Capítulo 2
Hola a todos, queridos lectores! (o bienvenidos a aquellos que por primera vez me conocen!)
Sin nada más que aportar, diré que ningún personaje me corresponde ya que para eso está su respectivo dueño.
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Capítulo 2
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2018
Últimamente el personal del hospital está dejándome entrar sin siquiera anunciarme. Pareciera que Rebecca les dejó avisado que me convertiría en una visitante habitual.
Elza quiso venir conmigo, pero luego de convencer a Sherry para que compartieran tiempo juntas, ambas han dejado de insistir en venir y ver a Leon por unos días. Realmente me duele mucho verlo dormido y sin reaccionar.
No quiero imaginarme cómo se sentirían ellas cada vez que intentan llamarlo para que abra los ojos.
La verdad es que desconozco la cantidad de veces que lloré a su lado hasta dormirme tomada de su mano. Solo desearía que Rebecca no me despertara, pero no puedo ser tan egoísta cuando está claro que no soy digna de ello.
Pero lo extraño mucho. Su voz, sus gestos, sus ojos vivaces. Todo eso y mucho más extraño de él.
A veces me pregunto qué me llevó a estar separada de su lado, pero luego la culpa me invade e incluso me imposibilita el verle las caras a mis hijas, lo cual termina obligándome a soportar el dolor para no angustiarlas.
Lástima que Sherry ya no sea una pequeña, pues por su cara sé que no se traga mi mentira de que todo está bien.
No estoy para nada bien.
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Con fuerza cerró los ojos el blondo agente en vías de recuperación, llevándose la mano derecha hasta el rostro para masajearse el puente de la nariz con apenas fuerza, totalmente incrédulo con lo que leía. La primera entrada por parte de la hermana de Chris Redfield le sirvió como introducción para saber el efecto que había tenido en ella su accidente, lo que le incomodó bastante ya que también supo que no tenía ninguna mentira que pronunciar para ocultar lo que sentía.
Sin embargo, la nota que acababa de leer en voz alta por pedido de su hija principalmente, ya que si hubiese sido por él no lo habría hecho debido al respeto que le tenía cierta pelirroja, le demostró ambos estuvieron viviendo una mentira. Una ilusión encargada de mantenerlos separados por temor y protección, ignorando en el proceso las heridas que se provocaban.
-Estás bien? – la interrogante formulada por Thompson sacó de su ensimismamiento al hombre que suplantó a determinado Redfield en su última misión.
-Es paradójico, sabes? Se necesitó que yo cortara toda comunicación con ellas para que me viesen como soy en verdad- gesticulando una mueca repleta de ironía, Leon alegó tras cesar el roce a la nariz y ver el dedicado trazo delicado que decoraban los renglones oscuros.
-Recuerdo haber dicho que ellas habían actuado como unas perras en aquella época, pero admite que tú no eres trigo limpio tampoco- el comentario de Jake fue conciso y directo, indiferente al vistazo lleno de reproche que Elza le dio ya que comprendía mejor el significado de algunas palabras.
-No lo niego. Nunca lo he negado. Pero tampoco soy joven como para creer después de unas simples palabras, más de una vez lo hice y no terminó bien para ninguno de los dos- a pesar de que inconscientemente adoptó un semblante símil al de su hija por el adjetivo peyorativo usado para describir al par de mujeres cercanas a su corazón, el antiguo guardaespaldas presidencial explayó.
Un incómodo silencio incautó el ambiente de la habitación, donde el persistente pitido del monitor cardíaco era lo único que no permitía que el mutismo abarcara cada rincón. Confundidos, Ark y Jake buscaron rápido la causa de ellos pues ambas manos del rubio estaban libres, solo para detenerse abruptamente en sus respectivos lugares en el instante que la niña cambiaba de falange la vía de medición.
-Tú y Sherry...- resonando a nivel mental breves momentos donde vio al pelirrojo con determinada joven que cuidó como pudo cuando era joven, insinuó escuetamente mientras intercalaba miradas entre el implicado y su hija más pequeña.
-Estamos en pareja? Sí- enarcando una ceja, Muller complementó la frase que sugería Kennedy, para luego dar una connotada afirmación.
-Bien- asintiendo con un aire ausente, el viejo policía novato de Raccoon City manifestó, bajando la vista para releer la nota vocalizada minutos atrás.
Impedimentos mentales se encargaban de eludir la mera ilusión de poner su fe en creer las palabras escritas con tinta azul. No porque Claire insinuara su nueva postura como madre con Elza, ya que demasiado claro tenía que ella tiene una habilidad excepcional para hacer sentir segura a niñas pequeñas. Mas esto no era igual con él, no al saber que las acciones hablaban más que mil palabras algunas veces.
-En serio preguntaste eso? – la interrogante del cierto pistolero, que se mantenía atento a los manierismos de su amigo, resonó en la habitación.
-Me preocupo por ella. Ya deberías saber eso- saliendo de su abstracción, Kennedy observó de reojo a Thompson para luego responderle como si fuese una obviedad.
-Claro que sí, Leon. Claro que sí...Mejor sigue leyendo, al menos así nos distraeremos en lo que Rebecca llega- gracia le halló a tal respuesta Ark, soltando un pequeño bufido mientras realizaba un movimiento lateral de cabeza previo a insistir que continuara con la narración de notas.
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2018
Quién hubiese pensado que cuidar de una pequeña era tan agotador?
No te envidio para nada Leon, nuestra hija más pequeña es una bola de energía imparable que desea correr en mi moto a todo momento. Agradezco que Wong y Ark estén cerca cada vez que les llamo para pedir ayuda.
Sin embargo, ella está llegando muy rápido a mi corazón. Pensé que se mostraría renuente a mi presencia, pero hemos conectado mejor de lo esperado, aunque no dudo que todo sea obra de su padre.
Aún tengo fresca la memoria en donde ella me dijo que causábamos dolor en él. Verdaderamente odio esa parte de mí, la que halló una vía de escape emocional al tratarlo tan mal verbalmente e ignorarlo en varias ocasiones.
Solo espero que él no me haga lo mismo el día que despierte.
No lo soportaría, incluso si lo merezco.
Quiero estar a su lado, despertarme junto a él, y recordarle que su amor es recíproco.
Invitarle a todas aquellas citas que de seguro pensó para mí.
Reírnos juntos. Llorar. Abrazarnos.
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Quería soltar una sonora carcajada el blondo, burlarse de la irónica vida que le tocó, aún si esto terminaba por lacerarle más todavía la garganta. No obstante, una amargura atentó con subir por la laringe, poniéndolo en el menester imperioso de beber agua mientras mentalmente rogaba que su rostro no hubiese develado el torbellino de emociones padecidas.
El par de adultos, por su lado, recordaron como solían visitar a la pelirroja junto al resto para ver cómo progresaba la relación entre Elza, Claire y Sherry, pues inclusive ellos tenían conocimiento que incluirse de forma sucinta en la vida ajena de alguien no era siempre bien recibido. Días, e incluso semanas o meses, todos aquellos que estuvieron cuatro años atrás en la habitación hospitalaria se turnaban para acompañar a la pelirroja superviviente de la isla Sonido de Tortuga, comprensivos de la carga psicoemocional que acarreaba por motus propio.
-Tal parece que le diste muchos problemas a Claire- parló Leon a su hija, quien había apoyado su cabeza contra el bíceps siniestro y leía junto a él en silencio las notas.
-Era una niña- respondió la única fémina de la recámara, formando una adorable faneca.
-Eras? – repitiendo el verbo usado por la joven muchacha, el propietario de unos cansinos orbes cerúleos le sonrió.
Ante la vista de todos, Elza entornó la mirada de manera desafiante, mas se contuvo de realizar comentario alguno excepto por algunos balbuceos inentendibles que derivaron en juguetear con los botones de la campera.
-Ahora que lo estoy leyendo, dónde está Ada? – siendo que no pasaba de página, el agente que viajó a España más de quince años atrás cuestionó.
-En una misión- contestó el novio de Sherry Birkin, haciendo caso omiso a los intentos del rubio para no hablar de la mujer que escribía lo que estaba leyendo.
-Sigue con eso de ser doble agente? – a pesar de no estar tan sorprendido como todos esperaban, Kennedy quiso saber si algún milagro había ocurrido en su tiempo inconsciente.
-No- acotó con sencillez el hijo de Albert Wesker, encontrando satírica la reacción del rubio.
Un par de cejas elevadas reflejaron la sorpresa del recién recuperado, el cual nunca creyó que algo por el estilo sucediera. No porque careciera de esperanzas en la espía con rasgos asiáticos y pasado enigmático, pues era el caso contrario, sí tenía grandes expectativas en ella de que algún día iba a dejar de trabajar en aquella tarea tan peligrosa.
Sino porque lo hizo en tan poco tiempo.
-Ahora tía Ada trabaja algunas veces con el hombre gorila- aportó su comentario de forma inocente la niña superviviente al incidente biológico de New York, poniendo la mano derecha con la palma en dirección al techo sobre el regazo de su padre.
Ese último diálogo atentó con sacar una risa del rubio, resignándose a mover la cabeza para no hacerlo por respeto a Redfield. Lamentablemente esto no podía decirse de los dos adultos restantes, quienes más de una vez disfrutaban de aquel mote burlón cada vez que Valentine lo gritaba en reuniones informales.
-Sabe que fui yo quien le puso así? – inquirió Leon a la infante, colocando su extremidad superior siniestra sobre la mano de su hija para entrecruzar los dedos.
-Sí. Y recuerdo que se enojó cuando lo supo- despeinándose al sacudir la cabeza de arriba hacia abajo, Elza contestó.
Imaginándose lo que pudo intentar hacerle mientras estaba en coma, el ex agente de la ley en Raccoon City se dispuso a proseguir con la lectura.
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2018
Admito que mi vida es un desastre sin ti Leon. Tú me hiciste esto al abrirme los ojos, y no sé cómo remediarlo.
Por Dios! Soy una mujer adulta de casi cuarenta años y actúo como una maldita niña cada vez que pienso en ti...y lo peor es que no se lo puedo decir a nadie sin sentirme como una idiota. Creo que estoy entendiendo muy bien el por qué empezaste a escribir en este diario. Es una buena forma de desahogarse.
Sherry y Elza han intentado ver qué tanto pongo aquí, pero tras indicarles que esto solo podría leerlo su padre, se tranquilizaron.
Sí, no sé cómo ni cuándo, pero el día en que Leon abra sus ojos, le permitiré saber todo lo que siento de la misma forma que él hizo conmigo.
Hasta entonces, me dedicaré a seguir llenando estas hojas, depositando pensamientos y sucesos a modo de bitácora. Sin embargo, hasta nuevo aviso deberé esperar afuera de la habitación ya que Rebecca ha regresado para realizar el control rutinario.
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Ninguno, adultos o menor de edad, requería saber cómo estaba emocionalmente la persona encargada de leer en voz alta las memorias de una mujer ausente. Vivir más de veinte años en la oscuridad, algunas veces autoimpuesta y muchas otras siendo el caso contrario, dejaban grandes mellas en la psique y voluntad para continuar. Por eso mismo, mientras escuchaban atentamente, cada uno estaba listo para actuar con lo que fuese necesario para ayudar al rubio.
Este, por su parte, solo deseaba arrojar la bitácora en el maletín con el fin de cerrarlo y finalmente recostarse de nuevo, ansioso de que todo fuese nada más que una sugestión onírica producida por la recepción de sensaciones externas. Lamentablemente para el agente, ya no sabía bien si despertarse luego de cuatro años fue algo bueno para su temple.
Quería gritar que todo era una endemoniada broma de mal gusto, que Claire no estaba haciendo lo que describían las páginas. Que ella no estaba proponiendo lo que él, en numerosas ocasiones, realizó. Que esa pelirroja, cuya protección fue efectuada por su persona tras bambalinas, ansiaba complementar viejos sentimientos en simultáneo que le culpaba por ellos.
Realmente se arrepentía de despertar.
-Papá...- llamó, preocupada porque su padre estaba desde hace un minuto con los ojos cerrados, la niña de largos cabellos áureos.
-Estoy bien, no es nada- el hombre respondió, aunque las manos del mismo parecían opinar lo inverso ya que algunas hojas estaban arrugándose por la fricción aplicada con los pulgares.
-Leon, si no quieres seguir leyendo nadie te dirá nada- comprensivo con el momento que estaba viviendo su amigo, Ark indicó mientras se proponía erguirse.
En su lugar, el aludido permaneció en silencio, abriendo los ojos pero manteniendo fija la vista en un punto de la pared donde el color sepia parecía ser un poco más oscura debido a que las capas de pintura fueron superpuestas por error. Por unos minutos, Kennedy optó por dejar en blanco la mente, poco deseoso de pensar en algo relacionado a la lectura o Claire.
Pero la vida era cruel. Cuando se necesitaba más de algo, este siempre faltaría. Cuando quería ayuda, ausencia era lo que le brindaba. Cuando ansiaba amor, odio recibía. Y cuando finalmente buscaba olvidarlo todo, ella quería estar a su lado.
Las ganas de gritar, aún si lastimaba su garganta reseca, eran exponenciales. Derramar injurias y lanzar puñetazos al aire, hasta finalmente llorar de la rabia. Todo por la impotencia que sentía luego de despertar tras años de pérdida de consciencia.
-Son tal para cual ustedes dos. No me sorprende que Sherry haya heredado algo de ustedes incluso siendo adoptada- resopló el pelirrojo por los manierismos que era obligado a ver, hallando claras reminiscencias que su pareja ejercía hasta el día de hoy cuando algo sucedía.
-No digas eso de ella! – defendiendo a su hermana, Elza exclamó mientras fruncía el ceño.
-Aceptaría el regaño si fuese mentira, pero para tu información, ella sí actúa de esa manera. Ahora permíteme esto, si sigo escuchándote me quedaré dormido seguro- relajando la postura que tenía bajo el umbral de la puerta, Jake desestimó la reprimenda de la niña para luego arrebatarle con cuidado aquel mismo diario que leyó hace menos de un lustro.
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Final del segundo capítulo, amados lectores!
Les gustó la lectura?
Están empezando a comprender los problemas de Claire durante el primer año donde estuvo en coma Leon?
Es entendible que el rubio esté renuente a entender el cambio de emociones que la pelirroja tiene?
Ark y Jake ayudarán o simplemente estarán allí hasta que Rebecca llegue?
Habrá una lucha final entre el novato y el gorila?
DEJEN SUS COMENTARIOS, PREGUNTAS, CRÍTICAS, DUDAS! SOLO ASÍ SÉ LO QUE PIENSAN AL RESPECTO DE LA HISTORIA!
Saludos, hasta la próxima y no se olviden de comentar!
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