La mañana parecía bastante tranquila, hasta que el cuarteto escuchó el inconfundible "permiso" de Yoongi, y oyeron la puerta abrirse. Los cuatro habitantes del bus ya estaban en pie, y Jimin salió a atender. Era algo así como su tarea atender a quien llegara. Yoongi traía un gesto extraño, como que hubiese estado fingiendo seriedad, o bien, Jimin lo conocía tan bien que sabía que debajo de la línea severa en sus labios se escondía una carcajada a punto de salir.

- Necesito tener una reunión con ustedes

- Uhm... okay - Jimin se preocupó, sólo un poco - chicos, vengan acá

Jungkook salió del baño, en bóxer y con el cepillo de dientes en la boca, mientras que Taehyung salió del cuarto con el cabello enredado y cara de sueño. Jin apareció al par de minutos, con pijama y pantuflas.

- Hm... nosotros dijimos hace tiempo atrás, que siempre que pudiéramos cooperar con el ahorro del circo y con la economía, lo haríamos, ¿verdad?

- Sí - respondieron tres, y Taehyung asintió, sumándose a la unanimidad.

- ¿Entonces por qué les está sobrando una cama?

- Uhm... - Seokjin pensó un momento, y miró a Taehyung, quien aún estaba afectado por la somnolencia y no pensaba adecuadamente. - Eh... sí, bueno, Taehyung y yo estamos durmiendo en la misma cama...

Taehyung reaccionó como si le hubiese caído un balde de agua fría. Abrió los ojos a más no poder, y luego, comenzó a sonreír como un bobo. Debía reconocer que amaba que Jin no lo negara, se sentía reafirmado.

- Bien, tenemos que darle un uso a esa cama. ¿Prefieren que llegue alguien nuevo, o sacar la cama a otra casa?

Los presentes observaron a Taehyung, esperando una respuesta, pues era el dueño del lugar.

- Hm... creo que es mejor que la saquemos de acá. Nos falta espacio para la ropa, y todo eso...

- Bueno, ya le encontraremos dueño. Gracias chicos - Yoongi dijo, sonriente, y dando palmaditas en el hombro de Taehyung. Les dio instrucciones de dejar la cama desarmada afuera cuando pudieran hacerlo, y después de que abandonó la casa, hubo un silencio incómodo. Seokjin miraba el techo, mientras Taehyung tenía los ojos clavados en el piso, ambos bajo el atento juicio de Jungkook y Jimin.

- Estoy feliz por ustedes, muchachos - exclamó Jimin, abrazando a ambos. - Yo ya sabía que pasaba algo entre ustedes, pero me alegra que sea oficial

- Sí, también me alegro mucho, ¡ahora vamos a poder hacer competencia de gemidos! - Jungkook golpeó la espalda de Taehyung, quien enrojeció, mientras Seokjin sólo se rió.

- Hum... en realidad no es oficial... Seokjin no me ha dicho que sí - Taehyung explicó, rascándose la nuca. Seokjin miró al piso, y sonrió.

- Vamos Jin hyung, ¿qué estás esperando? - le dijo Jimin, bromeando con la clara intención de que le hiciera caso. - Taehyung es un buen tipo

Taehyung enrojeció aún más, y miró a Seokjin, quien sólo sonreía, dulcemente, pero en cierta forma evitándolo. Regalaba su sonrisa a Jimin y Jungkook, como queriendo decirles que no se preocuparan por algo como eso.

- No pensé que tendría que responderte, Taehyungie. Siempre ha sido un sí

El rubio se precipitó a abrazarlo por la cintura y lo levantó del piso. Jimin sólo consiguió suspirar con un "aaaaaw" enternecido, y comenzó a aplaudir, seguido por Jungkook.

La celebración terminó abruptamente cuando Seokjin se ofreció para preparar desayuno. Jimin miró a Taehyung con un gesto aprobatorio, levantando ambos pulgares, y luego partió a ayudarle a su hyung.

~

Los platos estaban limpios y la casa impecable para cuando Yoongi fue con otros artistas a sacar la cama de la casa. Seokjin se había dedicado a lavar los platos, mientras que Jimin hizo aseo y Jungkook desarmó el catre. Taehyung estaba poniendo la ropa y las cosas que guardaría en la nueva habitación dentro de unas cajas.

Namjoon entró junto a otro muchacho, y saludó a quienes estaban adentro. Le pidió a Jungkook que lo ayudara a levantar el otro extremo de las piezas de la cama para poder sacarla, pero Jungkook lo miraba con recelo. No conseguía quitarse esa espina que tenía con él desde el día que lo vio tan cariñoso con Jimin tras bambalinas.

- ¡Jungkook! - Namjoon tuvo que repetirle para sacarlo de su estado pensativo

- ¿Qué quieres?

- ¿Cómo que 'qué quieres'? Ayúdame a sacar la cama

- Sácala tú

Jimin llegó al escuchar el diálogo. Era evidente que las cosas estaban tensas, vio a Jungkook mirando a Namjoon con odio, mientras que el mayor parecía algo confundido por la forma de responder del muchacho.

- Jungkook, por favor ayuda a Namjoon, así vamos a poder mover nuestras cosas a esa pieza...

- ¿No estabas trapeando el piso tú?

- Jungkook... - Jimin se sintió muy mal, Jungkook estaba hablándole de forma muy despectiva. Al ver su gesto herido, Kook murmuró un "disculpa" y levantó las maderas de la cama para sacarla de la casa. Namjoon se rió, lo cual enfureció aún más al castaño, pero no quiso seguir actuando como un idiota, no después de tratar mal a Jimin.

Aclaró su mente y concluyó que no tenía ninguna razón para comportarse así. Todo estaba en su imaginación.

Dejó las piezas de la cama afuera y volvió a entrar, encontrando a Jimin fregando el piso muy rápido y con fuerza. Lo escuchó inhalar, y su nariz hizo un sonido húmedo. Había estado llorando, era obvio. Jungkook se acercó por atrás y le acarició la espalda. Jimin dio un pequeño sobresalto, pausó lo que estaba haciendo, y luego continuó trapeando.

No estaba realmente enojado ni triste por la actitud de Jungkook. Estaba destrozado porque sentía que lo merecía. Había estado engañando a Jungkook desde el principio. Ya estaba con Namjoon, como amigos con beneficios, cuando empezó la relación con Kookie, y jamás pudo soltar al mayor.

~

Jimin había estado revolviendo la tierra con los pies sin saber exactamente qué hacer después de citar a Namjoon detrás de la carpa. El hombre llegó puntual, sin embargo, Jimin estaba atrasado en lo que respectaba a tomar la iniciativa en la conversación.

- Bueno, ¿y? - preguntó el más alto, intrigado por el misterio de Jimin

- Voy a comenzar una relación

- ¿Con quién?

- Jungkook

- Ah, entiendo. Deberíamos cortar esto entonces - dijo Namjoon, con una sonrisa comprensiva y la actitud más positiva que se podía imaginar. Namjoon no mezclaba las cosas, si eran amigos con beneficios, sabía que no debía involucrarse demasiado, porque en cualquier momento eso acabaría, y debía tomarlo bien.

No estaba ni cerca de estar enamorado de Jimin.

- Uhm... es que no puedo

- Jimin... ¿quieres tener novio y además seguir con esto?

- Sí... -respondió, avergonzado

"Qué goloso" pensó Namjoon, "lo quiere todo y no sacrifica nada". Namjoon se rió, y pese a que lo consideraba una mala idea, aceptó. Él no tenía que explicar nada a nadie, sería Jimin quien tendría que rendir cuentas después.

Después de conocer a Jungkook... inevitablemente Namjoon sintió culpa al ver lo dulce que era con Jimin, cuánto lo amaba, con cada gesto.

No merecía que le mintieran.

~

Jungkook entró cautelosamente al cuarto que compartía con su novio, y al verlo sentado en la cama, se acercó a acariciarle los hombros. Jimin estaba tenso, los músculos duros, y una actitud completamente cerrada.

- Kookie, no - le dijo Jimin, con un tono de voz severo

- Lo siento, Jiminnie

- Hablaremos después, ¿sí?

- Uhm...

Jungkook estuvo toda esa tarde pensando en la reacción que tuvo. Debió ser más humilde, ayudar a Namjoon sin chistar, era mayor y también tenía más experiencia en el circo, debía ser respetado. Pero no podía evitar tener esa sensación punzante de sospecha, que llevaba consigo durante mucho tiempo.

- Me gustaría poder hablarlo ahora...

Jimin suspiró, estuvo un momento en silencio, y luego invitó a Jungkook a sentarse junto a él. Las manos del más joven temblaban, y con cada segundo que pasaba, Jimin comenzaba a arrepentirse, al ver la ansiedad plasmada en el rostro de su novio, sus ojos brillantes, los dientes apretados, los labios escondidos, y todo el rubor de sus mejillas había desaparecido.

No volvería a jugar con él, no volvería a mentirle.

Finalmente se confesaría.

~

Ken estaba ocupado, por lo que, debido a su ausencia, Taehyung inmediatamente se ofreció a ayudar a Seokjin a ensayar, como forma de mantener el ritmo y también para entretenerse en algo más. Estuvo trabajando en las costuras durante toda la tarde, y la tarea rutinaria lo dejó un poco agotado.

Después de que Seokjin practicó sus saltos, Taehyung quiso atreverse a intentarlo. Llevaba un buen tiempo con ganas de usar el trapecio, como en épocas anteriores. Quería sentir la adrenalina que extrañaba.

- Hyung, quiero saltar también, ¿me recibes?

Seokjin lo miro, confundido. No se suponía que hiciera una petición como esa.

- No, Taehyung, no sabes saltar

- ¿Cómo que no sé? Toda mi vida he saltado - sonrió confundido, también. No esperaba que Seokjin se negara.

- Pero hace tiempo que no lo haces, y en este momento no eres trapecista, puedes lesionarte

- Hyung, sé hacerlo, ya te dije...

- ¡No, Taehyung, entiende!

Seokjin le contestó como nunca lo había hecho. El muchacho simplemente se quedó en silencio, suspiró y bajó la escalera. Jin bajó inmediatamente, notando la angustia en la mirada del menor y en las cosas que no decía.

El rubio caminó rápidamente hasta la casa rodante y Jin lo volteó, para poder conversarlo. No era algo que podían dejar pendiente así.

- Lo siento, TaeTae, pero prefiero que no saltes...

- No sé qué te ha dado el derecho de creerte tanto. Sí, eres genial, todos lo sabemos, pero los demás también podemos hacerlo. Dejaste a Hobi sin saltos, todo por querer ser tú el único que lo haga

Seokjin lo escuchó en silencio. No había visto a Tae así, jamás, tan ofuscado y con una expresión de decepción. No lo esperaba, pero sí lo entendía.

- Lo siento, Taehyung

El muchachito no dijo nada. Simplemente entró a la casa y fue al cuarto, que compartía con Seokjin, pero el mayor no lo siguió. Continuó practicando sus saltos, solo, y una vez que cayó la noche, volvió a casa a cenar.

~

Al llegar, Jimin estaba llorando en su pieza, Taehyung estaba echado en el sillón con cara de pocos amigos y Jungkook no estaba allí. Era una atmósfera muy extraña, incómoda y Seokjin necesitaba romperla para entender qué pasaba.

Se sentó junto a Taehyung, acarició su muslo, y el muchachito se dejó. Miró su mano, y luego descansó su cabeza en el hombro de Seokjin, rendido. El mayor sonrió al fin, con el alma volviendo a su cuerpo. Buscó el rostro de Taehyung con el suyo, y lo besó suave en los labios.

- Aún estoy enojado - dijo el muchachito, haciendo un mohín que se deshizo en una sonrisa al ver el rostro preocupado de Seokjin. No le duraba mucho el enojo, en realidad.

- Pensé que tendría que dormir en el sillón - Seokjin le dijo.

- Nunca, amor. De hecho, te extrañaba. Perdóname, ¿sí?

- Eres una dulzura... no hiciste nada malo, tú perdóname a mí

Taehyung sonrió. Aún creía que Seokjin había sido un poco egoísta al no dejarlo saltar, pero no se ahogaría en esos pensamientos. Después de enfriar su cabeza, tenía la impresión de que Jin buscaba protegerlo de lesionarse o hacer un mal movimiento, y no necesariamente lo hacía por mala persona. Lo preocupado y amoroso que era con él, le impedía pensar que Jin llegase a ser un aprovechado.

Buscó arrullo en el hombro del mayor y cerró los ojos por unos minutos. Tener a Seokjin a su lado se sentía tan bien, escucharlo respirar, sentir su aroma, dejarse acariciar. Rompió su estado de relajación dando un saltito, recordando algo muy importante.

- Oye, Jimin está mal, y no ha querido hablarme... terminaron con Jungkook. Ahora Kookie se fue a dormir a la carpa de los polvos.

- ¿Qué? Oh, dios... ¿crees que sea por lo de-?

- Sí, eso creo. Me siento mal por no haberle dicho nunca a Kookie...

- No, Tae. Jimin debía hacerlo.

- Tienes razón...

Taehyung recogió sus cosas y luego fueron rumbo a dormir, no sin antes decirle un "buenas noches" a Jimin a través de la cortina, y el chico les contestó con amargura. Jin preguntó si necesitaba hablar, pero Jimin les dijo que al día siguiente conversarían, que no se preocuparan. No insistiría, lo mejor sería dormir un rato, y descansar de ese día cargado de emociones negativas.

Cada uno se puso la ropa de dormir, y se metieron a la cama, buscando contacto sin ahogarse, dándose un abrazo suelto con brazos y piernas enredadas.

- ¿Deberíamos haber entrado igual con Jimin?

- No, dejémoslo procesar todo esto, démosle espacio. Mañana hablaremos con él

- Okay... - respondió, algo inseguro

- Tranquilo, Tae. Jimin estará bien - Seokjin tomó su mano y la entibió con la suya. Las manos de Taehyung eran grandes y suaves, pero un poco heladas.

- No, eso lo sé. Sólo... pensaba en otra cosa

- ¿Qué ocupa tus pensamientos, TaeTae?

- Sólo... nunca me rompas el corazón, Jinnie hyung

- Tae...

¿A qué venía esa petición? El mayor lo envolvió en sus brazos firmemente. Lo apretó contra su pecho y repartió mil besos en sus mejillas, nariz, frente, labios y cuello. Taehyung comenzó a reír, cosquilloso y con escalofríos al sentir los besos bajo su oreja

Seokjin escondió su cara en la clavícula de su novio y se dedicó a besarlo allí, mientras el chiquillo cerraba sus ojos y dejaba salir pequeñas risitas. Estaba feliz de sentir a al mayor tan cerca, amándolo de esa manera. Se durmió, sin escuchar que Seokjin le confirmara con palabras que no le rompería el corazón.

Porque Seokjin no podía estar seguro.

Hola lectores/as!

Aquí estoy, posteando un capítulo de relleno pese a haberlos/as hecho esperar tanto. Aún no tengo internet y me las arreglo en forma artesanal u.u

Estoy con un humor de mierda tras saber que Bangtan no viene a mi país. Lloré un rato :c supongo que sirvió.

El siguiente cap está casi listo, sólo le falta forma. Quiero subir otros TaeJin también que tengo escritos desde hace mucho. Veré si alcanzo a subirlos con esta conexión ortiva.

Besos, los/as quiero mucho y pido perdón por estar así tan apagada y aplastada :c