C-1

Quería quitarse los audífonos, o cambiarle la canción rápidamente, pues descubrió que el jazz no era su estilo, cosa que la frustraba.

Bajó del autobús, dirigiéndose a su instinto, en donde se encontró a su mejor amiga por los corredores, pegada contra su casillero, besándose, con su novio desesperadamente.

Rodó los ojos, y bufó por lo bajo. Era lo mismo cada mañana.

Le gustaba verla feliz, lo que le irritaba, es que no tuviese ni una pizca de piedad por su soltería.

De repente, sintió como alguien se colgaba de su hombro, haciéndola tambalear un poco, dejando ver a un chico peligris.

— ¿Qué escuchas? — Preguntó TaeHyung, quitándole un lado del auricular, y colocándose en el oído — Oh, no sabía que te gustaba el jazz — Comentó, disfrutando de la sinfonía que escuchaba.

— Hay muchas cosas que no sabes de mi aún — Sonrió, guiñandole un ojo.

— ¿Ah, si?, ¿cuál es tu color favorito? — Inquirió, juguetón, arrugando su nariz a modo de broma, gesto que fue imitado.

— Hey, hola, no nos dimos cuenta que estaban aquí — Admitió NaYeon, separándose del joven, acomodando su ropa, y acercándose al dúo.

— Claro que-... N-no te preocupes, no hay problema — Dijo Minatozaki, sonriendole levemente.

Im frunció el ceño, ¿dónde estaba la japonesa que la regañaba por andarse comiendo a su novio frente a sus narices?.

— Umh, ¿okey? — Pronunció la mayor, dudosa, tomando la mano de su pareja — Kook y yo compartimos la misma clase con ustedes, vamos.

Ellos comenzaron a caminar, siendo seguidos por los otros dos.

En ningún momento Kim había quitado su brazo de los hombros de la castaña, dejándolos ver como una pareja, de esas que salen en las películas de Estados Unidos.

Ella con los libros en mano, más su bolso a un costado, y él con la chaqueta de su equipo de basquet puesta. La típica relación cliché.

Pero Sana sabía que el mayor no se apartaba sólo para poder seguir escuchando la música. Aún así, no tenía intenciones de separarlo, le gustaba tenerlo tan cerca, permitiéndose imaginar algo así en un futuro.

Pues él le gustaba.

Y todos lo sabían, menos el susodicho. Irónico, ¿no?

Al menos algo de provecho podría sacarle a lo que leyó, ya que se dio cuenta que si funcionó, por ende, seguiría los pasos de aquella lista.

A pesar de que no cumplía con ninguna de las características que describía.

Pero lo iba a intentar. Por él.

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🍃Nimin_36

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