271

Narrador Omnisciente.

— ¿Cómo te sientes? — preguntó el joven que estaba sentado al lado de la camilla, mirándolo con algo de intranquilidad.

— Vacío — susurró dolido, en todo lo que llevaba del día no había sacado la mano de su estómago, como si ésta sustituyera lo que ahora no esta.

Ayato también suspiró, no sabia como consolar a las personas, seguramente si decía alguna palabra de apoyo iba a lograr que Juuzou llore nuevamente.
Tomó su mano libre con cariño, apretándola para darle a entender que no estaba solo.

— Prometo que todo irá bien, esto en realidad era algo que iba a pasar — le regaló una pequeña sonrisa, observando como los ojos del chico se cristalizaban por primera vez.

— Mi bebé.. — su voz se hizo aguda, arrugó el rostro para comer a llorar Lo perdí, perdí a mi bebé.

Soltó la mano del peli azul para abrazarlo sin permiso, sabia que a él no le gustaban mucho las muestras de afecto, pero en ese momento habría una excepción.
La mano de Ayato acariciaba su espalda con suavidad, importándole poco que ahora estuviera por llenarle de mocos la campera.

— No es tu culpa, es la culpa de ese idiota — no iba a desperdiciar su momento.

— ¿A qué te referís? — se alejó unos centímetros confundido. Secando sus lágrimas con el dorso de su palma, tratando de calmar su agitada respiración.

— Digo, si él no te hubiera hecho lo que sea que te hizo, vos no estarías acá ahora, todo es culpa de Ken — nombró su apellido con asco y rabia, casi escupiendo lo.

— Cierto — la expresión de Juuzou pasó de una dolida a una furica Por su culpa perdí a mi hijo, él tiene toda la culpa.

Sonrió a sus adentros, su plan si funciono.
Paso uno; completo.
Paso dos; en proceso.

— Tendrías que alejarte de él, yo te dije que ese idiota te traería mierda a tu vida ¿O no? — lo agarró de las mejillas, acariciando las con su pulgar.

— Si..

— Pero eso ya no mas, esta vez me encargaré de que no se te acerque ni vos te le acerques, porque ya te conozco — se acercó bastante rápido, dándole un pequeño beso en la frente tomando por sorpresa al albino, quien solo quedó con la boca abierta.

( Mi inspiración se suicidó el año pasado :) ]

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top