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Capítulo dedicado a @Park_Pumpkin 💜 Thanks u💜
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Definitivamente no era un buen día.
Era por mucho el más problemático que había tenido durante ese año.
Cuando abrió los ojos esa mañana, lo primero que sintió fueron las náuseas que hicieron que corriera al baño, empujando a Namjoon en el proceso, que justo había salido después de lavarse los dientes. Vomitó lo poco que tenía en el estómago, de repente la ansiedad había aparecido como un insoportable fantasma de hace siglos en su vida.
Hasta entonces había sido tolerable, no comió nada y sentía que todo le dolía, pero no lo fue en absoluto cuando de camino a la universidad sintió que se mareaba y, aunque Namjoon a su lado le dijo que parara, no fue lo suficiente rápido como para no abollar el auto que se había detenido frente a él por la luz roja y el tráfico de la mañana.
Tuvo que suspender las clases de esa mañana, había obtenido un monologo interminable de retos por parte de Namjoon, en absoluto haciéndole sentir mejor y sólo soportándolo porque se sentía culpable. Negoció lo que tenía que pagar con el caballero que estuvo insultándolo media hora por abollar su auto, y supo que le iba a costar dos veces su paga. Para cuando llegó a la universidad, pensando que las cosas no podrían ir peor, en medio de la clase volvió a marearse y empezó a tener problemas en su visión, la ansiedad por las nubes y supo entonces que si no terminaba esa clase iba a vomitar por el vértigo.
Así que en ese momento se encontraba en la enfermería, siendo atendido por Seokjin, el cual también solía dar clases de primeros auxilios en la Universidad. Acostado en una de las camillas que había, se sentía tan somnoliento como en los últimos días.
Después de decirle sus síntomas y lo que había estado consumiendo últimamente, no se esperaba otra respuesta por parte de Seokjin.
- ¿Sabes que tu vida se acorta cada vez que abusas de los medicamentos? -empezó a regañarle, tal cual Namjoon en la mañana. Si Hoseok no hubiese estado tan cansado y Seokjin no le hubiera puesto un suero, dejándolo quieto y con el brazo derecho estirado al lado de su cuerpo, se hubiera ido-. Tienen dosis, no puedes simplemente tomar más de la cuenta porque te da la gana. Sé que te han generado adicción, pero escúchame bien, debes buscar algo que lo suplante. Sabes, el insomnio empeora cuando la persona cree desde antes de acostarse de que no va a poder dormir, es el miedo al insomnio lo que te da más insomnio. Si sigues así, vas a envejecer rápido, Hoseok-ssi. Además te volverás más lento y tonto, no sé como has podido aguantar tan bien aunque claramente tienes un historial con los medicamentos.
Hoseok suspiró, hastiado.
- No lo sé, suerte, supongo - se encogió de hombros ante la mueca de Seokjin que tenía las manos apoyadas en sus caderas-. Hago ejercicio, debe ser eso, pero las etapas de insomnio en mi vida siempre vuelven. Es como un ciclo. Puedo dormir bien por un tiempo, pero de repente, simplemente ya no puedo dormir.
El enfermero también suspiró con preocupación, caminando a la mesita y tomando un portapapeles.
- ¿Has planteado ir al psicólogo otra vez?
- Tenía uno bastante cercano, pero no me he sentido tan mal para volverlo a ver desde hace tiempo.
- ¿Cuándo fue la última vez que lo viste?
- No recuerdo, ¿Más de un año tal vez? -trato de recordar, pero hasta el simple esfuerzo de pensar lo ponía irritable-. Dos... no sé, ahora me siento más estúpido de lo normal, ¿Qué me pusiste?
- Es sólo un suero para hidratar por el vómito de esta mañana, no voy a poner más somníferos a tu molido cuerpo -explicó Seokjin alzando las cejas, anotando todos los parámetros vitales de Hoseok en un formulario mientras se sentaba a los pies de la camilla-. Te aconsejo que disminuyas la dosis hasta que dejes de tomarlas, hablo en serio, pueden provocarte convulsiones y... bueno, que lo que estás sintiendo ahora se volverá mil veces peor con el síndrome de abstinencia que puedes adquirir, ¿Namjoonie sabe de esto?
Hoseok arrugó el entrecejo, de repente sintiendo la boca seca.
- Nam sabe que soy un terco y que tendrá que coserme la boca para dejar las pastillas. Ya peleamos mucho por eso.
- Tengo todo el implemento para hacer una sutura, no me provoques, Hoseok-ssi -insinuó Seokjin con seriedad, haciéndole reír, señalándole con el bolígrafo-. Deberías hacer caso a tu mejor amigo, preocúpate de ti mismo más de lo que él lo hace. Da un respiro a tu cuerpo, hay más cosas que puedes intentar para el insomnio. Voy a darte una lista para que intentes cosas diferentes... -volvió a la hoja, haciendo que Hoseok se inclinase a la mesita de la izquierda y tomara el vaso con agua que le había dejado Seokjin, dando pequeños sorbos-. ¿Te has preguntado porque tus insomnios aparecen siempre?
- Sí, sé porque aparecen -respondió Hoseok, volviendo a poner el vaso en la mesita, cerrando los ojos porque a pesar de que entraba poca luz por las ventanas y sus cortinas, seguía sintiéndose somnoliento-. Sé porqué tengo insomnio, no fui al psicólogo por nada. Sé sobre la mayoría de mis problemas, lo malo es que aún me es difícil hacer algo al respecto para que desaparezcan.
- No está en que desaparezcan por completo -dijo Seokjin, dejando el portapapeles en su regazo para prestar atención-, los problemas de la mente no son como los problemas de matemáticas en el que tú puedas encontrar una respuesta y listo. Encontrar la respuesta no te asegura que el problema desaparecerá, sólo te ayuda a buscar métodos para resolverlo y llegar a ella, vivir el día a día en base a esos métodos, porque existen miles de formas, pero pocas servirán para ti -se detuvo, haciendo que Hoseok abriera un ojo para ver que hacía; le estaba mirando con un gesto extraño-. ¿Quieres hablar de eso?
- ¿De mis problemas emocionales y traumas de niñez? -el enfermero asintió-. No, gracias, Seokjin. No estoy de ánimo -tras decir eso, una pregunta que rondaba mucho su mente esos días apareció. Debía hacerla, sino jamás sabría, y Seokjin era el único que podía contestarla-, pero quisiera... quisiera preguntarte algo un poco... incómodo.
Seokjin sonrió a lo nervioso que fue el tono de voz de Hoseok a pesar de su cansancio.
- Adelante, soy experto en responder preguntas incomodas.
Hoseok tomó aire antes de soltarlo.
- Tú eres bi... bisexual, ¿Verdad? -titubeó, pero Seokjin solo lo miraba-. Algunos rumores -sus alumnos como Jeon Jungkook y Kang Hyesun venían a su mente-... dicen que te ven en bares donde usualmente sólo va gente homosexual y bueno... Si te sientes incomodo, no tienes que responder, yo...
- ¿Por qué me preguntas eso? -preguntó curioso. Pensó que se ofendería, pero en cambio una sonrisa divertida apareció en sus labios.
- Sólo... quiero saber cómo es, si es difícil, yo... no lo sé -respondió avergonzado, rehuyendo su mirada-. Tengo curiosidad y no entiendo mucho del tema, aunque leí bastante en internet, siéndote sincero. Pero es mejor escucharlo de alguien en persona, te haces un juicio mejor.
- Sí, soy bisexual, Hoseok-ssi -asintió con una sonrisa digna de revista-. No puedo hablar por todos los bisexuales, pero sí puedo decirte que para mí al principio fue realmente un martirio de confusión, hasta que finalmente me cansé de encasillarme a mí mismo en dos opciones que no me hacían sentir totalmente feliz, ¿Entiendes? - Hoseok trataba de hacerlo, aunque se sentía adormilado asintió-. No me sentía bien llamándome hetero cuando me comía a algunos chicos con la mirada, ni me sentí bien tampoco cuando decía que sólo me gustaban los hombres porque no era así, también me gustan las chicas. Tratar de buscar la razón del porqué no puede simplemente gustarme un sexo es la misma a que si yo me preguntara porqué me enamoro de una persona en específico. Algunas respuestas ayudan aclarar un poco la mente, sabes, pero la respuesta correcta y específica para ello nunca la encuentras. En palabras simples, me gusta física y mentalmente ambos sexos y nada es un impedimento para mí el estar con uno u otro.
- P-pero... entonces, ¿Te excitan ambos? -preguntó atontado, haciendo que Seokjin no pudiera evitar carcajearse sin malicia-. Ah, lo siento, esa fue una respuesta estúpida.
- No te preocupes -lo tranquilizó Seokjin-. Y sí, Hoseok-ssi, me excitan ambos. Es como si no pudieras decidir por uno u otro, simplemente te quedas en medio y si aparece la persona que te gusta tanto física como mentalmente, no importará su sexo. Hay varios términos que pueden identificar tu sexualidad, pero si hay algo en común en todos ellos es que al final te encantará, no hay que darle muchas vueltas al asunto sino te quieres marear aún más.
Hoseok trato de grabarlo en su mente cansada, de alguna forma podía entenderlo porque lo sentía. No había estado con nadie de su mismo sexo, pero sintió que lo que decía Seokjin lo describía completamente.
- Entiendo... Sí, lo entiendo -asintió ensimismado, un rostro sonriente apareciendo en su mente-. Muchas gracias.
- Me alegra que puedas hacerlo, ahora... -Seokjin lo miró pícaro, sus cejas alzándose graciosamente-. Estamos hablando de ti, ¿Verdad? Mira, si te gusta un chico, puedo darte toda una charla sobre el sexo homosex...
- No, no, no gracias -interrumpió Hoseok, con una mueca-. Tengo bastante con Nam siendo como mi padre últimamente, no quiero sentir que tú... no, no, realmente gracias, pero no.
Seokjin resopló decepcionado.
- Hombre, no todos los días un chico guapo te propone darte una clase sobre el sexo homosexual, deberías aprovecharlo.
Hoseok se tapó el rostro con el brazo libre, su rostro caliente por la conversación. Mintió descaradamente, con voz ahogada, aunque sabía que no era nada convincente.
- No, no se trata de mí. Olvídalo.
- Hoseok-ssi, cuanto antes lo aceptes, mucho mejor -respondió Seokjin con voz dulce-. Tal vez por esas confusiones y cuestionamientos en tu mente empezó otra vez el insomnio, ¿No lo has pensado?
- Yo... tal vez sí -murmuró inseguro. Lo pensó por unos segundos que parecieron minutos y agobiado respondió-. Sí, lo siento. Te estoy mintiendo. No puedo dejar de pensar en este chico y siento que voy a explotar encima de él y... no, no será bueno.
- ¿Y qué te detiene para no hacerlo?, ¿Por qué no lo será?
- No quiero hacerle daño. Ningún tipo de daño que sé que puedo evitar. No cuando estoy hecho un lío y estoy peor que un volcán a punto de hacer erupción todo el tiempo a su alrededor. Ni siquiera sé que es lo que me gusta de él - Hoseok lo miró; sabía que mentía. Maldición, Hoseok sabía perfectamente todo lo que le gustaba y disgustada del escultor. Incluso Seokjin parecía saberlo con su sonrisa divertida-. Bueno, si lo sé, pero no es fácil aceptarlo cuando... cuando tienes malditos traumas como los míos.
Seokjin enarcó una ceja.
- ¿Cómo qué traumas?
Haciendo una mueca, Hoseok musitó.
- Tengo un poco de Hafefobia.
- Oh, ¿Se puede tener un poco de Hafefobia? -dijo Seokjin extrañado, ladeando la cabeza con confusión. Hoseok rió y asintió-. Si no me equivoco es miedo al contacto físico, ¿Verdad? Es... oh, lo siento.
- ¿Por qué te disculpas?
- Pensaba que eras un quisquilloso del espacio personal, no que tuvieras Hafefobia o algo por el estilo, pero... ¿Cómo lo has llevado tan bien hasta ahora? -preguntó incrédulo-. Por lo que entiendo la Hafefobia es un miedo extremo al contacto físico y bueno, acabo de ponerte un suero, te he tocado para examinarte y tu pánico fue leve al de un hafefóbico.
- Mi familia y mi antiguo psicólogo me ayudaron cuando de verdad tenía Hafefobia -explicó Hoseok con ojos entre cerrados-. En realidad, hoy en día es totalmente diferente a mi adolescencia, realmente rehuía a todos en ese entonces y era desesperante porque trataba de no tener miedo, pero era imposible dejar de sentirlo. Parecía que nací con esto, y creció aún más cuando mi madre biológica me dejó en el orfanato.
- ¿Eres huérfano?
- Casi -se encogió de hombros. No quería hablar de eso en absoluto, menos con Seokjin y su expresión sorprendida. Comparado con antes, Hoseok había cambiado muchísimo-. Yo... con los años se vuelve soportable, me he esforzado por no sentir miedo, pero a veces cuando se me acercan tanto...
- Vuelve aparecer -terminó por él.
- Sí. Me da menos cuando soy el que tiene la iniciativa, de hecho, cuando tengo la iniciativa, no aparece ningún síntoma. Pero cuando me tocan demasiado, es... es difícil mantener la calma durante mucho tiempo. Nam puede tocarme porque me he acostumbrado bastante a él, son ya años de amistad, pero a veces igual vuelvo a sentirme... amenazado. Y es tonto, lo sé, pero...
- Tal vez necesitas volver a ser tocado de esa manera -dedujo Seokjin, cuando Hoseok se quedó mirando la nada durante varios segundos volviendo a tener su atención-. Sabes que una de las razones por las que dejas que Nam te toque es porque le tienes confianza y le quieres. Deberías tratar de tener otra persona así en tu vida, no de una forma amistosa, sino una que realmente desees tocar, con pasión, y luego... simplemente desearas que te toque. Lo querrás tanto que va a ser más fuerte que todo el miedo que experimentes.
Hoseok negó con la cabeza.
- No creo que sea buena idea, lo he intentado con mis antiguas parejas, pero no funciona y... es decepcionante.
- Tal vez porque de verdad no tenías el deseo de que te tocasen -replicó encogiéndose de hombros-. No estabas enamorado. Hazme caso e inténtalo, vuelve otra vez a enfrentar tu miedo, si sigues escondiéndote sin seguir intentándolo tus esfuerzos previos realmente no valdrán la pena.
Seokjin se le quedo mirando en busca de una respuesta, pero sólo obtuvo una mirada perdida de Hoseok a punto de quedarse dormido.
- Lo pensaré.
- No pienses tanto o el insomnio volverá -rió Seokjin-, ¿Qué no has aprendido nada? A veces está bien seguir tu primer pensamiento, tu impulso.
- Que mal que mis impulsos sean una basura -gimió derrotado.
- Mi culpa, mal uso de palabras -divertido, volvió a pararse con el portapapeles dejado en la mesita. Estaba viendo el suero que quedaba poco y ya tenía que sacárselo-. Mi último consejo antes de irme a dar mis clases; sólo concéntrate en lo bueno - Hoseok alzó la vista, encontrándose con la sonrisa amable de Seokjin- Concéntrate en el amor con todas tus fuerzas.
Hoseok no sabe en que momento se quedó dormido en la enfermería, pero lo bueno era que ya no tenía que dar más clases porque ya había notificado sobre su salud. Como no tenía fuerzas para caminar, dejo el auto en el estacionamiento y asintió hacía Jimin y Taehyung cuando pasaron a su lado diciéndole que podrían llevarlo a casa. No hablo mucho como siempre, más porque estaba cansado que porque no quisiera hablar.
Le irritaba la forma en la que Taehyung tocaba el hombro de Jimin y reía de lo que decía. En la que le sonreía.
- Hobi hyung, ¿Estás bien? -preguntó preocupado, haciendo que Hoseok le sonriera, calmándole. Taehyung sonrió contagiado con un brillo emocionado en los ojos-. Vendrás a mi departamento ahora, ¿Verdad?
Quería abrazar a Taehyung, inundar su nariz en su largo cuello, pero ante tal profundo deseo la ansiedad volvió a corroer su piel como dos sustancias que combatían en su cuerpo.
Seokjin tenía razón.
Pero desgraciadamente él también la tenía.
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