Miércoles Addams estaba abrazada a Tn mientras recibía los besos por su cuello. Ella suspiraba con cada beso, sentía que el calor impactaba en su fría y pálida piel con cada beso que éste le proporcionaba. Las manos del joven se deslizaron por sus muslos, acariciando, recorriendo cada milímetro de ella.

—Miércoles, deseo hacerte mía—susurró él antes de morderle la oreja y tirar levemente.

—Eres un maldito pervertido—le agarró la entrepierna con algo de fuerza—ya estás duro—bajó el cierre de la cremallera y metió la mano antes de sacar el miembro del chico—la verdad, no me decepcionas aquí abajo—jugueteaba moviéndola de un lado a otro.

El chico dejaba escapar algunos suspiros sintiendo la mano de la joven antes de que en un abrir y cerrar de ojos, su ropa de cintura para abajo cayera al suelo.

—¿Realmente crees que iba a dejar que me dominases?—le preguntó con ese tono tan serio de ella que al chico le encantaba—eres mío...y de nadie más.

Pronto, el joven se vio con unas esposas y desnudo completamente. Miércoles se desprendió de la ropa, quedando solamente con la interior. Era de color negro, como siempre iba vestida ella.

—Tu amigo está deseoso—se aproximó y lo fue acariciando con suavidad.

El chico respiraba con dificultades, todo el calor recorría su cuerpo y suspiraba con cada caricia.

—Bien, veamos que sabes hacer—le susurró con picardía antes de colocarse sobre su cara, retirar la tela y ordenar lamer.

Tn lo hizo, empezó a lamer como pudo debido a la su posición. Miércoles se mordió el labio, esa sensación era nueva, pero lo que más le excitaba era esa dominación de poder sobre el chico. 

Ella empezó a gemir con un poco más de fuerza a la par que Tn aumentaba el ritmo. Se desprendió del sostén dejando sus pequeños pechos al aire. Al ver esto, la excitación del muchacho aumentó mucho más haciendo que tuviera que cubrirse con la mano para no soltar un gran gemido.

—Buen chico—dijo quitándose de encima antes de besarlo con fuerza—ahora toca la mejor parte.

Era la primera vez de ambos, estaban nerviosos, especialmente Tn. Ella colocó el preservativo y luego poco a poco, se fue sentándose encima. Dio un pequeño quejido de dolor, salió un poco de sangre aunque no le importó en absoluto.

El chico sentía la estrechez de su novia, abrió los ojos y dejó escapar un grito ahogado, esa sensación era demasiado excitante y su corazón apenas aguantaba. Pero lo hizo. Pronto comenzaron las embestidas por parte del chico mientras Miércoles acariciaba sus pechos o se sujetaba a éste para no caerse.

En unos cuantos minutos, Tn avisó de que llegaba, que no iba a aguantar mucho más y ella dijo que adelante. Cosa que hizo el chico y ambos gimieron alcanzando el clímax.

—Ha sido...horrendo—la pelinegra se dejó caer sobre su chico antes de besarlo de nuevo.

—Si...estoy...agotado...—contestaba antes de que ella le liberase de las esposas.

—Uff, duele un poco—se sobó las muñecas.

—Pues aún quedan más juegos como estos—le susurró al oído excitada y emocionada.

Se quedaron allí un buen rato descansando hasta que el chico comentó que tenía fuerzas de nuevo y le apetecía hacerlo otra vez. Algo a lo que ante su sorpresa, ella aceptó.

En está ocasión, Miércoles estaba en cuatro y con la cabeza sobre la almohada. No podía negar que siempre le gustaba dominar en todo, pero quizás está vez probar el juego de sumisa resultaría algo...entretenido. Tn se colocó detrás y tras colocarse otro condón, jugar con la vagina de su chica y darle unos pequeños azotes...entró de nuevo.

Las embestidas se producían de manera constante, el chico no daba crédito que aquello estuviera sucediendo. Pero le encantaba así que se limitó a hacerlo.

—¡Roomie tenemos que ir a...a...!—Enid se quedó perpleja al ver a su compañera de habitación en cuatro y siendo embestida.

Los tres se quedaron de piedra, la cara de placer de Miércoles que no le estaba mostrando a Tn debido a su posición, cambió a una de enojo.

—¡Lo siento!—la chica salió corriendo de la habitación como alma que lleva el diablo.

Tn tartamudeó un poco.

—No creo que pueda seguir...—comentó.

—No digas tonterías, he notado como se te ha puesto aún más dura maldito pervertido—replicó molesta ella—acaba el trabajo.

—¡Me debes respeto maldita gótica sumisa!—le dio unos azotes en las nalgas.

Miércoles no negó que aquella faceta de su chico le encantaba, y siguió recibiendo unos cuantos más mientras era embestida. El color de su culo fue tornándose de color rojizo ante las continuas nalgadas por parte de éste.

El sexo continuó durante unos cuantos minutos más antes de que llegasen de nuevo.

Ahora, se dieron una ducha mientras Tn estaba algo sonrojado por lo ocurrido. Abrazó a su chica por la espalda y le besó el cuello.

—Ha sido maravilloso—comentó mientras la llenaba de besos.

—Si, lo admito. Ahora...besa mi culo como muestra de perdón por haberme azotado—cuando el chico se echó a reír, le miró fríamente—hablo en serio.

—Ah.

Tn se puso de rodillas y besó el trasero de la pelinegra, pero también lo fue mordisqueando suavemente. De nuevo estaba duro y muy sensible. Lo fue besando, acariciando y dando pequeños mordiscos como forma de disculpas.

Luego, al ponerse de pie, la chica alargó la mano para hacer que bajase esa dureza. El chico tuvo que agarrarse a la pared para no caer mientras ella hizo todo lo propio.

Agotado, sin fuerzas y con un dolor por todo su cuerpo, así regresó Tn a su casa. Miércoles por su parte, aunque no lo mostraba, necesitaba comer algo antes de descansar. 

—El sexo es realmente muy agotador—pensaba mientras se miraba al espejo y veía las marcas en su cuello.

Luego de hacer todo eso, tuvo una charla con Enid quien dijo que nunca contaría unas cosas tan íntimas. Solamente comentó que le sorprendió que hiciera aquella postura.

—Un momento de debilidad, pero me gustó—respondió ella mientras se sentaba a escribir un poco pues había tenido unas cuantas ideas.

Tn por su lado, tras cenar algo en su casa, se tumbó sobre la cama antes de quedarse completamente dormido. Y todavía quedaba volver a ver a los padres de la gótica pues eran dos días los que iban a estar allí.

Ahora, ambos habían dado un gran paso en su relación y quedaron...unidos.

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo  :D