TYC - Nayuta Ishikawa.
Les go.
:D.
Esta historia ya tiene más de 11k leídos y 1.3k votos, como que la idea de una familia disfuncional de demonios caló bien xd.
. . . .
Preescolar Estatal de Tokio, Oficina de la Directora.
-Puedo ver que ya se conocen... - Dijo la directora Nishimoto con sus manos entrelazadas viendo a los 'adultos' en cuestión. – Me sorprende ciertamente, hace un poco más fácil o difícil la discusión viéndolo de distintas perspectivas.
Denji no tenía idea de porque él estaba en la oficina de la directora de la escuela de Nayuta en primer lugar, no quería estar ahí, quería estar de vuelta a la cafetería para seguir trabajando y ganar su propio dinero. Ciertamente no entendía porque requerían de su presencia cuando fácilmente uno de los dos padres puede venir sin la necesidad de molestar al otro.
Cosas de escuelas, supone él.
Aunque, se preguntaba como hizo para terminar en esta situación.
Nayuta estaba sentada en su regazo cruzada de brazos con un puchero tan grande mientras miraba vorazmente a Aoi quien estaba sentada a lado de su hermano menor.
Makima estaba sentada a lado de él abrazando su brazo derecho con fuerza mientras miraba a Aoi como si fuera la cucaracha más asquerosa del universo (y apretando el brazo del pibe contra sus pechos, eso hizo que él se sonrojara).
Por alguna extraña razón, ambas féminas estaban super enojadas y Denji con su putrefacto cerebro, le era incapaz de razonar el porqué de eso.
Mientras que Aoi no se dejó intimidar por las miradas de Nayuta y Makima, ella estaba cruzada de brazos viendo a Denji con ojos blancos esperando aún una explicación de su parte y su hermano menor estaba refunfuñando bajo su aliento molesto por algo.
"N-No, espera, no me mires así, ¡no sé como explicarte esto sin que suene descabellado!" Pensaba Denji sudando frío ante la mirada de Aoi que poco a poco, lo estaba quebrando por dentro.
Maldita sea la madre, ni siquiera ha ideado una historia en caso de que Aki y Power descubrieran la existencia de Nayuta, ¿cómo carajos iba a explicarle esto a Aoi?
-Ehm, puede decirme ¿por qué me necesita aquí? – Dijo confundido Denji recomponiendo sus ideas a paso de tortuga y no loco preguntarle a la directora eso.
-Porque su hija le tiene una estima bastante alta. – Dijo Nishimoto mientras entrelazaba sus dedos frente a ella. – Y me pareció pertinente llamarlo viendo que si hay alguien que la Srta. Ishikawa escucha, es solo a usted.
-Ah... - Bueno, eso tiene sentido después de todo, Nayuta siempre se ha mostrado reacia y extrema cuando Makima intenta darle una orden, pero cuando entraba él, la niña se comportaba bien por alguna extraña razón con él.
-Además, también me pareció pertinente hablar de algunas cosas que su hija estuvo haciendo. – Dijo la directora con una sonrisa simple pero una mirada oscurecida.
Ante eso, Nayuta palideció. – E-Espere ¡N-No creo que-
-Nayuta Ishikawa creó una red de tráfico de almuerzos. – Dijo la directora haciendo que Denji abriera los ojos de par en par y Makima casi cayera de su asiento al escuchar semejante oración. – Desde onigiris hasta bentos, su hija ha hecho miles de yenes con esa red y fue descubierta hoy, esa fue una de las razones por las cuales yo los llamé.
- ¡¿QUÉ HICISTE QUÉ?! – Rugió Makima haciendo que Nayuta se cayera del regazo de Denji dando un grito. - ¡¿ME PUEDES EXPLICAR QUE SE TE ESTABA PASANDO POR LA CABEZA?!
- ¡E-Era una oportunidad de negocio! – Chilló Nayuta, asustada por primera vez de Makima al ver como su figura se hacía más grande y la sombra de la demonio control caía sobre la niña.
- ¡TIENES SEIS AÑOS Y SE TE COMPRA TODO! ¡¿CÓMO SE TE OCURRE SEMEJEANTE- ¡DENJI, DILE ALGO! – Gritaba Makima viendo vorazmente a Denji.
"... E-Estoy tan orgulloso de ti hija, la chamba está en la sangre" Pensó Denji para sus adentros victoreando, la chamba jamás moriría y él se haría cargo de eso.
Pero dejando aquello de lado.
¡¿Qué se supone que debía decirle a Nayuta?!
No era bueno en estas situaciones porque él más que nadie sabe que si él estuviera yendo a una escuela, haría prácticamente lo mismo o incluso peor que Nayuta.
¿Traficar almuerzos? Cosa de niños; podía montar un puesto de revistas porno, un quiosco de cigarros de dudosa procedencia ¡e incluso un negocio de sillas donde él puede ser la silla! (Solo disponible para féminas).
-Tranquila Sra. Ishikawa, si Nayuta devuelve todo el dinero, no creo que haya problemas. – Dijo la directora a lo cual Makima se sentó cruzada de brazos con un tic nervioso en su ceja.
-Dígame, solo dígame cuanto es. – Dijo la demonio control desprendiendo un aura tan oscura que puso de los nervios a Denji.
-Fueron ¥50,000 ($336,43 americanos) en almuerzos que se estimó que Nayuta recolectó. – Con razón la pequeña demonio había pasado tanto tiempo sin pedir mesada.
Aunque Denji tembló ante el monto, mierda, a lo mejor si debía hablar con Nayuta. Mierda, que dolor de culos tener que pagar por las cagadas de unos mocosos que son tu responsabilidad.
-TCH. – Makima sacó una chequera del bolsillo y un bolígrafo, y de mala gana firmó un cheque a su nombre por ¥70,000 (para la sorpresa de la directora). – Los veinte mil extras son por LAS MOLESTIAS OCASIONADAS.
-E-Ehm, g-gracias Sra. Ishikawa. – Dijo la directora Nishimoto, a veces se le olvidaba que Makima era una devil hunter y, por ende, percibía bastante bien, entonces ella volteó a ver a Aoi y su hermano. – Ahora, vamos con la otra cuestión en manos, como sabran, su hija se peleó con uno de sus compañeros de clases.
- ¿Por qué fue eso? – Preguntó Denji sintiéndose treinta años mayor de lo que era.
-Quisiera saber también, Jiro es bastante tranquilo. – Dijo Aoi pasando un dedo de forma suave por el moretón de su hermano quien tembló por eso.
-Y yo creía que Nayuta SE PORTABA BIEN. – Decía con una sonrisa tétrica Makima viendo a Nayuta con ojos con espirales que cobraban vida haciendo que Nayuta sudara a cantaros, de las pocas veces que creía que la demonio control daba miedo y esta era una de esas.
La directora Nishimoto tosió un poco. – Por lo que escuché de la profesora a cargo de su sección, se resume así...
- ¡TE ROBASTE MIS COLORES! – Exclamaba Nayuta parada encima del escritorio de Jiro quien veía con estupefacción como una de las niñas más inteligentes y al mismo tiempo más extremas le acusaba de ladrón.
- ¿Qué cosa? No te robé nada, bájate de mí pupitre, niña loca. – Dijo Jiro quien tampoco tuvo la decencia de ser amable con la niña.
(Así se ve Jiro Tanaka).
Digo, se paró encima de su pupitre y en pocas palabras, lo tachó de ladrón.
- ¡MARY DIJO QUE TÚ LOS TIENES! – Chilló Nayuta, la antes mencionada rio bajo su aliento desde su asiento viendo todo el espectáculo.
- ¡¿Y le crees a la niña extranjera mentirosa?! – Gritó Jiro y sacó su cartuchera. - ¡Ni siquiera tenemos la misma marca de colores!
- ¡¿Osas oponerte a mí?! ¡Enfrentarás la ira de los dioses! – Chilló Nayuta tronándose los dedos y lanzándose hacia Jiro quien gritó por ello causando una pelea entre ambos en el cual se formó una nube de pelea, gritos, insultos no apto para niños de sus edades.
- ¡SUELTAME, LOCA! – Gritaba Jiro pateando el rostro de Nayuta para que se alejara de él.
- ¡NO ESTOY LOCA! ¡DEVUELVEME MIS COSAS PLEBEYO DE MIERDA! – Gritó Nayuta mordiendo el brazo de Jiro quien gritó por aquello.
- ¡Están peleando!
- ¡Que alguien llame a la profesora!
- ¡Vamos Nayuta! ¡Demuestra quien manda!
- ¡No te dejes amedrentar por una niña Jiro!
- ¡PELEA! ¡PELEA! ¡PELEA!
"Oh oh..." Pensaba uno el busca problemas del salón, él era quien tenía la cartuchera de Nayuta escondida en uno de los estantes del salón, era para jugarle una pequeña broma, no creía que su pequeña broma escalaría de forma tan radical como lo hizo ahora.
Ahora temía lo que Nayuta le haría cuando descubriera todo.
- ¡¿QUÉ SUCEDE AQUÍ?! – Rugía la profesora entrando al salón y escuchando todo el alboroto, se congeló cuando vio que Jiro y Nayuta estaban peleando mientras que los demás niños estaban victoreando como si se tratara de una pelea de gallos. - ¡SRTA. ISHIKAWA! ¡SR. TANAKA! ¡DETENGANSE AHORA!
-Y eso es todo de lo que tengo entendido que sucedió. – Dijo la directora recontando todo lo ocurrido de pies a cabezas.
Denji, Aoi y Makima veían con miradas variadas a los dos niños; Jiro tenía una mirada fastidiada de brazos cruzados y Nayuta silbaba aledañamente sin sentir pena de haberle dejado un ojo morado a Jiro en toda aquella farsa.
-Entonces; un niño pendejo escondió la cartuchera de Nayuta y ella creyó que fue el otro mocoso porque una mentirosa le dijo. – Dijo Denji... y sudó levemente, eso sonaba bastante familiar y no iba a mentir.
-Preferiría que no usara ese tipo de vocablo con ellos enfrente, Sr. Ishikawa. – Dijo la directora Nishimoto riendo un poco tuerta. – Nayuta tiene algunas llamadas de atención por su mal vocabulario también.
-Eh... - Denji sentía la mirada intensa de Makima en su persona, él sudó frío, tantas veces que la demonio control le decía que tuviera cuidado con lo que decía enfrente de Nayuta y al parecer le iba a morder en el culo. - ¿Q-Qué ha dicho exactamente?
-No me veo en la necesidad de repetirlo-
-Una vez le llamó a una de las niñas populares; 'zorra plástica de mierda'. – Dijo Jiro escupiendo fuego por la boca aun enojado con Nayuta.
- ¡CHISMOSO DE-
BONK.
- ¡AUWIE! – Chilló Nayuta cuando Makima le dio un golpe en toda la cabeza haciendo que un chichón creciera a más no poder, cuando alzó la mirada, vio que a Makima se le formó un anillo oscuro de ángel y por alguna razón que no entendía.
Un aura oscura se formó detrás de ella mientras que su rostro era inundado por venas de la ira que estaba sintiendo ahorita y un aura tan oscura que hacía temblar las ventanas de la oficina, haciendo que Denji palideciera al punto que todos sus colores desaparecieron, Jiro se escondía detrás de una estupefacta Aoi quien no entendía que pasaba y la directora Nishimoto quien suspiraba.
-Nayuta~... HABLAREMOS EN CASA. – Dijo Makima tronándose los dedos haciendo que Nayuta sudara la gota gorda.
¡¿Cuándo Makima se volvió así de tenebrosa?!
-N-No, espera papa den-den, ayuda-
Suplicaba Nayuta, pero la demonio control ignorando aquello, miró a Denji quien ahora se persignaba.
-Y TÚ SEÑOR, TE HE DICHO MILES DE VECES QUE NO HABLARÁS ASÍ CON NAYUTA ENFRENTE, AHORA MIRA A DONDE LLEVÓ ESO~~~~~~~. – Decía Makima con voz de ultratumba haciendo que la directora Nishimoto también sudara por aquello.
- ¡JIRO! – Exclamó Aoi por escuchar lo que dijo su hermano, aunque estaba sorprendida por el lenguaje fuerte de Nayuta por lo que miró a Denji con una mirada digna de la diosa de la guerra. - ¿Algo que decir Denji~?
-Yo- pero- ¿qué hice mal- ugh- odio mi vida-
Balbuceaba Denji sin saber que decir, esto era una cagada en proporciones bíblicas, ser sometido por féminas con personalidades más fuertes que la de él. Mientras que Jiro estaba admirando toda la escena enfrente de él y conectó miradas con el pibe motosierra.
"¡SUFRE POR LO QUE ELLA ME HIZO!" Era lo que decía la mirada del niño quien sonreía de forma demoniaca.
Pequeña plasta de mierda.
Lo jodió sin siquiera intentarlo, no sabía si sentirse anonadado o impresionado por tal acto de ataque a su persona. A lo mejor ambas sería la mejor descripción porque Denji no encontraba las palabras para poder defenderse.
Por lo que, por alguna extraña razón, toda esta situación era su culpa, y culpa de Nayuta también por haber hecho tantas travesuras de las cuales ni él ni la propia Makima tenían idea de.
La directora Nishimoto solo suspiró, ella lidiaba con su buen afán de padres con personalidades algo variadas, no podías pedir mucho en un mundo donde existían demonios, pero la familia Ishikawa le demostró hoy que eran de todos, pero no normales.
Por lo que solo se resignó a seguir con la reunión.
...
-Tsk, tsk. – Chasqueaba la lengua Makima viendo a Nayuta y Jiro en las afueras de la escuela, ambos se estaban dando la espalda. - ¿No se van a disculpar?
-Ella es la que se tiene que disculpar.
- ¡En tus sueños, plebeyo!
"Esto no llevará a nada" Pensaban Aoi y Denji en perfecta sincronía.
La sentencia de la directora fue la siguiente; Nayuta tendría un día de suspensión por alterar el orden dentro de la escuela además de que Jiro tiene que cumplir un castigo correspondiente fuera del horario de clases siendo, en palabras groseras, la mula de los profesores hasta finalizar el año.
-Tienes suerte que no te expulsaran Nayuta. – Siseaba Makima super furiosa, lo más furiosa que la ha visto Denji desde que llegó la niña. – Pero que esto sea una advertencia para que no vuelvas a cometer esas cosas en el futuro.
- ¡Tú no me mandas! – Chilló Nayuta para correr y darle una patada en la espinilla a Makima (quien ni lo sintió). - ¡No eres mi mamá!
- ¡¿Cómo dices?! ¡RESPETA A TÚ MADRE! – Rugía Makima y las dos empezaron a jalarse las mejillas la una a la otra.
-E-Ehm... - Aoi miraba aquello sin saber que decir, ella miró a Denji. - ¿Entonces...?
-Ugh, esto es una mierda. – Gruñó Denji pasandose una mano por su rostro. – Es... complicado de explicar.
-Pero, ¿cómo eres papá a los 18? – Preguntaba Aoi mientras que Jiro sudaba un poco al ver como Makima cargaba a Nayuta como un costal de papas mientras que la niña pataleaba con todo si se tratara de un perro rabioso.
-Es una larga historia-
- ¿Acaso ella abusó de ti? – Preguntó Aoi apuntando groseramente a Makima quien al escuchar eso, casi se cae al suelo con Nayuta incluida. – Si es así, llamaré a las fuerzas policiacas pertinentes-
"¡¿Acaso cree de verdad que soy una abusadora?!" Exclamaba en su mente Makima indignada. Aunque no se alejaba bastante de la realidad, no era abusadora per se, pero si una controladora profesional con PHD incluido.
- ¡NADIE ABUSÓ DE NADIE! – Exclamó mortificado Denji, ¿acaso Aoi creía que él de todas las personas era la esposa maltratada? – Ugh, Aoi, no sé como explicar todo esto, solo Nayuta apareció y ya.
-Hm. – Aoi solo se acercó a Denji para ajustar su corbata. – Me hubiera gustado encontrarme contigo, en otros términos, pero aún así me alegro que estes bien (en una forma un tanto extraña).
-Heh, me hace feliz volver a verte Aoi. – Dijo Denji sonriendo de forma feliz, entonces notó que Jiro lo veía intensamente, por lo que Denji se agachó para sonreírle al niño. – Que tal campeón, fíjate... no sé que decirte, a lo mejor no sea la persona más madura, pero perdona a Nayuta por lo que hizo ¿ok? Ella es algo extrema y malcriada, pero no es una mala persona.
- ¡HEY! ¡No soy-
-Nayuta... DÉJAME HABLAR. – Decía con una sonrisa tétrica Denji haciendo callar a Nayuta quien temblaba en el agarre de Makima quien se preguntaba ahora porque la niña se escondía detrás de ella. – Como decía, dale una oportunidad.
-No creo-
-Si lo haces, los llevaré a comer helado. – Dijo con cara de palo Denji haciendo que ambos niños se congelaran y de la nada, ambos aparecieron frente al pibe motosierra.
- ¡¿DE VERDAD?! – Exclamaron Nayuta y Jiro juntando sus mejillas ante Denji quien se preguntaba como una luz de inocencia infantil lo estaba cegando.
-Seeh, solo si se perdonan y son amigos. – Dijo Denji alzando un dedo.
Nayuta fue la primera ya que ella abrazó con fuerza a Jiro mientras exclamaba. - ¡LO SIENTO! ¡POR FAVOR PERDONAMEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!
-¡Q-Quítate de encima! ¡T-Te perdono por el b-bien del helado! – Exclamó Jiro y su mente hizo un cortocircuito.
Ya que Nayuta alzó su vista de su pecho y sus ojos enormes amarillos ambar conectaron con los suyos, estos brillaban con intensidad por las lagrimas que salían de estos y sus labios temblaban haciendola ver toda vulnerable.
Jiro sintió sus paredes caer, era un chico solitario quien no tenía tantos amigos y no ayudaba que Nayuta fuera una de las niñas más inteligentes y lindas de su sección. Por lo que se sonrojó furiosamente y empezó a balbucear intentando sacar una respuesta.
-... T-Te perdono. – Murmuró Jiro, a lo cual Nayuta se le fueron las lágrimas tan rápido como aparecieron y riendo abrazó con toda una vez más al niño quien gruñó por eso ya que Nayuta empezó a restregar su mejilla con la suya.
- ¡Eres el mejor plebeyo del mundo! ¡A partir de ahora, serás mi segundo al mando! – Reía Nayuta dedicándole una sonrisa tan grande que era imposible no morir de diabetes.
-E-Eres una m-manipuladora... - Susurró Jiro para su gran desconcierto y nerviosismo (con un leve sonrojo en sus mejillas).
"Ara ara~, que extraña forma de tener su primer crush~" Reía en su mente Aoi y miró orgullosa a su hermano, aunque se impresionó ante la forma de Nayuta de doblegar a su hermano menor de perdonarla, solo para ir a comer helados.
"... Me siento orgullosa, y no sé por qué" Pensó Makima ante tal muestra de manipulación emocional por parte de la pequeña pelinegra en contra de Jiro, por lo que suspiró y negó con una sonrisa.
"Ya va, espera, ¡No cabrón! ¡HUYE DE AHÍ NIÑO! ¡ESCAPAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!" Pensaba Denji sudando a cantaros.
Reconocía la mirada del niño en cualquier sitio.
Esa misma mirada la tenía él cuando estaba con Makima. ¡El bien mocoso se estaba enamorando de Nayuta!
Hasta él reconocía cuando perdió la pelea porque había muchas veces que Makima lo doblegaba para hacer lo que ella quisiera. Uno diría 'Denji es un padre sobreprotector'.
Nada más lejos de la realidad, si Nayuta algún día le llegara a traer pretendientes, él sabiamente les diría a estos que merecían algo muchísimo mejor que la niña de actitud extrema, eso es abogar por el bien colectivo y sería su buena acción del día.
Tenía que evitarlo, el niño merecía algo muchísimo mejor que el pequeño experimento de los científicos chinos que tiene por hija, sin quitarle méritos a Nayuta. ¡Pero debía salvarlo! ¡MIERDAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
-Mejor vámonos Jiro. – Reía Aoi y entonces le dio un leve beso en la mejilla a Denji quien rio levemente ante eso. – Fue un gusto Denji, aun me debes ese café ¿oíste?
-Heh, cuenta con eso, te llamo en estos días ¿ok? – A lo cual la joven secretaria asintió dando una risilla y miró a Nayuta quien la miraba con desprecio por ese leve beso que le dio a su papá en la mejilla. – Me hubiera gustado conocerte en otros términos cariño, espero que cuides a tú papá ¿sí?
- ¡HMPH! ¡No me digas que hacer! – Vaya actitud, Aoi rio y entonces miró a Makima-
Oh oh.
Aoi reconocía una mujer celosa en cualquier lugar del planeta tierra. A lo mejor besar en la mejilla a Denji no fue una gran idea de su parte viendo que Makima mantenía su sonrisa plástica con ojos que poco a poco cobraban vida y juró ver sus manos formar unas pistolas y con ello, gritos de personas empezaron a rodearlos.
-EJEM, vámonos Jiro, despídete de tu novia~. – Reía Aoi tomando a Jiro (quien gritaba que Nayuta no era su novia con un sonrojo en su rostro) y arrastrarlo lejos de la familia extraña con Nayuta quien entrecerró los ojos y volteó a ver a Denji.
-Papa den-den ¿qué es una novia? – Preguntó Nayuta a lo cual Denji se paralizó en su lugar.
-B-Bueno~ e-es una persona que mantiene relación con otra. – Susurró Denji sudando y maldiciendo a Aoi por haber dicho tal cosa.
- ¿Entonces soy novia de Tanaka? – Preguntó confundida Nayuta.
- ¡NO! – Rugió Denji. - ¡Aun eres una escuincle y muy pequeña para esas mier- cosas! Mejor concéntrate en pasar la escuela y cuando seas grande, ya tú ve a ver a quien le arruinas la vida.
-Hm. – Bufó Nayuta cruzada de brazos, entonces vio como Makima se acercó a Denji con sus cabellos tapando su rostro.
-Eh ¿sucede algo Makima-
Pero no terminó porque Makima se puso de puntas y le besó la mejilla con intensidad en el mismo sitio donde la secretaria le besó.
CRAAAAAAAASH.
CRAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAASH.
Los cerebros de tanto Nayuta y Denji tuvieron que reiniciarse debido a este acto de 'cariño' por parte de Makima quien se alejó rápidamente con un sonrojo en sus orejas, la niña estaba tan anonadada que no sabía cómo reaccionar.
Mientras que Denji se sonrojó furiosamente. – M-Makima ¿q-qué-
-Yo... soy la primera. – Susurró Makima a lo cual Denji aun sonrojado no sabía que decir.
- ¿D-De qué hablas-
- ¡SOY LA PRIMERA! – Exclamó Makima con pasión a lo cual Denji retrocedió un poco. - ¡Fui tú primera cita y soy la madre de tú hija! ¡¿Entiendes?!
-Claro, pero-
-Bien, espero que lo entiendas. – Susurró Makima y tomó de la mano a Denji entrelazando sus dedos. – Vamos a casa.
- ¡H-HEY! ¡NO TOQUES A MI PAPÁ! – Chilló Nayuta interponiéndose entre ambos y como única solución, la niña tomó de la mano de Makima y la otra a Denji para evitar que estos se tocaran. - ¡Vayamonos así! De esa forma no lo tocarás.
"Para ser una niña inteligente, a veces es demasiado huevona" Pensó Denji con cara de palo.
-... - Makima vio su mano tomando la más pequeña de Nayuta, ella apretó levemente esta y... sonrió un poco. – No me molesta hija.
Nayuta se congeló en su sitio, Makima era normalmente una perra sin sentimientos, pero las expresiones de la demonio control de hoy dejó un sinfín de sentimientos en la niña que variaron entre miedo/ansiedad con la expresión que le dio en la oficina de la perra Nishimoto.
Hasta esta expresión sincera con una sonrisa tan única y honesta que hizo que Nayuta no supiera como reaccionar, ella bajó su cara al suelo y no dijo más nada.
Por alguna razón, se sintió bien como Makima le dijo 'hija' de esa forma, no de una en la que ella normalmente dice '¡SOY TU MADRE Y ME DEBES RESPETAR!', era una en donde no había nada de eso.
Solo honestidad y una sonrisa simple.
-N-No te diré mamá, sueñalo. – Susurró con fuerza Nayuta a lo cual Denji reía y Makima daba risillas. - ¡No se rían! ¡Papá, d-dile a mi ma-
Pero Nayuta se detuvo y se sonrojó furiosamente al sentir la mirada de Makima en ella (con sorpresa al ver como Nayuta casi la llamó y Denji bailaba feliz en su cabeza, a lo mejor su día no terminaría tan mal) al ver como la llamó, la pelinegra solo chilló molesta y arrastró a ambos adultos jovenes para irse de la escuela.
-Nayuta ¿acaso me ibas a llamar-
- ¡NO! ¡ERES LA BRUJA DE BLAIR Y HUELES MAL! ¡NO TE IBA LLAMAR DE OTRA FORMAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – Chillaba con las mejillas hecha fuego la niña haciendo que Makima... sonriera levemente con sus ojos brillando de forma intensa. - ¡N-No me des esa mirada! ¡N-No, es que- ah- papa den-den vamos!
Denji solo reía mientras cargaba a la niña quien ahogaba un grito de vergüenza en su pecho mientras ocultaba su rostro del mundo, los tres empezaron a caminar rumbo a su caótico hogar después de un caótico día, Makima acariciaba la cabeza de Nayuta quien se negaba a hacer más comentarios y Denji hacía leves tarareos que poco a poco fueron durmiendo a la niña.
Y para cuando se dio cuenta, Makima lo estaba abrazando del brazo con una expresión brillante en su rostro.
"Huh..." Pensó Denji viendo la dinámica familiar que tenían los tres.
Era raro.
Pero no le desagradaba en lo más mínimo.
Nunca la experimentó de niño, no tuvo padres para hacer esto ciertamente más allá que Pochita lo acompañó por tantos años. Por lo que no sabía como sentirse al estar brindando a Nayuta cosas que él nunca pudo tener de niño.
Una madre que siempre te querrá.
Un padre en el que puedas confiar.
Y un sequito de mascotas más lindos que el coño.
¿Qué más podía pedir? Si había una forma de como describir lo que sentía...
Era felicidad de alguna forma u otra. A lo mejor no iba a ser el mejor padre del mundo, pero estaba absolutamente seguro que él saltaría a las profundidades del mismísimo infierno para proteger esta pequeña realidad/burbuja en la cual estaba atrapado con Makima.
Lo protegería a capa y motosierra de ser necesario.
...
Hogar de Makima, 9:23pm.
-Huh, se volvió a quedar dormida en tu regazo. – Dijo Denji de forma aledaña viendo la imagen de Nayuta dormida en el regazo de la demonio control quien estaba en sus pijamas; una franelilla sin sostén (le costó al pibe no mirar allí), shorts y descalza.
Mientras que él andaba en una franela de su propia mercancía de Chainsaw Man (el cual se ha convertido popular en estos días) y unos pantalones largos oscuros con medias viejas.
Y Nayuta usaba pijamas de cohetes animados, la niña dormía con baba saliendo de su boca.
-Hm. – Makima solo asintió y miró a Denji. - ¿Cómo lo haces?
- ¿Qué cosa?
-Llevarte bien con ella... - Susurró Makima y suspiró entrecortadamente. – Si he sido una mierda con ella ¿no Denji?
Denji se sentó a lado de Makima para rodearla con su brazo. – Si eres una madre de mierda, entonces yo soy un padre de mierda también.
-No digas eso-
-Entonces no digas cosas incoherentes. – Suspiró Denji y miró al techo mientras que Makima se recostaba en su brazo. – A ver, esto es nuevo para todos, tú y yo no tenemos ni idea de cómo actuar con Nayuta, estábamos acostumbrados a una rutina que se vio destruida por la niña extrema que tenemos por hija... pero es cuestión de hacer las cosas bien.
- ¿Por qué dices eso? – Dijo Makima sintiendo sus ojos pesados por alguna razón, el corazón de Denji latía con un cierto sonido de motosierras que la calmaban.
-Si bien siento que tu relación con Nayuta puede mejorar (y creo que lo está haciendo), creo que es más de ir con lo que te dice tú corazón, por más cliché que suene esa mierda. – Reía Denji con todo a lo cual Makima daba risillas un poco cansada también. – No tenemos un manual para cuidar a niñas extremas, solo vayamos en contra de la corriente y acoplémonos a lo que se nos venga ¿ok? No estás sola en esto, Makima.
-... Gracias Denji, eres increíble. – Susurró Makima con una sonrisa al sentir como Denji recostaba su mejilla contra su cabeza aunque suspiró. – Pero... ahora, ¿qué haremos? Mañana estaremos fuera y no tenemos a nadie que cuide de Nayuta en lo que pase el día aquí y debo trabajar, no la puedo llevar a la oficina.
-Hm, yo estaré ocupado también... - Entonces, Denji tuvo una idea descabellada, incluso algo loca. – Tengo una idea.
- ¿Ah sí? Cuéntame. – Dijo Makima quien aun no se explicaba porque Denji no le quería decir que hacía ahora que estaba fuera de la oficina.
-Te lo cuento mañana, por ahora vayamos a dormir. – Dijo Denji acomodándose en su sitio en el sofá y cubriendo a los tres en una sabana, ellos eran rodeados por los siete canes de Makima mientras que ella sonreía felizmente y se hundía en el brazo del pibe mientras que Nayuta murmuraba cosas dormida y restregaba su rostro contra la barriga del demonio control.
Era la imagen digna de una familia que después de un día bastante intenso, podían dormir en donde sea con tal de solo pegar ojo un poco por la noche.
Nada podía arruinarlo-
-Para tú información, esto no te salvará ni a ti ni a Nayuta de lo que sucedió hoy en el colegio. – Dijo Makima y Denji abrió los ojos como platos y vio los ojos amarillos que brillaban en la oscuridad de la pelirroja clara. – Haré que ambos lamenten esto y no se volverá a repetir ¿ENTENDISTE?
Mierda.
Al parecer Denji y Nayuta en algunas ocasiones compartían una suerte de mierda.
De tal palo a tal astilla como algunos dicen.
Esto de ser padre primerizo y soportar las cosas locas diarias que suceden en esta familia de inadaptados era demasiado incluso para el propio pibe motosierra.
"Odio mi suerte" Fue lo último que pensó resignado Denji queriendo acabar con su vida tirándose del decimo piso de un edificio.
. . . .
FIN~.
DEJEN SU VOTO Y OPINIÓN~.
Pd: Una vez más, sufro de diabetes escribiendo esta cagada, me relaja bastante escribir esto porque como ya dije, la trama no es complicada y los capítulos son rápidos de hacer. Tengo planeado entre 10-12 capítulos para esta historia o algo así, y si se queda en 10, entonces vamos ya por la mitad de la historia.
¿Qué tal les ha parecido la interacción familiar entre Makima, Denji y Nayuta?
¿Les gusta esta historia? Aunque es algo tonto de preguntar viendo la aceptación que está teniendo XD.
Imagen del día:
(Makima con emociones para que queden así: :0) (Así son las reacciones de ella en mis historias en donde muestra sus verdaderas emociones al público).
Sin más que decir, nos vemos~
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