Juno. 

Los días pasaron y cuando menos nos dimos cuenta la Navidad ya se sentía en el aire. La casa se llenó de adornos y luces, entrabas y tu nariz se encontraba bendecida con olores navideños. Navidad solía ser mi época favorita, pero mamá se fue y todo cambio, ahora todo cambio nuevamente porque pasaríamos las fiestas con la familia de Dylan. Sus parientes no los podrían visitar este año debido a que vivían muy lejos, y nuestros parientes estarían en casa de mamá. 

— ¡Feliz Nochebuena! — exclamaron los padres de Dylan cuando abrimos la puerta.

— ¡Hola! Que bueno que estén  aquí — dijimos papá y yo felices, hace mucho tiempo que no veía a papá feliz en esta época. 

— Creo que no te he presentando oficialmente a mis padres — comentó Dylan tomándome de la cintura cuando ya todos nos encontrábamos en la sala —. Juno, ella es mi madre Victoria, y mi padre Matt.

— Mucho gusto en conocerlos al fin, y enserio nos alegra demasiado que celebren con nosotros, ya hacía falta un poco de espíritu navideño — dije con una gran sonrisa.

— Nos alegra mucho también a nosotros querida, haces a nuestro hijo feliz y nos alegra devolverte el favor.

Pasamos la tarde viendo películas navideñas, contando anécdotas y bailando las típicas canciones navideñas. Llegó la noche y con ello la hora de la cena, estaba acomodando la mesa cuando alguien tocó la puerta. 

— Yo voy — me dirigí a la puerta y cuando abrí me encontré a mamá y a Clara. 

— ¡Hola Jjjjuno! 

— ¡Clara! ¡Feliz Nochebuena! — dije agachándome para abrazarla —. ¿Qué te trae por aquí?

— Tenemos rrrregalos, para ti — no pude evitar reír y volver abrazarla, Clara era tan tierna.

— Es muy dulce de tu parte. 

— Y de parte de mami — me levanté y miré a mamá con una leve sonrisa.

— Clara quiso hacerte un pequeño regalo, y yo decidí comprar uno para ti y tu padre — me entregó una bolsa —. Ábrelos hasta que Santa llegué, a media noche — mi sonrisa se hizo más grande, y por un momento todo lo malo que pensaba de mi madre se fue.  

— Es un bonito detalle, gracias, y espero que se la pasen muy bien — le di un beso a Clara y despedí a mamá con una sonrisa.

La cena estuvo deliciosa, sin duda papá este año si se esmero, y verlo tan feliz me hacía feliz a mí. 

— Ya es media noche ¡a abrir regalos! — dijo Dylan emocionado cómo un niño pequeño haciéndonos reír. 

Papá y yo le dimos a Victoria unos bonitos accesorios, y a Matt un reloj, papá sabía lo mucho que le gustaba los relojes. 

— Son muy bonitos regalos, muchas gracias — dijeron agradecidos. Yo recibí unas botas muy bonitas que le había dicho a Dylan que quería tenerlas algún día. 

— No teníamos idea de que darte pero Dylan recordó lo que le dijiste.

— Son muy hermosas, gracias — dirigí mi mirada a Dylan —. No creas que nos hemos olvidado de ti, toma — le di una caja, y al abrirla Dylan se encontró unos tenis deportivos —. Yo también recordé algo que querías, me dijiste que querías comenzar a jugar fútbol y le dije a papá que te consiguiera unos tenis especiales.

— Wow, muchas gracias, enserio — sonreí y lo abracé. 

— Tengo un regalo especial — le susurré.

— Yo también — nos separamos y reímos.

Papá abrió el regalo de mamá, encontrándose con un elegante abrigo, y bastante costoso a mi parecer. Abrí primero el regalo de Clara, una carta que me hizo sonreír, y al abrir el regalo de mamá además de mantener la sonrisa, lágrimas salieron de mis ojos. Era un cuadro, lleno de fotos nuestras en todas las Navidades y en otras fiestas especiales, y una pequeña nota que decía: 

"Aunque no lo parezca, yo siempre te voy a querer, y si me das la oportunidad te prometo que seré mejor esta vez. Feliz Navidad mi pequeño reno ¿lo recuerdas? Yo recuerdo cada pequeño momento"   

— Lo siento, es sólo que la Navidad me pone emocional — dije limpiándome las lágrimas.

— Tranquila, a todo aquel que tiene corazón este tipo de fiestas lo pone emocional — dijo Matt.

— Enserio queremos que sepan lo agradecimos que estamos con ustedes, por hacer que esta Navidad sea más feliz, a pesar de todo lo que mi hija y yo hemos pasado — papá comentó con una sonrisa.

Dylan y yo salimos afuera, el paisaje era hermoso, la nieve cubría la calle y pequeños copos de nieve caían desde el cielo. Hacía bastante frío, y esa era una excusa para mantener nuestros cuerpos juntos. 

— Esto es lo que te quería dar — Dylan me entregó una pequeña caja, y dentro estaba un dije en forma de corazón. 

— Dylan, yo..... No sé que decir, no quiero llorar otra vez — Dylan rio por lo bajo y me colocó el collar, ya con el collar en mi cuello volteé y lo miré con ojos brillantes, estaba segura que así estaban; brillantes.

— Me hace feliz pasar esta Navidad contigo, puedo decir que es la mejor Navidad que he tenido.

— A ver que opinas cuando abras esto — yo también le entregué una pequeña caja, y dentro contenía un disco, con una foto nuestra de portada —. Creo que esto sonará muy cursi pero decidí colocar en este disco canciones que siento que fueron hechas para nosotros, que nos representan de alguna manera — Dylan levantó la mirada llena de lágrimas, dejó el disco a un lado, tomó mi rostro y me besó.

Esta vez, en los labios. 

Finalmente había dado mi primer beso, y Dylan había perdido el miedo. 

— Te amo, Juno Stuart, no sabes cuánto.

— Yo también Dylan Carrison, yo también — y nos besamos una y otra vez, quitándonos nuestros miedos y expresando todo lo que sentíamos el uno por el otro.

~~~ 

Al día siguiente por la mañana, me atreví a levantarme y dirigirme a casa de mamá. Tardé algunos segundos, pero toqué la puerta.  

— ¿Juno? — dijo mamá sorprendida al encontrarme ahí frente a ella —. ¿Vienes a ver a Clara? 

— De hecho vengo a verte a ti. Quería agradecerte por tu regalo, enserio me hizo muy feliz y hasta lloré de felicidad, hace mucho que no lloraba de felicidad por un regalo tuyo.

— La última vez fue en la Navidad de hace dos años, yo no pude darte algo pero te hice una carta pidiendo disculpas y diciendo lo mucho que te amaba.

— Esa carta sigue conmigo, en mi cajón, a pesar de todo tus cosas siguen conmigo, nunca me he atrevido a tirarlas.

— Me alegra saber eso. 

— Te quiero mamá, y ya no quiero seguir con esto, ya no quiero seguir alejada de ti por un error del pasado.  

— ¿Lo dices en serio? — preguntó mamá con lágrimas en los ojos al igual que yo. Asentí con la cabeza.

— Te extraño mucho, y aunque cada día lo niegue lo hago, te extraño — dije sollozando, mamá inmediatamente me acercó a sus brazos, y después de mucho tiempo por fin me sentía aliviada y tranquila, sobretodo feliz. 

Nota de la autora

Feliz casi Navidad! O felices fiestas por aquellos que celebran algo diferente. Espero que se la pasen muy bien, rodeados de personas importantes, Y MUCHA COMIDA Y REGALOS.

Okay no, sí pero no, JAJAJAJA.

Mañana no habrá capítulo así que por eso les digo esto desde ahora, yo mañana tengo la cena familia de Nochebuena pero lo más seguro es que el 25 por la noche ya haya capítulo, ustedes lo sabrán.

Les quiero agradecer mucho mucho por leerme, hemos llegado a 3K lecturas y enserio eso no me lo esperaba cuando publiqué esta historia, enserio gracias y por eso les decidí dar un regalo y milagro navideño de el esperado beso entre Dylan y Juno, y la reconcilación entre ella y su madre.

Esta época es para estar feliz y agradecido con todo lo que tenemos, así que disfruten y sean felices<3 Los amo<3 

Capítulo editado