En un apartamento ubicado en la ciudad de Nueva York, se podía apreciar a un hombre de cabello blanco de  aproximadamente 35 años siendo abrazado por una joven de 18 tal vez unos 19 años de piel morena, ambos estaban completamente desnudos sobre una cama completamente desordenada en la cuál se podían apreciar algunos preservativos y unas cuantas botellas de alcohol alrededor de esta, ninguno de los dos parecía tener intenciones de despertar hasta que el sonido de un teléfono celular interrumpió el sueño del hombre de cabello blanco, el cuál sin querer abrir los ojos extendió su mano para tratar de encontrar el teléfono celular en la mesa de noche que estaba alado de la cama, pero por más que buscaba no lo encontraba.

- busca en tu pantalón - dijo la joven que tenía a su lado.

El hombre de cabello blanco estiró su mano para ahora tratar de encontrar su pantalón, pero lo único con lo que sus manos de topaban eran las botellas de alcohol vacías de la noche pasada, lo que ocasionó que el hombre abriera de mala gana sus ojos y se asomara por el borde de la cama para poder localizar su pantalón el cuál apenas era visible ya que se encontraban sepultado por una camisa negra ,una blusa y sosten de color negro,al retirar las prendas que sepultaban su pantalón metió la mano en uno de los bolsillos para sacar de este su teléfono celular el cuál había dejado de sonar, haciendo que dejará escapar un suspiro de frustración y para después volver a cerrar los ojos y tratar de retomar su sueño, pero en el momento que sus ojos volvieron a cerrarse el teléfono celular volvió a sonar haciendo que el hombre volviera a despertar.

-¿Porque molestan tan temprano?- pregunto el hombre mientras tomaba el teléfono celular para observar por unos momentos el nombre que aparecía en la pantalla el cuál era Clyde.

- hola Clyde que ocurre - dijo el hombre seguía acostado y se encontraban observando las botellas que se encontraban en el suelo.

- hola Lincoln, buenos días ¿podrías hacerme un favor? - pregunto Clyde al otro lado del teléfono.

- si el favor es dentro de una hora lo hare - contesto Lincoln con mucho sueño.

- lamentablemente nesesito el favor en los próximos 30 minutos ¿Podrías ir a abrir la tienda? - pregunto Clyde.

- ¿Abrir la tienda? ¿Sucedió algo? - pregunto Lincoln con algo de curiosidad.

- tengo mucha gente en la cafetería en este momento, mi encargada Amy está de vacaciones por maternidad  y Cleo no llego a casa anoche, además que ella tenía que abrir la tienda hoy porque tenía que recibir el camión con la nueva mercancía - contesto Clyde.

Lincoln al escuchar que Cleo no llego a casa cerro los ojos, alegó el teléfono celular de su oreja comenzó a murmurar - porfavor que no sea ella, porfavor que no sea ella - volteando para poder observar a la persona que se encontraba a su lado,notando que se trataba de Cleo mcdride la hija de su mejor amigo la cuál seguía dormida abrazándolo - mierda, no de nuevo - murmuró antes de volver a colocarse el teléfono celular de nuevo en la oreja - dame solo 10 minutos para vestirme y me voy a la tienda- contesto Lincoln.

- muchas gracias Lincoln, la llave está dentro del murciélago de la derecha ah y si ves a mi hija dile que estará en muchos problemas - dijo Clyde antes de terminar la llamada.

- no será el único que estará en problemas, ¿Como es que siempre que salgo a un bar, termino acostándome con tigo? - pregunto Lincoln mientras se frotaba la rostro para poder despertar.

- eso es por qué se cómo te gustan las mujeres - contesto Cleo mientras abría los ojos y le daba un beso en la mejilla a Lincoln mientras esté giraba los ojos.

- te e dicho muchas veces que no podemos seguir haciendo esto, tienes que estar con alguien de tu edad y tienes que dejar de ir a los bares no tienes edad todavía - dijo Lincoln mientras se sentaba en el borde de la cama y se volvía a frotar el rostro y dejaba escapar un pequeño suspiro.

- me lo has dicho tantas veces en estos 2 años que e perdido la cuenta, ademas no parecio importarte mucho anoche - contesto Cleo en tono coqueto mientras abrazaba por la espalda a Lincoln.

- olvidemos lo que pasó anoche y mejor vístete tenemos que ir a abrir la tienda de tu padre - dijo Lincoln mientras se paraba de la cama y tomaba un par de calzoncillos limpios  del tocador que tenía enfrente.

- me gustaría tomar primero una ducha, ya que ayer me hiciste sudar bastante - contesto en tono coqueto mientras se levantaba de la cama y comenzaba a caminar hacia el baño.

La mirada de Lincoln se enfoco por unos momentos en el cuerpo de Cleo mientras ella caminaba hacia el baño, por mucho el quisiera negarlo la verdad era que Cleo tenía una hermosa figura y era el tipo de figura que a él le gustaba, por unos instantes su mente se lleno de recuerdos de las veces que se avía acostado con ella.

- no es momento de pensar en eso en estos momentos - dijo Lincoln mientras negaba con la cabeza - ella es la hija de tu mejor amigo, no puedes estar acostándote con ella - se decía asi mismo mientras se colocaba el pantalón, tomaba uno de sus tenis y salía de la habitación con dirección a la cocina para poder desayunar algo rápido antes de tener que ir a la tienda de Clyde.

El departamento de Lincoln no era ni muy grande ni muy pequeño, era lo suficientemente espacioso para 3  personas,una pareja y un niño, pero ya que él vivía solo lo que tenía era espacio de sobra, de las dos habitaciones que el departamento tenía una se avía convertido en el estudio de pintura de Lincoln ya que en este se podían apreciar algunas de sus obras terminadas esperando a un comprador, otras sin terminar, y varios lienzos en blanco además que el piso estaba cubierto por una enorme manta blanca para evitar manchar el suelo de madera del departamento, al llegar a la cocina Lincoln abrió el refrigerador para sacar de este una caja de leche, después tomar una caja de cereal de una de las alacenas, y tomar un plato de otra de las alacenas, para poder desayunar un plato de cereal.

- debo recordar comprar algo para el dolor de cabeza - dijo Lincoln.

Pasaron alrededor de 10 minutos desde que Lincoln y Cleo avían despertado, Lincoln estaba recargado en la cocina esperando a que Cleo quien ya avía salido de la ducha terminara de cambiarse.

- Lincoln ¿has visto mis botas negras? - pregunto Cleo mientras asomaba la cabeza por la puerta de la habitación.

- no, no las e visto - contesto Lincoln.

- ¡olvídalo! tomara unas de las que deje en tu clóset -

Lincoln levanto una de sus segas por lo que avía dicho Cleo, después de unos instantes Cleo salió de la habitación vistiendo unas botas cafes, un pantalón negro y una blusa de color blanco.

- es bueno tener ropa en tu departamento - dijo Cleo mientras caminaba hacia Lincoln.

- eso es porque nunca que la llevas apesar de lo mucho que te lo digo - contesto Lincoln algo molesto.

- eso es porque se que la voy a necesitar cada vez que me quedo con tigo, te ves adorable cuando estás molesto - dijo Cleo en tono coqueto mientras recorría sus dedos por el pecho de Lincoln hasta llegar a su naríz.

- será mejor irnos - dijo Lincoln con algo de nervioso mientras se separaba rápidamente de Cleo y se dirigía a la puerta.

Tanto Lincoln como Cleo habían salido del departamento y comenzaron a bajar las escaleras del edificio donde se ubicaba el departamento de Lincoln, al salir del edificio los dos se dirigieron a la tienda de Clyde la cuál se dedicaba a vender todo tipo de artículos góticos desde camas en forma de ataúd, ropa, accesorios, peluches, libros, algunas copas, calis y cráneos de cristal y cosméticos, después de caminar aproximadamente unos 25 minutos ambos llegaron a la tienda la cuál tenía el nombre de vacío algo simple pero original eso era lo que pensaba Clyde cuando abrió la tienda junto a su exesposa Haiku hace 10 años, fuera de la tienda un pequeño camión estaba estacionado y alado de este se encontraban 3 hombres recargados sobre este.

- Cleo ve abriendo la tienda, llamaré a tu padre para informarle que el camión con la nueva mercancía ya está aquí - dijo Lincoln mientras sacaba su teléfono celular de uno de los bolsillos y le marcaba a Clyde pero este no contestaba.

- muy bien muchachos la tienda está abierta es hora de descargar - dijo uno de los tres hombres mientras levantaba la puerta de la caja del camión revelando muchas cajas las cuales algunas de ellas tenían escrito frágil y  cuántos ataúdes

Después de aproximadamente 40 minutos los 3 hombres avían descargado toda la mercancía.

- eso es todo porfavor firme aquí - dijo uno de los tres hombres.

Lincoln tomo la pizarra electrónica para poder firmar de recibido, cuando  le regreso la pizarra al hombre su teléfono volvió a sonar, metió rápidamente su mano al bolsillo para poder sacar el teléfono celular y poder contestar.

- hola Lincoln, perdón por no contestar como te dije tengo mucha gente en la cafetería, como sea ¿Ya llegó el camión con toda la nueva mercancía? Pregunto Clyde.

- se está marchando en estos momentos, toda la mercancia ya está dentro de la tienda - contesto Lincoln.

- muchas gracias amigo, de casualidad ¿mi hija ya habrá llegado? -

- esta dentro de la tienda en estos momentos - contesto Lincoln.

- es un alivio, no te imaginas lo preocupación que me da cada vez que no llega a casa - dijo Clyde con mucho alivio al saber que su pequeña estaba bien.

- ¿quieres que te la comunique? - pregunto Lincoln.

- no descuida amigo, yo le llamaré cuando la cafetería se calme un poco, de nuevo muchas gracias por recibir la mercancía - contesto Clyde.

- no tienes nada que agradecerme  sabes que tengo tiempo libre en las mañanas ¿Quieres que acomode la mercancía? - pregunto Lincoln mientras entraba en la tienda.

- no hace falta Lincoln puedes irte y decirle a Cleo que cierre la tienda, ya la acomodaremos mañana y de nuevo muchas gracias Lincoln- contesto Clyde antes de terminar la llamada.

- mi padre ¿te dijo cómo quiere acomodado esto? - pregunto mientras se recargaba en el mostrador.

- tu padre dijo que lo acomodarán mañana, que cierres la tienda y ya que solo tenía que recibir la mercancía me voy a descansar de nuevo, así que adiós Cleo- dijo Lincoln mientras comenzaba a caminar con dirección a la puerta pero fue detenido por la voz de Cleo.

- espera - dijo Cleo mientras se acercaba a Lincoln.

- ¿Que su sede? - pregunto Lincoln.

- te irás así nada más sin despedirte - contestó Cleo mientras se acercaba más a Lincoln.

- creo que ya te dije adi...- trato de decir Lincoln pero fue interrumpido por Cleo la cuál le dio un beso en los labios.

- listo ya puedes irte a descansar - dijo Cleo mientras se separaba de Lincoln y se dirigía al mostrador.

- sabes que odio que hagas eso, además que no debés - dijo Lincoln mientras retomaba su camino hacia la  puerta.

- te quiero tío Lincoln - dijo Cleo en forma coqueta mientras se volvía a recargar sobre el mostrador.

- como sea - contesto Lincoln mientras  salió de la tienda.

Lincoln comenzó a caminar de regreso a su departamento  el único pensamiento que tenía en su mente era volver a dormir hasta observo a un padre cargando sobre sus hombros a una niña mientras otra estaba tomándolo de la mano los tres se encontraban riendo, el pensamiento de querer volver a dormir  fue sustituido por varios pensamiento ¿ Que aspecto tendrían sus hijas en este momento? ¿Sabrían algo de el? ¿ En donde estarian? ¿Cómo hubiera sido su vida si ellas estubien con el? ¿Hubiera sido un buen padre?¿Sus hermanas tendrían razón?, Esta eran las mismas preguntas que invadían su mente cuando observaba a una familia, este era el motivo por el que Lincoln no salía durante el día de su departamento ya que él simple echo de ver a una familia lo hacia recordar a sus hijas esto es algo que a Lincoln le molestaba, no solo no conocia el nombre de sus hijas, sino que además solo las avía visto una solo vez.

- nesesito un cigarrillo - dijo Lincoln mientras retomaba su camino hacia su departamento.

Después de unos cuántos minutos Lincoln se encontraban frente a la puerta de su departamento buscando sus llaves, al encontrarlas abrió la puerta y procedió a entrar, como era costumbre para Lincoln se dirigió al que era su estudio de pintura, preparo un lienzo tomo su paleta de pinturas encendió un cigarrillo y comenzó a pintar, cada pincelada que Lincoln daba la pintura iba cobrando forma sus pinceladas eran suaves y firmes, el estaba pintando a una mujer cubierta solamente con una manta blanca mientras caminaba por un campo lleno de diversas flores, mientras colocaba más pintura en su paleta escucho que el teléfono de su departamento sonaba.

- contestadora es tu momento de brillar - dijo sarcásticamente mientras  tiraba la ceniza de su cigarrillo.

Al no tomar la llamada está fue directo a la contestadora.

- dios no puedo creer que este dejándote un mensaje......hola Lincoln soy Lori - al escuchar este nombre Lincoln abrió los ojos de par en par - me costó mucho trabajo encontrarte y más trabajo aún obtener tu número de teléfono.....se que te dije muchas cosas.....pero...dios porque es tan difícil..... nesesito que cuides a mi hija....tu hija....Por unos días....- al escuchar esto último Lincoln dejo caer su cigarrillo y estuvo apunto de arruinar su pintura por la impresión