Cuando veas al sol, recuerda que yo te doy mi calor para que vivas.

Cuando veas la luna, recuerda que yo te ilumino cuando te encuentras en la más grande oscuridad.

Cuando toques el agua, recuerda que yo entrego todo de mi para que seas sano.

Cuando veas el cielo, recuerda que te daré nuevos días cada mañana.

Cuando veas las nubes, recuerda que cada cosa es única.

Cuando sientas el viento, recuerda que yo te estoy abrazando.

Cuando veas algún animal, recuerda que ellos son mucho mas sinceros.

Cuando te sientas satisfecho, recuerda que estas haciendo las cosas bien.

Cuando estés triste, recuerda que siempre estoy para ayudarte.

Cuando sientas frío, no te tapes, siente como puede llegar a entrar a todo tu cuerpo y estremecerte.

Cuando veas la naturaleza, recuerda que ahí estaré presente para siempre y para ti.

Cuando veas una estrella, recuerda que es un lucero que guía tu camino.

Cuando sientas que todo se viene abajo, recuerda que siempre habrá una salida.

Cuando leas esto, recuerda que lo escribí para ti.