—¿Qu–

—¡AhAhh!, ¡Chu¡Ah!, ¡AaHí!, ¡MhN! ¡MahAhs!

—…………

—Si que gime fuerte..

—Dejando eso de lado, Akutagawa, ¿De que estás hablando?

—Pues..no creas que es por ti, entiendo porque me dejaste y te lo agradezco, pero...hace años que estoy tomando antidepresivos sin que mí familia lo sepa, voy a terapia y todo, pero..nada parece servir y creo que ya estoy en riesgo mayor

En medio de la oscuridad de la habitación el albino lo abrazo fuertemente acurrucandolo en sus brazos, tiempo siendo novios y jamás se había dado cuenta de las terapias o de los antidepresivos que Akutagawa tomaba, se sentía el peor ex novio de la historia

—¿Qué puedo hacer para ayudarte?

—No lo sé..no sé si alguien me pueda ayudar, y tengo miedo de decirle eso a mí doctor, si lo hago me va a encerrar en un loquero

—Primero que nada, es manicopnio y te entiendo, cuando estemos en la universidad pasarás todos los recesos a mí lado, ¿Entiendes? No voy a dejar que te suicides, pero..¿Me puedes decir la razón por la que entraste en depresión

—No..no me siento listo para contarte.. tengo la suficiente confianza para decirme que atentó contra mí vida, pero no la suficiente para darte la razón

—..¿Es por eso que Chuuya es tan sobreprotector contigo?

—Si..nos conocemos de hace años y él sabe la razón

—Akutagawa..no te dejaré solo en esto, estaré a tu lado siempre, aunque ya no seamos novios, no significa que te dejaré sufriendo

—..Gracias

Susurró el pelinegro aferrandose a Atsushi, ambos tuvieron dificultades para dormir, no por la cercanía, los latidos, la respiración del otro, o la oscuridad, sino por los fuertes gemidos del castaño que se escuchaba en toda la casa, ambos podrían jurar que hasta los vecinos más cercanos podían escuchar a su amigo gemir como una zorra en celo. A Atsushi le hubiera encantado llegar a hacer eso en la cama con el pelinegro, había una duda que lo carcomia por dentro, ¿Akutagawa era de los que gimen como perra en celo igual que Dazai?, ¿O es de los que gimen bajito y avergonzados?

[ × × × ]

Al día siguiente Chuuya y Atsushi estaban desayunando en el primer piso

—¿Y Akutagawa?

—Seguía dormido, no quería despertarlo, se veía..cansado

—Te dijo la verdad, ¿Cierto?

—Pues..no toda, sólo me dijo que ya se está considerando un peligro para si mismo

—¿Ahora entiendes por que no quería que terminarás con él?.. Akutagawa se sentía mal y el hecho de que lo terminarás podría hacerlo sentir peor.. tenía miedo de que está vez él si tomara el valor para..ya sabes

—Entiendo..y no pienso dejarlo

—¿Te dijo la razón de por qué está así?

—No

—Entiendo..

—Cambiando de tema, ¿Y Dazai?

—Ah pues..él está muy cansado y un poco adolorido, así que estaba en la bañera, luego le llevaré el desayuno a la cama

—Te regaño por ser muy rudo, ¿Verdad?

—¡Y eso no es justo! Él era el que pedía más y más, es normal que quiera complacerlo, así que le di más, ¿Y ahora quién es el malo?, ¡¿Yo?!

—Pues honestamente creo que hasta los vecinos escucharon los gemidos de Dazai..¿Siempre fue tan ruidoso?

—No, las primeras veces no lo era, lo cuál me extrañaba ya que con lo gritón y exagerado que es..así que un día le pregunte de frente, pero no me respondio. Sin embargo a medida pasaba el tiempo, me daba cuenta que se aguantaba los gemidos

—¿Por qué?

—Aparentemente alguien le dijo que odiaba a los chillones en la cama, lo cual obviamente es mentira, así que le dije la verdad y ya no se contuvo

—Oh..