Capítulo Extra.

En momentos como estos Gina y yo comenzamos a creer que realmente estámos malditas, malditas a hacer literalmente todo juntas y arruinarlo por nosotras mismas sólo para tratar de salirnos con la nuestra.

-Sabía que debí haberme casado en las Vegas.

-No me parece lo correcto pero parecer mejor que esto.- dijo Gina mientras se quitaba un guante.

-Cuando Tiago y Steven se den cuenta de esto, nos van a matar.- le dije mientras la miraba.

-No lo creo.- me respondio mientras se acostaba en el suelo.- creo que más bien nuestros padres lo harán antes.

-Si, en especial los mios, se que me culparan por estar aquí encerradas en una celda el día de nuestras bodas.

- Estoy comenzando a pensar que debí haberte tirado por aquellas escaleras.

Yo mire a Gina sorprendida.

-¿Desde cuando eres tan violenta?.

-Cuando tu novio es el chico más popular de toda la universidad tienes que aprender a defenderte.

-Eso es muy cool.

Ambas nos miramos después miramos los barrotes de la celda antes de volver la mirada entre nosotras, Gina soltó una leve risa y yo después reí a carcajadas junto con ella.

-Gina Parker y Hana Parker, son libres han pagado su fianza.

Ambas nos levantamos y corrimos afuera, pero nos detuvimos al ver a nuestros respectivos futuros esposo.

-Tenemos una explicación.- dijo Gina antes que yo.

-No es lo que parece, se los prometo.- continue yo.

Steven y Tiago se miraron entre sí antes de volver la mirada hacia nosotras, con un gesto Tiago me indicó que diera la explicación y vaya que sería una gran explicación.

Empezaré desde el principio, como sabrán después de que Tiago me pidiera matrimonio hubo un gran revuelo en mi familia, bueno y no sólo por mi si no también por Gina, al final nuestros padres solamente nos llenaron de condiciones, el matrimonio se haría hasta terminar la universidad, fueron tres largos años pero por fin había logrado mi cometido por lo que decidí volver a Londres.

-Mamá, papá.- dije mientras corría hacía ellos envolviendolos en un fuerte abrazo.- los extrañe.

-Nosotros también mi princesa.

-Papá voy a casarme.

-Ni me lo recuerdes.- dijo mientras hacía un gesto de disgusto.

- Hana.- me llamó mi pequeño hermano quien bueno ya no era tan pequeño, después de todo ya era un jovencito de 17 años.

-Mi bolita con patas.- dije mientras lo abrazaba, ahora tenía que mirar hacia arriba para verlo, el maldito había sacado la altura de papá.

-Deja de llamarme así es vergonzoso.

-Jamás.- exprese.

-¿Como la soportas?.- pregunto William mientras miraba a Tiago.

Yo mire a mi hermano y le di un sape antes de arrugarle la nariz.

- Me voy un par de años y te vuelves un inrrespetuoso conmigo.

-Te amo Hana.- dijo mientras me abraza.

-No quiero tu amor, hipócrita.- dije mientras fingia indigancion, toda mi familia comenzó a reir, yo mire a mi hermano y le devolví el abrazo.

-Sabes algo Hana.

-¿Si?.

-Bueno verás es sobre Gina.

-¿Que sucede?.- le pregunte a mi hermano.

Llegue a casa de mi tío realmente en cuanto vi a Gina ella me miro tambien.

-¿Como que te casaras en 5 de Abril?.- preguntamos ambas molestas. -Se supone que tu el 10 y yo el 5.... ¡Maldita sea!

-Tranquila chicas, no hay como hacer una doble boda.- dijo el abuelo Parker.

Ambas lo miramos molestas y el abuelo tan sólo se retiro lentamente.

-Stephanie.

-Lizzeth.

Ambas seguiamos llamábamos por nuestros segundos nombres cuando estábamos molestas. Si, así es, ahora si habria derramamiento de sangre en un par de segundos.

-Vamos mi amor podemos hacer una boda doble.- dijo Tiago mientras me abrazaba.

-Si imaginatelo será divertido.- oí decir a Steven.

Y por mi mente y al parecer por la de Gina vinieron varias imágenes donde seríamos confundidas todo el tiempo, por nuestro enorme rostro de disgusto se notaba que ninguna de las dos quería.

- Me niego a hacerlo.- dijimos ambas al mismo tiempo.

Fui a casa y comencé a pensar en todo lo que podría hacer, pero ¿como hacer que Gina no tenga su boda el mismo día que yo?, ¿Qué podría hacer?.

-Detectó malas vibras.- dijo Celeste quien se encontraba acostada en mi cama.- deberías abandonar esos malos pensamientos serán como un veneno para tu alma, acepta la realidad.

-Ahora no Celeste, lo único que necesito es un plan.

-Bueno una boda no puede hacerse si no se está lista, ¿Verdad?.- pregunto Sam quien leía una revista.- si no mal recuerdo lo primero que nos enseñaste es que todo debe estar perfecto.

Sonreí con malisia mientras pensaba en las palabras de Sam, ella me miro y luego volvió su mirada a Celeste.

-Aunque apoyó a Celeste, deberías rendinter y aceptarlo. No creo que sea tan malo casarte con tu prima.

-Ustedes no lo entienden.

A la mañana siguiente me dirigí a la tienda donde casualmente Gina iría a revisar sus arreglos, aunque claro suponiendo que los encontrará todo listo.

-Típico de ella.- dije mientras miraba los jarrones de vidrio.- oh vaya me pregunto que pasaría si inclino este un poco a la derecha.

Dije mientras recargaba un pequeño florero, salí de aquella sala y cerré la puerta en un azote, oi el sonido sin parar de vidrios rompiéndose sonreí victoriosa y me dirigí a casa.

-Señorita Parker, tenemos un problema.- lo decir a Jane mi Secretaría.

Mire alrededor y observe todas las flores destrozadas, ¿como demonios había logrado hacer algo así en un par de horas?.

-Maldita Lizzeth.- grité con molestia antes de mirar a Jane.- no me importa como pero arregladas todo esto.

-Si señorita.

-Maldita niña, esto es guerra.

Y la verdad eso fue tan sólo el comienzo de todo, cada vez que una le hacía una cosa la otra nos la regresaba, por ejemplo cuando Gina fue al spad la pinte de azul y ella bueno me tiñó de rosa la piel.
Mande a sus chef al otro lado del país y ella mando al mío directo al hospital, la verdad fue una pelea un tanto intensa pero algo de lo que no estábamos dispuesta a tocar era el vestido de novia, eso era algo totalmente sagrado.

-Lizzeth.

-Stephani.

Dijimos ambas al mismo tiempo cuando nos encontramos en la Zapateria, después de todo había utilizado sus zapatos como juguetes para los perros y Gina los había llenado de algo que nisiquiera tenía ni la menor idea de lo que era.

-¿De compras?.- pregunte con una sonrisa.

-Nada que te importe.- me respondio.

Ambas miramos hacia aquel par perfecto de zapatillas, y casualmente calzamos del mismo numero, ¡genial!, yo le sonreí a Gina y me acerqué a pasos veloces hacía los zapatos pero la verdad no me espere verla a ella correr hacia los zapatos, corrí detrás de ella y salte hacia los zapatos pero sólo logré tomar uno, levanté la mirada y la observe a ella con el otro zapato.

-Una tiene que seder.- me dije y ella sólo me sonrió.

-Entiendo que ya quieras rendirte, ahora el zapato.

Yo reí sarcasticamente, antes de lanzarme sobre ella por el zapato, ella me jalaba el cabello y yo mordia su brazo para tratar de que soltara el zapato.

-Disculpen señoritas pero tenemos otro par igual de ese zapatos.- oi decir el gerente a lo lejos.

Solté a Gina y le lanze la zapatilla antes de correr al lado del gerente que se veía bastante temeroso.

-Yo los quiero.

-Enseguida.- dijo el gerente antes de irse detrás de la caja de zapatos.

-Espero que tengas todas tus vacunas.- lo decir a Gina.

-Tal vez.- le respondí mientras la miraba.

-Sabes esto es tonto.- dijo por fin.- sólo hay que hacer las cosas cada quien por su cuenta, si nuestros padres se enteran nos mataran.

-Por favor ya nos vamos a casar, quienes deberían preocuparnos deberían ser nuestros esposos.- dije y me quedé pensativa.- no le dirás nada de esto a Tiago, ¿verdad?.

-Nada que tu no le digas a Steven.

- Perfecto.

Pasaron los días y ese tratado de paz duro un poco tiempo.

-Sigo percibiendo malas vibras.- oí decir a Celeste mientras me probaba el vestido.

-¿Por que lo dices?.- pregunte mientras la miraba.

-Tengo hambre iré por un panecillo.- dijo y salio de la habitación.

Me mire en el espejo y por primera vez en mi vida si extrañé el hecho de que Gina no fuese a asistir a un evento importante para mi, salí de la habitación y la observe a ella en su vestido totalmente pegado a su piel, reí para mi misma ella era la novia sexy y yo la novia tierna, algo andaba mal, no se supone que debio haber sido así las cosas, ambas nos sonreimos y nos abrazamos.

-No puedo ir a mi vida sin ti mocosa buena para nada.

-Gracias egocéntrica problemática idiota.

-Wou pero que insultó.- le dije y ambas comenzamos a reir.

-Hasta que por fin te encuentro.- oi decir a alguien gire la mirada y observe a una chica que saltó cielo decía en todas parte prototipo de cirugía al 100%, con un cabello tan mal teñido y uff de tan sólo tecordarla daba horror.

-Espero que hayas pensado en mi propuesta y hayas aceptado que Steven no es para ti.

Vi como Gina bajo la mirada y comencé a sentirme en verdad muy mal es decir me había estado soportando y de paso a esta también.

-¿Y tu eres?.- pregunte mientras la miraba.

-La única chica que merece estar con Steven.

Yo reí sarcasticamente si esto no lo creia, mire a Gina y luego a la chica le sonreí y después le lanze un puñetazo en el rostro dejandola en el suelo.

-Si no lo creo, la única que merece a Steven es mi prima. Oye a sí como me insultas y golpeas deberías hacerlo con ella.

-Brittani.- oi que gritaron con pánico varias chicas antes de mirarnos molestas.

-Recuerda que es bueno morder.

Le aconseje a Gina antes de las chicas se acercarán a nosotras para luchar y bueno una cosa llevo a la otra, los vecino nos reportaron por causar alboroto, fuimos arrestadas por violentas, la verdad no estuvo tan mal, creo que sólo le quite todas sus extenciones pero no hubo mucha sangre, tal vez, mira incluso aún tengo un macho rubio teñido, le dije a Tiago mientras me mostraba el mechon.
 
-En fin lo que tratamos de confesar es que si peleamos pero lo resolvimos y que está lucha que tuvimos ahora mismo solo fue para defendernos una a la otra.- dijo Gina.

-Si y como conclusión casemonos mejor en las Vegas.- concluí mientras miraba a Tiago y Steven.

-¿Por que creen que aún queremos casarnos con ustedes?.- pregunto Steven mientras se cruzaba de brazos.

Gina y yo nos miramos antes de echarnos a reir a carcajadas.

-No pueden vivir sin nosotras.

-Eres muy mal actor cariño.-dijo Gina mientras miraba a Steven.- en fin si no vienen con nosotras, podemos ir solas.

-Cierto embriaguemosnos y consigamos algún chico lindo de por allá.- dije mientras camina fuera con Gina.

-En 5.

-4.- continúe.

-3.

-2

-1.- dijimos al mismo tiempo, antes de oír a Steven y Tiago llamandonos, sonreimos victoriosos mientras seguíamos caminando.

-Por cierto que la diremos a sus padres.- dijo Steven preocupados.

-Pueden alcanzarnos alla, ¿verdad Gina?.

-Si además no creo que los quieran dejar viudos.

-¡Las vegas!.- grité con alegría mientras tomaba la mano de Tiago.

-¡Las vegas!.- me siguieron los demás antes de subir al taxi con dirección a las Vegas.