. Capítulo 30 .

-Es mejor que te alejes o yo te alejare de él. – Taehuyng advirtió. 

-Veo que no puedo hacer nuevos amigos, porque te defienden de más. – me dijo el alfa. – Es lindo que lo defiendas, pero de verdad vengo en son de paz y quiero acercarme al omega bonito.

Park solo quería hablar en doble significado.

-Dejemos que el alfa hable, tal vez sea importante. No es bueno ignorar a las personas así tengan un extenso discurso que decir y esperen todo un fin de semana a que el teléfono sonara. – traté de morder mi lengua al darme cuenta de que debí decir lo ultimo.

Mi pequeño enojo se estaba expulsando de mí y lanzar indirectas era más fáciles de lo que había pensado.

>> Pero que le puedes decir a un omega que sea de importancia, cuando lo más probable es que otras y otros omegas se mueran por platicar contigo. – terminé de hablar.

"Yoongi, solo fueron unas llamadas" "Que también fueron ignoradas, por cierto"

-Yoongi, mejor vámonos. – me dijo Taehuyng.

-No, no es necesario quiero escuchar que me viene a decir Park. – alcé una ceja. – Que excusas vas a decirme.

-Ninguna, solo viene a decirte que te veías hermoso con tu polera azul cielo y que tu cabello esta despeinado.

-Lastima Park, tu tiempo se acabó. – le dijo Taehyung.

La mano de Jimin se coló por debajo de la mesa, lo sabía por que su toque apenas estaba rosando con mi pierna; yo no sabía si estaba siendo tan obvio, pero me quede un poco congelado ante su toque. Su mano apretó mi pierna, la cual subió y bajó con gentileza. Nervioso, quise ponerme de pie, pero el alfa la apretó más.

-Si no vas a decir nada más, me gustaría irme. – le dije.

-Solo escucha lo que vengo a decir. – me dijo. – Por favor...

Bajé mi mano para quitar le de él, pero el alfa fue más rápido cuando entrelazo sus dedos con los míos dejando mi palma sobre mi pierna. Jimin frotaba su palma sobre el torso de mi mano.

-Quiero concursar contigo. – dijo de repente.

Fruncí mi entrecejo confundido.

>>Me gustaría concursar contigo. – dijo sin problemas mientras yo traté de no suspirar cuando su mano se desvió cerca de mi entrepierna.

-No. – dije de repente.

-¿Yoongi estas bien? – preguntó Taehyung.

-Sí. – dije también rápidamente.

-¿Por qué no? – preguntó Jimin. – Me podrías dar una explicación.

Por un momento estaba odiando a Park, su mano cada vez se adentraba más  y me estaba provocándome, mi mano era débil al querer separarlo, pero no quería demostrar nada ante Taehyung.

-Porque, no soy alguien a quien solo vengas a conseguir algo. – hablé deseando que no sonara nerviosa mi voz.

-Yo no deseo nada de ti, más que solo hablarte enfrente de todos.

Sí, definitivamente fue un recado entre líneas. Daba gracias que mi neutralizador si funcionaba o sin embargo no iba aguantar ocultar mi poca cordura ante el toque del alfa.

-Oh, es hora de irnos Yoongi. – avisó Taehyung. – Ya oíste Park, Yoongi no quiere participar.

-Él no ha dicho nada en concreto. – su voz se cortó un poco, cuando mi mano se posó sobre la de él guiando sus toques sobre los míos.

El trueno sorprendió a todos los presentes en la cafetería y los pasos y el recorrido de sillas nos indicaban que todos estaban corriendo hacia sus aulas.

-¡Vamos Yoongi! – dijo Taehyung. – Tengo que pasar a dejarte y salir corriendo a mi facultad antes de que la lluvia sea más fuerte.

-Si quieres puedes irte y yo lo dejaré. Me gustaría seguir rogando un poco de atención. – dijo el alfa.

Su mano se detuvo y yo mordí mi labio.

-Prefiero mojarme antes de dejarte solo con él. – Tae habló seguro.

-Taehyung, no le voy hacer nada. – informó. – No hay necesidad de que siempre estes tras de él. Solo necesito cruzar unas palabras con el omega.

Una frase que Taehyung usaba mucho y ahora estaba siendo ocupada en su contra.

Su bufido fue sonoro y la silla fue recorrida. Los toques del alfa dieron de nuevo el inicio de caricias por debajo de la mesa.

-Solo si Yoongi quiere. – dijo Taehyung y los ruidos de la cafetería iban siendo menos.

-¿Podemos hablar? – pregunto Jimin seguido. – Prometo solo dejarte en tu aula y después me iré.

"Yoongi, estas enojado di que no"

-Sí. – mi lobo me había traicionado.

"la verdad es que quería escucharlo"

>>No te preocupes Tae, voy a estar bien. – le sonreí con nervios. – No quiero que llegues a clases empapado, ahora ve corre antes de que la lluvia sea más fuerte.

-Está bien Yoongi, te vere más tarde. - se resignó. – Te estaré vigilando Park...

Nos quedamos en silencio Park y yo. Los murmuros fueron casi inexistentes y solo las losas de los platos que eran levantados nos acompañaban.

-¿Ya no hay nadie? – le pregunté. - ¿Mi hermano no está cerca?

-Casi nadie y tampoco él, pero si me lo pides con gusto te daré un beso. – dijo cerca de mí. – Muero por comerte la boca.

-A- aléjate. – tartamudeé. – Aquí no.

-Tienes razón... aquí no.

Su toque de la pierna se alejó y tomó mi muñeca.

-Ven. - me animó. - Vamos.

-Directo a mi aula. – le pedí.

-Si vamos. – confirmó. – Yo te llevaré a tu aula.

Confiando en sus palabras me deje guiar por el alfa hasta levantarme de mi asiento, un pequeño jalón me hizo juntarme más a él.

-¿Quieres un aperitivo? – me ofreció.

-No muchas gracias, comí bien. – le dije con un poco de indiferencia.

-Esta bien.

Nuestros pasos fueron en silencio, al parecer no iba hablar nada el alfa. El cosquilleo en mi pierna seguía presente y mi ansiedad inexplicable, hacían que mi lobo solo estuviera de un lado a otro dando un toque de espíritu alegre.

-No esta tan lejos mi aula de la cafetería. – le avise.

-Lo sé. – dijo seguro. – Pero hay veces que amo tu ingenuidad.

Sin decir nada el alfa me cargó entre su hombro y sostuve bien mi bastón al momento que solo di un pequeño grito de sorpresa.

-¡¿Qué haces?!

-Baja la voz o nos sorprenderán. – mandó.

-Jimin, esto no es correcto. – le dije.

-Si bueno, sabes no siempre hay que ser tan obediente. ¿O donde está mi omega osado del fin de semana?

-Esto es diferente. – le dije.

Pero el alfa hizo oídos sordos ante mi comentario.

Las gotas de lluvia sonaban recias y fueron frías al toque de mi cuerpo. Mi polera se comenzó a empapar por la parte de mi espalda. Y fue ahí  cuando una pequeña parte de mi se sintió feliz mi risa baja fue  ocultada por el ruido de los truenos y también la de Jimin.

"Yoongi estas enojado, ¿recuerdas?"

Este me bajó y dejamos que la lluvia nos mojara, él me quitó el bastón de mis manos, para tomar mi muñeca.

-¡Hay que correr!

Y así fue, con pequeños jalones y cargadas del alfa hacia mí, fue que nuestro trayecto se sintió eterno, la lluvia se volvió más torrencial que sentía mi cabello cada vez más húmedo y gotas frías abarcaban mi cuello así como mi vestimenta más pesada.

Ambos nos reímos por nuestras fechorías y el olor del toque de la tierra con el agua abrió más mis sentidos y reaccioné al momento que la lluvia dejó de sentirse y solo fue escuchada.

El alfa rápidamente, me llevó hacia tras pegándome con lo que suponía era una pared, su mano se soltó de la mía y sus manos fueron directo a mis mejillas, sus labios fríos me hicieron recorrer un choque de nervios y pasión, cerré mis ojos y abrí mi boca dejándome llevar por mi alegría y el momento.

Nuestras lenguas eran un contraste de nuestros labios, pues eran cálidas e increíblemente dulces, su aroma me estaba transportado a mi inquietud de sentir un poco más, sus toques al final si había tenido éxito. Mi beso se volvió desesperado y más apasionado. Sin negarme y el alfa sin prohibirlo, llevé mis manos tanteando y buscando el borde de su camiseta.

Al encontrarlo, mis dedos se adentraron y acariciaron sus abdominales, nos separamos un solo unos milímetros para respirar, pero todo era ahogado en feromonas por parte del alfa, sonreí satisfecho de lo que tocaba.

-¿Te gustan? – me dijo el alfa.

-No llamaste y no contestaste. – ya no pude callarlo.

-Perdóname mi amor, pero estaba ocupado.

Sus labios se pegaron con los míos y sus manos también alzaron mi polera, me separé para seguir la conversación entre suspiros.

-¿En qué? 

-Pensando en que me estoy enamorando muy profundamente de ti, y que no sé qué voy a encontrar en un futuro.

Lo besé en cuanto dejó de hablar, era inútil responderle cuando yo estaba casi igual. La atracción que sentía por el alfa era casi palpable cada que estábamos juntos.

En un movimiento lo cambié de lugar y ahora era yo quien lo acorralaba, sus manos nunca se quitaron de mis caderas y estas se fueron recorriendo hasta que el borde de sus dedos se refugió dentro de mi pantalón. Entre besos di un pequeño gemido y sin pensarlo tiré para arriba su camisa, el alfa rápidamente sacó de sus manos de mis caderas y junto con las mías de un jalón la quitó de su torso, sus manos guiaron mis palmas hasta sus pectorales y los bajó por sus abdominales, las pasó por su cadera y su cintura. Embobado, mantenía mi boca entre abierta.

-Me gusta quebrantar la inocencia. – me dijo. – Me gustas mucho, Yoongi.

-Y tú a mi Park Jimin. – le confesé.

Jimin jaló de mí y me pegó a su torso, aunque su gemido no pasó desapercibido, pues mi polera estaba húmeda y probablemente fría.

El alfa pareciese que me leyó la mente al tiempo que lentamente pasó hasta que la estaba retirando.

-Me encanta lo que veo. – dijo en mi oído.

-Y yo lo que toco y pruebo. – le respondí también bajo.

-Me gusta mucho tu cuello...- dijo bajando por mi mentón hasta que daba pequeños besos por la extensión de este, hice mi cabeza hacia tras.

-Tus clavículas... - besó cada una de ella, su lengua se paseaba y mis piernas temblaban.

>> Tus hombros... - beso mi hombro izquierdo.

>>Tu aroma, que es solo para mí, que solo me pertenece a mí, que es mío, solo mío. Eres mío. – dijo besando mi fuente de olor intensamente.

Un gemido salió de entre mis labios y pronto los apreté para que no soltara más, pues las manos del alfa se adentraron por mi camisilla de tirantes. Sus roces sobre mi abdomen eran irreales, sus manos fueron subiendo cada vez más y sus yemas apenas estaban tanteando mis pezones erectos, que eran golpeados por la fría brisa de la lluvia por la espalda y la excitación que estaba entrando en mí.

-Son muy suaves, mi amor. – dijo coqueto. - ¿Te imaginas esos besos que te doy en estos? – su pregunta fue hecha al mismo tiempo que los acariciaba.

El alfa me volvió a besar y este me sostuvo por detrás de mi espalda. Me sentía tan frágil por su toque.

-Tienes una erección, omega. – me avisó. - ¿Quieres que resuelva tu problema?

No tenía mente en esos momentos, pues y su mano iba bajando hasta que llegó al borde de mis pantalones, sin pudor apretó mi nalga, otro gemido no pudo ser retenido.

-Y-yo-no sé. – dije tartamudeando.

-No te preocupes, no te voy a presionar. – me dijo.

Me volvió a besar, sus labios cálidos y su torso pegado al mío que estaba casi desnudo, me transportaba a un mundo de nuevas sanciones, y reacciones que mi cuerpo quería deseaban y necesitaban.

-Yoonie, no quiero ocultar que me gustas. – me dijo. – Pero tampoco voy a presionarte; comprendo mucho lo de tu hermano.

-No pensemos en eso en estos momentos. – dije.

Y es que yo de verdad que no quería mortificarme.

>>Es un momento que de verdad estoy disfrutando. – dije entrecortado.

Lleve mis manos a sus mejillas y lo besé, mis besos también querían probar su cuello y sin experiencia, fui bajando mis besos. El alfa me dio espacio y sus manos se hundieron entre mis cabellos mojados.

Mis labios hicieron el mismo recorrido que el alfa. Su piel estaba salada, y algunos puntos dulces que se mezclaban con el perfecto sabor de la lluvia y de su aroma. Podía oler la nuez tan penetrante y perfecta.

-Sabes increíble. – dije sin pensar. – Amo que compartamos un aroma.

-Yo también lo amo, pero Yoongi si no paras tendré un grave problema en mis pantalones.

-Estamos iguales, alfa. – dije. – Estoy dispuesto a hacerme responsable de tu problema.

Estaba doblemente cegado por todo, que no me dio vergüenza el usar sus palabras.

-Aunque lo deseé, no es el momento mi amor. – dijo en un susurro. – Solo dime que vamos a estar juntos a patir de ahora.

-Sí alfa. – dije sin temor. 

dejare este otro... No saben cómo amo esta canción y es que siento que esta va con la historia jajaja  

Tengan una bonita noche y días también. 

Las amo con todo mi corazón.

ALICIELITO.

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