Todo se basa en perspectivas. Lo que conoces como malo puede ser bueno para otro. Sin contexto, las cosas son como son. Pero la humanidad siempre busca excusas, para justificar falsamente sus actos y dormir bien por las noches. Sin embargo, Dios no sintió correcto dejarlos en paz. Así que permitió algunos demonios en la tierra. Hermosos seres parecidos a los ángeles, pero más mortíferos que los leones, pesadillas andantes.... Llamados:

Lamia.

O mejor conocidos como: vampiros.

Criaturas de la noche que, al igual que los humanos, aprendieron algunos trucos para caminar a la luz del día. Los humanos todavía se ven así mismos en la cima de la cadena alimenticia... Ignorantes de la alimentación realizada en las sombras.

First Foccet es un hombre de treinta años, rubio (este lacio hasta la nuca donde se pone puntiagudo como dagas), con la fortuna de dos, serenos, ojos azules y no oscuros sino transparentes, cristalinos. Ojos que ni siquiera la oscuridad podría cerrar. El tronco de su nariz comete dos zigzags antes de continuar un trazo normal hacia una estructura afilada. Blanco como la nieve cuando se aclara como ahora. En tonos más oscuros, se ve crema.
Con un café matutino y cinco turrones, no se duerme mientras lee archivos. Y al contrario de lo que todo el mundo piensa First no se aburre al leer, despertarse a las cinco de la mañana todas las semanas con solo sábado y domingo para descansar provoca su cansancio. Gracias a eso aprendió a apreciar el café.

Avanza página tras página, cuando alguien llama a su puerta. "Sr. Foccet, soy yo, um, ¿Franklin?".

-Si usted mismo desconoce su verdadero nombre, muéstrese para asegurarme de que ningún extraterrestre lo haya poseído. - Bromea el psicólogo con una amplia sonrisa poniendo los archivos en una mesa cercana. Aún con las piernas cruzadas.

Aquel cuyo nombre es Franklin abre lentamente y se acerca en silencio. Mira a su alrededor hasta capturar a First en sus ojos y sonríe tímidamente. El siempre encogido de hombros e inseguro, Franklin. Una vez dentro, cierra la puerta con demasiado sigilo y camina con las piernas pegadas.

-¡Oh! Pero sí eres tú, Franklin.- First mantiene la broma y su tímido cliente se ríe mientras se sienta en el sofá de adelante.

-Me siento como yo, Sr. Foccet. - Ríe tímidamente sin parar cambiando su mirada al suelo y de vuelta al psicólogo.

-Y eso es bueno, ¿no es así, Franklin?

-Si esa es la entrada a la respuesta de 'cómo está': me siento bastante bien, doc. O bueno, psic, o bueno...- Mira al techo helando su boca y hormigueando un dedo. Tratando de encontrar un apodo correcto. First se ríe en silencio y suavemente dice:

-Puedes llamarme como quieras, Franklin. No te preocupes por eso.

-Bueno.- Comete otra carcajada, esta vez mirando al psicólogo. No mal ni nada negativo. De hecho, se ve tan feliz que su progreso es notable. -Recientemente conocí a una mujer. Una mujer que parece simpática,

-Una mujer, - Apoya First con una juguetona voz engreída. -Pues mírate, Franklin, cuéntame más. ¿Cómo la conociste? Cómo... Cuéntamelo todo, Frank.

El cliente se ríe, admirando el interés del contrario.

5:00 PM.
Beton, Tailandia

Tocan melodías mexicanas en un club vacío. Las mesas están cabeza abajo, vasos rotos con cervezas salpicadas en el suelo y más allá, dos hombres parados frente a uno arrodillado. Los que están de pie usan vestidos y zapatos caros, al igual que sus relojes.
Fríamente mirando al arrodillado con ojos rojos, apasionados e infernales.

-¿A quién le vendiste nuestra información?- Exige uno de los hombres. Ninguno es el líder de la pandilla.

-Yo... solo publiqué un post en internet. ¡Nadie lo va a ver, lo juro!

-Uf... Humanos. Tan sabrosos pero molestos.- Una voz fría y feroz abre paso. Todos miran la barra. No se ve nadie. O eso parece. Cuando un segundo después de esas palabras, Gawin Damphere, se levanta sujetando a alguien por el cuello de la camisa. El barman apenas puede mantener los ojos abiertos. Tiembla sin parar y tartamudea. Hay una mancha gigante de sangre en su cuello. Tan enorme y sigue sumando. Ha sido mordido hasta el punto en que se pueden ver algunos de los huesos profundos de su garganta. La sangre sale a borbotones como un volcán.

El tipo muere y Gawin lo deja caer sin piedad. Toda su boca ensangrentada hasta sus mejillas. Sangre pesada que aún tras finalizar, gotea. Su cabello negro, ondulado e impecable se encuentra con los anchos de su cuello. Salta la barra y camina confiado al hombre asustado.

-Los policías locales humanos no deben meterse en esto. Las píldoras mías tienen sangre especial, sangre única que puede mantener satisfechos a otros vampiros durante semanas. Así que, por favor, sea un caballero y dígame dónde están. O se desatará todo un infierno.

-Muy bien, mi amigo es un hombre lobo. Creo que dijo algo sobre su manada de lobos planeando algo para los vampiros. Realmente no tengo nada que ver, ¿de acuerdo?

Gawin Damphere le da una mirada mortal mientras endereza su espalda. Una vez que se ha levantado por completo, piensa...

«Hombres lobo, ¿eh? Supongo que quieren jugar duro... Dos pueden jugar ese juego. »

Gawin sonríe perdido en sus pensamientos. El pobre y lloroso humano mira a los guardaespaldas y a él. Desesperado.

-¿Me puedo ir?

Los guardaespaldas de Gawin miran a su jefe principal.  Esperando sus órdenes.  Que serán pronto.  Fuera de sus pensamientos debido a la voz, pestañea no una sino dos veces y mira fijamente al humano.

—Si ese hombre lobo tuyo realmente es tu amigo, querrá conocerme una vez que vea tu muerte.  Y tal vez charlemos, ¿qué te parece?—  Sonríe mientras lo alza del suelo por el cuello.

—¡No!— Sus piernas patean el aire una tras otra vez.  —¡Por favor no!

Gawin lo atrae hacia su pecho y hunde sus colmillos en la carne.  Saboreando el miedo que endulza la sangre.

A las seis en punto, First se dirige a su casa.  Cuando estaciona el auto al frente, ya puede ver otro auto estacionado allí y una mujer apoyando su espalda en el con un lindo niño de cabello color caramelo.

—¡Papá!— Grita el niño saludando desde la distancia.  Protegido del frío por una chaqueta azul tan grande que lo hace ver gordito como un anime.

First saluda de vuelta todo feliz de verlo... Sin embargo, no feliz de ver a la mujer.  Quien le da una mirada realmente enojada.

*N/A: ¡Nuestro chico First tiene un hijo!  Entonces, en esta versión de nuestro mundo, hay hombres lobo, ¿por qué tomaron las drogas de los vampiros?  😱💖🤭 Espero les guste ✨ Si ven nombres como Wayne o Wolfe es porque hice este borrador con nombres originales para convertirlo en fan-fiction🥺💖*