El doncel caminaba apresurado, jugaba con sus manos, estaba nervioso, ese guardia de mirada tierna lo ponía nervioso, no sabía exactamente por qué.
Su vista estaba posada en el camino, mientras Jungkook caminaba detrás de él. Los pasillos del palacio, se sentían más largo que de costumbre, el camino hacia su habitaciones, se estaba haciendo interminable. Por primera vez la tranquilidad que caracterizaba al doncel había desaparecido, por que?. Eso era lo que se preguntaba Tae. Por qué?. Una y otra vez.

- Majestad!. - llama el guardia del reino fuego.

Se detuvo al escuchar el llamado.

- Le incomoda mi presencia?. - interrogó el azabache.

El doncel giro sobre su propio eje, despacio regulando su respiración y sin levantar la vista, mientras jugaba con los anillos, de sus largos y delicados dedos. Respondió.

- No.... disculpe... Es que no estoy acostumbrado a tener gente nueva a mi lado.

Jungkook con su dedo índice y muy despacio, levantó el mentón del doncel para que lo mirara a los ojos.

- Yo cuidare de usted. - susurró con una hermosa sonrisa,como queriendo calmarlo, parecía que los nervios del doncel eran demasiado obvios.

Aquel guardia estaba tocando su rostro y si el rey lo veía, podría mandarlo a matar, y eso no era lo que Tae quería.

-Si algún guardia, te llega a tocar, lo mandare a cortar la cabeza.

Tae asintió, separando su rostro de la mano de Jungkook.

Se volvió a girar para seguir camino, a su habitación.

Pero Jungkook no era cualquier guardia y sabía que era intocable, era la mano derecha del futuro Rey fuego, y si su reino deseaba atacar, el reino agua no tendría ningúna posibilidades ante ellos.
No era muy difícil de entender, ellos cuidaban a todos los reinos, el resto no tenía muchos soldados,ni uniéndose los tres reinos, podrían superarlos en número de hombres guerreros.

Jungkook tomó la muñeca del doncel, para volver hablar.

- Majestad, conmigo será libre. - habló en un tono bajo, casi imperceptible.

Tae lo miro confundido, libre? Que significaba eso?.

-Majestad. - Interrumpió la Jin, llegando al lugar.

Jungkook  soltó al doncel, y su semblante cambió.

- Jin. - saludo el azabache, si lo conocía, el chico alto de labios gruesos, había luchado junto a él, en una pequeña batalla, antes de ser guardia personal del doncel.
El guardia del reino agua, lo miró confundido, algo desconcertado, quisas se preguntaba que hacía un guardia fuego en el palacio del rey agua.
-Jungkook, recuerdas. - vuelve hablar el azabache al ver que aquel muchacho no reaccionaba.

- Si... Us...

-Luego hablaremos de eso, ahora acompáñanos. - respondió.

Jin recordó como peleaba en la batalla ese joven, era muy bueno con la espada, realmente era el mejor soldado del reino fuego.

En el jardín seguía la disputa sobre aquel guardia, si debía o no quedarse.

- Mi guardia se queda Majestad. - sonaba como una órden, el príncipe Namjoon, parecía más un Rey, su porte era elegante, y firme al hablar.

- Creo, que esto no es justo, usted jugó sucio. - renegó Ji-Sung, el príncipe del reino tierra.

- Nadie me envió las reglas. - arremetió Namjoon. - Qué sea más
astuto que ustedes, no es jugar sucio. - agregó.

- Era solo ver al doncel la invitación. - soltó el príncipe Hyun-Jin, del reino aire.

- La carta no aclaraba ese punto. - contestó Namjoon sin mirarlo.
- Mi guardia se queda o desea una guerra, Todo por un doncel.. Majestad?. - sonaba como una burla hacia el rey Kim sung.

Este suspiro, y desviando la mirada respondió.
- No.... Cuales son las indicaciones. - odiaba a Namjoon y ceder ante este, pero una guerra, no era buena idea, sabía que con sólo pensarlo la tenía perdida.

- Mi guardia, enviara cartas cada mes, me informara sobre mi futuro esposo,no podrá alejarse de él, su habitación estará pegada a la del mi doncel.

El rey resoplo sobre esas últimas palabras, no era un secreto, lo que hacía con su hijo, y no iba a dejar que un principito le diga que hacer con él.

- La gente seguirá viéndolo. - Interrumpió a Namjoon.

- Si, bajo la vigilancia de Jungkook. - contestó firme. - Él estará a su lado en cada momento, del día y de la noche.

El rey mordió su labio inferior con fuerza, no le gustaba para nada esa idea.

- Una cosa más, no se atreva a tocar a mi guardia, porque no responderé de mi. - amenazó mirándolo a los ojos.

- Me esta amenazando? - grito el rey con ira.

-No Majestad le estoy adviertiendo. - hizo una reverencia y volvió a hablar. - Ah, olvidaba vendré en unos días, a ver a mi futuro esposo.
Retirándose con su segundo guardia.

Dejando al rey furioso, lleno de ira y rabia, todo su plan se estaba llendo al carajo, gracias al príncipe Namjoon, pero no era momento de dudar, tenía que seguir con sus planes.

-Majestad esto es injusto. - se quejo como un niño pequeño el príncipe del reino aire.

- Esto, no va quedar así. - amenazó el príncipe del reino tierra.

- Pueden retirarse. - ordenó el rey, su humor se había volado lejos.

Ambos jóvenes, dieron una reverencia y se retiraron indignados por todo aquello.

~Un plan~

-No podemos solo dejarlo ganar. - se quejo Hyun-jin,el príncipe aire.

- Tenemos que hacer algo. - respondió Ji-Sung, príncipe tierra.

- Matar al maldito guardia. - soltó con odio el futuro Rey aire.

~Nam~.

- Creo que salió bien.

-Si Yoongi, espero que Jungkook no salga herido.

-Jungkook es el mejor guerrero de nuestro reino, no deberías preocuparte.

-Solo has lo que te digo y todo estará bien.

~~~

Tae estaba en su habitación, junto a jimin.

- Como estuvo la reunión Majestad?. - preguntó el doncel rubio.

- Bien mimi, ya se quien será mi futuro esposo. - suspiro profundo,Tae trataba de ver el vaso medio lleno, el joven que había ganado su mano, era el mejor de los tres, había sido muy respetuoso, no lo había mirado con ojos lascivos, y al hablarle fue muy cortés, era el único que valía la pena a simple vista,no sabía mucho del príncipe Namjoon, tan solo era una pequeña
reflexión de todo lo sucedido.

-Tú quién eres?. - grito la reina Yu-ri del otro lado de la habitación del doncel.

- Soy el nuevo guardia personal del príncipe. - hizo una reverencia. - Jungkook del reino fuego. - se presentó.

A lo que era obvio a la vista de todos, por que los reinos se dividían no sólo por logos también sus vestimentas eran del color de sus elementos.
Reino fuego, colores negro y rojisos en distintos tonos.
Reino Agua, azules, celeste,y purpura
Reino tierra, verdes en distintos tonadas.
Y Reino Aire, colores grises y blanco.

- El rey sabe de esto?. - grito la mujer.
La cual Jungkook hizo una mueca de desagrado al escucharla.

- Si Majestad.

Sin más que decir entro a la habitación como siempre, aventando la puerta. Sus aires de superioridad se sentían en cada paso que daba, Jimin solía bromear con que se bañaba en limos esa mujer, por lo agria que era su cara.

- Estas listo? - dirigiéndose al doncel, dejando la puerta de la habitación abierta, detrás de ella estaba el azabache, observando todo en silencio, siempre con una mano en su espada, listo para cualquier ocasión.

-Hoy vienen a verte tocar el gayageun. - siguió hablando,la reina.

(gayageun, instrumento coreano)

Tae asintió.
El azabache lo siguió muy de cerca, a diferencia de Jin que estaba uno metros atrás.

-Muestrame tus manos. - volvió hablar la mujer.

El doncel obedeció. Ella las tomó bruscamente.

- Inútil. - grito cerca del rostro del Tae. - Tienes las manos sucias.

Cuando la reina había Interrumpido en su habitación, él estaba comiendo unas fresas y sus dedos había quedado un rosa suave, lo cual Tae no se percato.
Tomó su rostro con una sola mano, apretando fuerte las mejillas del doncel, algo que solía hacer seguido.

- No sirves para nada. - dijo apretando los dientes.
Los ojos del doncel se critalizaron.
-No empieces a llorar, me das asco.

Jungkook no aguanto más.
-Suelte al príncipe ahora. - amenazó, pero al darse cuenta de su error . - Por favor Majestad.

-Quién eres para hablarme así, maldito guardia. - levantando su mano para golpear al azabache.

Sin ningun esfuerzo el guardia la detuvo con su mano.

-No puede golpearme Majestad. - con una sonrisa burlona. - orden del Futuro Rey Namjoon.

Tae observaba todo detenidamente, si Jin hubiera hecho eso, ya estaría muerto, pensaba el dulce doncel, y sus ojos brillaron de felicidad por primera vez.
Tan vez ahora podría librarse de los castigos físicos, que le otorgaba su madrastra.

-Desafinaste, bastardo. Dormirás en el calabozo.

Una tarde, como muchas de ella, Tae tuvo que cantar para aquellos que pagaban por oírlo y verlo.
Su garganta dolía, pero los reyes ignoraron su malestar, y lo obligaron hacerlo igual. Para su suerte, no sonó nada bien.
La reina enfureció, dándole una bofetada y llevándolo aquel lugar oscuro, lleno de lodo. Tae paso toda la noche en ese lugar, pasando frío, y sin comer ni beber nada por muchas horas.

-Debes ser perfecto, o volverás a dormir con los caballos.

En otra ocasión, habían llegado caballeros de Inglaterra, pagaron para verlo y poder cruzar unas palabras con el doncel en inglés, aún no hablaba fluido, y pronunció varias palabras mal.
Una vez más fue castigado, la reina lo tomó de su larga cabellera, y lo empujó hacia adentro de uno de los pequeños cubículos donde estaba un caballo, esa noche no durmió, el lugar olió horrible y el caballo estaba molesto por la presencia del joven, dando vueltas en el lugar, Tae temió que lo el animal lo pateara , algo que no sucedió al estar en constante movimiento.

Quisas, tan solo quisas, el nuevo guardia sería su salvación.

- Hablaré con él rey para que te corte la cabeza. - grito enoja, safando el agarre de su mano.
- Muévete. - le volvió a gritar al doncel.

Este apresuró el paso para lavar sus manos, todo bajo la mirada del guardia fuego, que estaba a unos excasos centímetros.
Sin mirarlo susurro con alivió un simple..
-Gracias.

Jungkook asintió con una calida sonrisa.

Llegaron a la habitación, habían cinco hombres esperando, sentados en almohadones, justo en frente de ellos estaba en instrumento, y a lado como siempre el rey.

- Al fin llegas, comienza.
-ordenó.

El doncel se sentó en el gran almohadón, poso sobre sus piernas el gran instrumento, pasando sus finos y largos dedos por las cuerdas de este, y comenzó a sonar la melodía.
Sonaba como un ángel tocando el arpa, a eso se asimila la melodia que producía.
Eran muchas las dotes que tenia el doncel, pero aquellos hombres que pagaban por verlo, no apreciaban eso, ellos iban con morbo, todos eran iguales, nadie había pagado, por caminar junto a él para conocerlo, todos querían lo mismo, poseer su cuerpo.

Jungkook admiro, la habilidad que poseía el doncel, para tocar tan bien ese gran instrumento, y la dulce melodía era fascinante.

Cuando estaba apunto de terminar, uno de los hombres, comenzó a gatear rápidamente acercándose al doncel, para tocarlo, pero el azabache fue más rápido, y un segundo antes de lograr tocarlo, el hombre tenía la espada del guardia posada en su cuello.

Decir que el rey sintió enojo era poco, dos cosas estaban mal, una uno de los clientes había roto la regla de no tocar al doncel, y dos para su mala fortuna, eso le sería informado al príncipe Namjoon, lo cual,  le daría la razón, de que su guardia era necesario en ese lugar.

- Lo siento Majestad. - sollozo, aquel hombre que aún tenía la espada, presionando su cuello.

El rey llamó a sus guardias, para que retiraran aquel individuo.

- Puedes retirarte. - ordenó el rey a su hijo.

Se despidió con una reverencia, y como siempre, del otro lado de la puerta, estaría la reina esperandolo.

Antes de llegar a la puerta, Jungkook se acercó al príncipe para poder hablarle.

- Lo hizo maravilloso Majestad. - susurro.
El doncel no se detuvo, pero una pequeña sonrisa se poso en sus labios.

- Cuando harás algo bien. - se quejo Yu-ri,como siempre.
Ser desagradable era su pasatiempo favorito.

El doncel llegó a su habitación, la mujer se retiró.
No había nadie, solo el silencio y él, del otro lado de la puerta, estaban Jin y Jungkook.

Se recostó en su cama recordando las palabras del guardia, era la primera vez que alguien le decía que lo había hecho bien.

~~~

-Por qué lo haces?.

-Quisas por lastima?.....

Hola mis dulces obsesiónadas 🥰.
Espero que se encuentren bien y que allán disfrutando el capitulo.

A quien odian más?

El Rey. --->

La Reina. -->

Las leo.

Se me cuidan mucho.
Las quiere..
🌸Nikii..

🌸