Sr. Theodoro Hell "el lechero"

Es jodidamente aterrador amar a alguien y más jodido es que ese alguien ni siquiera casado contigo te voltee a ver con los mismos ojos.

Es todavía más jodido que malditamente ese alguien aun teniendo una hermosa hija contigo y llevando cinco jodidos años juntos no sienta malditamente ni una mierda por ti.

Duele como la mierda saber que esa persona por la que sou capaz de dar mi vida no me quiere una mierda,  peor aun es que no quiere ni mínimamente a nuestra hija.

Apretar los puños por la intensa oleada de ira que recorre mi cuerpo incendiándolo como a una hoguera,  no podrá contener las ganas que tengo de borrar el sufrimiento por el que pasa mi hermosa hija.

Me odio por no dibujar en su pequeño rostro todas las malditas sonrisas que mi  hija de tan solo cinco años recién cumplidos debería exponer al mundo.  Aunque no es de llorar, creo que solo lloró al nacer y luego de cumplir dos años y ver el poco amor que su madre le tiene, desde ese entonces no ha derramado una sola lágrima. De hecho,  y para asombro de todos me pidió a esa corta edad aprender a defenderse. Increíble pero cierto, mi mayor tesoro prefirió canalizar el rechazo de su madre y el respectivo dolor a través de los puños.

A la única persona que le muestro afecto y ante la cual me muestro sin mi máscara de vil asesino sin sentimientos, es ante ella; mi gran tesoro, mi hija y la única mujer en el mundo que  hasta ahora amo más que a mi propia vida.

Mi hermosa hija,  Lina,  tiene el poder de hacerme reír con su presencia, de hacerme feliz con sus locas ideas de niña y de hacerme meditar con sus pocos arrebatos de adulta.

Ella es mi todo.

Mi vida.

Mi alegría.

Mi debilidad.

***###***

Mi esposa,  esa que amo y llegué a entregarle cada uno de mis suspiros,  es una hija de perra. Sí,  duele admitirlo en voz alta entre mis pensamientos,  pero sus actos cada vez más me demuestra lo perra que puede ser.

Nuestra relación era pura, hermosa y apasionada hasta que a los pocos meses de conocernos -hablo en todos los sentidos- salió embarazada y tuvimos que casarnos por su reputación,  su seguridad y según yo, nuestro amor. O eso creí. Luego de casarnos cambió totalmente. Comenzó a ser una jodida llaga en mi piel y a crear cada vez más heridas en mi oscuro corazón con sus arrebatos de idiotez.

Empezó a volverse cada vez más extraña y tras el parto que vió el parecido que mi tesoro tenía conmigo...  todo se tornó aun más loco. Fue como si comenzase a evadirme y a Lina no la quería casi ni amamantar. Luego de un tiempo volvió a ser ella otra vez.

Al año de tener en nuestra vida a Lina,  ella comenzó a cambiar de nuevo,  lo que me estaba preocupando era su falta de afecto para con nuestra hija y seguido de sus evasivas conmigo y sus cambios de humor.

Pasó otro año y no modificó en absoluto sus actitudes de idiota total. Por un momento llegué a 💭 pensar 💭 que era paranoia mía o que simplemente estaba obsesionado con sus actos. Pero el tiempo siguió su curso y ella no hacía nada en favor de mejorar sus hábitos malsanos.

Rechazó vilmente a nuestra pequeña aun con más ahínco, de hecho, creo que hasta la ignoraba todo el tiempo.

Cuando mi tesorito comenzó a caminar y dijo sus primeras palabras, una de las cosas que me pidió fue que quería aprender a defenderse. Me asombré en sobremanera por su petición pero si había alguien en este mundo de mierda a quién le daría cuanto quisiera era a ella. No lo pensé dos veces para acceder y supervisar su avance que era sin dudas agigantado en cada encuentro,  así como lo era su avance en cuanto a su lenguaje y su intelecto.

No me opuse a su petición pero me carcomí el cerebro buscando la explicación de por qué una niña de dos años entre las primeras oraciones largas que pudo haber dicho como: "Te quiero mucho papá" "Te quiero mamá" "Linda casa" "Muchos guardias en casa". Lo menos que pensé era que me dijese alto y claro: "Papá quiero aprender a luchar". ¡Dios!  Creo que por un segundo me paralicé. Pero luego recordé que es mi hija.

Sí. Recordé que es mi hija.

Y que siempre me han sorprendido sus actos.

Sonrío inconcientemente.

Estuvo en el vientre de su madre sin previo aviso. Hizo lo que quiso durante el embarazo. No nos dejó saber su sexo hasta el último minuto. Nació antes de tiempo. Lloró solo al ver a su madre y no cuando la golpearon en su trasero rosado al nacer.  Comía cuando le daba deseos. Solo reía conmigo. Comenzó a hablar y a caminar cuando le dió la reverenda gana. Me llamaba a mi celular cuando no podía verme.  ¿Qué cómo rayos aprendió los números y a maniobrar con el teléfono de casa?  Aun es un enigma. Para mí muchas cosas de las que hace o dice todavía lo son.

Bueno,  comenzó a llamarme cada media hora o una hora, por lo que tomé el atrevimiento de cómprale un teléfono de botones enormes donde los números eran visibles a kilómetros. Ahora debo darle más explicaciones de las que alguna vez le di a mi propia madre, ya que a mi esposa nunca le digo ni mierdas y a ella tampoco parece interesarle.

Lina me llama ahora cada tres horas cada que salgo de casa y debo de darle hasta el último detalle de mi ambiente y mis actos incluso lo que planeo hacer o juro que es capaz de ir a donde estoy si no contesto cuando me telefonea. Sin dudas es mi hija.

Hoy llegó a casa una nutricionista que es conocida de mi esposa y a la cual mi hija, no entiendo la razón pero,  mira con devoción y casi con la misma admiración que a mí. He llegado a sentir celos locos de esa deslumbrante y callada mujer.

Sin duda es muy única sino mi tesoro ni le dirigiría la palabra. Lina es demasiado estricta con sus amistades y es demasiado calculadora con quién se me acerca. Es capaz de amenazar y causar temor a mis allegados que no le agradan. Eso es tan propio de mi hija.

En fin, la nutricionista de ojos cafés y acciones trasparentes como su alma, es hermosa y mi hija la ama. Sí, la ama como nunca amó a su madre. Ello se debe a la calidez con que la chica trata a mi tesoro.

Le roba sonrisas genuinas y brillantes cada vez que nos visita. Esta es su tercera visita en la semana. Ella, la nutricionista, de nombre Alianna, tiene dotes de carisma y paciencia que me hacen sonreír cuando mi hija intenta socavar su temple y no lo consigue porque la chica que debe ser como mucho un par de años menor que mi esposa y yo, de unos 24 años. Es muy ávida con los niños ya que el hijo de mi amigo Hernan ha estado aquí cuando ella está y es igual de dulce que con mi hija. Ambos la miran con adoración al igual que ella los observa como un tesoro y con ternura.

Esa chica es muy linda para mí. Sí, creo que me gusta toda ella. Sus sonrojos cuando sonríe mucho con las travesuras de los pequeños, “corazones pequeños” como suele llamarles. Su voz melodiosa y cálida cuando les habla. Su firmeza y determinación cuando  dicta a mi esposa los alimentos correctos que debe ingerir en su dieta diaria y los que debe administrarle a nuestra pequeña. Además de orientarle ejercicios a ambas. Incluso se toma el atrevimiento de darle consejos a Hernan y a mí mismo de vez en cuando.

Hernan dice que la observo mucho cuando viene de visita, que quizás me esté empezando a gustar más de lo normal. Aunque sea cierto como que puedo matar sin compasión no lo admitiré en voz alta. Mucho menos traicionaré a la ahora extraña mujer que tengo por esposa. Aunque ella sea todo un dilema sigue siendo mi esposa. Y por jodido que parezca aun la amo aunque es más cariño y costumbre,  que amor.

Hoy es un día de mierda, me enteré que Hernan me traicionó y duele con la mierda que a pesar de que él fue inducido a hacerlo por el pequeño Luck que fue asediado por mis enemigos. Su hijo es su tesoro y lo entiendo porque él es padre soltero y viudo. Yo también soy padre y comprendo.  Yo también haría lo imposible por la felicidad de mi Lina.

Tengo que hacerle pagar por la traición como a todos. Pero duele como la mierda que sea a él a quien tengo que desaparecer.

Joder.

Es mi amigo de hace años.

Joder.

Me traicionó.

Joder.

Siempre nos hemos cuidado las espaldas.

Joder.

Me traicionó.

Joder.

Siempre hemos cuidado de nuestras familia.

Joder.

Joder.

Joder.

Y doblemente joder.

Me odio por esto.

Joder.

Triple joder.

Tengo que matarlo y él lo sabe.

Joder.

Cuátruple joder.

Solo para eso vino.

Joder.

Maldita sea.

Joder.

Solo vino a entregarse y a entregarme a su hijo.

Joder.

Voy a dejar al niño huérfano.

Joder.

Es mi único amigo que aun vive.

Joder.

Joder.

Joder.

Triple joder.

Tengo que hacerlo.

Joder.

Joder.

Joder.

Es ahora o nunca.

--Hernan, amigo mío… sabes que es lo que viene ahora ¿cierto?

Asintió.

Mierda. No quiero hacerlo.

Joder.

En verdad me duele.

Joder.

Me odio por esto.

--Estoy listo. Ya me despedí de Luck desde ayer. –dijo y quise que todo fuera una vil mentira.

Joder.

No quiero hacerlo.

Joder.

Es mi amigo.

Mierda.

Me traicionó por salvar la vida de su hijo.

Joder.

Vino a mí.

Joder.

Joder.

Joder.

Joder.

Paso las manos por mi cabello negro con desespero.

Mierda.

Mierda.

Mierda.

--No quiero hacerlo, joder. ¿Por qué no me dijiste? ¿Por qué lo dejaste tan expuesto? ¡Joder! –le grité con desesperación en mi despacho.

Él solo me observa en silencio.

--Hermano, no puedo hacerlo. Entiende. –me arrodillo a sus pies.

Él me observa sin decir malditamente nada.

Su silencio me confirma que en verdad está listo para morir.

No lo soporto más y me abalanzo encima suyo. Lo abrazo como si el mundo y mi vida dependieran de ello. Me corresponde el acto y siento que es una jodida despedida. Y no quiero que malditamente lo sea. No quiero hacerlo. Joder. No puedo perderlo a él también. Técnicamente, hace tres años perdí mi matrimonio. Llevo 6 meses durmiendo solo. Con una mujer que no sé qué rayos le pasa que no quiere ni a su propia hija.

Pero joder, mi vida ahora mismo es una mierda. Y perderlo a él también sería la cereza del jodido pastel que la vida me está ofreciendo por ser tan cabrón, por ser un asesino, por ser un mafioso hijo de perra que solo trata de tener una vida normal.

Pero, joder, todos conspiran en mi contra. Si no es mi padre, son mis enemigos. Joder, yo también quiero vivir. Porqué coño no lo entienden.

Ya jodidamente dejen de quitarme a quienes quiero. Primero mi hermana pequeña en un incendio. Mi madre un auto sin frenos. Mi hermano mayor un atentado y hace tan solo 4 años a mi padre. Y para rematar mi esposa parece un jodido robot, ya no queda nada de la mujer que conocí hace casi 6 años.

Estoy harto de luchar contra la vida. Estoy por rendirme. Solo me mantengo en pie por mi amigo, Luck y Lina y ahora por esa chica nutricionista mandona.

Joder, porqué tenía que perderlo a él también. Joder.

Nota de la autora.

La vida no es color rosa😢

Sonríe a la vida.

Ruthsita_Glez

paulavandew

Death💀