🌸Capítulo 22🌸


1/2

(Perdón si les llegó la notificación que había actualizado, le había dado en guardar pero se publicó, ahora sí pueden leer en paz (づ。◕‿‿◕。)づ)






-¡MinMin, Bae! Los extraño mucho

-Tambien nosotros, princesa.

Tanto _______, como Bąękhyun y Xiumin ahora se encontraban en una videollamada, ya que los mayores estaba en exámenes y casi no podían comunicarse o ir a ver a la menor, por ello una vez que fueron a ver a la pequeña, los tres acordaron en hacer una videollamada al día, ambos instalaron una aplicación y por esa vía era más fácil comunicarse.

Aunque al principio la pequeña estaba perdida y tuvo que pedirle ayuda a Bae, ahora podía llamarlos siempre que quisiera, pero usualmente las horas de las videollamadas eran en la tarde. Pero gracias a qué hoy era domingo podían tener su videollamada en la mañana, claro, después de haber desayunado.

Por lo que los tres se encontraban en una muy linda conversación, hablando de trivialidades y escuchando los relatos de las niñas y sus travesías en aquella casa.

-¿Entonces NamJoon Hyung te está enseñando? -preguntó Baehyun.

-Sipi, igual Kooki me ayuda a veces, pero luego se tira al suelo diciendo que soy un caso perdido-explicó la pequeña antes las caras divertidas de sus amigos- pero yo no soy un caso perdido, yo soy _______ ¿Verdad? -ella estaba verdaderamente confundida.

-Claro, pequeña -respondió Xiumin reteniendo una risa- Creo que Jungkook lo que necesita es paciencia y enseñar bien -se burló Bae.

-Pero a mí me gusta estar con Kooki y NamNam, me gusta escucharlos hablar y así puedo estar con ellos -la pequeña sonrió dejando ver sus hoyuelos.

-Basta, si haces eso solo me darán ganas de apachurrarte y no estoy contigo-refunfuño MinMin con un puchero- Eres un adulador y dramático de primera Xiumin -negó Bae- Já, como si no lo escuchara hablarle a _________ con su voz dulce -se defendió MinMin, haciendo reír a la pequeña y a Bae sonrojarse.

-Se supone que estamos hablando de otras cosas, no de exponernos unos a otros -y los tres rieron porque siempre que hablaban saltaban sus temas como un grillo en hoja en hoja.

-Lo importante aquí, es que está niña aprenda inglés -la pequeña puchereo.

-¡Pero es muyyy difícil! Con trabajo hablo bien este para que vaya a hablar otro -la pequeña dramatizó, haciendo que los mayores negara divertidos.

-La escuela, es la escuela -dijo Bae como si eso explicara todo.

-No me gusta la escuela -la pequeña refunfuño.

-A mí tampoco, no es como si amara que me llenen de tareas y proyectos -Xiumin parecía querer deshogarse- A mí tampoco me gusta pero si quiero tener un buen empleo o hacer algo de provecho tengo que estudiar.

-El sistema educativo apesta, lo único que se hace ahora es memorizar, no les importa enseñar mientras aprobemos, ahora un número es lo que determina nuestra inteligencia -bufó Xiumin de pronto irritado.

-No se que es eso, pero buuuu-abucheó la pequeña sin comprender bien las palabras de su MinMin.

Xiumin suavizó su mirada al escuchar y ver a cierta pequeña no saber nada pero aún así apoyándolo. Se sentía por alguna razón querido y con un sentimiento cálido con solo verla y escucharla.

-Creo que alguien no le fue bien en los exámenes-comentó Bae de pronto curioso.

-Lo siento, es que estoy algo irritado -se disculpó aborchonado y apenado.

-Tranquilo, solo desahógate ¿Verdad, pequeña? -La niña asintió sonriendo- pero ¿estás bien MinMin? -preguntó la pequeña ahora preocupada por su amigo.

-Si, solo algo frustrado y bueno indignado más que nada-se rascó el cuello nervioso- lo que pasa es que tuve un examen de Física pero el profesor me tachó la mayoría de las respuestas -explicó sintiendo otra vez un gran enojo- su argumento fue que no respondí las respuestas como estaban en el libro, y es que era un examen de 50 preguntas y lo teníamos que resolver en una hora, no es que sea una excusa pero las preguntas eran abiertas y todas tenían que llevar un procedimiento largo -bufó frunciendo el ceño ante las miradas de los contrarios- el caso es que resumí las respuestas para que me diera tiempo de resolver los ejercicios, pero el profesor dijo que debía de ser explícitamente como venía en el libro.

Xiumin había estado tan enojado cuando el profesor le dijo aquello, al parecer a ese viejo, porque si, era un viejo pelón de más de 50 años que pronto se iba a jubilar, solo le interesaba que sus estudiantes memorizaran un montón de teoría que no hacía más que usar un montón de palabras técnicas, que aprender y enseñar lo que realmente era importante en la materia.

No es que le deseara mal a aquel viejo pelón pero si se le iba el agua, la luz, el internet y si se quedaba sin papel de baño cuando fuera a cagar, no se quejaría.

-¡Eso es muy injusto! -pronunció la pequeña con un puchero y bufando- Ese maestro es malo, ni Jennie Noona es así -refunfuño la pequeña.

-Estoy con la niña, de verdad que no entiendo cómo hay maestros así-frunció el ceño Bae, disgustado- Ya sé, me fui a quejar con algunos compañero y con la dirección, pero dicen que así trabaja ese profesor y solo queda acostumbrarse -suspiró de pronto un poco triste.

-¡Seguro MinMin respondió todo correcto! Pero el profesor malo no le gustó-la pequeña trató de hacer sentir bien a su amigo, no le gustaba verlo así-Es cierto, no te desanimes, para la otra demuéstrale que Kim Min Seok no se deja vencer y puede con todo-animó el contrario, haciendo que Xiumin se sintiera querido.

-¡Daré lo mejor de mi! -asintió de pronto con las mejillas sonrojadas y con entusiasmo.

El tener a aquella pequeña haciéndole bulla y que su Hyung le dijera aquellas palabras, en verdad lo habían echo sentirse querido y un sentimiento lleno de fuerza y convicción lo embargó. Ellos no se habían sentido decepcionados con él, simplemente le habían dicho que no se rindiera y luchara, eso valía más que cualquier palabra y de la típica frase de "Estaras bien".

-No sé cómo es eso de la universidad, aún no entiendo bien eso, pero se que no todo se resuelve fácil, papá siempre me ha dicho que hay cosas que salen de nuestras manos-la pequeña movió sus manitos, de repente nerviosa y algo apenada, pero los contrarios prestaron atención, más MinMin- Por eso, yo creo en ti MinMin, sé que podrás demostraré a ese maestro malo que tú eres mejor y no te dejaras vencer -los ojitos de la menor brillaron y ambos se vieron enternecida y a la vez sorprendidos de las palabras de la pequeña.

-Gracias, mi linda princesa-agradeció honesto MinSeok, las palabras de la pequeña calaron en lo profundo de su ser- Para ser una niña tan tierna, sabes decir las palabras correctas en los mejores momentos-aduló enseguida Bae con aquella voz dulce que solo usaba cuando hablaba con la pequeña y otra personita.

-Eh, solo estoy siendo honesta-respondió la pequeña ladeando su cabeza, con sus mejillas en un fuerte color rosita y dejando ver aquellos hoyuelos que amaban ver los mayores-Una niña muy astuta.

Los tres rieron levemente ante lo dicho por Baek.

-Ya ves que si usas esa voz dulce con ella-MinMin no pudo evitar quedarse callado- ¡Oh vamos! Como si tú también no fuera condescendiente con ella-se defendió enseguida.

-¿Conde? ¿Cómo el conde Drácula?¿Qué tiene que ver un vampiro aquí? -la pequeña frunció el ceño confundida.

-Nada, nada...-restó importancia Xiumin- Bueno, ¿Qué tal si nos dices como es eso de que viste tu programa favorito... con quién habías dicho?

Preguntó Baek en seguida, llamando la atención de la menor y está asintió emocionada y muy entusiasta. Muy en el fondo, MinMin realmente le agradeció a su Hyung, pues aquellas palabras de la pequeña lo hicieron sentir sentimental, alguien creía y confiaba en él, es lo que no dejaba de pensar en su cabeza, y su corazón recordándole que había una pequeña personita especial que lo apoyaba.

-¡Vi dora la exploradora con TaeTae y Mimi! -chilló aún feliz por haber pasado un rato lindo con sus hermanos, aquellos que en un principio no se mostraron tan receptivos con ella.

-¡Owww! Ahora yo quiero ver contigo también Dora -chilló MinMin con una expresión soñadora- Viste que si eres un adulador de primera -resongó Bae, haciendo que la pequeña riera.

-Já, solo estás celoso que está vez yo la adulara -sacó la lengua infantilmente, haciendo que el Hyung del menor rodará los ojos.

-¡Yo quiero que vean conmigo dora! ¡Sería una tarde de amigos!-chilló emocionada la pequeña- ¡Si! ¡Eso sería genial! -MinMin asintió energético.

-¿También le dirás a Chanyeol, es tu amigo también no? -preguntó Bae curioso.

-¡Claro que sí! ¡Ustedes son mis primeros amigos! -la pequeña salto en su lugar emocionada.

-Bueno, pero solo espero que tus hermanos no nos interrumpan.

-Eso sería mucho pedir -comentó Bae, recordando cómo una vez habían visitado a la pequeña y estos no dejaban de interrumpirlos o entrometercerse en su conversación.

Tenía una ligera o muy grande sospecha de que estaban celosos porque la niña les prestará más atención a ellos ese día. Vamos, la menor siempre los ponía primero a sus hermanos, eran ellos los que se sentían celosos, no al revés.

Bueno, pero es que claramente, todos quería tener un lugar en el pequeñito -gran- corazón de ________.





(...)

Una figura masculina iba por los pasillos de la gran casa, ahora que vivía con su prometida, con su hija y sus hijos -pues ya consideraba a cada uno así- no podría estar más que feliz. Además estaba tan alegre de la conexión y la relación que su primogénita estuviera desarrollando con los chicos. Era algo digno que merecía su total atención.

Las risas y algunas frases fuertes sonaban desde la habitación de su retoño, curioso se acercó a la puerta de color turquesa.

Estaba mal espiar a su hija, pero era una niña de 9 años, necesitaba ser vigilada, amada y además su instinto paterno salía siempre para querer siempre ver por su bien. Así que disimuladamente se acercó y vio como la pequeña parecía estar en una videollamada con otras dos personas, chicos a juzgar por las voces.

Al instante su alerta paterna se encendió, pero trato de tranquilizarse, obviamente su pequeña nunca estaría con malas personas, además ella casi no salía de la casa ¿Verdad? Entonces, como abría podido conocer aquellos chicos ¿Por la escuela? ¿Alguna amiga se los había presentado? ¿Internet?

Definitivamente se dió cuenta que no conocía mucho de la vida escolar de su hija y eso le preocupó, ¿Abría algo que no supiera de su pequeña bebé? ¿Le estaría pasando algo? ¿Estaría mal en algún aspecto?

No lo sabía, pero de qué lo descubriría, lo haría.

-¿Pequeña? -tocó aquella puerta pidiendo permiso de entrar- ¿Papi? Oh, pasa -le dijo aún con su voz confundida- ¡Nos vemos MinMin, Bae! ¡Luego hablamos de lady Bug y las teorías que tenemos! -se despidió de los que al parecer había estado hablando.

-¿Appa? ¿Pasa algo? -preguntó la pequeña levantándose de su cama para ir a abrazar a su progenitor.

-¿Qué tiene que pasar para que quiera ver a mi preciosa bebé? -preguntó en cambio y muy dentro suyo una voz le reprochó el no pasar más tiempo con su hija para que está pensara que tenía que pasar algo para ir a verla y estar con ella.

-Uh, no sé -respondió de pronto tímida por haber dudado de que lago estuviera mal- Tranquila, cielo, solo quiero saber cómo estás y como pasas las cosas aquí con estos nuevos cambios que han pasado.

Realmente aquella conversación debió tenerla mucho antes con su pequeño retoño, ¿Cómo no se había dado cuenta que una plática entre padre e hija era fundamental? ¿Acaso, la comunicación no era lo mejor en una relación? ¿Por qué no había podido hablar con su hija así? ¿Desde cuándo había descuidado tanto a su pequeña bebé?

-¡Oh! Yo estoy bien papi, me la pasó bien con mis hermanos ¡incluso ví Dora la exploradora con TaeTae y Mimi! -le contó entusiasmada y Jinyoung no se pudo sentir más alegre con la bonita forma de expresarse de su hija.

-¿En serio? ¿Y qué más? -preguntó alentandola a seguir.

-¡Yonnie me calmó cuando tuve una pesadillar mala, muy mala! Él me abrazo y la pesadilla mala no volvió-relató haciendo gestos con sus manos- Cielo, ¿Por qué no fuiste conmigo para que yo te ayudará con eso? -preguntó extrañado y a la vez un sentimiento de rechazo nació en él, su bebé siempre iba con él cuando tenía pesadillas.

¿Por qué no había sucedido lo mismo cuando la tuvo esta vez? ¿Por qué no fue con él?¿Había echo algo mal?

-Es que...Nene dormía contigo, y-yo no quería molestar-confesó con sus manitas haciendo puños sus manos.

-Terroncito, nunca serás una molestia, siempre estaré para ti cuando me necesites -Jinyoung la tomó entre sus brazos, arrullandola y _______... Ella se sintió como si fuera un bebé que podría llorar y que su padre Siempre la calmaría entre sus brazos.

¿Había algo más hermoso que eso? ¿Un padre amando a su hija con un amor puro y lleno de paternidad? Aquellas almas que en un comienzo tuvieron que aguantar la perdida de una persona amada, de un pilar en sus vidas, ahora podían tener un instante a solas para poder estar juntas. Pero ahora no estaban solos, unas 8 personitas en sus vidas se habían colado y quién sabe, tal vez más adelante podría haber más con ellos.

Después de aquel momento siguieron hablando, la pequeña contándole anécdotas que tuvo con cada uno de sus nuevos hermanos y su padre nunca se sintió más integrado a la vida de su hija que ahora.

Hasta que llegó el tema que la pequeña nunca quería tocar, pero debía enfrentar y decirlo.

-Mi niña ¿Quiénes eran aquellos con los que hablabas antes de que yo entrara? -la duda brillaba en los orbes de su progenitor.

-¡Oh! Son mis amigos ¡MinMin y Bae! Aunque Channie no estuvo en esta llamada, también es mi amigo-la pequeña sonrió entusiasmada por hablar de sus amigos.

No notó la mueca en la cara de su padre.

-Oh, y esos amiguitos tuyos ¿Cuántos años tienen? ¿Cómo los conociste? ¿Son de tu edad? ¿Hace cuántos los conoces? -atacó con preguntas.

La pequeña mordió su labio inferior en nerviosismo. Definitivamente no sabía cómo contarle, no los había conocido en la mejores situaciones pero vamos, las mejores personas se conocen en las situaciones más extrañas o difíciles de la vida.

-Son amigos de mis hermanos -resumió sin querer dar detalles- estudian en la universidad con ellos, pero son buenas personas y siempre hablo con ellos -dijo con sus hoyuelos al aire.

Oh, pero para un padre y como era de sobreprotector Jinyoung, pareciera aquel su hija le hubiera dicho que andaba con un muchachada de Universidad y que se la quería llevar. Definitivamente no le agarraba en nada que su amada hija se junta con aquellos chicos.

-¿Qué? Mi niña ¿Ellos no han tratado de hacerte daño? ¿No te han pedido cosas extrañas? ¿Te han tratado distinto?¿Se te han insinuado? -preguntó paranoico y la menor frunció el ceño sin entender.

-¿Qué? ¿Appa...?

La pequeña no pudo decir nada cuando su padre se levantó de la cama repentinamente paniqueado y con una expresión molesta y algo perturbada. Había imaginado mil y un escenarios y en ellos, su hija no acababa de lo más sana.

-¡No! No, no, mi niña, no puedes ser amigos de ellos, simplemente no puedo permitir que mi hija sea amiga de esos... Esos...

No encontraba las palabras indicadas para describirlos, no los conocía, pero no podían tener buenas intenciones, por dios, su hija era una niña de 9 años, ¿Por qué unos universitarios querrían estar con ellas y hacer amigos?

-Papi...no entiendo -la pequeña lo miraba confundida y un poco asustada.

-Bebé, ahora mismo cortas esa disque amistad, no puedes ser amigos de ellos ¿Escuchaste? -ordenó alterado con un tono de voz un poco alto.

-¡¿Qué?! Pe-pero... ¡No! Me niego, yo no quiero perder mi amistad con MinMin, Bae y Channie -Simplemente la pequeña se le rompía y apretaba el corazón con la sola idea de no poder ver más al Señor Dumbo...a MinMin....y a Bae.

No podía permitir que su padre le quitará los únicos amigos que había echo, si, eran de la edad de sus hermanos, si, había una diferencia de edad, pero ¿En qué afectaba tener unos años de edad cuando se trataba de amistad? ¡Su padre era amigo de señores viejos! ¡De señoras con más años que el Señor Lee o la Señora Choi!

No podría prohibirle su amistad con sus únicos amigos, con las únicas personas que le dieron una amistad sincera, que la aconsejaban y trataban de hacerla sonreír, simplemente no podía.

-¿Qué? ¡Sungk _______! En este instante cortas cualquier lazo con aquellos jóvenes -ordenó alterado, era la primera vez que su hija se negaba a algo que él explícitamente había ordenado.

-¡No! No lo haré... Ellos...ellos son muy valiosos para mí...son mis amigos, no puedes prohibirme tener una amistad con ellos -respondió la menor con su mirada alterada y su pulso acelerado ante la idea que su padre la alejara de sus únicos amigos.

-¡Claro que puedo! Soy tu padre -respondió frunciendo el ceño.

¿Cómo habían llegado a esa situación? ¿Por qué su hija se exaltaba tanto por una amistad cualquiera? ¿Qué importancia tenía? Solo eran unos chicos, su hija podría hacer más amigos, no era el fin del mundo.

Claro que no era el fin del mundo, pero para esta pequeña niña de 9 años que solo había tenido una amistad en su corta vida, era lo peor que le pudieran hacer, decirle que cortara cualquier lazo con unos chicos que la habían ayudado tanto e incluso aconsejado...eso era una traición y no estaba dispuesta a aceptar aquello.

-Papá...ellos son mis amigos, son buenos, no los conoces ¿Por qué me pides hacer algo así? -la voz de ella pequeña tembló y su corazón se oprimio.

-No quiero escuchar nada ______, no puedo permitir que mi hija sea influenciada por unos chicos que son más grandes que tú-habia Sido su argumento.

-¡No entiendo! No me quieres escuchar, me dices que no puedo tener una amistad con ellos ¿Por qué? E-ellos son valiosos para mí -susurró, y su corazón latió oprimiendose más.

-Por favor hija, podrás hacer más amigos me la escuela, estoy seguro que tienes de sobra amigas ¿Para qué los quieres a ellos? -el tono autoritario, como si siempre tuviera la razón, caló en lo profundo de la pequeña.

¿Porque hablaba como si la conociera del todo? ¿Acaso tenía alguna idea de lo que pasaba? Bien, ya no quería quedarse callada, le iba decir cada cosa que su pequeño corazón había guardado con respecto a lo mal que lo había pasado en la escuela.

-¡No tengo amigas, no tengo amigos! Ya no quiero seguir diciendo que si los tengo cuando no es así, cuando esas niñas me pegan, me lastiman, cuando mi maestra Lisa siempre me ayuda con los rasguños y golpes, cuando la directora no me hace caso y dice que solo estoy buscando atención -su voz era muy inestable, cualquier palabra que quería decir Jinyoung murió al ver a su hija alterada y hablado con su corazón.

- ¡Ellas me odian! Dicen que soy un bicho raro, ¿Por qué tengo que ser rara? ¿Está bien ser rara? ¿Es normal que te odien por reír mucho, por sonreír? Y-yo no quiero que me peguen, ya no quiero que tiren mi almuerzo, ya no quiero que me empujen, ya no quiero que me vuelvan a decir que... mamá se fue porqué no quería a una hija como yo -su voz sonó lastimera...pero sus ojos ya no tenían brillo, se había pagado cualquier emoción, una barrera se había puesto- odio que mi pecho duela ¿Por qué duele? ¿Por qué mi garganta no deja de sentirse rasposa? Ya no quiero temblar, me duele cada palabra, nadie me toma en cuenta, solo existo y parece como si mi voz no la quisieran escuchar ¿Papá? Papá... no tengo amigos, me pegan en la escuela, mis maestras son mis únicas amigas ahí... Y aún así mi corazón duele, pero Bae, MinMin y Channie me dieron su amistad, ellos me dieron la esperanza de que tal vez pueda ser una niña normal...aunque todos me digan que soy una niña rara. Papá, mis únicos amigos son mayores que yo... ¿Eso me hace ser rara? ¿Eso me hace ser mala? ¿Está mal no querer amigos o amigas de mi edad? Aún así...ellos me aceptaron, se que soy una niña de 9 años, pero ellos aceptaron ser amigos de una niña, de mi...de una niña rara.

Las palabras que alguna vez quisieron dejar la boca de su padre, ahora siemplemente se había quedado helado.

-Papá, ¿está mal que sea una niña rara?

Simplemente _______, solo se dejó caer en su cama, pidiendo a su padre que se fuera...

-Papá, vete, por favor...-pidió en un susurro que simplemente hirió el corazón del hombre.

-Mi niña...-la pequeña no lo quiso ver, no quería ver su cara, al menor por hoy solo quería permanecer en su cama.

Y su padre respeto eso, saliendo en silencio y dejando a una pequeña con su corazón doliendo horrores, pero no era la única, su padre estaba igual.

-Copito, tigresito... No me dejen, no me suelten...por favor solo quiero dormir -pidió en un susurro que si aquellos peluches tuvieran vida, siempre la sostendrían entre sus brazos de felpa.








"Encontrar un amigo, es
Igual que encontrar un tesoro"








.
.
.
.
Luna🌙

Espero les haya gustado el capítulo, en un rato les traigo la segunda parte, tranquilos que no los haré sufrir mucho👉🏻👈🏻

¿Saben? Realmente pensé mucho este capítulo, pero realmente es importante para la trama. Además no me gusta el drama la verdad y suelo hacerlo lo más corto o no tan sufrifle al menos😂

Gracias por leer💕

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top