Tres hombres de rojo abandonan la casa llevándose a Ayane consigo. Cargándolo de las extremidades, pero justo frente la casa van llegando First y Gawin. A pie pues recién abandonaron el auto y Gawin muere por conocer a Ayane. Van caminando tales tórtolos riendo de alguna broma cuando al mirar enfrente, se congelan. First conmocionado.

Los hombres de rojo se congelan al mirarlos.

-¿Quiénes son ustedes? ¡¿Qué carajos hacen con mi hijo?!

First camina rápido hacia uno de los hombres. El hombre descuelga un taser de su cinturón de cintura y lo apunta en dirección a First, pero este se mueve a un lado esquivando la electricidad. Al quedar de frente, patea al desgraciado y este cae junto a todo su grupo pues no pueden cargar a Ayane solos. El taser se dispara en el pavimento mas no llega a extremos. Los tipos jadean sin saber cómo escapar libremente.

Gawin agarra a uno por el cuello de la camisa entonces lo alza a extremos donde sus pies ya no tocan el suelo. El hombre se retuerce, lucha cómo cerdo enviado al matadero. Su cuerpo comete un lento giro de 180° grados hasta finalmente estar cara-a-cara con el jefe de la mafia vampírica. La noche podrá no alumbrar tanto como el sol, pero alumbra lo suficiente del rostro de Gawin y, oh, si no es aterradora su sonrisa labial. Saborea al hombre con ojos carmesí divertidos.

-Prometí alimentar a este muchacho. Su primer alimento serás tú.

-¡NO, NO, POR FAVOR! ¡PERDONE MI VIDA, LO HACEMOS POR BIEN--!

Gawin desvía la mirada del hombre al sujetarlo del cuello con su mano libre. Añade tanta presión que el hombre agoniza bajo su agarre, sintiendo el hueso desprenderse poco a poco. Hasta que queda con el pescuezo abultado bajo la carne.

Los otros dos hombres huyen rápido. Uniéndose para correr hombro a hombro.

First mira a su hijo. Comprueba su respiración y sigue con vida, tan solo está noqueado. La única sangre que tiene ha secado y proviene de su cien derecha. El psicólogo suspira al tenerlo con vida. -Bien.- Le acaricia toda la cara hasta abrazarlo.

Ayane despierta sentado en el mueble. First está sentado junto a él observándolo incluso cuando dormía. Al ver a su hijo mover la cabeza, le presta atención. -Ngh... ¿Papá?

-Aquí estoy, hijo, estás bien. - Le acaricia los brazos al hijo.

-No sé quiénes eran esos hombres. - Informa triste Ayane. -Pensé que nos separarían.

-No, campeón, por suerte no fue así.

Ayane mira a la derecha y ve a Gawin. El tipo alto que se besó con su padre en el porche. Lo mira curioso, siente que se han visto por primera vez en otro sitio, pero no recuerda. De todos modos, se le queda mirando confundido. Jamás había tenido unhombre así de elegante en esta casa, ni siquiera los invitados eran así.

-¿Quién ere--?

-Mi nombre es Gawin. Un buen amigo de tu padre, fui quién te convirtió en lo que eres ahora, - Alza el trasero de la silla de la mesa, entonces camina hacia Ayane sujetando el brazo arrancado del hombre. Se le ofrece a Ayane. -le prometí a tu papá que te alimentaría. Me gustaría mantenerme firme en esa promesa.

Ayane mira al papá confirmando si es seguro. El progenitor le regala una humilde sonrisa labial seguido a un asentir como aprobación. El joven mira el brazo arrancado. Suavemente lo agarra entre ambas manos cuando Gawin se detiene, dándoselo.

Ayane agradece en dirección al vampiro. Tímido.

Acerca el brazo para sacar todos sus colmillos. Muerde, hundiendo también los colmillos en las mejillas por lo que los hoyos creados son el doble de graves. Comienza a succionar de la carne. Gimiendo en el proceso.

Gawin se sienta a su lado. -Bebe con calma. No te atragantes.- Sugiere.

El chico lo mira sin dejar de succionar la sangre. Reduce su propia velocidad y brusquedad, manteniendo un ritmo pacífico.

-Así. Vas aprendiendo. - Halaga Gawin.

Ayane sonríe sin dejar de succionar. Sintiéndose orgulloso. First sonríe también al ver a Gawin en modo "parental".

❃

Nanon empuja el rostro de Gulf a su pene. -Espera, ¡¿Qué?! - El arrodillado se exalta ante el pene enorme que lo espera.

-Mi abuelo dice que la mordida que te di, resultó ser una Marca. Aparentemente, - Gruñe. -te he marcado a ti como mi pareja.

-Espera, - Parpadea Gulf sin poder creerlo. Se queda estático unos segundos, hiperventilando. Comienza a sentir una quemazón en su estómago, ¿mariposas? No, se sienten cómo aves Phoenix rasgando y cortando sus entrañas sin misericordia. Jamás había sentido una cosa igual. ¿Esto era producto de La Marca? Apenas puede controlar la respiración, Nanon también. Es una batalla interna sacada del infierno. -¿Por qué? No te agrado.

-No queda de mí esa decisión. Maldita sea el destino. - Respira Nanon.

El chico se le queda viendo agitado. -Me duele el estómago... Me duele aquí, - Se agarra el paquete de su entrepierna y lo masajea de arriba a abajo sobre el pantalón. Lento. Haciéndose una masturbación sin contacto físico. Nanon se le queda viendo, le resulta excitante en cierta forma o quizás tiene la cabeza en llamas. -A ti también te duele. - Añade Gulf, poniendo su otra mano en la erección de Nanon e imita el masaje. Agarrando mucho más fuerte. Lo masturba al directo. Como jalar de una palanca arriba y abajo.

Nanon se abre los pantalones dejando los paneles desabrochados. -¿Lo quieres? - Tienta.

Gulf mira los bóxers luego devuelta a sus ojos. -Dámelo.- Murmura. Cediendo a la invitación.

A ambos les brillan los orbes en amarillo.

❃

Pronto e inesperadamente, ambos están desnudos al explícito, sin temor a nada. Nanon tendido en la cama mientras Gulf lo cabalga totalmente placentero. Sus manos como apoyo sobre el abdomen bajo suyo. Brinca dirigiendo un gemido al tejado. Nanon desplaza ambas manos suyas por la cintura de Gulf, poco a poco subiendo, sintiendo su piel erizada.

Llega a los pectorales y los masajea en círculos con los pulgares. Prestándoles divina atención. Gulf contrae su estómago, unos escalofríos lo hacen encogerse de hombros, mira abajo entre gemidos temblorosos.
A Nanon le gusta lo que ve. Esa mirada vulnerable, llena de rebosante placer, casi como si tuviera adelante un manjar de platillos, pero ya está sintiéndose lleno con el que prueba. Gulf brinca más rápido queriendo correrse. Desesperado.

Nanon los voltea quedando él encima, hunde ambas manos en el catre a los laterales del chico. Ambos se miran mientras ancla las rodillas en la cama y da su primera embestida. -¡Ah!

Retrocede las caderas para arremeter con más fuerzas robándole otro gemido. Gulf le rodea la cintura con ambas piernas y se agarra a la cabecera de la cama. El licántropo dominante toma ritmo y embiste tal cual. Haciéndolo gemir consecutivamente. Ahora no para ni sabe cómo parar. Respira arduo por golpear esa próstata de manera placentera.

-¡Nanon! ¡Por favor! - Gulf deja caer para atrás la cabeza. Entre gemidos.

Nanon se le queda viendo. Intrigado ante tal belleza. Siente la desesperación del chico al que está conectado íntimamente. Quiere hacerlo correr, retorcerse, gritar del placer.

-Espera, espera. - Gulf pide. Nanon se detiene mirándolo curioso. El chico se da la vuelta para quedar en sus cuatro plasmando una mejilla contra el catre y se sostiene su propio pene con una mano. -Podemos hacerlo así. - Sugiere.

-De acuerdo. - Nanon acepta entre jadeos. Se acerca a él para volver a entrar. Lento. Despacio. Hasta que nuevamente son uno. Gulf pega un gemido alto casi adolorido, para cuando Nanon vuelve a embestir. Ahora puede ver esos glúteos alzados brillar frente la lámpara a unos cuadros de ellos.

Gulf se masturba rápido.

Nanon lo nota y le arrebata la mano de esa área plasmandola contra el catre por debajo del pene de Gulf. Se agacha sobre su espalda, acaparando toda, y le lame el cuello.

-Dime si te duele y me detendré. - Pide atento Nanon antes de lamer su oído justo por detrás.

-No pares. - Pide Gulf.

Nanon continúa. Él con el mentón posado sobre uno de los hombros de Gulf. Ambos respirando al unísono. Mejilla a mejilla, sintiendo un calor peor que el desierto, pero pasable a comparación del infierno.

Gulf gira su rostro hacia el de Nanon. Buscándolo con la mirada. Nanon también lo mira, lento. Se besan. Así en esa incómoda posición reducen las penetraciones para besarse despacio. Centrándose en sus sentimientos, los que deberán desarrollar desde ahora si La Mordida los ha escogido como pareja destinada.

-Mgh.- Saborea Gulf presionando cerrados sus párpados. Nanon intensifica el beso a un segundo.

Lo sujeta suave de la cabeza para que se mantengan así pese a que Nanon procede a una oleada de embestidas suaves.

Para el tercer beso, Gulf chilla en sus labios y Nanon gruñe en los suyos. Se detienen por completo. Lo detienen todo, excepto la ternura con la que se miran al retroceder rostros. Gulf está cansado. Terriblemente cansado. Nanon ni se diga.

-Has sido un buen chico. - Susurra Nanon besándole la frente. Gulf ríe ante el comentario, manteniendo una sonrisa.

-Tú también lo has sido. - Le besa una mejilla a Nanon.

Ambos ríen acostumbrándose así mismos. El licántropo de más experiencia lo abraza, cubriéndolo casi por completo.

-mon petit loup (Mi pequeño lobo). - Dice Nanon.

-¿Qué idioma es ese? - Ríe Gulf.

-Francés, ¿cuál pensaste que era?

-Chino.

-No~, vamos~. ¿Chino? - Ambos ríen. -¡Sabes que no pensaste eso!

-Okay, tienes razón, tienes toda la razón. Pensé en italiano. ¿Puedes explicarle a esta cabeza hueca que fue lo que dijiste?

-Mi pequeño lobo. - Explica Nanon, paciente.

Gulf se sonroja. Mantiene la sonrisa, pero mira el catre pensativo. -¿Sí me vas a conservar?

-Bueno, podría tirarte a la calle ahora mismo. ¿Quieres eso?

Le hace cosquillas y Gulf ríe. Supongo que el destino también tiene caminos misteriosos para unir personas.

Un Mes Después
10 de marzo de 2023

La tanuki se movió de pueblo en pueblo siempre que hubiera un santuario vacío. Le costó días a Gawin encontrarla, pero todo valió la pena al hacerlo. En una noche tan ordinaria como cualquier otra en el mundo sobrenatural, se encuentra arrodillado en un santuario. Oye los árboles bailar con la ventisca, y es iluminado por una luz color oro cercana a ser celestial. La tanuki se encuentra frente a él flotando. Los finales de su kimono flotan junto a ella.

-Nos volvemos a ver, Gawin. - La tanuki comete un seductor, lento, parpadeo mientras ensancha una sonrisa labial.

-No sabía que eras una criatura, señorita. - Respeta él con una sonrisa igual.

-¿En qué lo puedo ayudar?

-Necesito una cura. ¿Ha oído hablar de los dhür? Vampiros antiguos muy peligrosos.

-Mi abuela me contó. Desafortunadamente, no tengo una cura exacta para detener ese mal. - Ella anuncia apenada sin conocer todo del asunto. Gawin va bajando la mirada. Decepcionado. Tardó tanto en encontrarla, ¿para esto? ¿En serio no habría nada que hacer contra ese mal?

-Pero tengo una cura que me temo no le gustará. - Atraviesa su propio estómago con una mano, el hoyo que rodea su brazo brilla en color oro. Gawin alza la mirada, interesado. Dispuesto a aceptar lo que sea para salvar a Ayane. Cualquier cosa. Todo.
La criatura saca un frasco de líquido carmesí. Parece sangre, pero es una mezcla de hierbas y especias. Lo sostiene entre dos de sus enormes dactilias. El frasco parece una uva al lado de esas patas.

-La cura sería convertirte en humano para que todos a los que convertiste también.

Gawin queda impactado. Esperaba todo menos esto. No sabe qué pensar. Mayormente tras que sus guardaespaldas fueron ambos mordidos por él. Y lo peor, él lidera a los vampiros. Sin él, ¿bajo qué manos quedarán los vampiros?

-No debes decidir ahora, - Mágicamente ella le envía el frasco. Flotando el mismo por los aires. Gawin alza una mano como en esos juegos de atrapar la pelota y el frasco llega a su palma. Todo suave. Cierra la mano con el frasco dentro. Poco a poco, baja el brazo hasta mirar su puño. -piénsalo bien. Luego decide. Lo que sea que decidas, será para bien, señor.

Kim da una reverencia cortés. Dándole un tratado digno de una tanuki. Gawin sonríe labial, por primera vez en mucho sintiendo algo amargo: inseguridad.

En la casa, First lee expedientes de nuevos clientes en el mueble mientras que Ayane está en su habitación estudiando literatura con Gulf. Ambos acostados hombro a hombro, esta vez Ayane leyendo.

-Él... "Decitio"...

-Desistió, - Corrige Gulf. Ayane ríe y vuelve a intentarlo:

-Desistió.

Ambos ríen entonces. La herida en Gulf ya se ha ido así que no debe tener un parche, se ve más feliz ahora que pasa tiempo con Nanon y Ayane. Con Ayane siente que habla con el hermano menor que jamás tuvo.

Afuera de la casa, cinco hombres en capuchas esperan. En línea.

Hasta que se cansan de estar ahí parados y corren agresivos hacia la casa. Uno de ellos derriba la puerta, y First mira la puerta alertado. Se pone en pie espantado ante lo que ve. Los hombres entran poniéndose en línea otra vez.

-No... - First murmura. -¿Qué es lo que quieren? No les tengo miedo, ¡¿saben?!

Camina hacia los tipos, pero estos todos sacan bastones tonfa y entre todos golpean a First en las costillas. Él cae al suelo gruñendo alto y soportando los azotes.

Ayane baja las escaleras apresurado junto a Gulf. Ambos se detenien a mitad de las escaleras finales.

-Son esos tipos otra vez. ¡¿QUÉ LE HACEN A MI PADRE?! - Gruñe mostrando todos los colmillos. En cuánto los hombres miran, Ayane los levita, haciéndolos flotar en el aire.

-Ayane... No... Espera. - First habla todo debilitado apenas apoyando un codo en el suelo para levantar la parte superior del cuerpo. Tiene golpes sangrientos en el rostro. Cortes en los labios.

Ayane abre su boca, obligando a todos ellos abrir sus bocas también. Listo para alimentarse.

Pero un hombre que no entró con todos los de rojo, le dispara un dardo al lobo. Durmiendolo al instante. A Ayane también le dispara uno en el pecho.

Ayane lo mira y grazna en su dirección. El hombre comienza a ser levantado cuando dispara un segundo dardo. Ese lo golpea justo en el corazón. El vampiro suelta todas sus víctimas. Cayendo de rodillas.

-No... Por favor... - First se aferra a la pierna del tipo recién llegado. La abraza como a un árbol. -Por favor, ¿Qué quieren? Él no lastima a nadie, ¡¿QUÉ QUIEREN?!

El hombre patea su rostro, haciendo a First quedar recostado todo débil. Su nariz sangra a por montón contra el suelo. Respira débil, temblando, inmóvil. Por más que lo intenta no puede alzar la cabeza tras ese golpe.

Ayane cae al suelo, aún batallando el suero. Tiembla igual que su padre. -Ya duermete, carajo. - El hombre tan pronto llega a él le da una patada en la cara, quebrando su nariz.

-¡NOOOOOOOOOOOOOOO! - Llora First. Por un segundo olvida como respirar, luego al recuperarlo solo solloza alargando su llanto.

El hombre se arrodilla, lo alza del pecho de la camisa y comienza a meterle un puño tras otro. Consecutivamente.

-Nogh.... - First traga grueso, perdiendo la consciencia. Sus ojos luchan por no cerrarse... Pero no puede. No puede no cerrarlos.

Borroso, pero con algo de consciencia, ve al hombre cargar a Ayane en forma nupcial para llevárselo. Los otros hombres también se van junto a él.

First sucumbe a la oscuridad.