El contrato de una vida firmada sin mi consentimiento, llegar al mundo sin sentirme dueño de mis sueños, entre la edad de mis locuras y la madurez de mis sentidos, por delante de mis miedos y siempre conmigo mismo. Navegando en contra y a favor de mis delirios, cuánto mar de gente embarca en nuestras islas, entre códigos,  señales, verdades y mentiras; cuántas huellas del pasado dejamos por nuestras vidas, más allá de los cuentos que escribimos entre polvo, viento y heridas. Me desarmo y regreso con todos los años vividos en mi vida, con mis días revolcados y mis noches de insomnio, detrás de  la pérdida de algún amor olvidado, entres las olas del mar, en cualquier tarde de verano, sobre las nubes y los besos de un patético enamorado, más allá de la suerte que tenemos los desafortunados.

No quiero poner en pausa mis sentimientos, no pretendo adelantar mi vida ni robarle tiempo al tiempo, no puedo conocer mi futuro sin antes conocerme primero. Por ahora prefiero seguir destiñendo mis desconfianzas, coloreando mi arcoíris de esperanzas, aprender a  quererme y aceptar mis palabras, empacar mis virtudes, tomar cualquier tren y equivocarme de nuevo, pintar una vez más de azul
mis desiertos; coleccionar fotos y grabar cada momento, escribir la
película perfecta con puntos imperfectos, tomar del mejor whisky, aparentar que estoy ocupado y enrollado con mis sueños, andando entre personas rotas que vienen y van, sentirme bien después de haber superado todo lo que estuvo mal.

En cualquier lugar pero sin dejar de ser quien soy, más allá de los veintisiete, entre crecer y cumplir, vivir y escribir, amar y sentir. No sé si estoy en la estación correcta, no sé si el próximo tren será la respuesta, al final de cada túnel se termina la tormenta. Debo ser valiente y vulnerable ante todo lo que expreso, quiero y siento. Hasta hoy he ganado sin apostar todo lo que tengo, con la suerte de mis dados, las estrellas en mi cielo y los pies en el suelo. Para qué poner pausa cuando quiero seguir corriendo, mientras tenga más de 27 razones creciendo. Un año más de vida y a la vez un año menos.

**Solamente Es Un Número**