Juno. 

Salí de la escuela encontrándome con el auto de mi padre afuera. Me vio y me dedicó una sonrisa mientras entraba al auto y le daba un beso en la mejilla. 

— ¿Cómo te fue hoy? — preguntó mientras arrancaba.

— Bastante bien a decir verdad, se puede decir que hice un nuevo amigo, se llama Dylan. 

— ¿Dylan Carrison? — lo miré sorprendida.

— ¿Sabes quién es?

— Su padre trabaja en el taller. 

— Que pequeño es el mundo.

— Sí ¿acaso no eran amigos antes? 

— Bueno, yo ya sabía quién era él y habíamos compartido solamente algunas palabras, pero digamos que su amigo Carter quiso robarme un beso, en la clase de Historia se burlaron de él y así. Saliendo de clase Dylan y yo hablamos sobre eso y sobre el proyecto en pareja que nos tocó juntos, así comenzó todo. 

— Y no me digas ¿irán a las malteadas? Típico lugar para hacer proyectos, aunque al final no terminas haciendo nada — reí levemente.

— ¿Fuiste ahí alguna vez?

— Con tu madre — mi sonrisa se desvaneció de mi rostro lentamente, y hubo un gran silencio en el auto hasta llegar a casa. 

Cuando llegamos inmediatamente subí a mi habitación, y en ese momento mi celular sonó.

— Hola Juno — dijo una voz reconocida, la voz de Dylan, haciendo que una sonrisa apareciera en mi rostro de nuevo.

— Hola.

— ¿Qué haces?

— Acabo de llegar a casa ¿y tú?

— Estoy afuera del taller Stuart ¿te suene el nombre? — preguntó sarcásticamente.

— ¿La hija del dueño es una chica sexy y pelirroja? 

— Creo que sí — reí ante su respuesta.

— ¿Así que admites que soy sexy?  

— Puede ser — dijo con una risa —. Te hablaba para confirmar si nos veríamos a las 4 en las malteadas Junior, y si puedes llevar tu laptop porque la mía está descargada y perdí el maldito cargador.

— Está bien, nos vemos ahí con mi laptop.

— Nos vemos — y la llamada terminó. Recordé que tenía un cargador de laptop extra, así que lo metí en mi mochila para dárselo a Dylan.

Bajé al comedor cuando papá me llamó para comer, había preparado su deliciosa sopa de fideos. Creo que no he contado mucho sobre mi padre, bueno, déjenme presentarlo. Su nombre es Andrew Stuart, es mecánico y actual dueño del taller Stuart, mi abuelo Toby solía ser el dueño pero debido a la edad decidió que mi padre se hiciera cargo. En casa solamente somos él y yo, siempre hemos estado juntos y nos tenemos muchísima confianza. Andrew Stuart es más que mi padre, es mi mejor amigo y mi confidente. 

— Puedo comer esta sopa hasta que muera — dije antes de meterme una cucharada a la boca —. Debes enseñarme la receta, pienso hacerle esta sopa a mis hijos, aunque seguramente no me quedará igual de buena pero puedo intentarlo — papá sonrió. 

— Tu madre es la chef oficial y original de la sopa Stuart — y mi sonrisa desvaneció de nuevo.

— No has dejado de mencionarla.

— Eso pasa en los días que la extraño más, hoy es uno de esos días.

— ¿Extrañas a la mujer que te engañó y después de una semana que lo descubrieras, se casó? — papá suspiró.

— Juno...

— Lo siento papá, pero simplemente no lo entiendo.

— ¿Es por eso que nunca has tenido novio o algo parecido verdad? ¿Ella es la razón por la que no dejas que te quieran? 

— En parte, y no es el hecho de que no me dejo querer. No me dejo querer por cualquiera, porque cualquiera puede hacer lo que hizo mamá. 

— Han pasado 5 años, las personas cambian, es cómo Selena Gómez y Justin Bieber, cometieron errores pero eso no les impide estar felices juntos. Al menos dime que le has regresado los mensajes a tu madre. 

— La bloqueé, y no metas a Jelena en esto — me levanté —. Ya no tengo hambre — dejé la sopa y me fui. 

~~~

Dylan.

Un par de minutos después de que me sentará, Juno llegó, y no se veía muy feliz.

— ¿Estás bien? — pregunté mientras se sentaba y se quitaba la mochila de la espalda.

— Sí, estoy bien.

— ¿No querías venir verdad? — Juno me miró a los ojos y negó con la cabeza.

—No te preocupes, no tiene que ver contigo, es una plática no muy agradable que tuve con mi padre.

— ¿Entonces si querías venir? — ella sonrió.

— Pues claro, a pesar de que sea por un tonto proyecto. 

— Al menos eso hizo que comenzáramos a hablar.

— Sí, y el intento fallido de Carter de robarme un beso tuvo mucho que ver — reí.

— Eso también.

Pedimos malteadas de chocolate y empezamos a trabajar. Teníamos que hacer una presentación a computadora sobre la cultura china, paso una hora y ya llevábamos bastante, sin duda Juno es muy hábil para estas cosas. 

— Tenemos hasta la otra semana, creo que podemos terminar el fin de semana. 

— Me parece bien — Juno guardó la presentación y cerró la laptop.

— Tengo algo por ti — de su mochila sacó un cargador y me lo dio con una sonrisa.

—  No tenías que hacerlo.

— Claro que sí, lo tenía por ahí y no lo uso así que es mejor dárselo a alguien que lo necesita — la miré con una gran sonrisa.

— Gracias — empezamos a hablar de cosas al azar, cosas que se nos ocurrían al momento. Juno era alguien bastante interesante, podías tener pláticas muy profundas con ella. 

— Cuéntame un poco sobre tu familia — sugirió ella.

— Bueno, en mi familia somos mi mamá, mi papá y mi perro Dylan.

— ¿Tu perro se llama igual que tu?

— Sí, mamá se le ocurrió ponerle así — Juno rio.

— Continua — dijo tomándole un sorbo a su malteada.

— Mi papá trabaja en el taller con tu papá y mi mamá es asistente de una veterinaria los fines de semana. 

— ¿Y tu quieres trabajar en un taller? Porque si algún día yo me vuelvo jefa del taller puedo contratarte y darte una buena paga — sonreí. 

— No lo sé, mi padre estaba pensando en decirle a tu padre que si podía darme al menos un pequeño trabajo.

— Bueno, cuando me vuelva jefa te puedo dar un ascenso. En realidad ser jefa del taller es algo extra, no es algo que desee tanto, quiero escribir, así que tal vez estudie algo que tenga que ver con alguna revista, editar y cosas así.

— Me parece bien. Yo pienso estudiar derecho, realmente quiero ayudar y dar justicia a las personas, pero el taller también podría ser algo extra, también puedo ayudar a las personas arreglando sus coches. Ahora tu cuéntame un poco sobre tu familia, tengo entendido que eres hija única ¿verdad?

— Sí, solamente somos mi papá y yo.

— ¿Y tu madre? — Juno suspiró, por la mirada en sus ojos supe que era algo complicado —. Lo siento, creo que no debí preguntar, y no debes responder eso. 

— No te preocupes, me va a hacer bien hablar sobre ello, a las últimas personas que les conté sobre eso fue a mis amigas, fue hace mucho tiempo. 

— Entonces te escucho, soy todo oídos.

— Mientras crecía tenía una vida y una familia por así decirlo normal, tenía a mis padres juntos y éramos una familia feliz, papá se encargaba del taller y mi mamá trabajaba en una guardería. Yo siempre fui muy celosa con mamá, a veces me enojaba con ella porque sentía que quería más a los otros niños que cuidaba pero siempre me decía que siempre me iba a querer a mí y solamente a mí. Cuando tenía 12 años, un día papá me llevó al taller, y cuando regresamos encontramos a mamá afuera de nuestra propia casa besando a otro hombre, él al vernos obviamente se montó en su auto y se fue, papá no quiso perder el tiempo yendo detrás de él. Recuerdo entrar todos a la casa y papá pidiendo que subiera a mi habitación, pero me quedé en las escaleras escuchando. Mamá dijo que ya no se sentía feliz, así que tomo sus cosas y se fue sin despedirse de mí, ni siquiera me dirigió la mirada. Una semana después supe que se había casado, la busqué en las redes y vi las fotos, lo vi absolutamente todo. La saqué de mi vida por completo, y entendí que lo que me dijo nunca fue verdad, no me quiso solamente a mí ni a papá. Meses después trató de contactarme, ella tenía parte de mi custodia así que tenía derecho y mi papá me lo decía, pero nunca dejé que entrará a mi vida de nuevo — me quedé en silencio unos segundos, sin saber que decir ni que hacer.   

— Lo lamento mucho Juno — dije tomando su mano con suavidad. Levantó la mirada y me miró con un suspiro.  

— Creo que por eso nunca me he enamorado completamente de alguien, si me han gustado chicos pero nunca les digo o nunca soy correspondida, desde mamá no me dejo querer por cualquiera. 

— ¿Esperas al indicado? ¿Esperas a alguien que sepas que nunca te hará eso? — Juno asintió con la cabeza —. Yo también espero lo mismo. 

Capítulo editado