49
Cuando dejó el auto en el estacionamiento, tuvo que quedarse varios segundos mirando la nada frente a él preguntándose cómo le haría para llevar a un Hoseok dormido al departamento.
No quería despertarlo. Se veía tan inofensivo y tierno dormido que le daba nervios hasta respirar si llegaba a despertarlo por accidente.
Suspirando rendido contra el asiento del chófer, Taehyung siguió admirando a Hoseok. Le picaban los dedos con las ganas que tenía de tocar su cabello o cualquier parte de su rostro, volver a besarlo o, al menos, dibujar o pintarlo para plasmar lo hermoso que es a sus ojos en el papel. Él siempre había sentido demasiado y necesitaba una forma para drenar todas esas sensaciones, hallando ese método de liberación a través del arte. Taehyung recuerda que cuando besó a Hoseok dormido la primera vez, había sido su forma para, inadvertidamente, drenar todo el conjunto de emociones que le hacía sentir y lo mucho que quería conocerle para devolver todas esas buenas sensaciones. Y aunque Hoseok parecía no darse cuenta de eso, él quería cambiar su perspectiva. Y sabía lo difícil que sería lograr eso, pero le gustaba tanto que estaba seguro que lo intentaría.
Taehyung se preguntó si el enamoramiento que tenía por Hoseok se iba a desvanecer algún día. Porque en ese momento parecía que no tendría fin. Tan imposible como que la tierra se detenga. Pensaba que tal vez podría detener el flujo de sus sentimientos, pero a pesar de todos los momentos desagradables no podía dejar de sentir y sentir tanta necesidad de él.
A veces pensaba que lo que sentía por Hoseok era más atracción física que atracción emocional, como un hambriento al tacto que siempre había sido, pero luego pensaba en todas esas largas conversaciones que los había acercado un poco más en ese tiempo sin necesidad de algún toque. No sabía mucho de su vida, pero si sabía mucho de él como persona.
Y le gustaba lo que sabía. Le gustaba demasiado.
Taehyung salió del auto, un poco ruborizado por el rumbo de sus pensamientos y, tocándose el cabello de manera nerviosa, rodeó el capó del auto para abrir la puerta del copiloto. Hoseok seguía durmiendo con el cuello ladeado, viéndose algo incómodo y siendo esa la principal razón para moverlo despacio, casi con la punta de los dedos.
- Hyung, despierta -dijo Taehyung, insistentemente, sólo logrando que entre abriera los ojos cuando una de sus manos tocó su mejilla con suavidad, moviendo su rostro. El profesor, ya despierto, emitió pequeños gemidos soñolientos y quejumbrosos. Cuando su mirada perdida y dormida dio con la del escultor, este sintió como una de las manos del profesor tocaban su mejilla también, su mano posándose en la mitad de su rostro, palpando. Taehyung no pudo evitar soltar una risita cuando el pulgar de Hoseok sobó su nariz, justo encima de su lunar, irguiéndose en el asiento.
- No entiendo có...mo puedes ser tan... guapo... -dijo Hoseok frunciendo el ceño, realmente como si fuera un asunto grave. Taehyung soltó un resoplido avergonzado, enarcando una ceja por lo incrédulo que le hacía sentir y tratando de no hiperventilar demasiado por las palabras del profesor e ignorar el nerviosismo en su estómago.
- Hyung, vamos adentro -volvió a insistir, acercándose sólo para desabrochar el cinturón de seguridad tan rápido que Hoseok se le quedó mirando como un niño que despierta de la siesta.
- ¿Dónde? -musitó, siendo guiado fuera del auto que emitió un sonido de bloqueo de las puertas cuando la cerró. Taehyung hizo que Hoseok envolviera un brazo alrededor de sus hombros al ver como seguía mareado al apoyarse en el capó del auto. De repente, vio como su ceño se fruncía y trataba de alejarse de él, dándose la vuelta hacia la parte trasera del auto-. Creo... creo que... voy a vomitar.
- ¿Estás bien? -preguntó Taehyung, preocupado, tocando la espalda curva de Hoseok apoyándose en el auto y respirando con dificultad. El profesor negó con rapidez, pero no vomitó. Cuando se calmó, dando grandes bocanadas de aire, se irguió para empezar a caminar sin rumbo, mirando hacia todas partes. Taehyung agarró su brazo, atrayéndolo hacia él-. ¿Hacía dónde vas? Ven aquí.
- No vomité -musito Hoseok, con una sonrisa sin dientes y casi orgullosa mientras apoyaba todo el peso de su cuerpo en Taehyung, a punto de caerse.
- Sí -reprimió una risa, burlón-. No vomitaste. Eres un excelente hyung.
Taehyung guió a Hoseok hacia dentro de los departamentos, siguiéndole el ritmo a los comentarios sin sentido del profesor, quien además no dejaba de decir lo guapo que era y hundir su nariz en su cuello, besando y mordiendo juguetonamente cuando entraron al ascensor y apretó el número del piso de Hoseok. En un momento tuvo que tapar la boca de él con su mano, porque realmente no estaba siendo de gran ayuda si actuaba de esa forma y él con su necesidad insoportable de tacto. Amaba la forma tan posesiva que tenía de tocarle, pero en ese estado, lo único que le preocupaba era que no se cayera de bruces al suelo.
- ¿A dónde vamos? -preguntó Hoseok, su tono de voz ronco y grave, mirando hacia todas partes cuando la puerta del ascensor se abrió-. Quiero ver a Taehyung.
- ¿Qué dices? -rió el mencionado-. Estoy aquí.
Hoseok lo miró incrédulo, sin reconocerle.
- Quiero ir al departa...mento... de Taehyung -insistió, frunciendo aún más el ceño mientras trataba de alejarse de su agarre. Casi cayéndose, Taehyung volvió agarrarle para sostenerle-. Sillón... Taehyung... -balbuceó resoplando. Taehyung rodeó la cintura de Hoseok con un brazo y casi lo arrastró hacia el departamento, tocando la puerta varias veces para que Namjoon lo escuchase. Pasó así varios minutos hasta que decidió buscar las llaves de Hoseok en sus bolsillos, pero sólo encontró su celular y su billetera-. ¿Qué demonios... le pasa... al maldito piso? -maldijo Hoseok, señalando el piso con el dedo de forma malhumorada-, ¡Dile que se deje de mover!
- Hyung, no grites -le calló Taehyung, sacando su celular del bolsillo para llamar a Namjoon.
- Oh, sí -asintió vagamente, llevándose el dedo índice a los labios y siseando mientras posaba su cabeza en el hombro de Taehyung de forma cansada-, tshh, tshh.
Namjoon contestó a la segunda llamada, su voz sonando pesarosa y ronca por el sueño preguntando quién llamaba. Para cuando Taehyung dijo su nombre, otra voz extrañamente conocida le interrumpió << Demonios, si vas a hablar por celular, que sea fuera de mi maldita habitación, déjame dormir >> que respondió a la pregunta que se estaba formado en ese instante. De todas formas, le preguntó dónde estaba y entonces supo que Namjoon también había salido y que en ese momento dormía en la casa de Seokjin, el enfermero y profesor de la universidad. Taehyung se preguntó en qué momento se habían vuelto tan amigos, y recordó que Hoseok le había comentado que Seokjin, hace años, había cuidado a la abuela de Namjoon, fallecida por cáncer terminal. Ellos ya eran amigos, sólo que no lo habían demostrado tanto como últimamente.
No pudo evitar reírse cuando Namjoon se rió burlonamente al escuchar que posiblemente Hoseok había perdido sus llaves, si es que no las había olvidado antes de salir.
Así que ahora se encontraba en su departamento, prendiendo la luz de su habitación para acostar a Hoseok tal como esa vez en la que actuó como un loco sólo para acercarse a él esa vez que salió con Mel. Tantas cosas habían cambiado desde entonces, excepto su atracción por él.
Precavido por los movimientos erráticos de Hoseok queriendo acercarse al atril donde tenía una de sus pinturas a medio acabar, destapó su cama para acostarle y sacarle los zapatos sin ningún esfuerzo. Casi parecía un muñeco de lo dócil que se comportaba al sacarle la chaqueta negra y dejando sus cosas en el mostrador. Taehyung lo tapó, todo bajo la mirada intensa y cansada de Hoseok que no dejaba de seguirlo a cada movimiento.
- Taehyung -le llamó casi en un susurro, captando su atención-. Soñé contigo hace un momento.
- Oh, ¿Sí? -enarcó una ceja, divertido. Un Hoseok borracho era tan divertido, pero aún así no podía evitar preocuparse, sentándose a su lado en la cama-, ¿Qué soñaste?
- Que me besabas mientras dormía.
Taehyung relamió sus labios, repitiendo que tenía que contenerse. No podía abalanzarse encima de Hoseok en ese estado, simplemente, tendría que dormir en la sala.
- Duerme, mañana te sentirás mejor -contestó tocando su frente y parte de su cabello, notando que tenía el cabello más largo y que ya se le veían las raíces oscuras de su cabello pelirrojo. Hizo ademán de levantarse, pero apenas se movió las manos de Hoseok tomaron las suyas, reteniéndole.
- No puedo dormir si te vas -refunfuñó Hoseok, provocando un fuerte sonrojo en él. Tragando saliva, Taehyung suspiró harto de tener que ser el cuerdo en ese momento. Simplemente apestaba.
- Tengo que ir a lavarme los dientes, hyung.
- No quiero que te vayas -replicó con demanda, tirando de él lo suficiente para que se acostase también. Sin poner resistencia, Taehyung se acostó de lado en la cama, dejando que Hoseok tirara las sábanas torpemente entre ellos para taparle también. Casi se ríe de lo tierno que se veía, sino fuera por los brazos de Hoseok que inmediatamente lo envolvieron en un abrazo caluroso, su nariz rozando la manzana de Adán de Hoseok, su cuerpo amoldándose al de él inconscientemente y de forma tan perfecta como si hubiera nacido para vivir así. El aroma a masculinidad que emanaba Hoseok le hacía sentir tan resguardado, quería ser todo brazos y piernas para no alejarse nunca. Entre sus brazos, sintiendo su calor, su pecho moverse a cada respiración, se sentía feliz. Simplemente deseaba tanto eso que ahora que lo tenía no podía evitar pensar en lo feliz que era así. No quería romper ese momento, ni el silencio, hasta que Hoseok volvió a hablar con sus labios rozando su frente-. Cántame una canción.
- ¿No puedes dormir? -susurró alzando un poco la cabeza, encontrándose con los ojos oscuros e inalterables del profesor.
- Me gusta tu voz -respondió, afianzando el agarre tanto que ya estaba olvidándose del límite de su cuerpo y el de él-. Cántame.
Taehyung aclaró su garganta, removiéndose en la cama y apoyando el codo encima de la almohada, mirando desde arriba a Hoseok quien se había dado la vuelta y no había soltado su mano, haciéndole que lo rodeara como un manto. Apoyando su mejilla en la sien del profesor, empezó a cantar con voz baja esa canción que le había cantado esa vez para hacerle dormir.
Cuando acabó el primer verso, se detuvo al ver como Hoseok se daba la vuelta y lo miraba pestañeando con lentitud. Parecía recobrar la conciencia poco a poco, cosa que lo tranquilizaba, pero por alguna razón le ponía más nervioso.
- ¿De dónde es esa canción? -preguntó curioso-, ¿Cómo se llama?
- Se llama cuatro en punto -respondió Taehyung, acariciando el cabello de Hoseok, pasando el pulgar por su sien y mirándole fijamente-. La compusimos mi padre y yo, él es compositor, comúnmente trabaja para orquestas y es de ese estilo, así que... sólo lo hicimos. Fue un proyecto de cuando mi abuela falleció. Se ha vuelto mi canción favorita para dormir.
Sintió como Hoseok escabullía su mano por debajo de su camiseta, acariciando su espalda sin dobles intenciones, sólo haciéndole sentir más relajado y afable por las caricias.
- Tu abuela tiene mucha suerte, en donde esté... debe sentirse muy, muy suertuda... y... tu madre... -balbuceó extrañado-. ¿En qué trabaja?
Taehyung sonrió al escuchar lo primero, sintiéndose nostálgico, pero no triste. Le gustaba que Hoseok le escuchase y supiera exactamente qué decir para hacerle sentir mejor aunque no estuviera completamente consciente.
- Ella era bailarina profesional de danza moderna, pero tuvo un accidente después de que yo naciera y no pudo bailar más -por alguna razón, en ese estado de cercanía, sentía que podía contarle todo.
- Oh -el rostro de Hoseok decayó-... eso es triste.
Asintiendo, Taehyung acortó aún más la distancia y dejo un suave beso en la frente de Hoseok, preguntando con cierta intriga.
- ¿Y tus padres, hyung?
Sintiéndolo removerse entre sus brazos, se le detuvo el corazón al escuchar su respuesta.
- Mi madre biológica... murió hace años -confesó con voz queda, casi temblorosa-. Mi padre biológico sigue vivo, pero las pocas veces que me contacta... hace que me enoje... y no me dan ganas de volver a hablarle, pero de todas formas... siempre espero que me llame. No sé porqué lo espero... Tal vez porque me gusta que... me hable de mi madre... de mi Mumi.
Taehyung junto las cejas, sin saber qué decir. Recordó la conversación que tuvo con Jimin y comprobó una vez más que no se puede especular sobre la vida de nadie, ni tampoco tomar decisiones en base a suposiciones. En ese momento se sintió tan estúpido, y tan triste, que dejó otro beso meloso en el ceño fruncido de Hoseok.
- ¿Cómo era Mumi?
- Era muy hermosa -contestó con un tono de voz confuso, cerrando sus ojos con cansancio-. Pero me abandonó... No era una mala persona, pero... me hubiera gustado que fuera mejor... una madre... mejor. A veces era demasiado humana... y yo... mierda, yo no quería estar en un orfanato... Los niños enojados con malos padres... hacen cosas malas, ¿Sabes?... -chasqueando la lengua, gruñó-. Ah, cuánto detesto que la gente me toque... Ojalá pudiera superar mi Hafefobia por completo algún día... No lo sé... No sé nada... -luego se volvió a mirarle con ojos indescifrables-. Tengo que decirlo... pero no quiero que lo sepas.
- ¿Hafefobia? -repitió Taehyung, sintiendo extraña la palabra en su boca.
De repente todo tuvo sentido, pero a la vez no. Hoseok parecía no querer volver a hablar, así que no insistió. Tenía muchas preguntas, pero no estaba tan seguro de querer conocer las repuestas, sobre todo porque sabía que no le gustarían.
Acariciando el cabello de Hoseok, Taehyung lo abrazó por la espalda y se aseguró de que dormía, luego de cantarle la canción tantas veces que perdió la cuenta.
[...]
¡SORPRESAAAAA, FELIZ 5K DE SEGUIDORES PARA MÍ WE!
AAAAAAAAAAAAAAAAH *chilla emocionada* Muchas gracias por leer y por seguirme y por todo alv lxs amo TT<33
Me di cuenta y fue como "alv debo dejar de llorar por bangtan y las pruebas, y tengo que actualizar!"
Así que aquí estoy a estas horas de la noche-mañana :D
Espero que les haya gustado el cap~
Yyyyyyy wn han pasado muchas cosas TT el cumpleaños de Jinnie, los premios, presentaciones, el tatuaje-falso-no-falso-quien-sabe de Jimin, el discurso, la confesión de Jinnie sobre que pensaron en separarse, nunca había llorado en clASES LPTM BANGTAN LLORANDO ME LASTIMAAAAA, literal estuve tal cual como Taehyung, sin poder dejar de llorar por lo que dijo Seokjin alv incluso ahora tengo lágrimas dios aiuda
como sea, no quiero echarles mis mocos, sólo quiero decir que lamento mucho demorarme en actualizar :( but mis pruebas no me dejan, me odian.
Así que sólo les recuerdo que lxs amo, muchas gracias por el apoyo yyyy nos vemos prontito en otra actualización (tal vez actualice el fin de semana de la próxima semana so esperen por ello bbs)
ya, eso, bai <3
pd. errores edito luego :<
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