Capítulo 40

-¿qué significa... que el otro se va?- preguntó incrédula.

El hombre oprime algo en la pistola y luego acerca el extremo a la cabeza
de Brenda.

-¡no tenemos tiempo para esto! Tienes cinco segundos para elegir cuál de los dos se queda. Si no lo haces, los dos morirán. Uno.

-¡espere! -exclama Thomas.

Brenda es mi amiga, mi única amiga en realidad, no voy a dejar que un garlopo con cabeza de rábano me la quitará. No sé que es lo que pasa por la cabeza de Thomas, ya no parece preocupado por que vayan a matar a las dos personas que nos sacaron de aquella asquerosa ciudad, ahora está pensativo. 

-dos.

Maldita la hora en que me acabe las flechas, sino este hombre ya tendría una adornandole la cabeza. ¿están pensando lo mismo que yo?

-tres.

Newt aún tiene su cuchillo, pero eso no me servirá. Tomo mi arco, me pongo delante de Newt,  quedando más cerca del tipo.

-¡cuatro! -la cara del hombre enrojece-. ¡Elige ahora mismo o mueren!

Estaba lista para pegarle en la cabeza con el arco. Me paralice al oír a Thomas pronunciar esa palabra tan horrible.

-mátala- señala a Brenda.

Al que voy a golpear va a ser a alguien más, ¿cómo pudo decir eso?

El hombre guarda su arma en su cintura, toma a Brenda del brazo y la arrastra hasta la rampa. No, No la voy a perder, no voy a perder a nadie más. Basta de muertes, ya me canse y si esto no está previsto en sus malditas Variables, me importa un pepino, me canse de ser su ratón de laboratorio.

A la mitad del camino, afirmó el arco y le doy un buen golpe al tipo detrás de las rodillas, haciendo que caiga estrepitosamente sobre su espalda. Thomas y Newt se sorprenden al ver lonque hice. Mi arco se partió a la mitad por la fuerza que use.

Brenda cayó cerca de la orilla, Chuck y Peter de encargaron de ayudarla a subir. Thomas recoje el arma que salió volando un par de metros. La zanahoria con patas intenta levantarse, pongo mi pie sobre su garganta y éste en un movimiento rápido me derriba.

Intento recuperar el aliento, caí sobre mi espalda y literal se me fue el aire. El tipo se coloca sobre mí, me toma del cuello y levanta su mano derecha, listo para darme un golpe. Antes de que logre si quiera tocarme, Thomas ya le está apuntando con el arma, junto en la cabeza.

-nadie más va a morir- habla Thomas-. Si no logramos pasar sus estúpidas pruebas, entonces fracasamos. Se acabaron los experimentos.

Le quita el seguro al arma. El hombre aún tiene el puño en alto y no deja de mirarme. Sonrío con sorna.

-levantate- ordena.

《Shuck, Tommy estuve a un segundo de golpearte》

《No te preocupes, de ahora en adelante ya no haremos sus estúpidas pruebas. Se terminaron las mentiras》.

-¿eres sordo? ¡de pie!

Zanahoria Man se pone de pie. Su rostro se suaviza y emboza una ligera sonrisa, retrocede hasta chocar con la pared. Newt me ayuda a levantarme.

-¿estas bien?- toma mi cara entre sus manos.

-si, no te preocupes.

Él asiente y volvemos a prestar a atención a lo que dice el tipo llamado David. Hombre zanahoria le queda mejor.

-... ustedes no entienden es que todo ha ido y continuará yendo de
acuerdo con lo planeado. Pero tienen razón: las Pruebas se han completado. Los llevaremos a un sitio seguro de verdad. Se acabaron los experimentos, las trampas y las mentiras. No más simulacros. Solo puedo prometerles una cosa. Cuando se enteren del motivo por el cual
los hicimos pasar por todo esto y por qué es tan importante que tantos hayan sobrevivido, van a entender. Les prometo que van a entender.

-esa es la segunda estupidez más grande que he escuchado en toda mi vida- digo. Apoyo mis manos en mi cadera.

¿dónde está la cura que nos prometieron? ¿eso también era mentira? Casi muero allá, por poco me parte un rayo, ¡¡literalmente!!

-¿y qué pasa con la cura? Nos la prometieron. Para nosotros y los dos que nos ayudaron a llegar hasta aquí. ¿Cómo podemos creer lo que nos dicen?- argumenta Chuck.

-por ahora, piensen lo que quieran- dice David-. De aquí en adelante, las
cosas van a cambiar y van a tener la cura como se les dijo. Tan pronto como regresemos al cuartel general. Por cierto, pueden quedarse con el arma. También les daremos más, si quieren. Ya no tienen que pelear contra nada, ni hay pruebas o exámenes que tengan que ignorar o rechazar. Cuando nuestro Berg aterrice, comprobarán que están sanos y salvos, y después podrán hacer lo que deseen. Lo único que les pediremos que hagan una vez más, es escuchar. Solo eso. Estoy seguro de que por lo menos, les intriga qué hay detrás de todo esto.

-basta de juegos- advierte mi hermano.

-al primer síntoma de que está ocurriendo algo raro- agrega Minho-, empieza la lucha. Si eso implica que tenemos que morir, así será.

Le sonrío a Minho y este me devuelve la sonrisa. Minho es la clase de persona con la que puedes contar para pelear, es el primero en anotarse para defender lo que creé correcto, para defender a los suyos.

David sonríe, ¿le parece gracioso que le amenacen?

-¿saben algo? Eso es exactamente lo que predijimos que ustedes harían a
estas alturas de los acontecimientos- exclama mientras señala con el brazo extendido una pequeña puerta en la parte trasera de la bodega-. ¿Me
acompañan?

La rampa ya estaba cerrada. Les recomiendo que le pongan un poco más de aceite, rechina espantoso. Newt es el siguiente en hablar:

-¿y cuál es el próximo tema en la maldita agenda?

-solo pensé que querrían comer algo o darse un baño. O dormir- exclama y comienza a caminar entre los Habitantes y las chicas-. Será un viaje muy largo.

***

David nos llevo a una habitación grande. Había algunos sillones, unos cuantos catres, almohadas y cobijas. A la mitad de la habitación había una enorme mesa con mucha comida.

David nos llevo a todas las chicas a un baño enorme en el cual nos esperaba un buen baño de agua fría y ropa limpia. A los hombres creo que los llevo a otro baño.

Después del baño no volví a ver a Brenda. Comimos hasta reventar y no pasaron más de diez minutos cuando todos se fueron a dormir en los catres y los sofás.

Me aseguró de que mi hermano este bien abrigado, al igual que los demás Habitantes. Chuck está desparramado por todo el catre, se mueve demasiado cuando duerme. Lo cubro bien y depósito un beso en su frente.

-descansa enano- susurro.

Ahora tengo que ver cómo esta el héroe del mes, mi héroe. Está en uno de los rincones de la habitación, tiene un brazo detrás de su cabeza y el otro sobre su estomago. No deja de mover su pierna izquierda, la cual tiene flexionada, está pensativo. A la vista de cualquiera se ve como el guey más guapo, o al menos de mi vista. 

-hola

-hola, princesa- deja de mover la pierna. 

-¿estás bien?- me acuesto a su lado. 

-sí, es sólo que estaba pensando- se da vuelta para mirarme- que... ya no quiero que sigan experimentando con nosotros. En cuanto nos den esa cura, nos largamos por nuestra cuenta. 

-me parece bien- sonrío, me acerco más a él. 

Thomas deposita un casto beso en mi frente. Se siente tan bien estar así, sin tener que huir de algo que quiera matarnos; sin tener que estarnos escondiendo; sin tener que pelear por nuestras vidas; sin  estar pasando hambre. Sólo somos él y yo, nadie más. 

Las palabras sobran cuando estoy con él. Quiero hablar de tantas cosas y al final no hablo de nada. 

-Chuck me salvo- comento. 

-¿Chuck? ¿el mismo niño al que no lo dejas en paz con tu sobreprotección?

-no te burles- le doy un golpe leve en el hombro-. Y sí, ese mismo niño me salvo. 

-es muy valiente, tiene agallas. Sigo sin entender por qué no lo dejas tomar decisiones por su cuenta, que ayude en algo.

-tú mejor que nadie conoce esa repuesta. 

-no es para que te enojes, amor, solo era un comentario- acaricia mi cabello. 

-entonces no digas comentarios que me hagan enojar- apartó su mano.

Le doy la espalda. Ya hizo enojar, yo venía en plan de la novia buena y ahora estoy en plan no hablen o los mató.

-hey- me abraza por la espalda- no estés así. Sabes que yo siempre digo tonterías, no te enojes conmigo. Si quieres seguir cuidando de Chuck como toda una mamá está bien, sólo te estaba sugiriendo que lo dejaras hacer otras cosas. Escuchaste lo que dijeron Minho y Newt; él venció a unos Cranks, ¡él solo!

-¡lo sé! Soy consciente de eso, Thomas- me separo de él para verlo a la cara-. No quiero perderlo, no a él. Le prometí que lo llevaría con su madre; le prometí regresarlo con su familia, y la verdad después de ver lo que allá... No estoy segura de poder cumplir mi promesa.

Le hice esa promesa, se lo dije cuando estaba en el pozo. Es sólo un niño, no tiene que por que estar pasando por esto, nadie tiene que pasar por esto.

-ven aquí.

Thomas abre sus brazos. Me acerco y lo abrazo, deposita un beso en mi frente.

-recuerda que ambos le hicimos esa promesa, -habla- tu y yo se lo prometimos, si no podemos cumplirla al menos trataremos de mantenerlo a salvo. Quiero a Chuck como ha un hermano, daría mi vida por él.

-pero...

-pero nada, ¿ok?- pone su mano bajo mi mentón y me hace verlo a los ojos-. Todo va estar, estaremos bien. Te amo.

-y yo a ti- le doy un gasto beso-. Te amo, Thomas.

Sonríe y me junta más a su cuerpo. Se siente bien, es reconfortante y les seré sincera; sin Thomas no puedo dormir. Como que ya es costumbre tenerlo a mi lado para dormir. Bostezo.

-¿hace cuanto que no duermes?- pregunta divertido, mirando como me acomodo en su pecho.

-varias noches. Y si me hicieras el favor de dejarme dormir ahora, te lo agradecería mucho- cierro mis ojos.

-descansa, linda.

Trate de decirle lo mismo, mas como estaba más dormida que despierta, murmure algo que ni yo entendí. Thomas se ríe y suspira.

Una noche de paz. Eso es todo lo que pido, que está noche nos dejen dormir bien y mañana les primeto que les voy a patear el trasero hasta que queden más planos que una pantalla.


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Hola, perdónque prometí este capítulo hace días. No sabía cómo continuar.

Bueno este es el último capítulo. Espero les haya sido de su agrado, gracias a todas esas personitas que me han apoyado desde el comienzo. Gracias a todos los que han votado y comentado, también quiero agradecer a esos lectores fantasmas (sé que los tengo, y se que estan leyendo esto. Si te hablo a ti amig@) por leer la novela.

Gracias a todos.

Sin ustedes este FANFIC no sería nada.

....

Ah y si se lo preguntaban; sí, habrá tercera temporada. ¿Cuándo? No lo sé, pero la habrá.

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