Capítulo Final (6)
Tengo actualmente 28 años, estudié y terminé en muy poco tiempo la carrera de Ingeniería Mecánica el año en que llegué a la Tierra luego de mi viaje espacial, en el año 2025. Fue un gran año para mí, debo admitirlo; aún me contacto con los Autobots y he visitado su planeta infinidades de veces desde aquel momento (en el que volví de su planeta), trabajo la Ingeniería junto a Ratchet, lo que me ha enseñado aún más y gracias a ellos, la tecnología humana sigue avanzando con éxito. La base que prometí construir y activar para los Bots, está a medio camino para ser terminada, gracias a la ayuda de Ratchet quien ha estado viniendo a la Tierra para ayudarme con la construcción de la misma.
Al terminarlo, puedo contar con la venida directa a la base, de los Autobots y cualquier otro buen cybertroniano que necesite de refugio directo temporal, y ¿recuerdan el libro que mencioné? Es casi del tamaño de una gran enciclopedia, puedo decirles que contiene mucha información veraz de Cybertron y sus habitantes, y no solo eso ¡también contiene la creación del Universo! No pienso publicarlo, o tal vez no aún, le falta información y considero que aún no están del todo listos para saber su contenido, pero ya me he desviado del tema original.
Conozco a Miko, Rafael y Jack, son aún más adultos que yo (tienen más edad que yo, a excepción de Raf, él tiene mi edad actualmente), y ahora trabajan para el gobierno estadounidense como agentes, al igual que Fowler y, de hecho, me piden trabajar de agente especial también, pero no pienso aceptarlo, tal vez luego, aún quiero seguir ingeniando y promoviendo la tecnología al igual que Ratchet en Cybertron... como civil.
Esta es mi historia, y ahora la conocen; me recordarán cada vez que escuchen mi nombre en cualquier lugar y sabrán que me ubico en el país suramericano, Venezuela. Si tan solo desean conocer alguna información del que no sepan sobre Cybertron y sus habitantes, pueden contactarme y si no presentan maldad en su interior, pueden estar seguros de que se los daré con todo gusto, por ahora me despido y recuerden, Nunca Abandonen sus Sueños.
-Madeleine S. Polanco.
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