14. Nada

Esa misma noche, Nathalie salía del baño luego de haberse dado una ducha, Gabriel la miró extrañado y no dudó en preguntarle como estaba.

- ¿Estás bien amor?

- Si ¿Por qué no lo estaría?

- Es que te he notado extraña últimamente, además  he dado cuenta de que ya no te has estado tomando tus medicamentos

- Sobre eso, el otro día fui con el médico y me dijo que ya no es necesario que las siga tomando

- ¿Fuiste con el médico y sin decirmelo? Hubiera estado bueno que yo escuchara lo que él tenia que decirte con respecto a tu salud, soy tu prometido

- Lo sé y lo lamento, pero estabas ocupado y no quería molestarte

Este le besó la frente - No te preocupes, además si es sobre ti cancelaria todo por estar a tu lado, sea bueno o sea malo

- En verdad agradezco que te preocupes por mi, al igual que yo me preocupo por ti

- En fin, aún no es tan tarde así que... - Se le acercó e intentó besarla, pero esta se lo negó - ¿Qué sucede?

- Yo... No me siento muy bien, creo que es mejor que duerma

- Oh, está bien. Descansa, amor, yo aún debo resolver algunos asuntos de la empresa

- Ok, buenas noches Gabriel

- Buenas noches, linda

El diseñador salió de la habitación luego de apagar las luces. No entendía porque ella había tomado esa actitud, desde hace días que actuaba un tanto extraña e incluso un poco distante con él a tal grado de que cuando sentía que las cosas se calentaban un poco se separaba de inmediato. Temía que había hecho algo malo.

«Si hubieras hecho algo malo no te habría dicho que si ayer»  Su mente tenía razón, aún así se preocupó por aquello. Estaba dispuesto a hacer lo que sea con tal de evitar un disgusto con su amada.

Bajó rumbo a su oficina cuando notó a si hijo en la estancia, parecía un tanto triste y preocupado por algo, se sentó a su lado.

- ¿Qué pasa Adrien, todo está bien?

- Hola papá, me gustaría decir que si, pero no, de nuevo discutí con Marinette, no ae que le pasa, parece que algo la está inquietando bastante

- Ya somos 2 hijo, pero bueno ¿Has hablado con ella?

- Hace rato fui a su casa y me cerró la puerta en la cara. Creo que mañana trataré de acercarme e intentar aclarar las cosas. Ahora me toca a preguntarte a ti ¿Qué pasa con Nathalie?

- No estoy seguro, ha estado extraña y hasta distante estos días

- Sabes, hace rato ella tuvo un mareo

- ¿Un mareo?

- Si, me dijo que no se trataba de algo malo, pero yo la vi bastante extraña, un poco más pálida y con un brillo en su mirada

- ¿Un brillo en su mirada? no puede ser

- ¿Qué pasa papá?

- Esa expresión la he oído antes y para una sola cosa, pero bueno, no puede ser más que  hasta hace poco dejó de tomar los medicamentos

- ¿Estás seguro?

- Si, en fin, debo terminar unas cosas, trata de dormir y mañana podrás hablar con Marinette, ya verás que todo se solucionará

- Gracias, buenas noches

- Igualmente, descansa

Apenas se fue el rubio a su habitación, el hombre se encerró en su oficina y al tener su situacion en mente no podía concentrarse en su trabajo tanto como quería.

«¿Será cierto lo que pienso? No, no puede ser posible, me estado cuidando, tal vez solo sea imaginación mia»

[...]

Nathalie se encontraba en el baño, devolviendo. Se cepillo los dientes, se miró al espejo de cuerpo completo y acarició su vientre. De pronto cuando estaba saliendo del baño Gabriel logró escucharla y enfrentarla.

- Te escuché vomitar ¿Qué sucede?

- Nada - Quiso irse, pero se lo impidieron - Gabriel...

- Dime que no es lo que estoy pensando

- ¿Y qué es lo que piensas? - Su voz tembló un poco

- Que puedes estar embarazada, si es así dimelo

Quería decirle, pero aún no estaba lista para hacerlo, así que decidió fingir - No, el médico dijo que puedo seguir teniendo náuseas y eso por un par de días, pero nada grave

- ¿Es cierto?

- Si, puedes acompañarme mañana, tengo un chequeo

- Ok, entonces mañana te llevaré con el médico y me confirmará tu estado de salud actual - La besó - Lo lamento, creí que existía la posibilidad de... Tu sabes

- Pues no es así, además si fuera cierto hay un riesgo por mi edad, al menos eso dicen algunos. Pero bueno, volveré a dormir

- Descansa

Él ahora entró al baño y mientras se daba una ducha pensó en lo que le dijo su prometida.

»Me está ocultando algo, lo sé y lo voy a averiguar«

Al dia siguiente, justo antes de irse al chequeo, Nathalie fue detenida por Adrien quien le pidió hablar seriamente.

- Sino vas a decirle a mi papá entonces dímelo a mi ¿Qué pasa?

- No me pasa nada Adrien

- No finjas, se que ocultas algo, por favor, seré tu hijo muy pronto así que tengo el derecho de saberlo. Confía en mi

- Está bien, bo se lo digas tú padree, al menos no deseo que lo sepa por ahora. Estoy embarazada

El joven no pudo ocultar su emoción ante aquella noticia - ¿Encerio? Esto es increíble

- Prométeme que no le dirás nada

- Es mejor se lo digas, tarde o temprano se dará cuenta, además se que le va a alegrar ya que deseó por mucho tiempo tener otro hijo y desafortunadamente mi madre y él no pudieron 

- Hay un riesgo para mi edad, no quiero que se desilusione si no salgan bien las cosas

- Por favor, dicelo, lo entenderá

Suspiró - De acuerdo, se lo haré saber luego de esta cita

Esperaba que no se molestara o algo parecido.





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