Capítulo 3. No es así.
La vida sigue —dicen—
, pero no siempre es verdad.
A veces la vida no sigue.
A veces solo pasan los días.
_______________________________________________________________________________
POV Brigette.
No entendía, mi cerebro aún estaba procesando el hecho de que los hermanos Holmes y John Watson estuvieran ahí parados frente a mí... Durante los tres años siguientes al año en el que estuve en coma, me había propuesto a ignorar lo que sentía y había hecho un esfuerzo por no matarme yo sola, o siempre que lo intentaba alguien intervenía, usualmente Scott.
-A quién le marcaste – George me observaba con cuidado.
-No te importa – Respondí con indiferencia – Explícame qué hacen aquí.
-No hasta que me digas a quién le marcaste – Alcé una ceja y me reí con sarcasmo.
-Tú y yo podemos esperar – Susurré.
-No necesitamos a nadie más para esto – Dijo Mycroft sin fijarse en nadie.
-Cuando tú opinión sea un poco de lealtad, nos la das – El gobierno británico me miro enfadado, un temblor recorrió mi cuerpo, cómo era posible que aún después de tanto tiempo me pudiera causar ese tipo de reacción.
-No tengo la culpa de que tu vida siempre haya sido una desgracia – Susurró mirándome.
-No siempre lo fue, creo que comenzó, a ver déjame pensar – Puse mi mano en mi mentón - ¡Ah! Cuando te vi por primera vez – Puse los ojos en blanco – John – Llame al rubio, que me miro rápidamente – no es nada personal contigo, si el caso hubiera sido tuyo, con gusto te hubiera ayudado – Él pestañeó levemente intentando procesar lo que le acababa de decir.
La puerta se escuchó, luego de unos minutos Scott entró a la habitación con el rostro demostrándome su confusión. Lo mire directo a los ojos indicándole que se acercará un poco más.
-Qué estás intentando Bri – Preguntó George mirando a Scott con unos fólderes en la mano.
-Mostrarte mi punto – Contesté sin dejar de ver al muchacho – Me alegra que vinieras, Scott.
-Un gusto verte George – Saludó para luego fijarse en los invitados especiales que mi jefe había traído – señores Holmes y Dr. Watson un gusto saludarlos. – Sus ojos cafés se fijaron en los míos, me preguntaban qué es lo que hacían ahí – Me dijiste que trajera esto – Señaló sus expedientes.
-Sí te los pedí, quería hacer una pequeña aclaración, es que hay un punto que aún no me ha quedado del todo resuelto – Mire a George – Hace poco Scott paso a ser mi protegido en el programa "Ares" – Mycroft frunció claramente su ceño – lo que significa que tengo un rango mayor que el tuyo en la CIA ¿Verdad?
-Así...
-La pregunta era para Scott, no estoy hablando contigo George – Le conteste con un susurró entre dientes - ¿Entonces?
-Sí – Contestó mientras fruncía su ceño.
-Pero no por ello debo sentirme más ¿Cierto? – Mis ojos se fijaban en cada uno de sus movimientos.
-Correcto – Asentí levemente.
-Bien, me puedes hacer el favor de explicarme ¿Qué es un protector para ti? – George bufó.
- ¿Para mí? – Asentí – Alguien que debe cuidarme – Fruncí levemente los labios – además es a quien debo entregar mis expedientes – Sonreí casi imperceptiblemente.
-O sea que, tú me das tus expedientes que contienen ¿Qué? – Scott miro los fólderes y luego regreso su vista a mis ojos.
-Mis datos, lo que hago en las misiones, o en ocasiones la gente que me odia – Sonrió con un poco de ironía.
- ¿Tienes gente que te odia? – Sabía que sí, pero necesitaba que me lo contestara.
-Tú sabes que sí – Y ahí empezaba mi punto de vista.
-Entonces, recapitulando – Le extendí mi mano para que me diera los fólderes, Scott no dudo en entregármelos – yo aquí ¿Qué tengo? Scott - Él me miro – Piensa un poco, si tengo tus datos, la gente que te ama, odia, extraña ¿Qué tengo?
-Mi vida – Susurró mirando al suelo, mientras asentía.
-Mmm – Suspiré – ahora, hagamos un caso hipotético – Moví los fólderes – supongamos que yo, te odio – Scott me miro – eso haría que si yo tuviese tus datos fuera un peligro en vez de una ayuda ¿Verdad?
-Sí – Contestó extrañado.
-Por qué – Pregunté apretando mis dientes.
-Porque podrías hacer conmigo lo que quisieras – Entrecerré mis ojos – conoces lo que soy, puedes crear lo que quieras basándote en eso... O aún peor, hacerme caer en lo que más temo – Suspiré.
-Justo eso – Apreté los fólderes – por lo tanto, mi deber es entregar estos fólderes, sin guardar copias, sin pedirlos de nuevo a la CIA a menos que sea sumamente necesario, si y solo si es para tu bien – Me acerqué un poco a Scott – no teniendo en mente hacerte algún daño a futuro por algo que sea PERSONAL – Grite justo al golpear la pared con la mano en las que sostenía los fólderes, Scott se sorprendió al ver mi acción, intente regresar a mi compostura lo más rápido posible - Esto se lo debe quedar George – Me dirigí hacia el escritorio de mi jefe y los tire – para evitarme problemas.
- ¿Ese es tu punto? – Susurró George mirándome con un poco de tristeza que ya no me importaba.
-Sí – Lo observe – puedes encontrar a alguien más que los ayude, yo no lo haré, ni Scott.
-No puedes prohibirle a Scott trabajar algo como eso – Me advirtió.
-Si soy su protectora velo por su bien, y estar con ellos no lo ayuda en nada – Me encogí de hombros – no voy a dejarlo con basuras.
-Cuánto te has drogado – Preguntó George, escuché un suspiro de parte de Scott.
-No te importa – Me di la vuelta y comencé a caminar.
-Sí me importa.
-No, nunca te importo, y ahora debería importarte menos que es una relación estrictamente profesional – Lo mire sobre el hombro – no intentes fingir algo que nunca sentiste – Un silencio lleno la habitación – Vamos Scott, tenemos cosas que hacer.
Salí de la habitación con el rostro indignado.
***
POV John.
Aún no entendía qué es lo que había pasado con Bri, estaba completamente diferente, a pesar de que se miraba más morena, su rostro tenía palidez como si estuviera enferma.
-Lo siento – Soltó George de repente, observándonos – ella a pesar de su actitud, es la mejor agente que hay en América. Actualmente trabaja en el FBI de encubierto, yo sé que todas las noches se dirige a bares, se droga, pasa noches enteras ahí, porque las misiones que le dan las termina en horas del día – Suspiró – también sé que desde hace un año... asesina personas – Lo observe – después de lo que paso, ella quedó en coma un año – George no miraba a nadie en particular – al levantarse ya no era igual, con nadie, solo con Scott parecía tener cierta afinidad – Nos miró directamente – Los traje porque la única forma de tener una oportunidad para ayudarla, es que enfrente sus miedos – Mire a Sherlock, no estaba bien – lo que vemos ahora de Brigette, son sus recuerdos consumiéndola.
-Y en qué debemos ayudar – George me observo.
-Mañana será la última prueba que haré, sino funciona, les asignare otro agente – Sherlock asintió.
-Gracias – Susurró Sherlock.
-Un agente alto de tez morena entró a la habitación – Señor, Collins salió del edificio ¿Algún movimiento?
-Blóquenle su pasaporte, que este habilitado hasta dentro de una semana – El hombre asintió y salió de la habitación – tengo la esperanza de que acepte, y creería que ustedes también.
- ¿Pueden dejarme un momento a solas con George? – Sherlock nos miró a Mycroft y a mi levemente, yo me levanté y lo observé le puse una mano en el hombro para luego salirme de la habitación, Mycroft llegó unos momentos después.
-Qué querrá hablar con George – Susurró Mycroft mirando hacia un lado.
-No lo sé – Dije de forma sarcástica – quizá porque la chica que creyó muerta por su culpa apareció de repente, confirmando que uno de sus miedos sigue ahí – Mycroft me observó – Por favor Mycroft tu nunca has tenido sentido de la empatía, pero es obvio hasta para el más tonto que tu hermano sintió algo por ella.
-Es tiempo pasado – Yo arquee una ceja.
-Pero existió – Él bufó – sea el tiempo que sea.
***
POV Sherlock.
-Qué quieres hablar – Preguntó George con un toque cortante – más que no tienes a tu hermano ni a tu mejor amigo.
-Yo – Suspiré – yo quiero pedirte, disculpas – Lo observe – es mi culpa que ella este así, y créeme que no quería verla de esa forma.
-Sherlock, no puedo mentirte – Sus ojos se clavaron en los míos – llegue a odiarte los primeros dos años, luego medite un poco sobre tu punto de vista y quise conocerlo – George se posiciono mejor en su silla - ¿Realmente te gustaba Brigette?
-Yo amaba a Brigette – George alzó una ceja.
- ¿Amabas? Ese verbo indicaría que aún la amas – Suspiré.
-Yo aún siento algo por ella – Susurré – sino, no estuviera nervioso.
-George me observo – Eso no me lo esperaba del todo – Respire hondo - ¿Qué paso ese día con Z?
-Yo no la traiciones porque fuera planeado desde semanas antes, yo ni siquiera sabía lo de Z hasta unos 2 días antes, yo había invitado a salir a Bri, la lleve de paseo, acepte ser su novio porque también quería serlo – Recordé lentamente como habían pasado las cosas – en navidad, Z fingió ser John, y me llevó al lugar donde ella me pidió ser su novio, me amenazo con dañar a los Watson – George frunció su ceño – yo había hecho un voto de protegerlos – Suspiré – falle con Mary, pero para aquel entonces no me imaginaba algo como eso.
-Aun así, no hay una justificante concreta Sherlock – Asentí – traición es traición, y a quién realmente deberías convencer es a ella – Se apoyó en su escritorio – no a mí.
- ¿Dónde estuvo durante todo este tiempo? – Necesitaba saber de ella, qué había pasado.
-En Sherrinford – Fruncí mi ceño – sí, es de esas ocasiones en las que estás muy cerca y muy lejos de lo que te interesa.
-Fui ahí hace un año – George frunció sus labios – ¿Aún estaba ahí?
-Ella estuvo ahí todo 2016, seis meses en coma, seis meses en tratamiento – Fruncí mi ceño – eso no importa Sherlock, eres naturalmente curioso, y si sigo mencionándote detalles, seguirás haciendo preguntas.
-Quiero saber – Dije despacio mientras George fruncía sus labios levemente.
-Lo sé, pero, poco a poco te darás cuenta solo de las cosas – Me miro – ella te odia, a ti y a tu hermano – Respiró pesadamente - sin embargo, algo en el fondo, muy en el fondo me hace pensar que ella aún puede recuperarse.
-No creo que sea como antes, nunca – Comenté.
-Lo sé – Aclaró – pero, con solo que viva y no deje pasar los días buscando una opción para morir me basta. Olvido a sus padres, olvido quien era... todo se acabó para ella, o eso pienso yo.
-Durante este tiempo me he dado cuenta que, teorizar sobre las personas es la forma más equivoca de proceder – Él me miro extrañado – nunca se sabe nada respecto a un ser humano y las acciones, aunque pueden ser leídas tienen un trasfondo más profundo que no se puede leer.
-Si lo dices por tu hermana, no todos los casos son iguales...
-No, pero todos esconden algo y descubrirlo es mi trabajo – George alzó una ceja – Bri cuando estuvo en Londres, dijo que ella que era un enigma y que no a todos les gustaban los enigmas – Observe a George – tenía razón, sin embargo, a mí siempre me han encantado los acertijos y los enigmas. Y ahora ella es un enigma más grande.
-No será tan fácil – Susurró.
-Nadie dijo que lo seria – Repliqué.
***
POV Brigette.
Tire la puerta del apartamento justo después de que Scott entrara, me sentía molesta, indignada, pisoteada, estafada, engañada... TODO lo que se pudiera decir, no necesitaba que George me hiciera ese tipo de estupideces para enfadarme, podía hacerlo de otra forma.
Ver a Sherlock de nuevo, me había hecho sentir miedo y llevaba años luchando contra mis propios miedos. A veces sentía nostalgia por Londres, a pesar de todo, ahí había sido el único lugar donde casi encontraba la paz que necesitaba para seguir, suspire, siempre que recordaba lo último que había pasado, lo que me hizo Sherlock y Mycroft me subía la bilis, podía casi saborearla.
Mi teléfono comenzó a vibrar, Fruncí el ceño al ver quien era, me fijé que Scott no estuviera cerca y conteste.
-Hola – Dije sin emoción en la voz.
-Pensé que estarías más feliz de escucharme – Su voz causaba una corriente de nervios en mi espina dorsal – por qué estás molesta Gorrión...
-Sabes que no me gusta que me digas así – Fruncí los labios – no estoy molesta, bueno, siempre estoy molesta.
-Su risilla me hizo torcer la boca – Me encantaría verte – Rodé los ojos – supe que estás enferma.
-No estoy enferma, no es así – Dije con los dientes apretados – no lo suficiente, Brook.
-Mi querido Gorrión, muy pronto te cuidaré yo – Respiré hondo, aunque Richard Brook se podía notar que era un psicópata, era quien más había estado pendiente de mí – debo irme.
-Adiós, rey de Londres – Podía sentir su sonrisa hasta que me corto.
-Bri ¿Con quién hablabas? – Scott apareció de su cuarto, con la ceja alzada.
-Con nadie importante – Me tire en un sofá – vamos a Coney Island.
-Qué – Me miró – nunca quieres salir, y ahora que vinieron ellos, quieres ir a Coney Island ¡En invierno!
-Está a 14 minutos de aquí, no es muy lejos – Scott pestañeo – solo quiero irme a sentar a la playa durante todo el día, y el invierno no mucho problema ahí.
-Te vas a requemar más – Susurró – vamos, pero hay que ir y volver temprano, mañana debes ir al FBI.
-No queda muy lejos de nosotros, no hay problema si volvemos un poco tarde – Me levante para ir a tomar un short, un crop top negro y me fui al baño a cambiar, me apresure lo más que pude, y logré salir en unos minutos, Scott ya estaba listo – Vámonos – me observó de pies a cabeza, dejando sus ojos fijos en mi cicatriz del abdomen – Es lo que Z me hizo – Susurré sin sentirme incomoda, no con él – lo que me dejo de recuerdo...
-Lo siento, no debí fijarme en ello – Negué no dándole importancia.
-Es normal, los seres humanos vemos más los defectos que las virtudes porque nuestros ojos suelen estar llenos de pesimismo – Me encogí de hombros.
Él guardó silencio, y asintió, llevaba una pequeña maleta donde seguramente tenía un jeans y una camiseta. Salimos del apartamento que estaba en Ocean Parkway, Brooklyn era un bonito distrito, demasiado para mí.
Scott tenía un auto por haber estado en logística, era uno de los beneficios que ahora usábamos para nosotros dos, en ocasiones sentía que el chico tenía demasiado futuro para estar conmigo, especialmente porque la última vez que había ido al doctor las cosas no me habían salido del todo bien. Había tenido que investigar a profundidad para encontrar un doctor que no fuera aleado de George y hacer mis cosas en secreto. Suspiré, mientras Scott comenzaba a mover el auto.
***
POV Narrador.
Después de haber terminado de hablar George, junto a los otros tres, se habían dirigido a la casa de Mycroft en Brooklyn, Grand Street era una calle perfecta para el carácter de Mycroft, a pesar del ruido, el lugar tenía un toque vintage, con algunas casas viejas mezcladas en los edificios y tiendas modernas.
Sherlock se sentía un poco consternado, nunca pensó que verla de nuevo le causaría tantas emociones en unos momentos, sentía que le debí más que una disculpa a la chiquilla, y estaba consiente que en realidad no iba a ser sencillo acercarse de nuevo.
Estaba sentado en la sala de estar de la casa de Mycroft, que tenía una chimenea, unos sillones de color gris y una mesa cuadrada en medio de ellos, John había ido a instalar sus cosas al cuarto al igual que su hermano, mientras George hablaba con la ma de llaves de la casa, una anciana con nariz aguileña y un claro acento ruso que lograba hablar muy bien el inglés.
-Es una linda casa ¿Verdad? – Dijo George al despachar a la señora.
-Sí, supongo, aunque el ruido de la calle molesta – Contestó el azabache.
-La Sra. Kozlov, también se acostumbró con el tiempo – Sherlock entendió que la casera se apellidaba Kozlov, así que solo asintió, se levantó para ver algunas imágenes que estaban en la repisa de la chimenea, una pequeña Bri se presentaba ante él haciéndolo sonreír levemente.
-Qué tan dañada está Bri – Preguntó viendo sobre su hombro a George.
-Mucho – Susurró el jefe sin ninguna emoción, del pasillo aparecieron Mycroft y John con ropa más cómoda.
-Qué bueno que vinimos en invierno – Comentó John – seguramente es horrible el calor aquí.
-Lo es – George asintió con un poco de indiferencia – debo irme, mmm, tengo cosas que hacer, mañana iremos al FBI tengo un amigo ahí y también intentaremos convencer a Bri, sino, les asignare otro agente que pueda ayudarlo – Dijo viendo a los tres – Permiso – El jefe salió de la sala acompañado por Mycroft.
-No te ves bien – Susurró John mirando a su amigo.
-Ni tú, y eso que te dijo que el problema no era contigo – John alzó una ceja y la bajo de inmediato.
-No importa, igual tengo que hablar con ella – John se lamio sus labios – Sabías que Mycroft tiene terraza en esta casa, deja ver el patio y lo que está más allá.
-Sherlock sonrió – América es muy diferente a lo que estamos acostumbrados – El rubio asintió.
-Sabes me he estado preguntado ¿Dónde está Mike? – Sherlock frunció su ceño levemente – Parecía inseparable de Bri, y ahora en vez de él está Scott ¿Crees que se pelearon?
-Lo dudo, pero podemos averiguarlo después... Lo importante es el caso y la gente que está involucrada.
-Porque no lo dices como es – Reprocho el exsoldado – han secuestrado a tus padres y por eso quieren ayuda, estoy seguro que, si dejan de mentirle a Bri, ella los ayudará, ella quería mucho a tu mamá que fue a quién conoció.
-Decir que son mis padres, es ponerle sentimiento, por el momento son factores nada más... Pero igual debo hallarlos lo antes posible... - Dijo con los ojos fijos en el suelo.
_---------------------------
Holaaaa volví, siento sino he estado muy conectada pero ya saben la carrera mata, por lo demás espero que les guste el cap y que me den su opinión 💙✨
DECLARO EL MES DE AVENGERS INAUGURADO XD a morir se ha dicho ;-;
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top