Karma paseaba sin rumbo por los pasillos, buscando algo interesante que hacer aunque tiene algo pendiente que tenia nombre y apellido. Nagisa Shiota.

Desde que ese pequeño llego, le intereso demasiado a Karma y logro que aquel pequeño liberara toda su rabia que tenia guardada dentro de si. Algo que era su objetivo y lo logro. Pero... El Ángel dejo sus blancas plumas para convertirlas en alas demoníacas? Era una incógnita que tenia Karma desde que hablo por ultima vez con Nagisa, el mismo lo había tratado diferente pero vamos, no le disgustaba para nada. Pero si le inquietaba.

Donde estará ahora... Pensaba Karma mientras escuchaba unos gritos provenientes del fondo del pasillo, por lo que se dirigió ahí por curiosidad.

-Ahora te arrepentís? Después de romperme todas mis cosas? -Decía con furia una voz muy conocida para el pelirrojo mientras escuchaba... Golpes?

-DEJAME!! -Gritaba una chica con un inmenso miedo hacia su agresor, que al parecer era Nagisa.

Karma se asomo cautelosamente al aula y se encontró con algo que lo dejo impactado. El pequeño Nagisa golpeaba a Kaede sin parar y salia sangre en la escena. Karma no veía bien la cara de Kaede pero al ver tanta sangre esparcida, era muy obvio que Nagisa le estaba dando el golpe de su vida. Karma sonrió, realmente cumplió con su propósito y luego se largo del lugar para esperar en la entrada del colegio a su instrumento.

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-Si que el kétchup funciona bien -Reía Kaede mientras se chupaba los dedos llenos del condimento rojo.

-Nagisa soltó una pequeña risita- jaja, si... Hey, tengo que irme. -Se dispuso a marcharse, no sin antes decirle a su amiga- Acordate, mañana falta al colegio y cuando asistas fingí mucho miedo.

-Dale! -Sonrió la de cabellos verdes para luego salir por la ventana con mucha agilidad.

Creo que Karma lo vio... Pensaba Nagisa mientras se dirigía a la salida de su colegio. Creo que ahora no sospechara...

-Nagisa! -El pelirrojo se acerco rápidamente a Nagisa con un semblante tranquilo- Te llevo a tu casa?

Vaya... Nunca pensé que fuera amable... No, solo quiere ganarte tu confianza, acuérdate Nagisa, juega su propio juego.

-Nagisa sonrió de lado con cierta lujuria- Y cuando lleguemos a mi casa, que piensas hacer? -Paso su dedo por su pecho llegando hasta el cuello donde paro.

-Hare lo que tu quieras...- El pelirrojo posos sus manos por la pequeña cintura del pequeño peliceleste.

-Entonces...- Nagisa coloco sus manos por las mejillas de Karma y las apretó con diversión- Quiero que me cocines algo dulce! -Y se escapo de los brazos del pelirrojo.

Vale, Nagisa en realidad es divertido con las personas que tiene demasiada confianza pero tenia que actuar diferente con Karma, así que, porque no mostrarle facetas de el diferentes?

Que le paso... Pensaba Karma DEMASIADO confundido con la reacción de Nagisa... Pero le pareció algo adorable...