Un último chequeo hizo que Yukio fuera dado de alta, todo estaba en orden por lo que ya no tenía que seguir en la enfermería. Después de despedirse de aquel soldado que lo cuidó, Yukio sale hacía el pasillo y se queda de pie un momento para después dirigirse a paso calmado al comedor.

Podría ir a la sala con los demás pero no tenía ánimos de conversar con alguien, el soldado fue una excepción pero solo porque lo estaba cuidando.

Mantenía su mirada en el suelo mientras caminaba por el pasillo, su cabeza llenaba de pensamientos sobre su hermano, ¿Cómo debería disculparse? La verdad no sabia siquiera si su hermano lo recordaría, ya que el soldado le había dicho que era probable que Rin perdería algunos fragmentos de su memoria. También le mencionó que su conducta sería más agresiva/defensiva por lo que era probable que lo atacaría apenas lo viera o se volvería alguien muy distante de todos.

Esa idea le daba miedo, no quería volver a perder a su hermano.

Tan perdido estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta que ya había llegado al comedor, mas logró reaccionar cuando sintió una extraña sensación en el ambiente. Sube la mirada y logra ver a una persona de espaldas, quien iba vestido con una camisa gris sin mangas y pantaloncillos color carbón que le llegaban a las rodillas, que se encontraba enfrente de el a unos metros: era su hermano, Rin.

Pudo notar que su apariencia había cambiado un poco: en su cabello se notaban varios mechones blancos, en ambos brazos había algunas marcas en forma de espiral que le llegaban al codo, y en el extremo de su cola tenia una especie de anillo plateado a la vez que tenia fuego como si fuera un cerillo. Rin voltea la mirada viendo a Yukio, sus ojos seguían siendo azules solo que sus pupilas parecían las de un gato, en su cabeza se notaban dos protuberancias que simulaban ser sus cuernos.

Yukio se acerca con mucho cuidado a su hermano, quien mantenía una mirada seria, y cuando logra estar a una distancia apropiada espera alguna señal de hostilidad, pero mas no esperó recibir una sonrisa llena de honestidad y cariño.

Rin (AnE): hola Yukio --sonríe hacia la persona enfrente

Yukio (AnE): --aquello le provocó una punzada de dolor en el pecho, pero sabe que se lo busco-- hola hermano... ¿Cómo te sientes? --le costaba hablar-- te veo diferente

Rin (AnE): lo sé --se mira los brazos-- solo fueron pequeños cambios, además me siento más ligero --mueve su cola de lado a lado emocionado-- aunque aun tengo la sensación de que algo se mueve por mi cuerpo

Yukio (AnE): --muestra una cara de preocupación-- ya veo, escucha Rin yo...

Rin (AnE): no Yukio --lo para antes de que siguiera hablando-- esta vez déjame hablar a mi --ve que el otro accede-- desde niños siempre quise ser como tú, intenté seguir tus pasos pero nada de lo que hiciera funcionaba, tu sacabas buenas notas y yo apenas si lograba que no me llevaran a dirección, tú eras el hermano bien portado mientras que yo era el problemático; todos murmuraban que todo te seria más fácil si yo no fuera tu hermano o que deberían de dejarme encerrado en algún internado --pausa un momento para calmarse y no dejar que las lagrimas surgieran

El ambiente se había vuelto melancólico con cada palabra que salía de Rin era una daga que se clavaba en el pecho de Yukio, el había escuchado esos murmullos más no les había tomado importancia pero no se había dado cuenta que su hermano si lo hacia.

¿Cuánto tuvo su hermano que aguantar esas palabras? La respuesta era muy sencilla: desde siempre.

¿Y que hacia él a cambio?... simple: nada. Nunca se puso al frente para defender a su hermano, al contrario siempre lo culpo por recibir más atención de su padre.

Rin (AnE): y cuando supe sobre lo que era en realidad... Solo pude enojarme con papá, por no decírmelo desde antes, y me sentí aun más mal cuando lo vi sacrificarse por mi culpa --sus ojos se llenaban de lágrimas, pero se resistía a llorar enfrente de Yukio-- tú tampoco me dijiste nada, yo siempre pensé que ibas a ser un doctor, pero al final me entero que siempre supiste la verdad desde un inicio --lo mira seriamente

Yukio (AnE): papá me pidió que no te lo dijera, que no necesitabas saberlo...

Rin (AnE): ¡¿Solamente tú debías saber la verdad?! --le grita interrumpiendo-- ¡Yo siempre me pregunté porqué me sentía tan diferente! y tú lo sabias, y siempre decías que todo estaba bien ¡Cuando no era así!

Yukio (AnE): ¡Se que hice mal en ocultarte algo tan importante! --aprieta sus puños en señal de frustración-- Papá creyó que así crecerias como una persona normal ¡Ninguno de los dos nos dimos cuenta de que tus poderes estaban despertando!

Rin (AnE): y después de eso, siempre ¡Siempre me señalabas todo lo que hacía mal!

Yukio (AnE): ¡Seguía frustrado por la muerte de papá, y no pude confiar en ti a pesar de tus logros! --sus ojos estaban llorosos-- Admito que ese fue el peor error que pude haber cometido, pero ahora quiero que vuelvas a confiar en mi

Rin (AnE): ¡¿Cómo quieres que confie en ti después de lo que me dijiste?! --fue lo ultimo que exclamó antes de que ambos hermanos guardaran silencio sin notar la presencia de los demás que habían escuchado eso último

El ambiente se había vuelto agobiante, ambos seguían heridos por las palabras del otro, ¿Cómo un vinculo de hermanos se pudo debilitar tanto? Uno de ellos sabia que el otro ya no confiaría en él como antes, mientras que el otro ya no sabia como tratar a quien fue su hermano sin terminar herido nuevamente.

Yukio (AnE): entiendo que ya no confíes en mi --dice resignado y dolido-- pero entonces ¿Por qué aceptaste el trato por mi?

Rin (AnE): no lo hice solo por ti --admite-- lo hice para obtener más fuerza para combatir contra Satán y así proteger mi hogar... el hogar de nuestro padre --su confianza había aumentado después de lo sucedido, después de todo ya había sufrido y sobrevivido a un infierno-- sin importar si tengo que hacerlo solo

Yukio (AnE): ¿Quién dijo que lo harías solo? Pelare contigo

Rin (AnE): Yukio no...

Yukio (AnE): sé que seré un estorbo contra Satán, pero... alguien tiene que aligerarte la carga contra los demás demonios

Rin (AnE): iras aunque te lo impida ¿Verdad? --parece que habían cambiado roles

Yukio (AnE): esta vez pienso cubrirte la espalda, y pienso recuperar tu confianza

Rin (AnE): quiero ver que sea cierto, esfuérzate Yukio

No hubo ningún abrazo ni siquiera un apretón de manos, el vinculo seguía dañado y nada iba a ser igual que antes, solo ellos podían resolver esto.

Shiemi (AnE): ¡Rin! --aquel grito hizo que los hermanos voltearan notando que los demás ya habían llegado-- Rin ¿estas bien? --se detiene al ver la nueva apariencia de Rin

Rin (AnE): ¿Eh? --esa rubia, era de la tienda de herbolaria ¿Qué hacía en este mundo?

Izumi (AnE): idiota nos asustaste --se acerca a los gemelos con los brazos cruzados-- también Yukio nos asustó cuando hizo su berrinche al verte frito

Rin (AnE): oh --reconocio a su compañera, parece que Yukio si se había preocupado por él, pero necesitaba más que eso para volver a llamarlo hermano

– ¡¡RIN!! --alguien venia corriendo mientras gritaba con enojo

Rin (AnE): --esa voz la conocía, hace mucho que no la oía-- Rag...

3F12Rh: ¡Idiota! --lo golpea en la cabeza con fuerza haciendo que Rin cayera al suelo y le saliera un chichón-- ¡Me voy un tiempo y ya andas metiéndote en el horno para salir como chicharrón! ¡Lo primero que te digo que no hagas y ahí vas todo menso aceptando tratos! --lo regañaba como si fuera una madre

Yukio (AnE): disculpe, pero no fue su culpa --sin darse cuenta también recibe un golpe en la cabeza como a Rin dejándolo igualmente en el piso

3F12Rh: ¡Por supuesto que no todo fue su culpa, tu también tienes la culpa por egoísta e idiota! --empezó a regañarlo también--  ¡Ambos son iguales, a los dos les gusta hacerme enojar pero ahora verán! ¡Voy a surtírmelos a los dos a ver si así vuelven a hacer una estupidez como esa!

Ambos hermanos se pusieron de rodillas escuchando todo tipo de regaños que les daba Ragni, nombre que Rin supo al escuchar al panadero gritar el nombre de la soldado cuando estaba siendo consolado probando diferentes platillos.

A los presentes se les salieron una cuantas gotas de sudor ante tal escena, no pensaron que algún soldado se portaría de esa forma, y era extraño.

3F12Rh o simplemente Ragni seguía regañando a los "ahora no hermanos" por hacer tonterías, sin importar el ligero ardor en su espalda. Producto de varias marcas de garras debido a un incidente que tuvo por un descuido, lo bueno es que eran cubiertas por la armadura.

Pero bueno, eso a nadie le importa.

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Por ahora.

Aquí tienen su reconciliación. . . ahora sigamos.

El capítulo fue corto pero simple, si tienen alguna duda las responderé.

Nos leemos a la otra.