LUKAS

Primer día de Clases

Me despierto por el sonido de la alarma, algo estresante, no me acostumbro rápido el despertarme temprano, así que vuelvo a dormir, unos minutos de felicidad son los que obtengo cuando vuelve a sonar la maldita cosa, lo rompería si no fuese mi celular.

Sin muchos ánimos me levanto y la pongo en silencio. Reparo mi alrededor y la habitación esta a oscuras solo puedo notar todavía el cielo nocturno que advierte el amanecer.

Dirijo mi cuerpo a el cuarto de baño donde me doy una ducha rápida.

Al salir noto mi cabello castaño un poco desordenado, lo peino y me coloco un gel para mantenerlo ahí, solo sera por hoy, a por cierto es el primer día de mi último año de instituto, y bueno no es que este nervioso o bueno tal vez si…un poco pero nada que mis amigos no resuelvan, todos estos años e tenido tantos amigos que al llegar allá me siento protegido, vale si suena estúpido sueno como un idiota y quizás lo sea, pero…¿no pasa siempre de entrar al instituto y tener miedo de ser el único que llego temprano? ¿O que te toque en un salón donde nadie se la lleva bien contigo?, bueno justo me pasa eso.

Me coloco el uniforme de deporte, si, empezar el primer día con deporte no es de mis materias favoritas.

Al final tomo mis tenis y mi bolso nuevo lleno de los cuadernos de mis 12 materias, y sabrá dios si entra alguna otra.

Bajo rápido de mi gran habitación justo a tiempo para el desayuno el cual esta servido junto a una nota
La tomo y abro para leerla.

"Buenos días cariño, esperamos que este día salga todo como esperas, lamentamos no estar presentes, sabes que el trabajo no puede parar volveremos en unas semanas o un mes aun no lo sabemos, te avisaremos cualquier cosa, te quieren tus padres"

Término de leer y arrugo la nota en mi mano con el puño apretado, esto es lo que me molesta, nunca están, jamas están presentes, simplemente desaparecen y ya.

Tiro el papel a la basura y me como mi desayuno, sin pensar mucho en lo que acabo de leer me levanto y dejo todo en el lavabo.

Salgo de mi casa, que podría decirce que es una mansión, mis padres al ser unos de los mejores abogados tienen una buena entrada monetaria y si, soy millonario de cierta manera, también por toda la herencia de mis abuelos.

Llego al estacionamiento donde tengo mi auto, un regalo de cumpleaños del año pasado. Mi ferrary  negro, es hermoso, exclusivo y bonito, llama la atención pero en esta sociedad pasa desapercibido.

Entro y enciendo el auto dejando el bolso en otro lado, conduzco por la carretera se que es un poco tarde y es peor cuando me tengo que detener junto con el tráfico de aquí, se me hace aburrido mirar el celular ya que me recuerda cada minuto que no llego a mi destino.

Giro a mi izquierda para notar un Jepp naranja a mi lado, pero no le pongo atención a dicho modelo cuando capto sus ojos.

Esos ojos marrones, ese cabello igual al mío pero claro, su rostro, sus labios, todo de ella.

Una chica la cual mira distraídamente los autos por la ventana por su rostro se nota que no esta nada contenta, se fija en mi dirección y casi pego un brinco en mi puesto pensando que e sido descubierto mirándola
Todo este tiempo.

Pero para mi suerte recuerdo que los vidrios están polarizados y no me puede ver, observa mi auto exsaminandolo por completo y asiente con la cabeza dando su ¿veredicto? ¿Decisión?.

No puedo dejar de observarla es como si con solo verla ya te tiene, ya eres suyo, como una diosa que es una tentación para el mundo.

Me fijo rápidamente en su vestimenta, sonrió de lado para mi placer.

Al parecer la vida y el día están a mi favor.

Ella lleva el mismo uniforme que yo, lo que significa que estudia en mi mismo instituto.

Mi corazón se acelera con solo la idea de conocerla ¿quien es ella? ¿A que año va? ¿Estara en mi salón? Espero a que si.

Como no puedo sacar yo mismo las respuestas solo hay una persona a la que si, alguien que sabe de todos y esa es Sabrina.

Si, ella lo sabrá

El cemaforo se torna en verde y acelero para llegar mas rápido al instituto, ahora si hay algo que me interesa, encontré alguien en quien fijarme.

Es como si la oportunidad de ganar 10.000$ esta ahí pero no sabes como llegar, pero sé por donde empezar.

Llego al instituto mas rápido de lo que me imagine, la emoción diría yo.

Estaciono mi auto y camino a la entrada, y justo allí en ese preciso momento veo a mis amigos si.

Vale se que e dicho que conozco a medio mundo y eso, pero de todas esas personas el número se reduce a que de tantos "amigos" solo queda 12 o menos depende de las personas en mi caso solo tengo a mi mejor amigo y a los demás y en el combo incluye a Sabrina.

—E pero si es Lukas—habla mi amigo

—Hola hermano —le saludo con la mano y un pequeño abrazo—¿me extrañaste?

—¿El ver tu horrible cara todas las mañana por un año?—dice sarcástico—no gracias.

Ambos reímos y le golpeo el hombro.

—Sabes que me quieres idota—le digo

—Tu también imbécil.

Hablamos un rato sobre las vacaciones cuando la figura de una chica que conozco muy bien se mezcla entre nosotros.

—¡Sabrina!—le saludo feliz.

—¡Hola Kass!—chilla ella abrazándome

—Te dije que no me dijeras así Brina

—Cuando tu me dejes de decir así yo lo haré también.

Ambos reímos y la vuelvo a abrazar, ella es como la hermanita pequeña que nunca tuve, una parte de mi que me alegra el día al igual que su hermana.

—Oye Sabrina…—empiezo—necesito la información o bueno mejor dicho, necesito saber de una persona.

Me mira extrañada mas no se queja y me sonríe.

—Claro, ¿a quien tienes en la mira?

Estoy a punto de responderle cuando la chica de mis pensamientos, ella, la chica del Jepp, la que tenia su mirada pérdida en las calles, ella la que miro mi auto.

—Ella—señalo a la chica que pasa—necesito que me digas quien es

Su cara de sorpresa se hace presente a lo que me extraño

—Ohh—dice—Ella es Clara Montoñes Cors, tiene 18, estudia mi mismo año y esta en mi salón, su madre es médico, su padre…la verdad no se que hace exactamente, tiene un hermano el cual siempre a estado ausente, ese chico guapísimo que va con ella es su mejor amigo Ander, de padres empresarios que viajan mucho, y él es Bisexual, ella no tiene ninguna relación por ahora—termina de contar—creo que es todo lo que te puedo decir de ella.

Entonces su nombre es Clara…ummm interesante

La miro impactado por todo lo que a dicho, por eso me encanta estar con ella, vale puede que suene raro que ella sepa de todos pero eso me ayuda.

—Muchas gracias Brina—la molesto

—¿Te interesa ella Kass?

—Puede ser

—¿Quieres que te ayude a emparejarlos o…?—pregunta animada haciéndome ojitos.

Niego con la cabeza

—No, esto lo tengo que hacer yo, además siento que ella es…especial.

—Eso dices siempre—me reprocha.

—Nunca dije que todas fueran especial, pero veo que ella lo es, y pronto lo descubriré.

—Cualquier cosa, ella estudia en mi salón, por si quieres pasar y eso—informa—bueno Lukas, enamoradito, debo irme.

—Adios ñoña—le sonrio

Me saca la lengua y yo hago lo mismo.

Pasan unos minutos en lo que hablo con mis amigos y los pasillos se van quedando vacíos.

—Jovenes, a su salón —nos regaña la coordinadora—apenas el primer día y ni siquiera entran a clases.

Todos le volteamos los ojos y asentimos. Caminamos por los pasillos de las aulas de ultimo año.

¿Y si hago algo…?

La idea no suena tan mal de hecho…

Como si el destino me diera las respuestas la puerta del salón de aquella castaña aparece en mi campo de visión. Aquí estudia Sabrina ¿no?.

Y que casualidad que Clara también.

Como si estuviera planeado me asomó al pequeño cuadro de la puerta y observo el aula, paso mi mirada por todos los lugares para encontrarla a ella…

Y justo esta allí, me ve, la veo, nuestra primera vez que conectamos miradas, la primera vez que puedo ver mejor sus ojos cafes.

Sin tenerlo planeado, le sonrió captando su atención por completo
Es ahora o nunca

Como si lo hubiese practicado le lanzo un beso por la ventana justo para ella, no me quedo por completo para ver su reacción pero disfruto irme con la idea de que ya la vi, ya me vio.

Y esto apenas es el comienzo de lo que ella sera para mi, puede que suene algo ¿acosador? Pero es como un presentimiento, como si supieras que esta escrito, pero que lo puedes modificar a tu gusto.

Y aunque ella no lo sepa lo descubrirá, sabrá quien soy y aun mejor lo que seremos.