Como siempre, muchas gracias por leer mi historia. Independientemente del momento en que hallan elegido leerla, ¡Gracias por darle una oportunidad!
La última semana estuve con varias dificultades para subir los capítulos o revisarlos, debido a que estaba sin suministro eléctrico. En otra palabras, ¡me quedé sin luz varios días y estuve trabajando mucho! Entre que se me borraban unas cosas y otras no me aparecían, fue un milagro que no hubiera entrado en una crisis nerviosa jaja.
Pero, en serio, como sufrí. Aparte de que inicie mis clases en la universidad y estoy concentrada en eso.
Me hace muy feliz poder haber terminado la historia antes de eso y les agradezco a todos que la hallan leído ❤️.

Rei y Shigaraki.
La relación entre ellos siempre fue de padre-hija. Una relación bastante tóxica y dependiente por parte de Rei, que se fue perdiendo cuando conoció a Enji. Ojo, eso no quiere decir que Shigaraki halla sido cruel con ella, el maltrato venía de otra forma, haciéndole creer a Rei que no necesitaba a nadie más que a él mismo, la encerraba en un mundo dónde solo existian ellos dos. Pensé en profundizar en algunos capítulos acerca de eso, pero no se me da bien el lado psicológico de algunas cosas, honestamente dudo poder tocarlo con el tacto necesario. Por eso, lo deje como estaba. También, para aclarar, el padre biológico sí abuso sexualmente de ella cuando era niña y esa fue la razón por la que Shigaraki lo asesino junto con su esposa en una incendio. No quise hacer un capítulo con esas escenas. No eran tan relevantes, a mí parecer. Formaban parte de la historia de trasfondo de Rei con Shigaraki. Y hasta ahí se iban a quedar.

Shigaraki y Katsuki.
Shigaraki sí tuvo sentimientos por Katsuki. Fue la primera persona que no se dejó manipular ni influenciar por él, aún estando en su peor momento cuando lo encontro en la tragedia con los niños de Nikka y Yelpe. Le causaba interés y por eso, no quería lastimarlo. Pero al ser magia negra nacida desde la crueldad humana, si Katsuki insistía en entrometerse en sus planes, seguramente iba a disfrutar el hacerle daño.
Shigaraki no sabe amar. Lo que quiere es adueñarse de las personas. Hacerlas suyas. Que le pertenezcan en todo sentido, hasta olvidarse de quienes son sin él a su lado.
Eso no quita que Rei lo halla ablandado un poco. Ya que una de las razones por las que no mato a Natsuo —lo que sí hizo con Hawks— fue porque Rei le menciono que se parecía a él y eso le detuvo, le hizo pensar que no valía pena. Aunque en el fondo no quería lastimar a alguien que, según su hija, se le parecía.

Inko Midoriya.
Al inicio pensé que Inko tendría más relevancia pero decidí que no, la presente más que nada en los recuerdos de Izuku y en las menciones que hace All Might sobre ella. Ella sabía que no era humana, entendía el peso de su pecado en la Batalla de las Rosas y por ende, comprendía su castigo. Al ser parte de la naturaleza, al volver con Mori, no se sintió mal. Lo que le dolió fue no poder explicarle a su hijo que ella no era...del mundo que estaba fuera del bosque. Le daba miedo herirlo. Dejarlo solo. Ya que tampoco le dijo a su amor que estaba embarazada antes de dejarlo.
Ah, por cierto, Izuku sí pudo matar a Shigaraki siendo excluido de lo que Mori considera pecar contra la naturaleza ya que Shigaraki no es considerado humano. Es energía mágica de crueldad, nacida de guerras y conflictos, alimentada de odio e ira.

Las tragedias del Héroe.
Las capas de cosas malas que le pasaron a Katsuki fueron planeadas meticulosamente aunque no negare que le puede haber errado a los números de cuando sucedieron. No diré nada en mi defensa, soy muy mala para recordar ciertas cosas jaja. Pero todas tuvieron razón de ser, ya fueram formarlo más como personaje y explicar porqué era tan maduro en el presente, porqué siempre aconsejaba a Shoto o cuidaba tan bien de sus protegidos o era bueno con los niños. Es la primera historia en la que incluyo —creo yo que es la primera— el tema del abuso sexual. No hice la escena muy explícita debido a que es un tema delicado, resalte lo que me pareció fundamental y dejé lo demás como estaba. Si alguien quedó con alguna duda, puede preguntar al respecto. Siempre que lo haga con respeto, yo responderé lo que quieran.

Los dos lados.
En mis historias, el protagonista es generalmente Katsuki —que se note mi favoritismo por favor— porque acerca de él hago la historia y lo demás se reúne alrededor. En esta ocasión quise darle un poco más de ese papel a Shoto, dándole más importancia a lo que hacia en ocasiones y las decisiones que él tomaba. Siempre me gusta que cada personaje tenga sus momentos especiales, pero aquí fueron principalmente ellos dos los que llevaron el mando XD. A veces podían estar Izuku o Momo, pero ellos tenían toda la posta jaja. Por eso en algunas ocasiones me costaba encontrarles un punto de encuentro en la historia pero pude manejarme bien y me alegro mucho de cómo quedó.

Yuki y Shoto.
El primer amor nunca se olvida porque jamás se cumple. Esa fue la idea que tuve cuando hice a Yuki y, lo juro, lo pensé como un golden retriver solo que con pelo blanco. La historia en sí, es bastante trágica, porque Yuki amaba a Katsuki pero sabía que tenía muchas obligaciones con el Valle del Hielo y que su maldición tenía que ser pasada sí o sí a una línea de sangre directa —de lo contrario, las Mantis podrían lastimar a los habitantes al no tener un amo, por muy pacíficas que fueran— le daba conciencia acerca de que no podría estar con el hombre que amaba, ya que tarde o temprano tendría que estar con una mujer que diera a luz a sus herederos. Es un amor puro el que sienten el uno por el otro, quieren ayudarse mutuamente pero saben dónde están los límites y no pueden pasarlos. Me dió mucha tristeza escribir esa parte de ellos, debido a eso no hay tantas escenas, mi propio corazón se ponía mal cuando se imaginaba esa situación.
Por otro lado, Shoto imaginé que amaría a Katsuki a medida que lo fuera conociendo más y más, capa por capa. Aunque sería como esos gatos que primero tienen que conocerte bien para después quedarse pegados para siempre a tu lado jaja. Eso sí, lo primero que sintió por Katsuki fue atracción, en el sentido de que lo misterioso que era como persona y la incapacidad que tenía para comprenderlo, lo hacía sentirse atraído hacia él.
Mis romances siempre son del estilo slown born así que no es ninguna sorpresa que hallan demorado tanto en demostrarse sus sentimientos jaja.

Especiales.
¡No habrá especiales para esta historia! Y si se preguntan porqué, la razón es simple, el único especial que planeo hacer es el de Izuku y Eijirou, dos seres con ciento treinta años de vida, a punto de esparcir las cenizas de Katsuki y Shoto en el océano.
¿Ustedes quieren leer eso? Pues que pena, me puse a llorar de solo pensarlo y escribir la mitad. No, no. Hay límites para todo y he encontrado por primera vez el mío. Seré una lectora masoquista pero no una escritora masoquista, ¡hay diferencias!
Por lo tanto, el final es el epílogo. Piensen después ustedes cómo sigue la historia, la aventura después del final, los personajes siempre estarán ahí cuando la vuelvan a leer y espero que la puedan disfrutar siempre.
Muchísimas gracias por todo. De momento, me tomaré un tiempo de descanso antes de decidir con qué sigo, como me acomodo en mi vida entre el trabajo y la facultad, al encontrar mi ritmo, nos volveremos a encontrar.
¡Nos vemos, muchas gracias por leer! ¡Los amo!