. Capítulo 44 .

Capítulo 44 [parte2]

Mi cuerpo parecía una roca ante el dolor, quise hacerme para atrás y con ello, quitar el cinturón que apretaba mi tórax. Al lograrlo, recosté por completo mi cabeza al reposacabezas y cerré mis ojos al soltar mi suspiro. 

Los lamentos del omega me partían el corazón, pero estaba seguro de que su perdón nunca llegaría. Mi mano fue directo a la manija para abrir la maltratada puerta de mi auto. El olor penetrante del humo y del los chorros del anticongelante goteando me invadieron en temor, así como, el de la gasolina.

--Tenemos que irnos. No descansaré hasta dejarte con tu padre o Taehyung. -- mi voz apenas fue sonora y miré directo al omega que no me mostraba una señal de querer hablar. De todas maneras, no era el momento ni tampoco era el lugar para esperar una respuesta.

La punta de mi pie, toco por fin el asfalto y se apoyó por completo en un tirón para salir del auto. Todo había sido tan rápido, pero en mi mente; se revivía lentamente el impacto del coche de Jungkook, una y otra vez.

Tocando mis costillas y rengueando de un pie me fui acercando al auto impactado. Mis ojos se abrieron en completa sorpresa al mira el cadáver de la madre de Yoongi. El choque había sido tan fuerte que su cabeza había quedado maltratada ante el severo golpe.

Tan pronto rodeé mi auto y fui directo a la puerta maltratada y fruncida. Los cristales terminaron por caerse a la orilla del auto y esta rebotó al abrirla con algo de fuerza, tomé la mano del omega y jalé de ella. Yoongi, no quería salir su poca fuerza me daba a entender que este se quería quedar aquí.

--Por favor Yoongi. Solo por esta vez confía en mí, y te juro por mi vida que te dejaré en paz.

A pesar de que el ruido de los cláxones y mormullos de curiosos que se asomaban con precaución ante el accidente, mi alrededor se mostraba como sonidos sordos y sin nada en que poner atención mas que en los lamentos del omega.

--¡No, ya no quiero saber nada! – dijo medio alto. – Estoy harto, cansado...

No deje que siguiera hablando y lo tomé de los brazos para sacarlo. Sus pies maltratados y sus rodillas lastimadas, así como su ceja sangrante; me provocaban no entrar en un tono en donde quisiera obligarlo y que hiciera lo que yo diga.

¡Bájame! – mando. -- ¡Bájame ahora!

Mi espalda dolía y mis piernas apenas querían seguir, pero solo descasaría hasta que él no estuviera a salvo. Ese era mi único propósito en la vida, con eso le pagaría todo el daño causado.

Solo bájame, por favor... -- sus lamentos tristes penetraban mi pecho y arden en mi marca. Su cuerpo se sentía cansado. – Jimin, te lo suplicó... Solo déjame ya.

Las palabras me estaban envenenado con un aire que me querían romper. Mi dolor solo era una bomba de tiempo para derrumbarme y recoger cada pedazo de mi. Pues en eso quedaría, cuando Yoongi se vaya de mi lado.

La luz al salir del túnel, era más cegador y caluroso ante sol que pegaba directo a nosotros.

Ambos estábamos cansados. Mis pasos trataron de ser más rápidos al escuchar el sonido de las sirenas. Note un desvío debajo de un puente peatonal y camine directo para ocultarnos y así poder llamar Taehyung.

Estábamos por llegar hasta que el grito furioso nos tomó por sorpresa y lo único que pude procesar fue como nuestros cuerpos fueron aparar al asfalto.

El quejido de Yoongi fue sonoro y yo me paré casi de inmediato al mirar como Jungkook se acercaba amenazadoramente. En un salto este me atacó con una patada, me acorraló junto a la pared y me tomó del cuello de mi camisa. 

Su mirada colérica me hacía entender que esta vez no habría ninguna tregua y menos cuando su lobo estaba ahí; los puños rápidos golpearon mi cara de un lado a otro. Al momento de querer esquivar otro de sus puñetazos, este tomó mi muñeca izquierda y con la otra mano agarró mi hombro que estaba lastimado encajando sus dedos con fuerza sobre la herida, mis dientes se apretaron al sentir el dolor.

--¡¡¡No, ya basta!!! – la voz del omega era suplicante.

Al distraerme, el alfa me despegó de la pared y me aventó al suelo, caminó lo mas rápido posible lanzando dos patadas que fueron directo a mi vientre. Al momento que reaccioné, mis manos atraparon su pie evitando otro golpe y mi pierna derecha le soltó también una patada directa a su rodilla y después otra hasta tirarlo.

Ambos nos levantamos con rapidez y chocamos frente a frente para que con fuerza uno fuera aparar directo a la pared; la cual la espalda de Jungkook ahora pegó con ella y así yo poderlo acorralar. Mis manos estaban en su camisa, y este trataba de apartarlas apretándolas en puño, mi frente le dio un golpe directo en la nariz y subí mis manos hasta su cuello. 

Sus quejidos se combinaban con mis jadeos.

--¡Termina con esto Jungkook! – dije con dientes apretados.

--¡No! ¡Solo hasta que estés muerto!

Una mano del alfa, golpeó mi costilla y con la otra dobló mi muñeca hacia atrás para después apartarla de él.

Con fuerza me agachó y me dio un rodillazo directo en la cara, el tronido de mi nariz solo fue resentido cuando la calidez del chorro de sangre sintió bajarse. Jungkook sacó de su bolsillo de atrás un pedazo de vidrio y atacó directo a querer herirme; mis pasos y movimientos trataban de evitarlos y solo fue que me acerqué sin importar el que, con mi ante-brazo traté de quitarlo y mi esquive hizo que mi mano derecha fuera hecho puño golpeando directo a sus costillas, el cual este rebotó solo un poco apartándose. 

Lanzó aún golpe con el vidrio en su mano otro intentó de herirme directo a mi cara, me aparté hacia atrás, tomé su muñeca que mantenía el vidrio y con mi derecha sorrajé un puñetazo hueco directo a su pómulo. A pesar de todo, Jungkook no se daba por vencido y no le importaba que el vidrio filoso le estuviera cortando la palma de su mano; de un lado a otro se movía y no fue hasta que mis manos cubrieron mi frente y este lo encajó directo a mi palma, pero aquello había servido para el vidrio al fin se encajara y pudiera quitarlo de la pelea.

Mi grito no había importado y mucho menos el dolor. 

El alfa de nuevo me atrapó de los hombros y soltó una patada directo a mi rodilla tratando de doblarla, pero al no conseguirlo este solo empuñó mi cabello y me miró directo a mis ojos.

--Jae amaba que lo tomara así. – dijo déspota.

Mi furia subió en un segundo y en manera para poder zafarme le di varios golpes directos sus costillas; este se quejó de más al sentir el dolor por lo lastimado que estaba.

Los puñetazos estaba listos y con dureza, la pelea se manejaba en pasos veloces con ardor el cada brote de piel, pero la adrenalina, el odio y la suma de emociones no nos dejaba pensar en claridad.

Jungkook, era mas fuerte que yo y sus golpes eran mas dolorosos; mi visión fue borrosa cuando sus nudillos fueron directo a mi mentón haciendo que casi callera de espaldas, pero solo fueron pasos débiles en reversa.

De un movimiento sacó su cinturón de su pantalón y como su fuera un látigo este soltó golpes con el grosor del cuero y el ardor de la hebilla dándome directo en el cuello. Este lo envolvió en su mano y se acercó en una sola zancada y me rodeó el cuello con el cinturón, mis manos lo empuñaron con fuerza para que este no pegara con la piel; apenas pude hacerlo para atrás para que pegara con la pared, mis sentidos se estaban perdiendo y mis dedos se estaba acalambrado ante lo apresado que estaban por detener mi ahorcamiento.

No podía darme por vencido, aún no. Miré con ojos vidriosos a Yoongi aun tirado y solo llorando, tratando de saber que pasaba.

Jungkook dobló mis piernas con un rodillazo.

--No sabes lo mucho que voy a disfrutar de llevármelo y que termine igual que todos tus amantes. Te morirás sabiendo que te detesta, que no vales nada para nadie y que el único destino de Yoongi será el ser infeliz y que no pudiste hacer nada.

Su voz estaba pegada a mi oído saliendo con tenues susurros. Si moría al menos mi único consuelo era que yo amaba a Yoongi.

Mi respuesta fue jadeos y el rechinido del cinturón al apretar el cuero.

No, Yoongi no sería infeliz, ya no.

Con mi poca fuerza, saqué mis manos del cinturón y mi cuello,  con rapidez puse mis manos directas por atrás de sus rodillas lo cargué y me lance hacia atrás. Por el despisté del movimiento, aproveché para levantarme y dejarme caer sobre su pelvis hasta montarlo, quité el cinturón de sus manos y lo arroje a un lado. Mis manos lastimadas no tenía ya la suficiente resistencia para apretar su cuello, pero aun así, ya no deseaba nada; más que solo su rendición.

--¡Ríndete! ¡Solo déjalo en paz! – le mandaba.

Sus ojos se abrieron con al momento en el que Yoongi le lanzó una patada directa a su sien.

Jungkook, de inmediato quedó inconsciente y Yoongi de nuevo cayó de rodillas, yo me fui quitando de encima de Jungkook y me fui acostando. 

Todo había acabado, al fin todo estaba terminando.

—Los tenemos! — exclamaron. — ¡Manden unidades de paramédicos!

Abrí mis ojos de nuevo cuando sentí el contacto de un beta, este revisaba mi pulso y después se desvió a Jungkook que aún permanecía inconsciente.

Yoongi escondía su cara entre sus rodillas y no dejaba de sollozar, no podía juzgar la debilidad del omega. Tanto le había pasado en tan poco tiempo.

Más pasos resonaron en mi oído y el sonido de llanta de metal también ambientaban el lugar.

Miré  con lentitud el como se llevaba a Jungkook en la camilla para después ser cegado al revisar mis ojos los paramédicos.

Me tomaron del torso y me levantaron para después sentir la suave y dura camilla.

Mis ojos se quedaron perdidos en los tonos rosados del próximo anochecer  y no pude evitar soltar mis lágrimas al escuchar los desgarradores llantos de mi amado omega.

La tristeza lo estaba invadiendo y esta vez no era por mi, sino, por su madre.

Mi pecho podía sentirlo, y hasta podría describir que el omega estaba sintiendo dagas continuas dieron a su vida.

Mi vista fue opacada por el blanco techo de la ambulancia y fue ahí cuando mi última mira fue al omega que era abrazado por Taehyung  y quien por detrás estaba una anciana en espera para poder también abrazarlo.

Ambos omegas eran libres, ambos estaban bien y en palabras banales; serían felices.

Yo lo había prometido y lo había cumplido.

(...)






Holaaaaa!!

Se que dije que terminaría antes de febrero, pero tenía que pagar deudas, trabajar, estudiar y aparte mirar lo de mis practicas profesionales, pero lo bueno es que hay salud.

Se que esta cortito, pero ahora si espero estar actualizando seguido. Ya no diré cuando terminará porque luego no cumplo 🤣

Perdón por las faltas de ortografía.

Las amo mucho y espero que estén bien mis ni@s hermosos.

ALICIELITO

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