenía ligeros manchones de sangre en la barbilla y las manos.
―¿J- Jongho? ―preguntó Hongjoong con la voz quebrada. En la cabeza de Hongjoong no cabía el hecho de Jongho pudiera haberle hecho daño a Seonghwa, no tras ver lo mucho que se querían esos dos, los hechos parecían tan alejados de la realidad.
El menor no entendía porqué todos estaban viéndole de esa manera tan extraña. Bufó molesto y caminó hasta ellos con seguridad, pero ver a la persona que Wooyoung estaba escondiendo con su cuerpo hizo que Jongho se detuviera.
―Seonghwa hyung... ―jadeó sorprendido.
El rostro de Seonghwa estaba golpeado y Jongho no sabía porqué, quiso acercarse a él, pero Mingi se puso delante y no pudo avanzar. La mirada helada del rapero hizo que Jongho se sintiera sumamente pequeño.
―¿Qué fue lo que pasó anoche? ―inquirió Hongjoong.
―Anoche bebimos de más... ―comenzó a decir Yunho―. Yo- fue- fue mi culpa, traje las cervezas y... estuvimos bebiendo y jugando hasta tarde, fue divertido y más cuando hyung se dio cuenta y nos mandó a dormir a todos ―Yunho soltó una risilla que murió rápidamente―. P- pero...
Nadie dijo nada. Todos se fueron a sus camas luego de la ducha obligatoria.
―¿Qué hiciste, Jongho? ―La pregunta de San interrumpió el silencio que se hizo tras las palabras de Yunho.
Jongho no supo a quién mirar ni qué decir, pues no recordaba nada de lo que había sucedido la noche anterior, llevó ambas manos a su cabeza apretándola con fuerza, pero no lograba recordar ni una sola cosa. Fue entonces que Jongho notó la sangre en sus manos, «¿por qué tenía sangre en las manos?»
Wooyoung soltó una risa nerviosa y negó con la cabeza, pero la sangre en las manos del menor hizo que se quedara callado.
―Jongho, ¿tú- lastimaste a hyung? ―La pregunta de Wooyoung sobresaltó a Jongho.
Seonghwa estaba desmayado sobre el sofá, con la ropa mal puesta, la cara golpeada y algunas heridas en el cuello y las muñecas, pero Jongho no había sido ya que ellos no jugaban así. ¡Lo recordaría! Incluso borracho, Jongho jamás lastimaría a Seonghwa... A su hyung. A su hyungie...
Mirando sus manos, pequeños recuerdos llegaron de repente. Jongho estaba recostado en la cama oliendo el delicioso aroma de Wooyoung. Jongho estaba en la cama tocando el delicado cuerpo de Wooyoung. Jongho estaba en la cama gimiendo el bonito nombre de Wooyoung, pero Wooyoung estaba llorando, Wooyoung le estaba suplicando que parara. La visión de Jongho se tornó borrosa mientras escuchaba las débiles súplicas de Seonghwa en su oído, diciéndole que le dolía.
Le dolía mucho.
Jongho jadeó horrorizado y negó con la cabeza intentando quitar esos recuerdos; no podían ser reales bajo ningún término. Sintió náuseas, patadas en el estómago, agujas en las uñas, Jongho no cabía en su estupor.
De un momento a otro, Jongho cayó sobre su espalda gracias una fuerte tacleada. El pequeño cuerpo de Wooyoung comenzó a sacudirlo por el cuello de la camisa mientras le gritaba en la cara, suplicándole una respuesta. La rabia en su voz, la ira en sus ojos, la fuerza en sus manos... Jongho abrió la boca, pero enmudeció.
Wooyoung soltó su ropa cuando la mirada ajena le dio una respuesta. Claro que había sido él.
Todos estaban atónitos. Ninguno tenía idea de qué decir o hacer a continuación.
―¿Por qué? ―inquirió Hongjoong, su ceño estaba fruncido y tenía una mueca de agustia en su rostro―. No entiendo... Él y tú... ―Hongjoong sujetó al mayor por los hombros y lo atrajo a su cuerpo, buscando protegerlo.
No le cabía en la cabeza.
Yunho, Yeosang, San, Mingi y Wooyoung... ¿Ninguno se había percatado? Hongjoong los miró enojado, culpándolos también. ¿Nadie escuchó un sólo ruido? Hongjoong bajó la mirada al delicado cuerpo del mayor y las marcas en este hicieron que sintiera ganas de llorar otra vez. No podía encontrar una razón por la que Jongho le hiciera aquello a su matz, a su amigo.
Jongho era arisco y algo gruñón, pero siempre tenía una mirada cálida para su hyung, Jongho siempre buscaba la compañía del mayor, sus besos y sus cumplidos, aunque fingiera que odiaba todo eso. Jongho se volvía una masa de plastilina rosada cuando se trataba de Seonghwa, pero entonces, ¿qué había pasado?
―Hyung... Lo siento, no sabía lo que estaba haciendo ―Jongho murmuró sujetándose la cabeza ante los fuertes dolores que estaba sufriendo―. Hyung, lo siento.
―¡Ningún lo siento va a arreglar lo que hiciste! ―Hongjoong le gritó fuerte y claro―. ¡¿Cómo pudiste ser tan cruel?! ¿Cómo pudiste lastimarlo así?
―H- hyung, hay que llamar a la policía ―dijo Mingi interrumpiendo los gritos de Hongjoong, temiendo que fueran a despertar a Seonghwa.
Ante aquellas palabras, Yunho y Yeosang lo miraron con el ceño fruncido. «¿La policía?» No se estaban enterando de lo que estaba pasando. Apenas podían comprender que Jongho, en un estado violento, había golpeado a Seonghwa hasta dejarlo así. Aunque tampoco podían ver las marcas en su cuello ni sabían acerca de la sangre en el sofá.
―¿La policía? ―Jongho jadeó asustado.
Jongho no había sido consciente de la dimensión de sus acciones hasta la mención de la policía. No había sólo golpeado a Seonghwa, también había abusado de él y las imágenes en su cabeza eran cada vez más y más nítidas.
La pesadez en su pecho llenó sus ojos de lágrimas.
―¡Esperen! ―el grito de Hongjoong sobresaltó a todos, incluso a San quien estaba tomando el teléfono fijo para marcar a la policía―. Mierda. Seonghwa no quería que la policía se involucrara... ―dijo con pesar, pues lo que más deseaba era que sacaran a Jongho de su vista, verlo esposado por lo que había hecho, pero Seonghwa se había mostrado tan firme y tan asustado―. Sería humillante...
Yunho, Yeosang y Wooyoung se miraron entre sí y les cayó la ficha al mismo tiempo.
Seonghwa se removió en sus brazos y soltó quejidos bajos debido al dolor de su cuerpo. Hongjoong tomó su rostro y lo giró cuidadosamente hacia él para que, si abría los ojos, no viera a Jongho.
―Hwa, por favor, dime qué hacer. No sé qué hacer ―murmuró Hongjoong.
Apenas escuchar la voz de Hongjoong, Seonghwa comenzó a temblar.
―M- me... ―Seonghwa trató de ocultar su rostro en el pecho de Hongjoong, pero no abrió sus ojos, ya que sabía que todos estaban allí, podía escuchar sus respiraciones irregulares― diles que me caí... No llames a nadie, por favor, no llames a nadie...
Wooyoung se había acercado nuevamente a ellos cuando vio que su hyung se estaba moviendo, por lo que, al escuchar esas palabras, sollozó. Seonghwa, al escucharle, también lloró y se hizo más pequeño contra el cuerpo de Hongjoong.
Seonghwa se sentía tan humillado, tan sucio.
Seonghwa no quería ver a Wooyoung, no quería ni escucharlo. Porque Wooyoung era tan lindo y encantador.
Había sufrido por su culpa.
―Diles que se vayan, no quiero que me vean... No quiero, ¡diles que se vayan! ―ante sus espasmos y sus gritos, Wooyoung intentó tomarlo para que dejara de lastimarse las manos, pero el mayor lo apartó violentamente―. ¡Alejen Wooyoung de mí! ¡No quiero verlo, lo odio! ¡Lo odio, lo odio!
Wooyoung se apartó sólo cuando oyó esas palabras llenas de rencor y no pudo entender porqué, su hyung favorito, a quien amaba tanto, lo estaba apartando y gritaba que lo odiaba.
―Déjenme... ―la voz de Seonghwa se apagó nuevamente y sólo sus sollozos completamente desgarradores se oyeron en toda la cocina.
Wooyoung, aturdido, los miró a todos buscando una explicación, pero no lograba comprender porqué el mayor había reaccionado así.
―Hyung... Hyung, ¿por qué? Yo no te hice daño, hyung...
Jongho se desmoronó ante las súplicas del mayor, pero pareció darse cuenta de algo. Se acercó a ellos, apartando con fuerza a San cuando este quiso detenerlo, Mingi lo sostuvo a tiempo antes de que llegara a Seonghwa, pero estaba tan cerca.
―Hyung.
17102022
y entonces nos vamos todos a putazos (contra jongho)
Yunho, Yeo y Woo fueron los últimos en darse cuenta de lo que había pasado, aunque todos estaban en shock. Sólo imaginen despertar y que una persona que amas está toda lastimada, es realmente fuerte.
Hwa, en este momento, está culpando a Woo TAMBIÉN, no es que sólo la tiene contra él. Es solo que no puede siquiera pensar en Jongho, por eso no se alude a él en ningún momento.
Jongho ni siquiera es capaz de comprender por completo lo que pasó, es decir, la dimensión de sus actos
Ya veremos en la 4ta parte cómo avanza esto
En otras noticias, pueden creer que en menos de 11 mil visitas llegaremos a 300K? ME DA ALGO, ¿será antes de fin de año? 👀💖
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