[NARRADOR]

Scott caminaba de un lado al otro como animal enjaulado mientras se agarraba la cabeza con frustración. Sin que ellos siquiera tuvieran que decirle algo el Nogitsune había salido de aquel circulo de mountain ash y se había ido con ellos sin oponer resistencia. Ahora se encontraban en el Loft de Derek esperando a que la madre de Kira y Deaton salieran y les dijeran como deshacerse de esa cosa.

- El chico de seguro estará bien -Dijo Peter intentando liberarse de un poco de la tensión que había en el lugar.- Ya ha pasado por esto.

- Y casi muere -Le recordó Lydia.- No podemos dejar que esa cosa vuelva a matar a alguien, no después de lo de...

La pelirroja se quedó callada el ver la mirada dolida de Scott clavada en ella. Ella había perdido a Allison, su mejor amiga y la única que la aceptaba con su condición; pero Scott había perdido al amor de su vida, la había visto morir en sus propios brazos sin poder hacer nada para impedirlo.

Finalmente la puerta del Loft se abrió, pero el brillo de esperanza en los ojos de todos desapareció al ver el rostro de la señora Yukimura y de Deaton. El primero en recuperar la compostura y hablar fue Jhon Stilinski.

- ¿Qué ocurrió?

- No podemos deshacernos del Nogitsune -Soltó sin tacto el Druida.

- ¿¡Cómo que no pueden!? -Preguntó Scott molesto.- ¡Debe haber alguna forma, ya lo hicimos una vez!

- Esta vez no se puede -Comenzó a explicar la señora Yukimura.- Entiende, Scott. Una cosa fue deshacerse del Nogitsune en Stiles, pero otra cosa muy diferente es separar un alma.

- ¿Separar un alma? -Preguntó Derek sin entender.

- Aunque no lo parezca los Nogitsunes tienen un alma -El Druida hablaba con seriedad.- Esta alma siempre estará unida al huésped que el Nogitsune elija, cuando Scott mordió al Nogitsune este fingió irse, pero en realidad le cedió el control a Stiles.

- ¿Y como es que Stiles no se convirtió en lobo? -Preguntó esta vez el Sheriff.- Puede que yo no sepa mucho del tema, pero entiendo que una mordida de un lobo alfa significa volverte un lobo o una sentencia de muerte.

- Lo que ocurrió fue que la criatura uso mucho de su poder para repeler la mordida -Le explicó la madre de Kira.- Así logró mantener humano a Stiles.

- ¿Quieren decir que en todo este tiempo esa cosa nunca dejó a Stiles? -Preguntó Lydia horrorizada.

- Ahora es aun peor -Deaton se notaba preocupado.- Esa cosa... -Señaló hacia el interior del Loft donde tenían sentado al adolescente hiperactivo.- Es Stiles.

(...)

Mientras la manada discutía afuera del Loft el Nogitsune escuchaba todo con mucha atención mientras analizaba todo el lugar en busca de una forma de escapar.

- »No lo harás -Le dijo el adolescente dentro de su mente.- Yo no voy a permitirlo«

- Cierra la boca -Le ordenó la criatura.- Aquí ahora mando yo.

- ¿Stiles? -Ambas voces en el cuerpo del chico hiperactivo se quedaron calladas cuando la pelirroja dijo el nombre del humano.- Stiles, escúchame.

- Stiles no se encuentra en este momento, pero si quieres puedes dejarle un mensaje. Luego se lo comunico con gusto.

La pelirroja sintió arcadas al ver a esa cosa usando la sonrisa burlona de su amigo, esa criatura no tenía el derecho de apoderarse del cuerpo del humano cuando se le diera la gana.

- Se lo que estás pensando -Le anunció el Nogitsune.-Y déjame informarte que esta vez no tomé el control a la fuerza, él me dejó hacerlo.

- ¿¡Por qué Stiles haría eso!? -Preguntó Scott furioso.

- ¿De verdad preguntas por qué lo haríamos? Déjanos ver... ¡Quizás porque tardaron una puta semana en sacarnos de allí!

Todos se quedaron en silencio, esperando a que alguien tuviera el valor de hablarle a esa cosa. Pero nadie tuvo coraje, entonces eso habló por su cuenta.

- Tengo una idea -Dijo poniéndose de pie, todos dieron un paso hacia atrás.- Vamos a jugar a contar cuantas cicatrices tiene este cuerpo.

El Nogitsune se dio la vuelta, enseñando un enorme agujero que se hallaba justo en el centro de la columna, la herida parecía estar infectándose, además de que un par de lineas rojas se abrían camino debajo de la piel. Eso era una clara señal de envenenamiento por metal oxidado, mejor conocido como tétanos.

- Dios mio... -Melissa se llevó una mano al corazón y puso una mueca de espanto.- Tenemos que curar eso.

Cuando la mujer de rasgos latinos iba a acercarse al adolescente fue detenida por los brazos de Peter y Deaton. Los cuales la miraban advirtiéndole que no se moviera de donde estaba, pero ella no hizo caso.

- Ven aquí, Stil... -Se frenó en el nombre del humano.

Aun así el mensaje fue claro, el adolescente se levantó y comenzó a seguir a la enfermera hasta el baño del Loft. Todos intentaron seguirlo pero una mirada de Melissa bastó para que entendieran que quería estar a solas con el chico.

Lo bueno del Loft era que en el baño del segundo piso había una tina, Melissa le pidió al chico que se quitara la ropa y esperara mientras ella llenaba la tina con agua caliente, luego le pidió que se metiera.

Además de la de la espalda, el chico tenía otras varias heridas, las cuales Melissa limpió con todo el cuidado de una madre. Porque Stiles era como su hijo, y según había entendido por lo que le dijeron Deaton y la señora Yukimura esa criatura ahora era una parte se Stiles, así que muy a su pesar también lo amaba.

Una vez limpias las heridas menos criticas pasó a la de la columna.
- Vaya, de verdad que es una herida profunda -Dijo la madre sorprendida.

- Ese alambre tocó nuestra espalda -Dijo el chico.

Melissa mojó un trozo de algodón con alcohol y al apoyarlo encima de la herida sintió como el cuerpo del adolescente se tensó mientras sus uñas se aferraban a los lados de la tina. El chico ya había hecho lo mismo un par de veces.

- ¿Te duele? -Preguntó por enésima vez.

- No -Respondió por enésima vez.

- ¿Puedo preguntar algo? -El chico la miró de reojo con sus ojos negros.- Por favor.

- Hazlo.

- ¿Por qué sigues fingiendo que no te duele?

- ¿Y tú por qué sigues fingiendo que te importamos?

- Porque de verdad me importas, Stiles -Melissa se colocó frente al chico.- No me importa lo que seas ni las cosas que hagas, yo te amo como a un hijo.

- Mentira... -Murmuró el adolescente.

- Sabes que no es mentira, puedes comprobarlo por los latidos de mi corazón.

El adolescente no respondió, en lugar de hacerlo se volteó a mirar las pequeñas gotas de agua que bajaban por sus brazos, esa fue su forma de distraerse mientras Melissa limpiaba y cocía la herida. Hasta que luego de otros quince minutos la mujer lo dejó en paz.

- Listo, ahora debo pedirte que no te toques no rasques en esa zona hasta que podamos retirar los puntos. Sino se abrirá.

- Está bien -La mujer se levantó para irse.- ¡Melissa!

La enfermera se puso tensa cuando su brazo fue agarrado por el adolescente, este al sentir su miedo retiró el agarre y ella se le quedó mirando esperando a que continuara hablando.

- ¿Qué ocurre?

- Stiles me pidió que dijera... -Era como si las palabras le costaran.- Gra-gracias.

- De nada, Stiles.

Melissa le sonrió mientras abría la puerta del baño para irse.

- No soy Stiles -Escuchó que murmuraba el chico antes de que ella volviera a cerrar la puerta.

La enfermera no pudo contener una lagrima que comenzó a descender por su mejilla mientras bajaba las escaleras hasta donde estaba el resto de la manada. Scott al verla así corrió a abrazarla, la mujer aun así no se permitía llorar.

- Si es Stiles -Dijo intentando que su voz no se quebrara.- Yo se que es él.

Melissa se separó y se quitó las lagrimas para luego respirar hondo y voltear a ver al padre del joven hiperactivo.

- Ya curé las heridas, pero la de la espalda me preocupa, parece que tiene envenenamiento por metal oxidado.

- ¿Qué es eso? -Preguntó Liam, todos le agradecieron con la mirada porque tampoco entendían que era eso.

- Tétanos, es una enfermedad grave. En casos graves puede incluso matar a alguien.

- ¿Entonces qué hacemos? -Preguntó esta vez Lydia.

- En mi opinión -Comenzó a hablar Peter.- Lo mejor sería que el chico se quedara con alguien capaz de darle una paliza si se sale de control.

- ¿Te estás ofreciendo? -Le preguntó Chris alzando una ceja.

- Podría... si el señor Sheriff me da permiso de matarlo, claro está.

- ¡No! -Dijeron el Sheriff y Derek al mismo tiempo.

- Okay... yo se por qué el señor Stilinski dijo que no ¿Pero por qué lo dijo Derek? -Le preguntó Malia a Kira en un susurro, la otra chica se encogió de hombros.

- Todos salgan, menos el Sheriff y Melissa -Ordenó Derek.

A pesar de que el pelinegro ya no era un alfa todos obedecieron, incluso Chris Argent, pero a regaña-dientes.

- Escuche, Sheriff. Yo podría mantener a Stiles vigilado, pero debería quedarse aquí.

- ¿Me estás diciendo que lo deje aquí?

- Le estoy pidiendo permiso, señor.

- Es lo mejor para Stiles -Le dijo Melissa a Jhon.

El Sheriff se lo pensó por alrededor de dos minutos, pero finalmente aceptó. Así, ambos se retiraron del Loft, dejando a Derek solo con Stiles.

- Nos aburrimos~... -Escuchó que canturreaba el chico desde el baño. Definitivamente iba a arrepentirse de haberse ofrecido a cuidar al chico.

NOTA DE LA AUTORA:

Al parecer este NogitStiles tiene un poco de amabilidad, por lo menos con Melissa. Pero pobre Derek, ahora es una niñera, y encima de todo no le pagan. Pobresito.

En fin, sin mas que decirles me despido deseándoles un buen resto del día y mandándoles muchos besos y abrazos. Adiós mi linda manada.