#300k! Mingi Special
Yeo Gi (pero todos han salido con Mingi)
Mingi se percata de que todos los amigos de Yeosang son sus exs, pero al mismo tiempo, Mingi y Yeosang no se han comunicado correctamente.
La primera vez que Yeosang le presentó a alguien, Mingi estaba igual de nervioso que en una cita con sus suegros, Mingi era temeroso respecto a su primera impresión y no soportaba la idea de caerle mal a las personas que Yeosang apreciaba. Por fortuna, en esa ocasión no fue tan complicado, su cuñada no fue hostil ni maleducada, de hecho, pareció caerle muy bien.
Sin embargo, ahora Yeosang le presentaría a todos sus amigos. Le había dicho que eran seis, e iba a organizar una reunión para beber y mirar una película en el departamento. Yeosang decía que si estaban todos sería menos incómodo, que la atención no se centraría en Mingi y que podría interactuar con ellos sólo si lo quería, sin presión.
Mingi todavía estaba un poco asustado, pero trató de ocultarlo (aunque sin éxito). Yeosang le sonrió besando su mejilla muchas veces, jugando con sus manos inquietas y diciéndole que era perfecto y que no había nada por lo que temer.
Sus amigos no eran unos patanes, así que Yeosang estaba seguro de que no tratarían mal a Mingi.
―¿Esa es la ropa que vas a usar?
Mingi miró sus prendas con atención y asintió lentamente, alzó la mirada para ver al mayor, pero este tenía una mueca.
―No es necesario que seas tan formal.
Mingi hizo un pequeño puchero. Él era profesor, por lo que estaba acostumbrado a usar ese tipo de vestimenta, y mentiría si dijera que no le gustaba cómo le lucían.
―Me gusta usar trajes... ―murmuró lento, arrugando la camisa celeste entre sus manos―. Pe- pero tienes razón, voy a cambiarme antes de que lleguen ―dijo echando a correr (aunque su pie estuviera adolorido) a su habitación.
Yeosang boqueó arrepentido, pero no dijo nada más cuando escuchó al menor arrastrar su perchero para buscar otras cosas para ponerse. La ropa ajustada a la cintura lucía muy bien en Mingi, por lo que le gustaba mucho usar cinturones, o prendas que se amoldaban a su cuerpo.
―¿En qué estaba pensando? Incluso me puse una corbata ―rio Mingi, volviendo a la sala.
Yeosang mordió ligeramente su labio inferior. Mingi se había cambiado la ropa ajustada por unos shorts que casi llegaban a sus rodillas y una camiseta básica ancha.
―Te ves muy bien ―murmuró Yeosang volviendo a sonreír.
Mingi infló sus cachetes y se acercó al mayor para juntar sus labios en un besito casto. Ambos rieron y volvieron a la cocina para terminar de servir los snacks.
―¿Sí pusiste las cervezas en el refrigerador?
―¡Sí, señor! ―respondió Mingi en un tono encantador.
―La próxima semana deberías presentarme a tus amigos entonces, Mingi ―murmuró Yeosang, rozando el brazo desnudo de Mingi con el suyo para sentirlo más cerca.
Mingi cerró la bolsa de papitas tras llevarse una a la boca y miró a su novio con sus ojitos muy abiertos.
―¿Quieres conocer a mis amigos? ¡Tengo muchos! ―Mingi empezó a contar con los dedos―. ¡Diez!
Yeosang boqueó.
―Sólo los más cercanos.
―Son diez... pero la mitad de ellos no están en la ciudad o en el país. Cuando quieras te presentaré a Minjae, Junmin, Sumin, Jinsik y Hyunwoo.
Yeosang soltó una risilla al ver lo emocionado que el menor se puso ante la mención de conocer a sus amigos.
―¿De dónde conoces a tanta gente?
―Un club.
El timbre comenzó a sonar cuando Yeosang iba a golpearlo suavemente en el trasero, miró hacia el pasillo, pero antes de ir a abrir, dejó que su mano siguiera el curso automático y golpeó los grandes glúteos de Mingi.
Mingi rio bajito y caminó cojeando detrás de él para poder ir a saludar a los recién llegados. El timbre sonó nuevamente, de manera insistente, y Yeosang supo al instante cuál de sus amigos podría ser.
―Heeey ―gritaron del otro lado con un tono agudo, que murió al instante de ver al chico alto detrás de su mejor amigo.
Los ojos de Wooyoung no fueron discretos cuando miraron a Song Mingi con sorpresa. La persona a su lado se asomó a ver, curioso por saber la razón de que su novio haya quedado en shock de esa manera.
Mingi jadeó viéndolos a ambos y cubrió su boca con ambas manos.
―Mangi...
―Gigi...
―¿Chicos?
―Burro ―jadeó Mingi cuando todos se quedaron callados y voltearon a verle como si él fuera el principal sospechoso de un crimen.
Wooyoung soltó una risilla.
―Yeosangie... ¿Él es tu novio? ―preguntó Hongjoong entrando a la casa.
Yeosang ladeó ligeramente la cabeza.
―Sí, ¿por qué? ¿De dónde lo conocen?
Yeosang no alcanzó a terminar sus preguntas cuando el timbre de la casa volvió a sonar y él se estiró unos pocos centímetros para abrir la puerta, pues seguían en el pasillo. Yunho y San saludaron con emoción, pero se quedaron inmediatamente callados al ver a las personas dentro de la casa.
Mingi estaba completamente rojo y los miraba ansioso, recorriendo de pies a cabeza a cada uno de ellos. San y Yunho lucían confundidos, pero no parecían alternados, Hongjoong y Wooyoung, por el contrario, no estaban siendo muy discretos.
―Pasen, chicos...
Yeosang los condujo a la sala y Mingi los siguió tímidamente, arrastrando sus pies casi perezosamente por la alfombra. Miraba las espaldas de todas esas personas y no podía creerse lo que estaba viendo, es decir, un ex puede ser coincidencia, pero cuatro exes en la misma casa con su actual novio allí era muy surreal. Tenía muchos años que no veía a algunos de ellos, pero jamás podría olvidar sus rostros.
―Preparamos aperitivos y Mini trató de hacer pizza, pero se le quemó la salsa... ―dijo Yeosang, recibiendo una queja adorable de parte de Mingi por haberlo avergonzado―. Así que pedimos delivery ―rio bajito, arrugando la nariz.
Mingi seguía parado en la división que había entre la cocina y el living, movía su piesito izquierdo en pequeños círculos sobre la punta de sus dedos, viéndoles con algo de duda.
―¿De dónde conocen a mi novio y por qué les tiene miedo? ―preguntó Yeosang cuando notó que todos sus amigos estaban viendo a Mingi atentamente.
Yeosang no los había presentado por el silencio incómodo que se había formado en el pasillo, pero al escuchar esos suspiros de sorpresa pudo imaginar que ya se conocían. Aunque su preciado novio era muy asustadizo y le inquietaba que haya tomado tanta distancia de ellos.
―¡No les tengo miedo! ―refutó Mingi azotando su talón contra el suelo, cruzado de brazos.
San y Wooyoung soltaron una risita.
―Qué adorable ―murmuró Yunho, riendo también.
Yeosang escuchó al menor quejarse suavemente por azotar su pie lastimado. No comprendía y todavía no sabía de dónde conocían a Mingi, por lo que estaba muy curioso. Estaba apunto de preguntar de nuevo cuando el timbre sonó, esta vez fue Mingi el que se apresuró a abrir la puerta.
Yeosang miró a sus amigos y alzó los brazos, preguntando en silencio.
―Oh, mmm, lo siento... creo que nos equivocamos de dirección... te dije que le preguntaras a Yeosang...
Yeosang escuchó la voz de Seonghwa y se levantó rápidamente para ir a recibirlos y decirles que estaban en el lugar correcto.
Seonghwa lo miró, abrió su boca y luego miró a Mingi. Jongho, a su lado, también se vio muy confundido.
―Pasen, chicos. Hola.
(...)
Mingi estaba sentado en el suelo, viéndolos a todos en silencio, mientras comía sus papitas favoritas lentamente. Su novio estaba sentado a su lado, ya habían llegado todos sus amigos, pero no había tenido la oportunidad de presentarlos adecuadamente.
―Minki ―comenzó Yeosang, pellizcando suavemente su mejilla por unos segundos para llamar su atención―, de izquierda a derecha, ellos son Seonghwa, Hongjoong, Yunho, San, Wooyoung y Jongho. Chicos, él es mi novio Mingi.
Todos sonrieron alzando la mano con una pequeña reverencia. Mingi hizo pucheros, pero los saludó de regreso.
―Parece que todos se conocen... ―murmuró Yeosang al ver la carita consternada de su novio.
―¿De dónde los conoces tú? ―preguntó Mingi frunciendo su linda nariz.
Yeosang boqueó.
―Hwa y Jongho son del trabajo, a San y Wooyoung los conocí en un bar gay, Yunho es de la universidad y Hongjoong es mi vecino. Un día nos reunimos todos en Navidad porque estábamos solos... Somos muy cercanos desde entonces ―sintetizó Yeosang sonriendo al final.
Mingi abultó sus labios y siguió teniendo esa expresión dudosa.
―¿Y tú? ―alargó Yeosang, pellizcando suavemente el mentón de Mingi.
Mingi se puso colorado y tomó la mano de Yeosang, el mayor se percató entonces de que las grandes manos de su novio estaban temblando ligeramente.
―Él es mi ex de preparatoria ―dijo Mingi apuntando a Yunho, todos voltearon a verle con sorpresa―, él es mi segundo ex, salimos desde mis veinte a mis veintidós ―apuntó a Wooyoung y este le guiñó el ojo, entonces todos miraron a Wooyoung también.
―¿Todo en orden, preciosa? ―dijo Wooyoung, riendo después.
Yeosang comenzaba a pensar en que debía conseguir un sujetador de mandíbula porque abrir la boca de esa manera podría ser peligroso.
―Mucho sin verte, Princesa... ―dijo Yunho y rio cálidamente―. ¿Te sigue gustando ese apodo?
Mingi se puso colorado y asintió tímidamente, aunque hace mucho que nadie le decía Princesa.
Yeosang apretó la mano de Mingi y las cosas se pusieron más hilarantes cuando el menor apuntó a Hongjoong.
―Él es mi tercer ex, salimos por unos pocos meses, rompimos antes del verano del 2022 ―dijo Mingi rascando su mejilla con su dedito, luego señaló a Seonghwa y Jongho―. Con él y él tuve una relación poliamorosa, pero no funcionó muy bien... En ese entonces era muy inseguro... Por último, salí con San unos cuatro años, pero rompimos porque me engañó. Salvo él, todos rompimos en buenos términos ―dijo sonriendo, pero su mueca tembló cuando Yeosang le soltó la mano―. Tuve otros exes, y espero que no sean tus amigos...
Yeosang se tomó unos cuántos segundos para pensar en lo que Mingi había hecho.
Todos en esa habitación habían salido con su novio y eran sus amigos. Aunque hubieran llegado a su vida antes que él, de alguna forma se sentía raro e incómodo.
―Oye... No te engañé ―dijo San tratando de defenderse, interrumpiendo el silencio incómodo.
―Cierto, “accidentalmente” besaste y le apretaste el culo a ese chico ―señaló Mingi rodando los ojos.
―B- bueno, en ese entonces, nuestra relación ya iba de mal a peor.
―Eso no justifica un engaño, San ―dijo Jongho golpeando su frente.
Mingi se cruzó de piernas, haciéndose una bolita tímida. Sentía que todos estaban mirándole, pero no se atrevía a comprobarlo.
(...)
―¿Y... cómo les va a ustedes?
Ya habían pasado tres horas desde que todos llegaron al departamento de Mingi, estaban llenos y alcoholizados, por lo que ya arrastraban sus palabras al hablar.
―Bien... ―dijo Yeosang acariciando la cintura de Mingi por debajo de su ropa, el menor estaba a nada de dormirse, si es que no lo había hecho ya sobre su hombro―. Llevamos seis meses saliendo ―apuntó.
―Wow ―alargó Wooyoung golpeando suavemente su hombro disponible―. Ya es mucho tiempo, ¿y apenas nos presentas?
Yeosang soltó una risilla.
―Ya saben, es algo tímido.
Algunos asintieron y otros, como Yunho, sólo alzaron sus hombros. En preparatoria, Mingi no era tan tímido como lo veía ahora, era más juguetón y siempre parecía estar dos pasos delante de él.
―¿Y tuvieron sexo antes de que llegáramos? ―preguntó San llevando la lata de cerveza a sus labios―. No te hagas, lo vi caminar cojo.
Yeosang se puso colorado al instante, provocando risas en todos sus amigos.
―No preguntes eso, nuestro Yeosang es tan puro e inocente ―bromeó Seonghwa.
Las risas fuertes hicieron que Mingi se removiera.
―Hablando de sexo... Recuerdo la primera vez que vi a Mingi, él estaba con un grupo de tipos grandes y musculosos ―comenzó Hongjoong―. Estaba tan ebrio, pero a toda costa quería irse con el tipo grande con cara de delincuente ―rio―. Mi primera impresión de él fue que era un poco idiota, así que tuve que salvarlo, les dije que era mi primo y no les convenía tener sexo con él porque le habían pegado algo, no recuerdo qué. Terminó lloriqueando porque le había arruinado el polvo ―contó emocionado, apuntando al menor con su cerveza―. Tuvimos sexo en mi auto esa noche, luego, como ambos estábamos solteros, comenzamos a salir. Quizá por eso duramos poco, era mucho sexo salvaje.
Yeosang lo escaneó de arriba a abajo y se preguntó si alguna vez Hongjoong de verdad había sido tan descontrolado. Es decir, el Hongjoong de veintisiete años jamás habría tenido sexo con un completo extraño.
También le resultaba muy increíble que Mingi fuera lo que estaba diciendo.
―No lo creo ―interrumpió Yunho―. El sexo con Mingi siempre fue salvaje y mucho ―dijo abriendo sus brazos para darle énfasis a sus palabras―. Mucho. Incluso en preparatoria.
Jongho bajó la mirada a sus manos entrelazadas y luego miró a Seonghwa, ambos se rieron bajito y asintieron a las palabras de Yunho.
―Nosotros éramos dos, y hombre... No éramos suficiente. ―Jongho no se veía desanimado por sus palabras, aunque fueran un poco duras―. No nos malinterpreten, era muy bueno, pero...
―Es como si fuera un adicto al sexo ―dijo Wooyoung―. Yo podría considerarme ninfómana, pero Mingi está a un nivel mucho más alto.
San rio al ver la expresión hermética de Yeosang y golpeó su cabeza con la lata.
―Oigan, no hablen de eso frente a Yeosang... Puede ser incómodo.
Yeosang negó, sobando su cabeza con la de Mingi cuidadosamente.
―No, no... ―Yeosang miró a su novio con duda y mordió su labio inferior por un segundo―. ¿Sexo salvaje? ¿Mucho sexo salvaje? ―exclamó incrédulo.
Los chicos asintieron, pero Yeosang seguía incrédulo.
―No, Mingi es la persona menos sexual que he visto en mi vida. No tuvimos sexo hoy, tiene su pie lastimado ―aclaró señalando su pie donde Mingi tenía un pequeño esguince.
Una ola de carcajadas y qués sacudieron los oídos de Yeosang burlonamente.
―¿Menos sexual? ―dijo Seonghwa y golpeó a Jongho ligeramente en el hombro―. Amigo, con él tuvimos que aclarar que podía usar nuestras pollas mientras dormíamos si él tenía ganas en la madrugada.
―Uy, yo también ―dijo Wooyoung, chocando los cinco con Jongho y Seonghwa―. Cuando rompimos, lo que más extrañé fue despertarme sin Mingi saltando sobre mi polla.
―Esperen, esperen... ¿qué?
Yeosang los miró horrorizado y todos se quedaron en silencio inmediatamente al verlo así.
―¿Qué? ¿Qué pasa? ―dijo Yunho.
Yeosang recostó a Mingi en su regazo y miró su rostro tranquilo, dormido plácidamente. Todas esas cosas que sus amigos estaban ventilando de Mingi parecían memorias de otra persona, pues nunca habría imaginado que Mingi fuera un ninfómana.
―¿Mingi es pasivo...?
Todos lo miraron ladeando la cabeza al mismo tiempo y pusieron esa expresión incrédula que sólo le das a un idiota.
―Sí. ―Obvió San, mirando a los demás para corroborar que le dieran la razón―. ¿Es pasivo sumiso? Aunque en ocasiones tomaba el control, pero seguía siendo el que recibía... ¿En serio no han tenido sexo en seis meses? ―preguntó alterado―. Ay, amigo, si aguanta la abstinencia te debe de querer mucho...
Yeosang no pudo explicarlo, de hecho, tuvo que morder su lengua si no quería ser la burla de sus amigos en ese momento.
Yeosang recuerda la primera y única vez en que Mingi y él estuvieron apunto de tener sexo. Yeosang se había subido sobre su regazo, había tomado el control inmediatamente, frotándose contra la enorme erección en los pantalones de Mingi. Sin embargo, el menor dejó de responder cuando Yeosang comenzó a prepararse a sí mismo y la situación se volvió un tanto extraña. Mingi tembló ligeramente dudoso y Yeosang se detuvo de inmediato, creyendo que Mingi no estaba listo para tener sexo todavía.
Yeosang lo había visto desnudo, y Mingi lo había visto desnudo también, ambos habían masturbado al otro algunas veces y Mingi le hizo sexo oral una vez. La boca caliente de Mingi no había querido soltar su erección incluso cuando se corrió dentro y estaba temblando por los espasmos.
Yeosang no se dio cuenta entonces.
―Oh, por Dios ―jadeó llevando las manos a su cabeza.
―¿Qué pasa? ―preguntó Hongjoong, más alterado.
Yeosang abultó su labio inferior como Mingi solía hacerlo y señaló a su novio con ambas manos como si el problema fuera obvio.
―¡Creí que yo debía ser el pasivo!
La primera risa provino de Wooyoung, y fue entonces que todos comenzaron una enorme ola de carcajadas.
―¿Mingi activo? ―apuntó Yunho, riéndose con lágrimas en los ojos―. Fui su primera vez y lo hice tan adicto a una polla que jamás intentó cambiar de posición.
Wooyoung golpeaba su espalda mientras seguía retorciéndose de risa en el suelo.
―¡Ni siquiera conmigo lo intentó! Y se lo pedí una vez ―señaló Wooyoung sin poder parar de reír.
Yeosang no se lo podía creer.
―Mierda, Yeosang... ¿Pero, nunca te lo dijo? ―preguntó San―. Ow, te debe de querer mucho, se está preparando mentalmente para follarte porque cree que así lo quieres hacer.
Yeosang boqueó nuevamente y negó con la cabeza rápidamente.
―¡No! ―Yeosang bufó―. Quiero decir, yo creí que... Es que él es enorme y parece tan...
Las risas no pararon.
(...)
De la reunión con sus amigos, habían pasado dos días.
Mingi estaba somnoliento cuando le abrió, rascaba la parte superior de su cabeza tiernamente. Yeosang lo había ido a visitar muy tarde, había llevado helado de chocomenta y un juguete que consiguió en una máquina de un dólar.
―Qué lindo eres, Yeoyeo ―murmuró Mingi besando los labios de Yeosang en un piquito dulce―. Gracias por el postre.
―No es nada, mi amor.
Además del postre, Yeosang había pasado por la farmacia.
―¿Quieres quedarte a dormir, mi vida? ―preguntó Mingi buscando los tazones para poder servir el heladito de chocomenta.
―Claro, mi amor ―Yeosang asintió y se rio de sí mismo, se sintió un poco estúpido también.
Ambos se habían quedado callados respecto a sus preferencias sexuales por temor a no ser compatibles, pero si seguían así, sin avanzar, en algún momento las cosas irían mal. El sexo era importante en una relación, Yeosang lo sabía.
Mingi tenía sus ojitos hinchados por el sueño, pero se acercó a él con una hermosa sonrisa y lo tomó de su dedo, conduciéndolo a su habitación con los tazones de helado ya servidos.
―¿Quieres ver una peli o mejor hablamos? ―preguntó Mingi arrastrando sus piesitos.
Yeosang rio bajito.
―Ay, amor.
Mingi y Yeosang se sentaron en la cama y comieron helado mientras conversaban del trabajo y los pendientes para fin de año.
Los labios rojos e hinchados de Mingi estaban brillosos por el helado y la saliva, sus ojitos curiosos lo miraban de vez en cuando, buscando en su expresión si quería decirle algo. No es que Yeosang no lo visite en la noche de vez en cuando, pero temía que se tratara de la reunión de hace dos noches.
Mingi había tenido muchos novios en su vida, y sus relaciones siempre terminaban porque acababa sintiéndose insuficiente. Muchas veces en seis meses creyó que era insuficiente para Yeosang, pero él le gustaba mucho y quería intentarlo. Todavía no sabía si funcionaría.
Sobre todo porque Yeosang parecía ser pasivo y él no se sentía cómodo teniendo sexo así. La versatilidad nunca había sido una opción en su vida.
―Mini...
Mingi dejó su tazón vacío en la mesita junto a la cama y miró a su novio con atención. Yeosang copió su acción y se acercó más a él, tanto que pudo apoyar el mentón en su hombro.
―Amor...
―¿Vas a hablar del otro día? ―preguntó Mingi―. Es una gran coincidencia que mis ex sean amigos tuyos... pero si debo disculparme, lo siento...
Yeosang negó con la cabeza rápidamente y tomó la carita de Mingi entre sus manos, los ojitos de su novio se veían tristes y Yeosang no quería eso.
―No, no, eso está en el pasado... Yo también tuve ex parejas... tenemos casi treinta años, no pretendo que seas virgen, amor.
Mingi levantó la mirada y sonrió sintiéndose mejor.
―¿Entonces?
―Estoy algo triste... No hemos sido muy sinceros, Mini.
Mingi abultó su labio inferior con genuina duda y Yeosang se inclinó para tomarlo entre sus dientes. El beso hizo suspirar con sorpresa a Mingi, pero Yeosang no le dio tiempo de pensar.
El mayor recostó a Mingi sobre la cama, abriendo sus piernas para colocarse en medio. Su mano derecha sostuvo el muslo de Mingi y lo apretó sintiendo la piel suave y erizada bajo su toque.
Yeosang había tomado desprevenido a Mingi.
Los jadeos bajitos de Mingi chocaron en las orejas de Yeosang mientras él seguía comiéndose su cuello, dejando marcas que serían muy notorias después. No pasó mucho para que Yeosang sintiera que su erección crecía.
―Mini, quiero hacerlo... Quiero follarte hasta perder la consciencia.
12122022
En fin, hemos llegado a 300.000 y el número se ve enorme... Wow 🥺🥺
A veces veo users que recuerdo que están desde el principio de esta obra, que aunque haya pasado mucho tiempo aún siguen aquí
Y los que llegaron después, y me alegran muchísimo y son tan buenos también
No sé cuánto tiempo más siga subiendo historias, pero hagamos precioso el tiempo que tenemos 💖🥺
Gracias por siempre 💝
Pd: de lo anterior subido, ¿qué les urge que tenga continuación? Xq mucho está sin acabar... jejejej
-Key
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top