"Chapter 9"
James
Me debatía entre marcar o seguir en la ignorancia. No quería saber de nada, continuar con la vida con la que todos me tachaban de egoísta sin embargo no era lo correcto. Nunca me lo perdonado teniendo la opción de cambiar algo, al menos eso merecía saber.
El sonido previo antes de atender la llamada me hacía dudar, quería colgar pero ya había tomado una decisión.
Alex
El celular sonaba y me apresure a contestar. Sabía perfectamente quien era por que ya había pedido a compañeros su numero para disculparme, me alegraba que me hablara. No podía dejar que pensara que no quería contestar.
-Hey Alex-
-he sí, ¿ quien habla?-
-soy yo...-
-¿quien?-
-Carricero....James Carricero-
-así, que es lo que necesitas-
-qu..quería saber... la dirección de ese lugar...hay...hay algo que necesito confirmar...por mí mismo-
Se notaba el esfuerzo por hacer esa petición, en verdad le costaba. No sabía que era lo que le ocurría. El simple hecho de ser etiquetado y llevar esa etiqueta a cualquier lado que vayas no era agradable. El no era libre, llevaba grilletes puestos por su propia mente.
-no preferirías que te acompañe-
-nooo, no, gracias por el ofrecimiento pero iré solo, necesito averiguar algo y en verdad no se....por que hago esto-
-lo entiendo, claro te mandare la dirección. Si necesitas cualquier cosa no dudes en pedirla, al igual si no necesitas nada o si solo quieres hablar-
-Alex...-
-claro, no somos amigos pero no debe haber una razón para simplemente hablar al igual que no hay una ley que te lo impida-
-si las hay, se llama orden de restricción-
-sin embargo nos acabamos de conocer hace poco, por favor no intentes poner una orden de restricción en mí me he portado bien y pago mis impuestos-
-por favor no intentes ser amable conmigo-
Había dejado una primera impresión fatal, ya nos sabía como arreglarlo por que al igual que por un momento lo juzgue como todos lo habían hecho, ahora él me juzgaba como uno más de el rebaño. Había sido muy evidente mi cambio.
-lo siento por... por que en ese momento creí todo lo que se contaba de ti-
-eres libre de creer todo le quieras, en esa situación no hay una ley que te lo prohíba-
-James en verdad que lo siento, no soy esa clase de persona que juzga sin conocer, si en verdad hiciste lo que se rumorea tendrás tus razones. Yo también cometí errores en el pasado. Podrías creerme-
-por favor solo envía la dirección, te veo más tarde-
Al decir lo ultimo corto la llamada inmediatamente si darme elección para seguir hablando con el.
James
No podía seguir creyendo en mentiras, había estando conviviendo con ellas demasiado tiempo.
El simple hecho que Alex fuera demasiado amigable conmigo no me dejaba tranquilo. Hace mucho tiempo que las personas no se acercaban a mi de una manera amistosa, hace mucho tiempo que habían dejado de ser amigables, la ultima persona que no cambiaba su esencia sin importar lo que yo fuera o hiciera estaba muerta, ella seguía siendo ella.
Decidí terminar con los preparativos de la noche, no me gustaban las fiestas. La gente cambiaba su actitud solo por única ocasión, solo por ser yo el anfitrión pero era el único momento que en verdad me perdía de la realidad, me dejaba guiar a la ignorancia; al igual que esa misma noche, El Grave Error que había cometido.
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Observaba los peatones pasar debatiéndome en mi interior, estaba a unos metros de el lugar sin embargo temía haber tomado la decisión incorrecta.
Me había equipado con unos lentes y gorra para evitar que me reconocieran, ya había cometido ese error y lo rumores no se habían hecho esperar. En ese momento me sentía tan nervioso, mis manos no paraban de temblar y mis respiración era tan tan errática, no podía detener los nervios que invadían mi cuerpo, no sabía si la iba a encontrar en este lugar.
Me sentía más culpable que nunca.
Observe mi reloj verificando el tiempo, aún me quedaba tiempo para la fiesta y había permanecido aquí una media hora. Ya era momento de entrar, las personas empezaban a ver mi comportamiento un tanto extraño.
Me detuve un momento para darle un ultimo vistazo al lugar desde el exterior: el letrero en mal estado por el paso el tiempo, me anunciaba "club nocturno, el ave". Y la sonrisa en mi rostro no se hizo esperar, (el dueño de el lugar tenía un extraño sentido del humor, tal vez solo era una coincidencia que no se apartaba de lo extraño de la situación).
El interior de el lugar era un poco diferente a lo que me había imaginado, me detuve a retirar los lentes debido a la falta luz de el lugar, el ambiente era un poco rústico aunque los lugar que yo frecuentaba era mucho más costosos. Me acercaba a la barra, sin observar a mi alrededor, no debía hacer pensar que era mi primera vez en este lugar, debía ordenar algo para mantener las apariencias.
Era un experto manteniendo las apariencias.
-Oiga camarero, sírvame una-
-los precios están ahí junto a su nombre, se pagan al entregar y mi nombre es Roy- Señalando una pizarra que se encontraba al otro lado de la barra.
-lo sé-
Al entregármelo había una extraña mueca de burla.
-¿a que hora iniciará el espectáculo nocturno?-
-Si se refiere a que vino solo para ver a las chicas, el espectáculo comenzará después de las 7, si vino solo para hablar con una se encuentran preparándose en es lado sin embargo si alguna de ellas notifica que la molesta me vére en la necesidad de llamar a seguridad-
Intentaba poner atención a lo que decía el hombre pero era consumida debido a lo cerca que estaba la verdad, se encontraba a tan solo unos pasos. Mis manos nuevamente temblaban con más intensidad, tratando de ocultarlas.
-¡Hey! amigo me presento soy Thomas, y tu eras ¿Roy?, ¿cierto?- Ante la necesidad y el poco tiempo respondí el primer nombre que se había cruzado en mi mente y trate de actuar tan distinto a lo usual.
-si, que necesitas Thomas-
-no lo había mencionado pero me dedico a la edición y a dirigir videos musicales para cierta discografía importante, no puedo mencionar su nombre pero trabajamos con unos artistas muy reconocidos y estoy en un aprieto- Las mentiras que mencionaba eran tan creíbles para mí, ya que estaba tan acostumbrado a ellas. Soltaba mentiras como si las respirase.
-Así ¿que tipo de aprieto?-
-tuvimos un pequeño desacuerdo con unas chicas, y cancelaron en el ultimo momento-
-lo entiendo-
-tal vez no, debes estar pensando que estoy loco y solo quiero aprovecharme-
-no, si lo creo no eres la primero que viene para contratarlas pero si el primero bien vestido; no obstante como lo había mencionado ellas se encuentran allá y la decisión son de ellas-
-si claro, me podrías anotar el teléfono de el lugar-
Al terminar el se retiro, lo había perdido por lo que para mí era minutos y regreso con papel donde venía el nombre del lugar con el numero de contacto que no necesitaría.
Deje mi bebida aún sin terminar y me acerqué, al menos el alcohol había hecho que cobrara un poco de valor.
Al acercarme escuchaba unos murmullos sobre quien creían que era, el maquillaje en exceso y el color de la poca ropa evidenciaba que trabajaban ahí, todas iban vestidas similares.
-Disculpa, soy Thomas y vengo buscando a unas chicas para un video musical, hay alguien interesada- La chica con la que me había acercado parecía ser la líder de ellas.
-Depende de a quién le preguntes como veras estamos muy ocupadas- El sombre floppy que llevaba en ese momento le incomodaba y hacía que se distrajera.
-son todas las chicas que trabajan en este lugar- Mencionaba mientras las examinaba, soltando un ligero suspiro al observar que entre ellas no se encontraba Megan.
- no, 2 de las 3 que no se encuentran aquí, viene mañana y ahí otra chica que no se encuentra aquí. Tuvo problemas, no se sentía bien de salud y se retiro en la mañana, menciono que tal vez no iba a poder continuar aquí, usualmente se van de aquí por la puerta trasera- decidí encender un cigarrillo para relajar un poco más mis nervios.
-puedo preguntar ¿como es ella'-
-claro que puedes pero me estas quitando algo de mi tiempo y aunque todavía no inicia el espectáculo, pierdo dinero- Saque mi cartera y le entregue unos billetes.
-es un tanto bajita, no creo que en verdad le interese ese tipo de trabajo ni este, la encontraras aquí mañana, su nombre artístico es tormenta pero en verdad no le agrada esa clase de trabajos, su verdadero nombre es Megan-
Alex tenía razón, los rumores podrían ser ciertos
-gracias, vendré aquí mañana y si no me presento mandaré a otro de producción-
-como gustes-
Al salir la luz de el sol me cegó, cubriéndome bien mi rostro con la gorra y los lentes espere a que las personas dejaran de pasar y al hacerlo me apresure al callejón cercano. La puerta trasera daba a ese pequeño callejón; el olor era terrible debido a la basura que se acumulaba, me adentre más y más al llegar al final las bolsas de basura estaban apiladas. Entre un espacio que quedaba había alguien sentado.
-lo siento-
Al no obtener repuesta comente:
-se encuentra bien- sin embargo la persona que estaba ahí no respondía.
Me acerque para observarlo bien, el rostro estaba cubierto por el cabello. Intente tocarle el rostro y cabello cayo a un lado dejando a descubierto quien era, no podía creerlo. Toque su rostro, pero el frío de él anunciaba lo trágico.
Megan yacía ahí sin vida.
Me sentía culpable, yo era el único responsable que había que señalar. Su vida se había extinguido y yo permanecía sin poder hacer algo bueno. Al final todos se iban y yo me quedaba cada vez más solo.
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