El viajero se preparó intensamente durante varios días junto a Yae Miko, mejorando sus habilidades y aprendiendo nuevas técnicas. Finalmente, sintió que estaba listo para enfrentarse nuevamente a la Shogun.

Cuando llegó el momento, el viajero desafió a la Shogun a un combate y ella aceptó. La batalla final empezó, el viajero estaba decidido a vencer a la Shogun, por lo que luchó con todas sus fuerzas. Comenzó invocando sus cuchillas hydro para contrarrestar la electricidad de la Shogun, que intentó atacar con su espada divina.

El viajero fue hábil en esquivar los ataques de la Shogun y, cuando tuvo la oportunidad, atacó con ferocidad, cortando el aire con sus cuchillas y logrando herir a la Shogun en varias ocasiones. Pero la Shogun no se quedó atrás, y respondió con ataques rápidos y precisos, que el viajero solo pudo esquivar por muy poco.

Finalmente, el viajero logró encontrar una oportunidad y atacó con todas sus fuerzas. La Shogun intentó esquivar el golpe, pero falló y fue golpeada de lleno.

La Shogun cayó al suelo, pero en lugar de acabar con ella, el viajero intentó clavar su espada en su pecho. Yae Miko, que ha  estado observando la batalla desde el talismán que le entregó al viajero apareció y rápidamente intervino para detener al viajero.

"¡No lo hagas! ¡No te conviertas en lo que tanto odias!", le dijo Yae al viajero mientras lo detenía.

El viajero se detuvo y dejó caer su espada. Se dio cuenta de que Yae tenía razón y que no quería convertirse en un asesino. En cambio, ayudaría a la Shogun a encontrar una manera de salvar a su pueblo.

La Shogun, conmovida por la actitud del viajero, aceptó su ayuda y decidió contarle la historia de Inazuma.

Después de la batalla, el viajero se acercó a la shogun y le pidió que le entregara la gnosis electro como recompensa por haberla vencido. Al principio, la shogun se negó rotundamente, pero después de una breve pausa, finalmente accedió. La sacó de su bolsillo y la entregó al viajero con una expresión seria en su rostro.

El viajero recibió la gnosis con cuidado y está fue absorbida inmediatamente por él y apareciendo un nuevo tatuaje electro también empezaron a caer muchos rayos.

Después de entregar la gnosis, la shogun se quedó mirando al viajero, como si estuviera tratando de decir algo. Finalmente, habló. "No sé tu nombre", dijo con una voz suave, "pero quiero agradecerte por haberme enfrentado y haberme ayudado a darme cuenta de mis errores".

El viajero se quedó sorprendido por la actitud de la shogun, no esperaba que después de todo lo sucedido ella quisiera ser su amiga. Sin embargo, decidió aceptar la oferta de la shogun y le respondió que su nombre era Ei y que estaba agradecido por su amistad. La shogun le sonrió y le dijo que estaba feliz de haber encontrado a alguien tan fuerte y noble como él.

El viajero le sonrió, agradecido por las palabras de la shogun. "Soy el Viajero", respondió, "y no hay necesidad de agradecerme. Solo hice lo que era correcto".

La shogun asintió con aprobación. "Eres un verdadero héroe, Viajero. Y si alguna vez necesitas mi ayuda, no dudes en pedírmela".

El Viajero asintió en respuesta. "Lo tendré en cuenta. Y si necesitas mi ayuda en el futuro, estaré allí para ayudarte también".

Ambos se despidieron amistosamente. Con una sonrisa de satisfacción, la Shogun se alejó del lugar, dejando al Viajero con sus pensamientos y su nueva gnosis en su poder. El viajero sabía que tenía que seguir adelante con su misión de encontrar a la diosa desconocida y regresar a su mundo, pero ahora contaba con un gran poder en sus manos gracias a la ayuda de la shogun.

Mientras caminaba por las calles de Inazuma, el viajero se sintió más fuerte y seguro que nunca antes. Sabía que el camino que tenía por delante era largo y difícil, pero ahora estaba más preparado que nunca para enfrentar cualquier desafío que se le presentara. Y lo más importante, ahora contaba con nuevos amigos y aliados en su lucha por salvar a su mundo.

Mientras tanto en la residencia Kamisato se cortó la noticia de que habían vencido a la shogun.

El ambiente en la residencia Kamisato era alegre y festivo, los sirvientes y los invitados se reunían en los jardines y en los salones, festejando la victoria del viajero sobre la Shogun. La comida y la bebida estaban en abundancia, y la música y la danza llenaban el aire.

El viajero se unió a la fiesta, feliz de haber cumplido su objetivo y de haber logrado su venganza contra la Shogun. Ayaka, la anfitriona de la fiesta, se acercó al viajero y le preguntó sobre el nuevo tatuaje que había aparecido en su cuerpo. El viajero intentó cambiar de tema, pero Ayaka no se dio por vencida y le preguntó de nuevo.

Finalmente, el viajero le confesó a Ayaka que el tatuaje era un recordatorio de su misión de encontrar una manera de regresar a su mundo. Ayaka entendió la situación del viajero y le prometió que haría todo lo posible para ayudarlo en su búsqueda.

La fiesta continuó hasta tarde en la noche, y el viajero disfrutó de la compañía de sus nuevos amigos en Inazuma. A pesar de las incertidumbres del futuro y la dificultad de su misión, el viajero se sintió más esperanzado y confiado de que algún día podría volver a su hogar.

Cómo Inazuma estaba tranquila Thomas decidió visitar a su familia en Mondstandt y se despidió de sus amigos de Inazuma dejando también al viajero en su habitación quien le dijo que no lo mencione a él ya que no le gustaba esa nación y no quería irse de Inazuma. A lo que Thomas le prometió que no diría nada del Viajero.

Cuando Thomas llegó a Mondstandt se encontró con sus amigos de aventuras: Paimon, Amber, Benett, Kaeya y Diluc. Todos estaban ansiosos por escuchar a su amigo y lo invitaron a una taberna. De copa en copa  Thomas no decepcionó en contarles cada detalle emocionante.

Les habló sobre la captura de visiones, la guerra civil entre la resistencia y la shogun, y cómo un viajero logró vencerla con la ayuda de la sacerdotisa Yae y su propio poder. También les contó sobre la Gnosis electro que ese viajero había obtenido y cómo la shogun se la entregó como recompensa.

Amber estaba muy emocionada escuchando las aventuras de ese viajero y también estaba contenta de que Thomas hubiera vuelto a Mondstandt para compartir todo esto con ellos. Benett estaba sorprendido por la habilidad de combate de ese viajero, mientras que Kaeya estaba intrigado por la sacerdotisa Yae. Diluc estaba tranquilo, pero a pesar de eso, parecía interesado en la historia.

Thomas también les habló de los hermanos Kamisato y cómo Ayaka lo había ayudado mucho durante su tiempo en Inazuma. Les dijo que eran una familia muy influyente en la región y que él los consideraba amigos cercanos. Les mostró algunas fotos que había tomado durante su viaje y compartió su entusiasmo por la cultura única de Inazuma.

Todos estaban que se reían pero el único que empezó a sospechar de ese Viajero era Kaeya, quien se fue inmediatamente con dirección a la sede de los caballeros de Favonius.