045

Mientras Hikaru se sentaba en la rama de un árbol, cerca de sus compañeros de equipo, de repente recibió los recuerdos de su clon.

Mientras lo revisaba, no pudo evitar hacer una palmada en la cara.

"¿Mi clon realmente se contuvo tanto? Les di armas y jutsus fuertes. Pero por alguna razón, decidió contenerse y jugar con ese Equipo". Sacudió la cabeza con decepción.

"¿Qué te pasa, querida?" Azumi preguntó preocupada.

"Nada," la breve respuesta de Hikaru.

"Está bien," decidió no profundizar más.

Mientras esperaban a que los clones regresaran, de repente escucharon un montón de metal golpeando justo detrás de los frondosos árboles.

¡Angustia! ¡Angustia! ¡Angustia!

"¿¡Que es eso!?" Dijo Sasuke, alarmado.

"Sasuke-kun, estoy asustado." Sakura dijo mientras sostenía el brazo derecho de Sasuke para sentirse segura.

"No te preocupes por eso, probablemente sean solo 2 equipos peleando", dijo Hikaru con indiferencia mientras apoyaba su espalda contra el árbol.

Cuando Sasuke escuchó eso, de repente tuvo una idea.

"¿Por qué no los emboscamos? Podemos tomar sus dos pergaminos, y tal vez uno de ellos sea el pergamino de la Tierra". Le explicó a su equipo.

Hikaru levantó la cabeza para mirar a Sasuke antes de decir: "No, esperemos a que los dos equipos se maten entre sí. De esa manera, serán mucho menos problemáticos".

"Eso es cierto..." murmuró Sasuke antes de que de repente escuchara una voz familiar de uno de esos equipos.

"¡Son fuertes! Hinata, aléjate, ¡me encargaré de ellos!" Esa voz sonaba extrañamente como la de Kiba ...

Al escuchar esa voz, Azumi abrió mucho los ojos y gritó: "¡Cariño!"

Justo cuando terminó, Hikaru se dejó caer del árbol y se sacudió el polvo antes de decir: "De verdad, esto está arruinando mis planes. ¿Por qué no todos pueden seguir el plan por una vez?"

Desapareció de su lugar y apareció donde está el Equipo 8. Miró a su alrededor y vio tres genins Amegakure. Llevaban la misma capa negra que el resto cuando los vio.

Detrás de él estaba el Equipo 8. Estaban cansados, bajos de chakra y los moretones eran vívidos en todas partes de su cuerpo.

Al ver eso, Hikaru volvió la cabeza hacia el Equipo Ame.

No habló, solo se escucha el silencio.

Sacó su Uchigatana poco antes de volver a ponerla en su funda.

Lo siguiente que vio el Equipo 8 fueron los cuerpos de carne picada del Equipo Ame.

Hikaru los cortó tan rápido que nadie pudo verlo. Los cuerpos fueron cortados en mil pedazos de carne.

Hikaru recogió el pergamino limpio que llevaba el equipo Ame antes de darse la vuelta para mirar al Equipo 8 y decir: "Sígueme".

Al ver el pergamino, sonrió. Fue el Pergamino de la Tierra. Justo lo que necesitaban.

"Hikaru ... ¿cómo hiciste eso?" Preguntó Kiba mientras cargaba al herido Shino. Hinata era un poco mejor que el resto de su equipo, por lo que podía caminar por su cuenta.

"¿Cómo hice qué?" Hikaru respondió con una pregunta sin darse la vuelta mientras caminaban hacia el lugar seguro que había hecho para su equipo.

Kiba se molestó y dijo: "¡Sabes a qué me refiero! ¡Un genin no debería ser capaz de ejercer ese tipo de poder! De alguna manera, simplemente sacaste tu Katana antes de volver a ponerla en su funda durante menos de 3 segundos, y ¡luego murieron! "

Hikaru aparentemente lo ignoró y sacó tres botellas doradas.

Se detuvo y se dio la vuelta para darles esas botellas.

Kiba estaba a punto de preguntar qué eran, pero Hikaru lo calló con un simple silencio.

"Estas tres botellas se llaman Bendición Divina. No preguntes de dónde vienen, lo único que importa es que te sana por completo. Bébela". Hikaru dijo mientras les daba las botellas.

Hinata tomó uno de ellos y estaba a punto de beberlo, cuando Kiba intervino y dijo: "No lo bebas todavía, Hinata-chan. Lo beberé primero para ver si es seguro o no".

Hinata entrecerró los ojos y dijo con frialdad: "No me des órdenes, Inuzuka. Beberé lo que quiera". Luego procedió a beberlo y un brillo dorado salió de su cuerpo antes de que se disipara.

Todos sus moretones y heridas se curaron casi instantáneamente después de beber la Bendición Divina.

"¿Qué ...?" Kiba no podía creer lo que veía, ¡algo tan milagroso en realidad existe!

Luego lo bebió también y sintió lo mismo que sintió Hinata. Curaba sus heridas y heridas. ¡De repente se sintió lleno de energía de nuevo! Pero luego, miró a su compañero, Akamaru. También resultó herido, y es más probable que sea más fatal que Shino.

"Um, Hikaru, ¿podrías darme uno de esos de nuevo?" Preguntó Kiba pero su voz era más baja que antes.

"Hmm, claro, pero después de que regresemos, me darás 100,000 Ryo". Hikaru dijo mientras le sonreía.

"¿Eh?" Kiba estaba repentinamente confundido.

"Ahora, ¿de verdad pensaste que otro de esos es gratis? No seas absurdo, solo te di tres gratis por tus heridas. Si quieres uno ahora, tendrás que aceptar darme cien mil Ryo al final de esta fase ".

Kiba se tambaleó ante la gran cantidad de lo que estaba preguntando Hikaru, y probablemente le haría un agujero en la billetera. Y ese agujero no sería pequeño.

"¿Qué tal un ... descuento?" Preguntó Kiba tímidamente en lugar del anterior bullicioso.

"No," la simple respuesta de Hikaru. Aunque probablemente sea más rico que cualquier otro clan en Konoha, todavía quiere más. Incluso si 100,000 Ryo es solo una gota de agua en su cuenta bancaria, sigue siendo dinero.

"Tch, bien. Dame la cosa y te daré el dinero más tarde." Dijo Kiba mientras extendía su mano para recibir la Bendición Divina.

"¡Trato! Aquí tienes." Hikaru le dio otra Bendición Divina.

Mientras hablaban, Hinata ayudó a Shino a beber la Bendición Divina y recuperó la salud por completo.

Kiba abrió la tapa antes de hacer que Akamaru bebiera una sola gota por vez. En poco tiempo, el perro se curó.

"¡Akamaru!"

"¡Waf, waf, waf!" El perrito ladró.

Hikaru luego se dio la vuelta para irse.

"Vamos, algunos equipos pueden intentar atacarnos". Hikaru dijo mientras se alejaba mientras los otros tres lo seguían.

Unos momentos después, finalmente llegaron donde Hikaru plantó su genjutus. Aquí, ni una sola alma puede verlos, incluso si se acercan a esa persona. Por supuesto, tendrías que tener el permiso de Hikaru para entrar aquí.

Cuando llegaron, Hikaru vio a tres de sus clones arrodillados frente a él.

"¿Ustedes lograron su misión?"

"Sí, creador. He robado 2 rollos celestiales y 1 rollos terrestres". Clon # 1 respondió.

"Yo soy el mismo." Clon # 2 respondió.

"Yo también." Respondió el clon # 3.

"Bien, ahora dispersos." Ordenó Hikaru.

"" ¡Sí, nuestro creador! "Luego desaparecieron en una nube de humo. Después de dispersarse, dejaron caer 9 pergaminos, 6 Heaven Scrolls y 3 Earth Scrolls.

"Realmente no sé cómo Darling es capaz de dominar tan bien a sus clones. Mis clones solo se quedan holgazaneando cuando trato de ordenarlos". Azumi se quejó mientras hacía pucheros.

"No te preocupes por eso, Azumi. Lo encontrarás a tiempo." Hikaru dijo mientras recogía los 9 pergaminos que los clones dejaron caer cuando se dispersaron.

Cuando el Equipo 8 vio la gran cantidad de pergaminos que tenía, Hinata decidió preguntar: "Hikaru-kun, ¿puedes darme un pergamino celestial? Es lo que necesitamos ahora".

"Por supuesto, aquí." Hikaru le lanzó un Pergamino Celestial hacia ella y ella lo atrapó fácilmente.

'¿Por qué no puede llamarme "Kiba-kun"? Soy mejor que ese tipo, en serio. Kiba pensó con celos y envidia.

"Nuestro próximo movimiento es regresar y entregar nuestro pergamino al procter, AKA, Anko". Hikaru dijo y todo el equipo estuvo de acuerdo.

20 minutos después, ya estaban frente a la torre.

Cuando llegaron allí, se dieron cuenta de que eran los primeros en llegar a la torre.

Después de abrir sus respectivos pergaminos, sus senseis aparecieron en una nube de humo. Kakashi para el equipo 7 y Kurenai para el equipo 8.

Al enterarse de que Hikaru salvó a sus estudiantes de una condena segura, le dio su gratitud. antes de que ella y su equipo dejaran solo al Equipo 7.

"Muy bien, estoy muy feliz de que mis pequeños y lindos estudiantes lograran aprobar los exámenes de chuunin, hubiera sido una sorpresa si ustedes no los hubieran aprobado. De todos modos, los superiores decidieron mover las preliminares en tres días. haciéndolo el 18 de agosto.

Se hizo así para que puedan esperar a que lleguen otros equipos mientras descansan los equipos que lograron pasar temprano.

Luego fueron trasladados a habitaciones separadas.

Hikaru ahora está solo en su habitación mientras revisa sus estadísticas.

[Nombre: Hikaru Hiroaki

Raza: No muerto modificado

Nivel: 310

Siguiente nivel: ???????

Sintonización - 30

Resistencia - 60

Fuerza - 60

Destreza- 60

Int - 60

Fe - 60

Resistencia - 50

Almas - 5.500.000

______

Chakra - 80

Control de Chakra - 70]

Ver sus estadísticas lo hizo sonreír.

Este es el resultado de todo su arduo trabajo.

"Ahora, vayamos a cultivar otro lote de almas. ¿Quizás desafiaré a Manus? Como ya soy así de fuerte, quizás pueda derrotarlo".

Esas fueron las últimas palabras de Hikaru antes de que finalmente muriera 20 minutos después.

(En la capital principal de la tierra del fuego)

En una mansión custodiada por cientos de shinobis de nivel jounin. Dentro de esa mansión había una habitación decorada como la habitación de los niños. Dentro de esa habitación, había una mesa larga. 12 niñas de entre 9 y 14 años estaban atadas a las sillas de la mesa.

Todas las niñas estaban vestidas como muñecas y sus caras eran como muñecas. Pero no eran muñecos. Son humanos atados a una silla, vestidos como la fantasía de un pedófilo, y si miras un poco de cerca, puedes ver moretones de color púrpura oscuro en sus caras. Estaba oculto por la base blanca de quien se maquillaba.

O estaban luchando por salir pero era inútil. Las cuerdas estaban demasiado apretadas, y eso no es todo, el que hizo todo esto también estaba en la habitación.

Era un hombre alto y guapo con cabello negro corto y ojos de color amarillo intenso. Estaba pálido, vestía un abrigo de noble con pantalones rodeados de joyerías. De vez en cuando, sus dedos largos y resbaladizos tocaban a las chicas como si fueran la cosa más preciosa del mundo.

Sus ojos vagaban sin rumbo fijo alrededor de las niñas.

Las niñas intentaban no llorar, como si tuvieran miedo de llorar. Pero uno de ellos no pudo aguantar y un niño de nueve años rompió a llorar.

"¡Waaahh! ¡Quiero ir a casa con mi mamá! ¡Waaahh!" Ella lloró y captó los ojos del hombre.

Corrió directamente hacia ella y dijo con voz trastornada: "¡No, no, no, no, no, nooo! Estás arruinando tu maquillaje, querida. Pero no te preocupes, yo te lo arreglaré." "

Sacó una botella llena de base blanca. Lo abrió y trató de sacar un puñado, solo para que la botella se cayera, derramando todos los cimientos.

Sus ojos de repente se volvieron locos antes de mirar el rostro llorando de la niña, y las lágrimas estaban arruinando más y más su preciosa obra de arte.

"¡Mestizo inútil! ¡Cómo te atreves! ¡Cómo te atreves! ¡¡Cómo te atreves !!" Levantó la mano y abofeteó a la niña sin cesar, hasta que su rostro se llenó de sangre. Incluso se estaba ahogando con su propia sangre.

Luego se puso de pie y comenzó a patearla en el estómago, haciéndola ahogarse más con su propia sangre. Pero el dolor que sentía en ese momento era insoportable. Y eso la hizo llorar aún más.

"Después," otra patada, "Todo lo que he hecho por ti", otra patada en el estómago, "¿¡Te atreves a decir que todavía quieres estar con tu campesina de madre !?

Mientras continuaba pateándola, no se dio cuenta de que su cuerpo ya estaba sin vida. Ella está muerta por todas sus patadas. Sobre todo porque también la pateó en el pecho, directamente en su corazón y eso hizo que su corazón se detuviera.

Él pateó y pateó y pateó y pateó, hasta que finalmente se dio cuenta de que la chica frente a él ya había estado muerta hace un tiempo.

Las otras chicas solo pudieron mirar hacia otro lado cuando vieron a una de ellas golpeada hasta la muerte, nuevamente. No querían llorar, no, no pueden llorar. Una vez que lloran, todo se acaba. La muerte es su única opción. 

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